Maduro dominante

Como se folla un maduro dominante a su nueva perra.

Como todos los días a las nueve de la noche me marchaba para ir a entrenar. Lo normal es que fuese al gimnasio en autobús ya que queda lejos pero se puede ir andando si no llevas prisa. Mientras esperaba a menudo veía pasar en su coche a uno de los tipos que también entrenaban allí.

Cuando llegue, ensimismado en mis pensamientos, entre directamente al vestuario después de saludar al dueño. Estaba en calzoncillos y revolviendo en la bolsa donde tenia las cosas cuando el tipo paso por detrás de mi casi rozándome para sentarse en el banco de enfrente. Me cambien de ropa, cogí las vendas, los guantes, los tibiales y el protector bucal, salí del vestuario y entre en la sala para ir calentando. La sala era amplia y estaba separa del resto del gimnasio por una mampara de cristal enorme. Después de calentar un rato y cuando ya estábamos todos el entrenador nos dijo que comenzásemos a guantear. Siempre que hacíamos esto muchos de los que estaban en la sala de musculacion se acercaban a la mampara para ver los combates. Mi compañero y yo comenzamos a picarnos hasta que en un momento dado y aprovechando un descuido mi tibia fue a parar a sus costillas más fuerte de lo debido lo que hizo que parasemos para relajarnos un momento. En ese momento y ya distraído de los combates mire a la mampara y allí estaba el tipo, no me había fijado demasiado en él pero con la camiseta ajustada marcaba unos enormes pectorales, velludos pero depilados, lo que me hizo bajar la mirada hasta el pantalón de tela fina que llevaba puesto y me dejo ver un bulto considerable a pesar de que no tenia una erección. El tipo tendría unos 45 años era un poco más bajo que yo pero me estaba dando tanto morbo que me quede mirándole ensimismado y se dio cuenta por supuesto.

Termino el entrenamiento y me quede estirando unos minutos tranquilamente aunque como siempre alguien más tenia que usar la sala con lo que me marche con intención de ducharme y volver a casa. Cuando entre en el vestuario la mayoría de mis compañeros ya se habían duchado y se marchaban. Faltaba apenas una hora para que cerrase el gimnasio y ya apenas entra gente con lo que me metí en la ducha, no me gusta demasiado compartir duchas, me enjabone tranquilamente y cuando me estaba aclarando el tipo entro en las duchas. Se situó en la del fondo y aproveche para ver como le colgaba el rabo. Era de tamaño considerable casi como el mio erecto, y yo ya comenzaba a ponerme cachondo lo que me obligo a irme de allí hacia los bancos para vestirme y volver a casa. No sé que tenia el tipo pero me daba un morbo increíble a pesar de que a mi los tíos no me resultan nada atractivos.

Para cuando el tipo salio de la ducha yo ya estaba recogiendo y enrollando las vendas de entrenar para meterlas en la mochila. Dejo las cosas en el banco de enfrente y comenzó a secarse con la toalla, primero los brazos, luego el tórax y después las piernas, para el final dejo al entrepierna. No estaba de frente pero sí un poco girado con lo que podía ver como pasaba la toalla por ese rabazo una y otra vez. Me estaba poniendo a 100 así que termine de enrollar una de las vendas la otra la metí en la bolsa hecha un lió y salí de allí.

Se me había puesto dura como un clavo y se me marcaba entera debajo del chándal con lo que no podía ponerme a esperar en la parada del autobús a que alguna viejecita montara un escándalo. Decidí volver andando hasta casa para que se me pasara el calenton que llevaba encima. No dejaba de pensar en el tipo y mi polla ya estaba un poco húmeda. Por mi mente comenzaban a pasar imágenes de ese rabo entre mis manos, en mi boca, yo de rodillas delante del tipo mientras el cogía mi cabeza y me follaba la boca. Sonó el claxon de un coche al lado mio gire la cabeza y allí estaba el tipo.

-¿Quieres que te lleve?

-Vale – No me lo pensé ni un momento, cuando estaba subiendo en el coche empece a pensar lo que estaba haciendo seriamente.

Nos presentamos ya que solo nos conocíamos de vista, hablamos apenas un minuto de artes marciales entre semáforo y semáforo y el tipo me pregunta si tengo novia.

-No tengo – Le dije – Pero tu estas casado según ese anillo.

-Cierto – El coche tomo una de las salidas a la autopista y acelero - En ese momento estaba claro lo que estaba sucediendo, era ya de noche y a mi se me había vuelo a poner como un clavo.

-¿Te apetece ir algún sitio tranquilo?

-Claro, pero hace calor mejor en algún descampado - Le conteste mientras sin ningún reparo a pesar de los nervios puse mi mano en entrepierna y comencé a acariciar su paquete.

-Por como os pegáis ahí dentro ¿no debes de ser muy obediente verdad? - Después de eso me la hubiera metido en la boca directamente.

-No, pero puedo serlo si sabes hacer como.

-Claro que sé hacerlo, vas a ser muy obediente. - Yo seguía tocando su polla por encima del pantalón ya bastante dura.

Después de unos minutos llegamos a una zona de campos llena de caminos. Nos metimos por uno de ellos buscando donde aparcar y encontramos unos arbustos muy bien situados.

-Baja del coche y quítate los pantalones y los calzoncillos pero déjate las zapatillas – Me hubiese corrido ahí mismo si me hubiera tocado la polla.

En cuanto termine de medio desnudarme se coloco detrás de mi y metió su mano entre mis nalgas - Como me pone este culo peludo que tienes – Con la otra mano agarraba mi cuello mientras me susurraba al odio – Te lo voy a abrir entero con mi polla – Que estaba durisima y pegada a mi pierna. El tipo apretaba su mano en mi cuello con autoridad pero sin hacerme daño cuando su mano en mi culo empezó a buscar mi agujero con un dedo. Era sencillamente lo más morboso que me había pasado nunca. En zapatillas. Medio desnudo en el campo y con un tío cachas metiéndome un dedo en el culo – Vamos puta cómeme la polla – Me puse de rodillas le baje los pantalones y los calzoncillos dejando al aire un rabo que por lo menos debía medir 20cm y era gordo de verdad. Estaba ya babeando, pase mi lengua por el capullo limpiándolo todo, nunca me había comido una polla pero esta iba a entrar hasta el final. Le agarre por los huevos y me la metí hasta donde pude en la boca succionando. Sin saber muy bien lo que hacia y con su mano en mi cabeza lamia su polla de arriba abajo y le pajeaba mientras succionaba su glande – Abre bien la boca – Y haciendo fuerza con la mano empezó a meter la polla en mi garganta, lo primero que ocurrió fue una arcada pero la retiro rápido para volverla a meter despacio. Yo me agarre con las dos manos a su culo duro mientras me follaba la boca. Entraba y salia hasta donde podía. Después de un rato moviendo sus caderas me ordeno que se la machacara – Ahora haz que me corra. Pon tus labios alrededor de mi capullo y pajeame. Te lo vas a comer todo puta.

No tardo en correrse en mi boca. Me lo trague todo mientras seguía pajeando su polla. Con cara de vicio me hizo levantarme y empezó a lamer mis labios y algunos restos de su corrida. - Ves como si puedes ser muy obediente. Ahora vas a ser mi perrita, apoyate en el capo del coche y pon el culo en pompa. Con dos azotes me hizo subirlo un poco más. Su dedo volvió a entrar en mi culo mientras con la otra mano masajeaba una de las nalgas. - Como me gusta este culo peludo, me lo voy a follar hasta el fondo, quiero ver como gimes – Un segundo dedo entro en mi culo, al rato los saco, abrió mis nalgas con las manos y paso su lengua por el agujero. Me estaba comiendo el culo y yo casi me corría del gusto. Después de unos cinco minutos paro y volvió a meter sus dedos, luego metió un tercero. - ¿Que pasa eres virgen, nunca te han follado? - Nunca le respondí e hizo más presión con sus dedos. - Pues te va a encantar y me vas a pedir rabo hasta partirte.

Cuando mi culo estuvo bien abierto según el apunto su polla y empezó a meterla. No entraba mucho y aunque no me dolía hizo mas presión hasta que la cabeza se colo dentro lo que me hizo soltar un grito ahogado y el ganarme dos azotes. La presión justa hacia que poco a poco el rabazo entrase hasta que después de un buen rato sus huevos estaban pegados a los míos. Me había partido el culo y el tipo hacia un suave movimiento de cadera apretando a pesar de que ya no entraba más mientras yo me moría del dolor.

-Como me gusta tu culo puta. Se la ha tragado entera. Ahora te lo voy a follar hasta que me corra – Sacándola hasta la mitad volvió a meterla lo que me hizo gemir fuertemente de nuevo- Vamos sé que te gusta, este culo tan peludo esta hecho para ser follado por un rabo grande. No te quejes o sera peor. - El dolor paso y mi polla se volvió a poner dura como el acero. Ahora ya casi la sacaba hasta el final y volvía a meterla. Yo estaba tirado encima del capo del coche gimiendo y con todos los músculos del cuerpo totalmente flácidos.- Como te gusta puta, a partir de ahora este culo va a ser mio y me lo voy a follar siempre que yo quiera, ¿entendido? - Con un golpe de cadera la metió hasta le fondo apretando y levantándome hacia arriba lo que hizo que me corriera como nunca lo había hecho en la vida. - Por como te has corrido entiendo que eso es un sí.

-Ponte a cuatro patas en el suelo, vamos! - Obedecí mostrandole mi abierto culo, cambio de posición rodeándome me agarro la cara y la puso a la altura de su polla con la que me golpeo en la cara, zarandeándola como una porra. - La próxima vez te corres cuando yo te lo diga. - Me soltó, volvió a ponerse detrás mio y me la metió hasta el fondo despacio pero sin parar, todo su cuerpo sobre mi y mordiéndome el cuello, la posición no era muy cómoda pero el se corrió llenandome el culo de leche. - Mañana te voy a enseñar mis pantalones de cuero perra - Decia mientras sacaba su polla de mi culo.

Si eres como este tipo, te gusta le cuero y eres dotado, ruben22madrid@hotmail.com