Madre pone los cuernos a su marido con su hijo

Un hijo descubre que su padre le es infiel a su madre y los dos acaban follando como locos para vengarse de su padre/ marido

Hola a tod@s.

Mi nombre es Luis Javier, tengo cuarenta y dos años. Trabajo dirigiendo la empresa que mi padre fundó hace cuarenta años.

Nuestra empresa alberga unos 60 trabajadores y trabajadoras.

Nos van muy bien los negocios.

Aunque más de uno piense que estoy ahí es por ser hijo del jefe, están muy equivocados.

Fui el primero en mi promoción, estudiando dos carreras a la vez Economía y dirección de empresa y desde que yo dirijo la empresa nuestro volumen y nuestras facturación han subido un 50%.

Vivo en un piso en el centro de una ciudad la cual no es importante para el desarrollo de la historia, sólo diré que vivo por el norte en una ciudad con mar.

Mi padre delegó en mi todas las decisiones de le empresa, y el solo se dedicaba a seguir con el trato a los buenos cliente, llevarlos a comer....

Bueno eso y algo más, que no sabia.

De siempre he oído, que el marido es el último en enterarse que le están poniendo los cuernos. Todo el mundo lo llega a saber menos él.

Y es que algo parecido, fue lo que me pasó a mí. Bueno a mí no a mi madre.

Todo sucedió un día, cuando llegue a trabajar, fui a mi despacho y puse en marcha mi cafetera, pero no funciona. Maldije la mierda de cacharro.

Necesitaba un café, así que fui al comedor donde tenemos máquina de café.

Al entrar salía una de las secretarías, una joven de buen cuerpo que si no recuerdo mal tiene unos 27 años, cuando salió por la puerta, la saludé pero los chichos que estaban dentro no se habían percatado de mi presencia, hasta que uno de ellos hizo un comentario, que me dejó con la mosca detrás de la oreja.

' Ahí, va la zorrita del gran jefe, seguro que va a que se la folle en su despacho....

Cuándo entré todos, se callaron yo hice como que no había oído el comentario. Los trate como siempre y les invite a café. A más de uno los conozco de toda la vida. Alguno de aquellos llevaban trabajo para mí padre, desde que emprendió esta empresa.

Me despedí de ellos, y volví a mi despacho, no sin antes escuchar detrás de la puerta, como decían nos abra oído?

Otro decía que va, tranquilo ha entrado después. Si no seguro que nos hubiera dicho algo, ya sabéis como es Luisja.

Llegué a mi despacho, de mi cabeza no salía la frase " Ahí va la zorrita del gran jefe seguro que va a su despacho a que se la folle".

Joder cómo era eso posible, mi padre. Un hombre ejemplar, un marido de libro y mejor padre. Siempre nos ha dedicado a mi madre y a mi todo el tiempo, que no pasaba en la empresa....

Es imposible, mi padre no es capaz. Quiere a mi madre como el primer día...

Será una burda idea de los empleados. Chismes de empresa.

Seguí con mi trabajo, Tenía una duda, por lo que fui a resolver con mi contable.

En la zona de oficinas están todas las secretarías, encargados, finanzas, etc.

Cuando llegue a la sala, y saludé al financiero miré a la mesa de la chica que había salido, del comedor y no estaba...

Mi cabeza comenzó a dar vueltas.

Resolví la duda que tenía y fui al despacho de mi padre. Antes de llegar pude ver como mi padre, abría la puerta y con el salía la secretaria.

  • Muchas gracias Almudena, lo reviso y se lo pasó corregido. Dijo mi padre a la chica.

La volví a saludar, y fui hacia el despacho de mi padre.

  • Hola, papá qué tal? Le dije intentando buscar alguna evidencia.

  • Bien, hijo acabo de pasar la facturación de este mes había una errata y ahora la va a corregir Almudena. Como todo está en perfecto estado me voy con tu madre a comer y al cine.

  • Vale, pues que lo paséis bien. Yo trabajaré por los dos le dije en broma.

Salí a mi despacho, convencido de que mi padre no podía ser infiel a mi madre, era imposible.

Pero cuando el río suena....

Busqué en internet una cámara espía, pero, si era verdad que mi padre se follaba a esa veinte añera que podía ser su hija yo no lo quería ver, por lo que busqué un micrófono, el cual llegaba unos 100mts y se podía escuchar con una aplicación del móvil.

Lo pedí. Llegó al día siguiente me lo trajo a mi despacho Almudena. Pero no sabia lo que era, ni lo que iba a descubrir.

Como siempre, el capitán es el último que abandona el barco, y ese era mi caso. Siempre era el último en irme de la empresa.

En casa nadie me espera estoy soltero, y creo que lo seré por mucho tiempo no me apetece estar comiendome la cabeza que la chica que tengo al lado me quiere por mí dinero o por como soy ....

Fui al despacho de mi padre, y metí el pequeño micrófono detrás de la estantería donde tenía libros que sólo estaba de adorno. Puse música en el hilo musical y fui a mi despacho a ver si podía oírla.

Abrí la app y se escucha de maravilla. Apagué todo, cerré y me fui a mi casa.

Seguía estando seguro que mi padre no podía engañar a mi madre.

Como todas las noches desde que me independice llame a mi madre a ver qué tal el día, teníamos una relación espectacular, además soy hijo solo y eso ha echo que me mimase mucho.

  • Hola, ma. Qué tal el día? le pregunté al otro lado del teléfono.

  • Hola, cariño muy bien. Hoy hemos ido a comer y ver una película al cine, tu padre y yo lo hemos pasado de maravilla. Dijo mi madre de lo más contenta.

Seguimos nuestra conversación, un rato y nos despedimos.

Al día siguiente, llegué al trabajo antes que mi padre, como todos los días pasó por mí despacho me saludó y se fue al suyo.

Abrí la app y me puse a escuchar todo lo que pasaba en el despacho de mi padre.

Pero allí no pasaba nada más allá de llamadas con clientes, conversaciones de la empresa, o temas que tratar con empleados, ah un par de pedos y un eructo.

Eso fue lo que escuche todo el día.

Estaba claro que me había alarmado.

El día paso, y con el llegó otro. Fui como todos los días a mi oficina, mi padre ya había llegado. Fui a saludarlo, estaba solo en su despacho.

  • Hola, hijo que tal?

  • Hola, pa bien que temprano has venido hoy no?

  • Si, hijo. Quiero revisar los pedidos de (una empresa que no viene poner el nombre). Tengo que reunirme con ellos y quiere que valla con el jefe de cacería. Ya sabes.

  • Buff qué rollo. Le dije.

  • Pues hijo algún día,. tú tendrás que ser quien haga estás cosas ya sabes que yo me quiero jubilar y disfrutar con tu madre el tiempo que nos quede. Dijo mi padre.

  • Papá, sabes que odio la caza, y que mi estilo de empresa no es el mismo que el tuyo. Esta claro que a los clientes hay que tenerlos contentos pero no creo que tú método sea el más adecuado.

  • Pues nos lleva funcionando mucho años. Dijo mi padre.

Me despedí de él, y volví a mi despacho. Al volver pasé por la oficina donde estan todos, pero algo llamó la atención. Almudena hablo con alguien por teléfono, colgó y se dirigió al despacho de mi padre.

Me fui rápido al mío, saludé a mi contrable que tenía unos papeles para mi.

Abrí la App, se conectó con el micrófono.

Pero no oía nada.

Se abra roto? Pero de repente empecé a escuchar algo. Era la voz de mi padre.

  • Que si, mude. Que este finde nos escapamos tú y yo solos. Que necesito que me hagas gozar como tú solo sabes.

,," Vale, mi hombreton dijo la voz de Almudena. Te quiero todo el fin de semana para mí sola... Vas a disfrutar como un loco. Dijo la joven.

  • Pero y ahora, me vas a dejar asi? preguntó mi padre a la joven. Ven que me coma esas tetitas tan duras. Dijo el cerdo de mi padre.

" Pero que ansioso eres, sabes que no me gusta que follamos aquí. Puede venir tú hijo y nos puede pillar. Mira el otro día libramos por los pelos. Dijo la joven que le daba besos a mi padre.

  • Pero si la puerta está cerrada, no puede entrar. Anda no le digas que no a papi. Se buena mude.. Dijo mi padre.

Joder que repulsa me producía aquello. No esperaba eso de mi padre. Toda la vida lo tenía como un dios, y ahora.. Se estaba follando a una zorra en su despacho. Como gemía la muy zorra.

Cuándo acabaron. Pude escuchar como le decía mi padre.

  • Mude, mira que que te ha regalo papito por lo bien que te portar con él.

Puede escuchar como abría una bolsa de papel y abría un paquete. La zorra de mude que le decía mi padre, no tardó en decir.

" Que collar más bonito, te abra costado una fortuna.

  • Para ti, lo que haga falta y oí como se daban un beso.

" Este finde semana no lo vas a olvidar, nunca le dijo la zorra saliendo de su despacho.

Estallé el móvil contra el suelo. En esos momentos hubiera ido al despacho de mi padre y le hubiera partido la cara.

Pero me calmé cogí lo que quedaba de mi móvil, y me fui a mi casa.

De camino me salían lágrimas en los ojos. Todavía no me lo podía creer. Además esto no era nuevo, llevaban ya tiempo. La de cacerías que se habrá inventado el hijo de puta...

Me fui a mi casa, y me tumbé en el sofá.

Busqué un móvil, y metí la tarjeta. Le mandé un mensaje a mi padre.

Le dije que me encontraba mal que me había tenido que ir.

Apagué el teléfono y no paré de darle vueltas en la cabeza.

Mi pobre madre... Que pobre mujer.

El jueves no volví por la oficina no tenía ganas.

Mi madre, me llamaba para ver cómo estaba, las conversaciones eran cortas.

El vienes, encendí el móvil, tenía varios mensajes uno de mi padre.

  • Acuérdate que me voy hoy de cacería, no volveré hasta el lunes. Cuida bien de la empresa.

Entonces vino algo a mi mente, si ahora sacaba esto a la luz, nos podía dejar a mi madre y a mi sin nada. La empresa estaba solo a su nombre. Joder no me había preocupado nunca de hablar con él y que pondría algo de la empresa a mi nombre..

Bueno, no sacaré a luz nada tovia, más que por mí, por la pobre de mí madre, que se quedaría en calle. Todo estaba al nombre de mi padre.

El viernes fui a trabajar, hice como que todo era normal. Al pasar por la zona de oficinas pude ver cómo la mesa de Almudena estaba vacía. Estaba claro dónde estaba la muy zorra.

Fui al despacho de mi padre a quitar el micrófono, estaban la chicas de la limpieza que cuando me vio mandó callar a su compañera, estaba claro que estaban hablando de mi padre o de mi.

Cogí el primer papel que vi en la mesa de mi padre, y fui a mi despacho.

Abrí la app y escuche lo que hablaban las chicas.

; Otra ves se ha ido con la zorra esa. Te has dado cuenta? No está ni el ni la zorra esa. Que verguenza podía ser su padre. Dijo la chica de la limpieza.

# Que razón tienes, con lo bueno que se ve al hijo y lo sinvergüenza que es el viejo este de siempre.

No quise escuchar más.

Sólo pensaba en mi pobre madre. Por un lado sentía la obligación de decírselo pero por otro me daba mucha pena.

La llamé por teléfono, necesitaba hablar con ella.

  • Si? Dijo mi madre al otro lado de la línea

  • Que hace la madre más guapa del mundo?

  • Hola, cariño pues nada, acaba de venir del gimnasio, y ahora me iba a poner ha hacer la comida.

  • Bueno, hoy estás sola a comer no? Le pregunté.

  • Si, cariño dijo mi madre entristeciendose un poco, tu padre se ha tenido que ir a esas mierda de cacerías de clientes. Se ha ido de mala gana. A ver si coges tu las riendas de la empresa y se olvida de todo.

  • Algún día mamá. No te preocupes.

  • Bueno, vendrás a verne en algún momento este fin de semana no?

Preguntó con voz de pena.

  • Ahora mismo ma, tengo todo controlado que te parece si te invito a comer. Le dije

  • Ah de verdad? preguntó mi madre asombrada y vas a dejar la empresa sola, hoy que no está tu padre? Dijo mi Madre.

  • Si, tranquila tenemos gente muy buena. Prepárate que pasó a por ti. Le dije.

Colgué el teléfono y avisé que estaría fuera lo que quedaba de día, me apetecía estar con mi madre.

Salí hacia el chalet que viven mis padres, en poco más de 20 min ya había llegado. Abrí la puerta con el mando y metí mi coche al lado del de mi madre.

Entré por la puesta del garaje, que sube al salón.

  • Mamá, ya estoy aquí. Donde estas? le chille desde abajo.

  • Cariño, que pronto has venido, no esperaba que fueses tan rápido, me estoy preparando. Sube estoy en mi habitación. Dijo madre chillando.

Subí las escaleras, de la que un día también fue mi casa. Recorrí el trayecto que lleva a la habitación de mis padre.

Mi madre estaba en el baño, aún con el albornoz puesto y la toalla en la cabeza, mientras se maquillaba.

  • Hola tesoro, dijo mi madre dándome un beso, y quitándose la toalla de la cabeza para secarse el pelo.

  • Hola, mamá hace unos días que no te veía y tenía ganas de verte. Dije a mi madre

  • Si es que no te tenías que haber ido de aqui. Dijo mi madre chillando por el ruido del secador. Total en casa estás solo aquí nos tienes a tu padre y a mi.

Salí, del baño mientras mi madre secaba su pelo. Me senté en un sillón orejero que tiene mi padre en la habitación para sentarse a leer o para ponerse lo zapatos.

Mire la cama de mis padres, y me puse a pensar en las noches de sexo que habrían tenido mi madre y padre, ahí.... Me sacó de mis pensamientos mi madre. Que salía del baño.

  • Dime, mamá. Persona estaba pensando en otra cosa. Le dije.

  • Que digo que a dónde me vas a llevar a comer? Dijo mi madre.

  • Iremos al club, el restaurante es todo un lujo. Le dije a mi madre que estaba todavía en albornoz.

  • Perfecto, era para saber qué ponerme. Dijo mi madre mientras que iba al vestidor.

Mis padres tienen un vestidor muy grande y con muchos espejos, de pequeño me gustaba jugar ahí, me podia ver en el techo....

En casa nunca nos hemos escondido, y nos hemos visto desnudos miles de veces. Así que no me fui de la habitación cuando mi madre se iba a vestirse.

Pude ver cómo mi madre se quitaba el albornoz, la tenía a escasos tres metros, y se quedaba totalmente desnuda ante mi. Mientras que seguía hablando.

  • Pobre de tu padre, esta mañana se ha marchado sin ninguna gana. Ya me ha dicho que a ver si coges pronto la riendas de la empresa y deja de tener que estar de aquí para allí.

  • Si, seguro que se ha ido triste. Se me escapó. Estaba dispuesto a contarle todo a mi madre. Pero estaba tan contenta que igual no era el momento.

  • Que si, hijo. Fíjate si no tenía ganas de ir que hasta quería llamarlos para decirle que estaba malo. Lo he tenido que convencer... Dijo mi madre totalmente desnuda, buscado ropa interior.

Por un momento, me olvidé de mí padre y su joven zorra. Me puse a observar a mi madre. La miraba de arriba a bajo, y veía a una mujer que aparte de estar siempre de buen humor, era guapa, elegante, y muy moderna para su edad. Pero eso lo podían ver todo el mundo. Pero nadie podía ver su cuerpo desnudo como yo lo estaba viendo.

Era una mujer de sesenta años, recién cumplidos, con las carnes bien firmes para su edad, el culo con algo de celulitis, pero se veía muy redondo. Unas tetas redondas, algo caídas ya por la edad pero es normal. Unos pezones redonditos y duros por el frío que hacía. Joder pero como es tan tonto mi padre. Esta claro que su zorrita es mas joven, pero mi madre está todavía de muy buen ver.

Empecé a sentir un calor por mis partes, y mi polla se empezó a poner morcillona, mientras mi madre ponía su culo en pompa para coger unas bragas y ante mí y entre sus piernas apareció su rosadito coño.

Un coño en el cual me fijé luego y pude ver cómo lo tenía depiladito. Sólo tenía una línea finita encima de coño. Joder nunca me había fijado en el cuerpo de mi madre y eso que la había visto mil veces desnuda. Pero nunca me había fijado como lo estaba haciendo ahora.

Se puso unas bragas, pequeñas negras, con encajes en el culo y en coño, que dejaban ver parte de ambos dos. Un sujetador negro a juego que resaltaba esas tetas. Mi madre se puso un vestido ajustado azul. Que le sentaba de maravilla. Y es que mi madre a sus sesenta años, pesaría cerca de 55-60kg y media 1'70. El hacer todos los días ejercicio hacia que se viera espectacular.

  • Luisja, que digo, que tal estás? Si ya te encuentras bien. Estos días me has tenido preocupaba, no contestabas ni mis mensajes. Dije mi madre mirándome.

  • Ehh ehh, si mamá estoy ya perfecto, estaba pensando en un cosa de la empresa, lo siento. Le mentí a mi madre. Voy ha hacer una llamada.

  • Ay, eres igual que tú padre sólo pensáis en el trabajo, refunfuñó mi madre.

Si si, mi padre en el trabajo, pensé mi padre estará con su zorrita que estará disfrutando de lo lindo.

Joder me senté en el sofá mientras terminaba mi madre de prepararse.

Tenía un lío en la cabeza, importante. No podía entender cómo mi padre, prefiere a una zorra veinteañera, que a mi madre, pero si está como un queso. Joder si hasta me he empalmado al verla desnuda... Joder pero como ha podido pasarme si es mi madre y la he visto mil veces, desnuda.

Buff un calor recorría mi cuerpo.

Mi madre bajó, por las escaleras, y nos fuimos a comer. Mi madre disfruto mucho de la comida y del día. En el club tiene varías amigas que incluso tomamos algo con ellas.

Fui a dejar a mi madre a su casa, y al llegar me dijo.

  • Anda cariño, quédate en casa conmigo, cada día me cuesta más quedarme sola, antes no me daba miedo pero ahora incluso me da hasta miedo. dijo mi madre

  • Mamá, tenéis una alarma de alta seguridad, y en la urbanización hay seguridad privada. No digas tonterías.

  • Pero si en casa vas a estar sólo. Venga así nos hacemos compañía. Puso mi madre voz de querer dar pena.

  • Venga, está bien. Abrí con el mando la puerta y volví a aparcar en el garaje.

  • Gracias tesoros eres un sol dijo mi madre abrazándome al salir del coche. Como te quiero dijo apretándose a mi dándome un beso en la mejilla.

Pude sentir sus tetas contra mi. Las había sentido muchas veces, pero desde esa mañana no sé, me hacían sentir algo raro en mi...

Subimos las escaleras del garaje, llegamos al salón. Mi madre dijo.

  • Me voy a poner comoda estos tacones me están matando.

  • Vale yo también, voy a ver qué tengo por mí cuarto.

Subí las escaleras, detrás de ella, podía ver esas piernas perfectas, y ese culo que se movía a cada escalera que subíamos. Mi amiga, volvió a dar evidencia que estaba viva, y que recobraba vida al ver las curvas de mi madre.

La dejé en su habitación y recorri los 5 metros que separa mi habitación de la suya. Bajé mis pantalones, mi dura polla, se marcaba en mis calzoncillos, joder pero que me pasaba estaba loco? Es tu madre degenerado...

Buff no podía ser. Me puse un pantalón de fútbol y una camiseta vieja. Fui al baño.

Al cerrar la puerta, me gire y vi la habitación de mi madre que quedaba enfrente.

Vi como mi madre se quitaba el vestido y volvía a quedarse con esas bragas que dejaban ver su precioso coño.

No podía más, sabía que aquello estaba mal, pero no aguantaba más.

Saqué mi polla y comencé a frotarla mientras mi madre, se quedaba totalmente desnuda, joder que coño más rico tenía mi madre. No dejaba de mirarla mientras mi mano subía y bajaba por mi polla, se puso un camisón y una bata, pude ver cómo se marcaban los pezones en su camisón de seda.

No podía más me estaba encantado la paja. Echo la ropa a lavar y bajó hacía en salón. Mi pulso se acelero cuando vi que salia de su habitación. Guarde mi polla. Miró hacia mí habitación, y empezó a bajar las escaleras. Me llamó.

  • Luisja, donde estás? Chilló mientras bajaba la escalera.

  • Estoy en el baño, ahora bajo ma. Le dije tranquilo al ver que no se había dado cuenta de donde estaba.

Buff que susto, pero mi polla no se había bajado, comprobé que mi madre estaba por la cocina, y salí del baño.

Fui a su habitación a su baño, y busqué esas bragas que tanto me habían gustado puestas en su cuerpo.

Me las lleve a la nariz, olían a mujer, seguí cascandome la paja, mientras olía la bragas de mi madre. No tardé mucho en correrme como un loco poniendo el baño perdido de lefa.

Deje las bragas como las había encontrado y limpie con un trapo mi leche. Salí del baño y dejé todo como lo había encontrado.

Bajé con mi madre a ver una película, habíamos picado algo antes de volver a casa por lo que ya no cenamos.

Acabó la película, y nos fuimos a la cama.

Al llegar a su habitación me dijo.

  • Cariño.

Por mí cabeza paso que me iba a invitar a dormir con ella y que me la iba a follar.... Pero no fue así.

  • Qué mamá? le dije.

  • Que muchas gracias por quedarte conmigo. Eres un sol. Y se acercó para darme un casto beso.

En mis brazos sentí sus duros pezones, tras sentir el frío después de salir de la manta.

  • Te mereces todo lo que me pidas mamá. Le dije y me fui a mi habitación.

A mi mente, vino un pensamiento de culpa, por haberme masturbado espiando y pensando en mi madre...

Me puse a pensar en el cabron de mi padre.

Como puede ser tan tonto. Estará gastándose una fortuna con esa zorra comiendo en sitios caros, y haciéndole regalos.

Y mi pobre madre muerta de miedo sola en casa, y pensando que su marido está haciendo negocios....

No tardé más, de 4 minutos en dormirme como un tronco, claro llevaba dos noches sin poder dormir, dando vueltas a la cabeza con lo del cabron de mi padre...

Me despertaron los pájaros en la ventana, eran ya las 11 de la mañana. Joder hacía tiempo de no dormía tanto.

Aclaré mis ideas y pensé que lo había hecho el día anterior, estuvo mal. Que era mi madre y que no me podía excitar con ella.

Lo tenía claro. Fue solo una tontería.

Hoy hablaría con ella y le contaría lo de mi padre. No podía guardar el secreto. Era mi madre y la quería a más que nada en este mundo.

Idearemos un plan, para que mi padre no la deje sin nada y todo resuelto.

Abrí la ventana, y baje a desayunar en la casa parecía que no había vida.

  • Mamá? Mamá estás en casa? chille desde el salón.

  • Estoy abajo, hijo en el gimnasio. Chilló mi madre.

Bajé a su encuentro y entre en el gimnasio que tenemos de toda la vida en casa. Lo montamos para mí, pero desde que me fui mi madre lo usa.

Estaba corriendo en la cinta.

  • Hombres buenos días dormilón. Que tal has dormido? Has descansado?

  • Buenos días ma, si he dormido muy bien. He descansado mucho..

  • Me alegro, quieres que hagamos una barbacoa en el jardín y aprovechamos que hace buen día?

  • Buena idea mamá. Me parece estupendo.

Pero mi subconsciente, me jugo de nuevo una mala pasada. Mis ojos fueron a parar a las tetas de mi madre, que botaban como locas dentro de camiseta de tirantes.

Joder no llevaba sujetador.

Pude ver la marca de sus pezones. Seguimos planeando la barbacoa, y me quité de allí, mi madre se daría cuenta de cómo la miraba. Me puse detrás y pude ver su culo embutido en esas mayas negras que también marcaban el tanga que llevaba.

  • Bueno, me voy a desayunar le dije a mi madre.

  • Vale hijo ahora subo yo, cuando acabe.

Me tomé un café con leche y una tostada, mi polla estaba dura otra vez. Sabía que me iba a hacer una paja ahora en la ducha a costa de mi madre....

Termine mi desayuno y subí a la ducha, cerré la puerta y me metí dentro.

El agua tibia recorría mi cuerpo mientras mi mano, recorría mi polla, apoyado en la pared, y con los ojos, cerrados podía ver ese coño de mi madre, esas tetas botando mientes corría, su culo..

Ahhjjhhh un pinchazo llegó a mis huevos, y me corrí en la mampara.. Joder que gusto que pajas más buenas...

Estuve un poco bajo el agua. Al final me decidí a salir.

Sólo tenía una toalla de manos, con las prisas no me di cuenta que estaba en casa de mis padre y no en la mía.

Me sequé como pude y me tape un poco la polla con la toalla. Salí del baño y me crucé con mi madre que subia a darse una ducha.

  • Pero cariño, que haces así? Dijo mirándome de arriba a bajo.

  • Es que no me he dado cuenta y no había toalla grande. Le dije arqueando mis hombros.

  • Ah, vale pero parece mentira te tapas como si fuese a ver algo que no he visto nunca. Hijo que soy tu madre.

Solté la toalla y me quedé desnudo, ante la mirada de mi madre.

  • Hijo que te fuiste de casa hace cuatro años, y tienes casi cualquier cuarenta, te he visto así mil veces, desde cuándo nos hemos escindido. dijo mi madre mirándome de arriba a bajo.

  • No sé, la verdad. Bueno es igual. Me voy a vertir para ir a comprar para la barbacoa. Le dije dándole la vuelta.

  • Vale cariño, pero esperame que te acompaño, dijo mi madre.

Y sin esperarlo me dio una palmada en el culo

  • Ahí mi hijo que le da vergüenza que le vea su madre ese culito tan duro...

  • Mamá, proteste. Mientras ella se reía camino de su ducha.

No me puse a espiar a mi madre, busqué algo de ropa que tenía en su casa y me baje al salón. Me puse a contestar unos correos de la empresa.

No tardó mucho en aparecer mi madre con unas mallas ajustadas con transparencia en toda la piernas en los laterales un unas zapatillas y una sudadera.

  • Nos vamos? cariño.

  • Si, vamos, de todos modos mamá, te voy a decir una cosa. Hay que ver qué bien te sienta el hacer todos lo días un poco de deportes. Ayer con el vestido azul estabas muy guapa, pero estas mallas te sientan de miedo.... Dije dándole una vuelta

  • Uhhh qué mal me huele esto. Es la primera ver qué me dices algo así. Qué quieres? río mi madre.

  • Nada, ma. Es solo que te veo muy guapa, que no sé cómo papá.. Y vi que estaba metido la pata me calle.

  • Como papá que ? Dijo mi madre. un poco estrenada.

  • No, nada. Déjalo. Le dije intento cambiar de conversación.

Salimos de casa y dimos un paseo. Hablamos de cosas banales, del día a día....

Llegamos a casa, prepare el fuego y abrí una botella de vino, como hacía sol mi madre se cambió de camiseta y quitó el sujetador y se puso una de tirantes.

Tomamos unos vinitos y comimos al sol de mayo.

Veía a mi madre de lo más contenta. Estaba agusto.

Sabía que era el momento de contarle la verdad.

  • Mamá, tenemos que hablar.

  • Que pasa hijo, no me asustes dijo mi dejando la botella vacía y mirandome a la cara.

  • No sé cómo decirte esto siéntate anda.

Le dije y me puse a su lado.

  • Pero te pasa algo cariño? estas enfermo? Preguntó mi madre preocupada.

  • No mamá, no soy yo es papá.

El rostro de mi madre se tranquilizó un poco.

  • Que le pasa a tu padre? Preguntó mi madre.

  • Pues, pues.. no me atrevía.

  • Vamos hijo, que pasa? me estas preocupando. Dijo mi madre.

  • El otro día, escuche por error un comentario en el trabajo. Era de papá y de una secretaria.....

Mi madre agachó la cabeza y miró al suelo.

  • Ya veo, que te has enterado. Dijo mi madre como avergonzada.

  • Pero como mamá, tú lo sabes? Le pregunté asombrado.

  • Bueno, hijo digamos que no lo quiero ver.. De sobra sé que tú padre hoy está de cacería, pero con alguna zorrita joven de la oficina.. Pero hay cosas que es mejor no saber dijo mi madre sin mirarme a la cara.

  • Pero mamá, papá te pone los cuernos y tú estás tan tranquila. Le dije asombrado.

  • No, hijo tan tranquila no..Pero que quieres que haga. Que después de todo lo que tú has luchado por la empresa, te deje en la calle? Que quieres que tenga que ir ahora a mi edad a buscar trabajo? a donde hijo a donde? Tengo 60 años..

  • Pero mamá, no es justo papá es un guarro y un degenerado. No podemos hacer que nos haga esto. Dije acalorado.

  • Hijo, tranquilízate un poco. No tenemos nada a nuestro nombre. Tú te podrías buscar un futuro pero yo? Dijo mi madre levantando la cabeza.

Hace años, que lo sospechaba pero por ti aguanté los cuernos lo más dignamente que pude. Me pasaba noches y noches llorando cuando tú padre se iba por ahí con alguna zorrita.

Pero hijo si te digo la verdad llega un momento que ya lo he superado. Ahora no me importa ser una cornuda.

La verdad ahora lo que peor llevo es quedarme sola en esta casa. Dijo mi madre cogiendo mi mano.

  • Bueno mamá, por eso no te preocupes. Cuando se marche papá, yo vendré aquí o tú podrás venir a mi casa. Así no volverás a estar sola.

  • Pero hijo, yo no quiero ser una molestia para ti. Y si tienes plan, ya me entiendes. No seré yo quien por estar en tu casa te lo estropee. Dijo mi madre ya más tranquila.

  • A ver mamá, tú eres lo primero en la vida, siempre te has desvivido por mí. Y siempre has estado ahí en mis malos momentos. Creo que ha llegado el momento de devolverte el favor. Dije a mi Madre.

Además no quiero saber nada de mujeres nunca sé, si me quieren por mí dinero o por como soy. Estoy arto de ellas.

  • Pero? y como lo haces? preguntó mi madre asombrada.

  • El qué? mamá, cómo hago el qué? le pregunté sin saber muy bien que quería decir.

  • No, nada hijo déjalo. no he dicho nada. Era una tontería. Dijo mi madre sin querer hablar más del tema.

  • Mamá, tenemos mucha confianza, no entiendo que me has querido preguntar. Dije queriendo saber que me estaba preguntando mi madre.

  • Hijo, sexo. Como haces con el sexo... Dijo mi madre un poco avergonzada..

  • Ahhh jaja rei, pues como muchos y le hice el movimiento como si me cascaria una paja.

  • Y con chicas nada? volvió mi madre al ataque.

  • Bueno alguna vez una o dos veces al año, contrato los servicios, de una chica de alto estading, y paso unos buenos ratos con ella. Luego y se va. Dije un poco avergonzado por hablar con mi madre de ese tema.

  • Es normal hijo, al cuerpo hay que darle alguna alegría.

  • y tú? Que solo hablamos de mi. Le dije a mi madre.

  • Ay hijo, calla que pregunta es esa. Tengo sesenta años, me da vergüenza. Dijo mi madre muerta de la vergüenza, poniéndose hasta roja.

  • Venga mamá, que te he contado mis secretos de alcoba. No te dé vergüenza.

  • Buff, hijo que calores. Esta bien dijo mi madre. Pues yo siempre he sido fiel a tu padre, no como él.

He tenido mil ocasiones de acostarme con chicos jóvenes, mayores.. Pero nunca acabe de dar el paso. Tu padre la verdad que para la edad que tiene todavía es valiente y casi todas las semanas, alguna vez una si otra no cumple conmigo. Y si no pues como tú dices me toco. Pero muy pocas veces ya. Se apresuró a responder mi madre.

Los dos reímos y olvidamos por un momento lo que estaba haciendo mi padre con esa zorrita. No dimos un fuerte abrazo y un casto beso...

Recogimos todo del jardín, puesto que el día se estaba nublando, y le dije a mi madre.

  • Mamá, voy a ir a mi casa a por algo de ropa.

Mi madre me acompaño gustosamente, dejamos el coche y dimos un paseo por el centro de la cuidad incluso tomamos algo.

Entre los dos ideamos un plan para quedarnos con un 51% de le empresa sin que mi padre se enterase. Nunca miraría eso. Así teníamos el poder de la empresa.

Volvimos a casa de mis padre.

  • Ay hijo eres un sol. Que bien me lo estoy pasando este finde semana.

  • Venga mamá, que es sábado vámonos a cenar algo por ahí. Dije a mi madre al regresar a casa.

  • Vale llama a un taxi, y vamos a prepararnos te llevaré a un sitio que me gusta mucho ir con tu padre.

Así lo hice llame a un taxi para que estuviese en 1 hora y nos fuimos a preparar, por mí cabeza paso lo de espiar a mi madre, pero no me parecía ético. Me preparé, revise mis redes sociales e incluso vi un rato la tele.

Un mensaje llegó a mi móvil. El taxi está en la puerta.

  • Mamá, le grite desde el salón a mi madre. El taxi ya está en la puerta. Te queda mucho? le chille.

  • No ya estoy, vámonos. Dijo mi madre mientras sus tacones sonaban contra la escalera.

Buff al ver bajar a mi madre por esa escalera hizo que mi corazón volviera a latir a toda prisa. Joder que buena estaba mi madre con vestido hasta las rodillas , con gran escote y unos zapatos de 10 cm de tacón.

  • Que tal estoy? preguntó mi madre.

  • Más que guapa. Vámonos preciosa. le dije cogiéndola del brazo.

Salimos de casa y nos metimos en el taxi, mi madre estaba, guapa guapa guapa...

Cenamos en un sitio de lujo, el cual frecuentaban mis padres, y a mi madre la conocian de sobra. Tomamos una botella de buen vino y unas copas de champagne. La cuenta la cargamos a la empresa.

Salimos del restaurante, mi madre fue quien dijo.

  • Ay, hijo que agusto estoy contigo pide el taxi para volver a casa.

  • Bueno, mamá no tengas prisa porque no tomamos algo por ahí? mañana no hay que madrugar. Dije intentando convencerla.

  • Hijo, que tengo sesenta años, quédate tú, con tus amigos yo me iré para casa.

  • Ni hablar. Ahora vamos a ir a tomar algo y luego iremos los dos juntos a casa. sentencie.

Así lo hicimos al final mi madre accedió. Fuimos a un bar discoteca con reservados, pedimos unas copas y empezamos a hablar de cosas banales.

Pusieron una canción lenta para bailar.

  • Cariño, quieres bailar conmigo? Hace siglos que no balio. Nunca bailo tú padre no quiere. Me dijo mi madre

  • Por supuesto que si, dije nunca rechazo a una mujer guapa. Le dije levantandonos de la mesa.

  • Mira que eres, adulador hijo. Seguro que un día encuentras una buena mujer que te quieras por como eres.

  • Te tengo a ti mamá, con eso me sobra. Le dije apretandola contra mi cuerpo y cogiendo su cintura.

  • ya hijo pero yo no te puedo dar lo que otras mujeres en la cama.

El oír eso de mi madre en mi oreja, y el tenerla pegada a mi hizo que se me pusiera dura la polla, mi madre creo que lo sintió pero no dijo nada.

  • Bueno ma, no me podrás dar en la cama

lo que otras mujeres, pero siempre nos podremos masturbar, jeje ríe. Por la conversación que habíamos tenido por la mañana en el jardín.

  • Hijo, por favor que soy tu madre, protestó mi madre.

  • Lo se, y eso es lo que te salva porque sino hoy acabas en mi casa. Le dije sin separarme lo más mínimo de ella.

  • Entonces hijo, lo que estoy sintiendo en mi tripa tan duro, es provocado por mí? preguntó mi madre al oído asombrada.

  • Creo que si mamá. No se cómo papá se complica la vida con zorritas jóvenes, Dije a mi madre al oído.

Apoye mi cabeza en su hombro mientras que mi dura polla se restregaba contra ella. No pude por memos que bajar mis manos al culo de mi madre. Nadie nos podía ver. La oscuridad del local era mi aliada. Su culo era duro y me gustó mucho la sensación.

Mi madre me miró asombrada por lo que estaba haciendo, pero se dejó hacer no dijo nada. Sólo reaccionó dando un beso corto en los labios.

Me quedé helado, iba a devolverle el beso y comerle la boca, pero la canción acabo. Nos separamos como si nos hubiese dado un calambre.

No dijimos nada e hicimos como que lo que acababamos de hacer no había sucedido.

Volvimos al reservado y terminamos las copas, nadie se atrevía a decir nada de lo que había pasado.

  • Hijo, creo que es hora de ir a casa a descansar. Llama al taxi anda.

  • Vale, creo que tienes razón mamá.

Parecía como mi madre, se hubiera enfadado por la que había echo, la forma de hablarme no era la misma que hace unos minutos.

Salimos a la calle a esperar nuestro taxi, Nos montamos atrás y nos separamos lo máximo posible, al contrario que cuando por la noche fuimos a cenar, mi madre se juntó a mi y estaba risueña hablando de cosas graciosas y así.

Pero ahora todo lo contrario, no decía nada y ni tan siquiera me miraba.

En el trayecto todo era silencio, cuando quedaba unas calles para llegar a casa puse mi manos sobre la suya y las junté, mi madre me miró y me sonrió apretó también mi mano. Eso me tranquilizó un poco.

Pagué el taxi, mientras mi madre entró en casa. Dejó la puerta abierta. Entre en casa todo estaba apagado no había rastro de mi madre.

  • Ma, mamá? chille al cerrar la puerta

  • Cariño, estoy en el baño, ahora salgo. Dijo mi madre..

Buff estaba nervioso, y a la vez inquieto no sabia que le pasaba a mi madre....

Por fin salió del baño, yo no sabía que decir o que hacer.

  • Tesoro son las 3 de la madrugada, nos vamos a la cama o tomamos la última dijo mi madre medio bailando en el gran salón de casa.

Me hizo ilusión ver a mi madre de nuevo contenta, por lo que la respuesta fue rápida.

  • La última y nos vamos a la cama. Mañana no se madruga. Yo me lo estoy pasando genial. Dije mientras iba a por unos vasos y hielos.

  • Vale, pues me voy a poner comoda, dijo mi madre.

  • No, espera la frene en seco. Así estás de lo más guapa. Quédate así. Al final tampoco vamos a estar aquí hasta las 10 de la mañana. Le dije poniendo ginebra en los vasos.

  • Como mi chico guapo mandé. Quién soy yo para no darle un capricho. Río mi madre que se sentó en el sofá.

Con los vasos en la mano, me acerqué a mi madre, y le di el suyo. Brindamos.

Los dos tomamos un trago y dijo fue mi madre quien Dijo.

  • Tesoro siéntate aquí, hablemos un rato. Dijo mientras ponía su mano en el cojín del sofá.

  • Espera mamá, nada de sentarnos vamos a bailar, aquí no molestamos a nadie.

Te gusta bailar, pues tu hijo te va a dar el capricho.

Mi madre le dio otro trago a su vaso y se levanto a toda prisa, mientras yo buscaba en mi aplicación de música, bailes lentos. Conecte un altavoz que tenía en el salón y sin poner la música muy alta, di otro trago a mi copa.

Deje el móvil y el vaso y volví a acoger a mi madre de la cintura, pegandome a ella lo máximo posible.

Enseguida mi polla que estaba morcillona desde que había tocado el culo de mi madre, se puso dura como una piedra de mármol.

Mi madre puso su cabeza sobre mi hombre y bailamos tres canciones seguidas.

Paramos para tomar unos tragos de nuestras copas. Yo no me atrevía a dar ningún paso más.

  • Venga cariño, pon la última y nos vamos a la cama vale? Dijo mi madre

  • Pero juntos? le pregunté sin pensar que decía.

  • Luis Javier, fue solo lo que dijo mi madre.

  • Lo siento lo siento. Dije riendo.

Nos volvimos a abrazar, está vez estaba dispuesto a quemar hasta el último cartucho.

Pero al poco de de comenzar la canción, mi madre fue quien me sorprendió.

Puso sus manos, en mi culo y me apretó, contra ella, mi dura polla pegaba en su vientre...

  • Mamá, le dije yo. Sin saber muy bien porque.

  • Qué hijo, tu antes me has tocado el culo y yo no te dicho nada. Paces. Dijo mi madre riendo.

Entonces, yo le devolví el beso que ella me dio, diente por diente pero esta vez un poco más largo. No lo rechazó.

Intenté meter mi legua en busca de la suya pero su boca estaba sellada.

Desistí.

Yo también, puse mis manos, en su culo. La canción estaba a punto de acabar,

  • Venga cariño, vamonos a la cama. Dijo mi madre separándose.

Hice caso, apagué el móvil sin saber que iba a suceder en los próximos momentos.

Subí detrás de ella las escaleras, joder que culito tenía mi madre...

Llegamos al pasillo nos quedamos parados... Fue mi madre quien rompió el silencio.

  • Bueno hijo, creo que ha estado muy bien el día, que descanses te quiero y me volvió a dar un beso en los labios.

  • si, yo también, lo he pasado bien. La pena que acabe aquí. Le dije a mi madre.

  • Buenos todavía no acaba ahora nos.... y mi madre hizo el gesto que había hecho yo esa misma tarde en el jardín, como si me haría una paja....

  • Pero tu a mi? le pregunté asombrado.

  • No, hijo estás loco? Tú a ti mismo.... Dijo mi madre.

  • Ahh como has hecho el gesto de hacer una paja, pues lo he mal interpretado. Dije con una sonrisa maliciosa....

  • Vamos a ver Luisja, que estoy un poco descolocada. De verdad te gustaría que yo, osea tu madre te hiciese una paja? Preguntó asombrada.

  • Hasta ayer me parecía una aberracion, pero ahora mismo me encaria. Bueno eso y algo más fuerte.. Dije mirando a mi madre a la cara.

  • Me dices de verdad que te has empalmado por mí y no porque llevas mucho tiempo si follar? Dijo mi madre un poco asombrada.

  • Si, suena mal pero si. Me encanta tu cuerpo. Dime la verdad mamá, a ti te apetece masturbarte? se sincera la dije cogiendo a mi madre de la mano.

  • Ehh ehhh, si. Bueno no. Ay hijo no sé... Creo que si no hubiéramos tenido la conversación está ahora estaría en mi cama tocandome, pero ahora me siento un poco rara...

  • Bueno, pues si quieres nos podemos masturbar juntos? Le dije a mi madre

  • Pero yo a ti? Preguntó mi madre asombrada.

  • Si quieres, por mí perfecto. Pero si no tú a ti misma y yo a mi mismo.... Le propuse para ver si aceptaba algo.

  • No sé, Luisja eso está mal. Una cosa es que sepamos que nos masturbemos por nuestras necesidades, y otra es que lo hagamos juntos... Dijo mi madre.

  • Bueno, que papá se esté follando a una zorrita que podía ser su hija tampoco está bien, y mira.. Además antes has dicho Que quien eras tú para no darle un capricho a tu hijo no? Le pregunté a mi madre

  • Si, bueno dijo mi madre...

  • Venga mamá, nadie se va enterar. Será nuestro secreto así además los dos no vengamos de papá... Dije intentando convencerla.

  • Esta bien. Pero lo haremos separados. Dijo mi madre.

Me abalancé sobre ella, y le plante un sonoro beso en los labios. Joder que cachondo estaba...

Entramos en la habitación de mis padres.

  • Bueno, dijo mi madre, tú en el sillon y yo en la cama, te parece? dijo mi madre.

  • Vale, le dije. No quería presionarla.

Me senté en el sofá, mi madre entró al baño, creo que a quitarse la ropa...

  • Ma, donde vas? le pregunté.

  • Al baño a desnudarme la verdad que ahora me da un poco vergüenza. Dijo mirándome.

  • Mira yo lo haré primero. Así yo romperé el hielo vale? Recuerda mamá, que ayer te vi totalmente desnuda, es lo mismo... Dije mientras me quitaba los pantalones.

En mis calzoncillos, era evidente lo dura que tenía la polla, al igual que la marcha de líquido preseminal que tenía. Claro llevaba todo el día cachondo...

Deje los calzoncillos puesto y me quité la camisa, bajo la atenta mirada de mi madre. Al final bajé mis calzoncillos, y mi polla salió de golpe de su escondite..

  • Ves mamá, no pasa nada, dije comenzado a subir u bajar mi polla delante de mí madre.....

  • Esta bien ahora lo haré yo. Jolín hijo que polla tienes dijo mi madre clavando la mirada en mi dura polla.

Mi madre comenzó a subir su vestido a escasos metros míos, no podía aguantar más, estaba esperando como si nunca la hubiese visto desnuda..

Subio su vestido hasta si cintura, no me daba tiempo a similar el cuerpo de mi madre, no podía dejar de frotar mi polla, sacó el vestido y se quedó con un conjunto precioso de lencería, sus bragas también dejaban prueba que mi madre estaba cachonda tenían una mancha de flujo. Por la pequeñas transparencia pude ver sus rosados labios. Llevaba unas medias con liguero..

  • Joder mamá, que buena estás ,creo que me voy a correr antes de que tú empieces a masturbarte. No voy a aguantar mucho.... Déjate la medias por favor le dije.

Mi madre mi hizo caso, se quitó el sujetador y se bajó las bragas, se sentó en la cama y sacó sus bragas por los pies mientras con una patada lanzaba las bragas hacia donde yo estaba.

No lo dude las cogi. Estaban empapadas, las puse en mi polla y seguí cascandome la mejor paja de mi vida.

Mi madre tumbada en la cama, sin quitarme ojo de encima empezó a frotar su clítoris con una mano, y con la otro metía dos dedos dentro de su coño...

Yo estaba apunto de correrme y más cuando senti el frío flujo vaginal de las bragas de mi madre en mi polla.

Yo estaba a punto pero mi madre no tardaría menos. Con tan solo tocarse un poco ya estaba gimiendo de placer como una loca....

  • Ahh ahhh ahhh joder que caliente estoy cariño.. Ahh ahha ahhh esto está mal pero joder me gusta me gustaaaa ahhhh me corroooooooo

Chilló mi madre como una posesa. El oír gemir de esa manera a mi madre hizo que me corriera como un loco.

De mi polla salieron chorros de lefa que hasta uno pego al lado de mi madre. Una gota le salpicó en la pierna..

Buff no paraba de correrme mientras mi madre seguía chillando.

  • Me corroooooooo me coroooooooooo y un poco de liquido salió de coño, manchando el edredón..

Vi como dejaba de meter sus dedos y frotar su clítoris. Yo meneaba mi polla muy despacio. Había sido la mejor paja que me había hecho nunca.

Los dos no quedamos un poco inmóviles, sin saber que hacer.

Mi madre rompió el hielo.

  • Mañana, tendré que lavar el edredón, lo hemos manchado. Dijo un poco nerviosa

  • Y tus bragas, las he puesto pérdida de leche. Dije yo riendo....

  • Mamá, podemos dormir hoy juntos? le pregunté.

  • Si, cariño pero sólo dormir. Sólo eso. Dijo mi madre mientras se soltaba el liguero y se quitaba las medias.

Los dos nos metimos en la cama desnudos era ya de madrugada, y estábamos muertos. Caímos dormido sin tan siquiera habernos dado las buenas noches.

Me despertaron las ganas que tenía de mear, con la luz que entraba por el baño, fui a mear. Era ya medio día. Volvi a la cama. Mi madre se despertó.

  • Buenos días tesoro. Ha dormido bien el rey de la casa? preguntó mi madre.

  • Buff mamá, hacia tiempo que no dormía tan agusto.

  • Normal dijó mi madre, después de la descarga de ayer como para no... y fue al baño, hacer pis.

Pude oír como su chorro pegaba en el agua del váter.

Estaba claro que ayer habíamos dado un paso pero hoy que pasaría?

Dejé de oír el pis, pero mi madre no volvía a la cama, donde la estaba esperando a ver qué sucedía.

Por el contrario oí, poner música es su baño, y encender el agua de la ducha.

Esperé a ver qué hacía mi madre, pero como solo hacia canturrear la canción que sonaba....

  • Ma, te vas a duchar? le pregunté a ver si me invitaba.

  • Si, tesoro quita las sábanas, la colcha y la ropa de anoche y echa todo a lavar ahh y abre la ventana dijo mi madre entrando en la ducha.

Joder ma y ya está? Eso es todo después de la paja que nos hicimos anoche aquí los dos, pensé en mi interior.

Abre la ventana... Una mierda, voy a abrir otra cosa.

No lo dude, me levanté de la cama y con la polla ya dura de pensar lo que iba hacer entre en el baño, abrí la mampara y me metí dentro.

  • ahh que susto cariño, pero que haces aquí. Estas loco dijo mi madre.

  • Bueno, ya que tú no me has invitado, me he auto invitado yo... Dije metiéndome debajo del agua de la ducha.

  • Hijo, lo de ayer estuvo mal, creo que debemos poner freno a esta situación dijo mi madre mientras se dejaba dar un masaje con jabón por su espalda.

  • Hombre mamá, no me podrás negar que no te gusto el verme como me hacía la paja no? Le pregunté acercando mi polla a su culo.

  • Si, claro que me gustó, y mucho no recordaba estar tan caliente nunca. Ni haberme corrido tan pronto... Pero creo que hay que parar esto antes de que sea demasiado tarde.

Me acerqué a ella y puse mi polla en su culo, toque por primera vez sus tetas y le di un beso en el cuello.

  • Mamá, sé que lo deseas igual que yo, así que hagamoslo. Dije bajando mi mano derecha a su coño, que estaba otra vez humedecido.

Mientras que con mi mano derecha jugaba con su coño, y con la izquierda pellizcaba sus pezones, ella con su manos derecha cogió mi polla y empezó a subir y bajar su mano, por ella.

Me daba un placer grandísimo que mi madre me estuviera haciendo una paja.

Pero quería más.

La aparté un poco del agua, y me agache a chupar su coño, no puso el menor impedimento.

Chupaba su coño mientras ella apretaba mi cabeza contra su sexo, y se pellizcaba los pezones. Metí un par de dedos en el coño, los sacaba y metía a gran velocidad mientras que succionaba su clítoris.

  • Ahhh ahhhh que gusto tesoro que gusto me encanta cómo me comes el coño ahh sigue sigue. Tu padre no me lo quiere comer ahh no pares mi rey no pares...

Deje de meter mis dedos en su humedecido coño, quería meterle la polla, así que seguí solo chupando su coño.

  • ahhh ahh síii siiii siiii ahhhh Follame joder chilló mi madre, no aguanto más, quiero que me metas esa polla de una vez.

No lo pensó dos veces, me levanté del suelo, y la incline un poco, cogí mi polla con mi mano, y la aprosime a la entrada de su coño, entró hasta el fondo de una sola embestida.

Tras las primeras embestidas, mi madre comenzó a gemir....

  • Sii Sii joder que polla más buena hijo, lo haces mejor que tú padre no pares no pares ahhh ahhhh ahhhh joder que gusto.

Apretaba las tetas de mi madre, mientras que mis huevos rebotaban contra ella.

  • Te gusta eh mami? te gusta como te folla tu hijo ehh.. Le dije metiendo mi polla a toda velocidad...

  • Si si ahhhh ahhhh me encanta me encanta ahhhhhhh me corroo me corroooooo.

Pegue unas cuantas embestidas más, pero sentí un pinchazo en mis huevos, y le llene a mi madre el coño de leche caliente.

Los dos jadeabamos y recuperabamos la respiración, sin dejar de meter mi blanda polla en su coño, que escurría lefa por sus Piernas.

Nos dimos un largo beso ahora sí con lengua. Mientras que le tocaba el culo. Los dos nos lavamos mutuamente y al final salimos de la ducha.

Recogimos el alboroto sexual de la noche anterior, y bajamos a desayunar algo.

Salimos al jardín, con un café unas tostadas y un zumo. Casi era la hora de comer, pero estábamos desayunando.

Estaba muy relajado, hacia buen día los pajaritos cantaban y lo mejor de todo era que acababa de echar uno de los mejores polvos de mi vida, si no el mejor.

  • Sabes mama? le pregunté a mi madre

  • Dime tesoro. Dijo mi madre dando un sorbo a su zumo.

  • Que nunca podía pensar, que te iba acabar follando. Pero bueno también pensaba que papá, te era fiel y mira.

  • Bueno hijo, ahora tenemos que actuar como si nada de esto hubiese sucedido y como que no sabemos de los líos de tu padre. Poco a poco entre los dos pondremos la empresa a tu nombre y veremos qué pasa con el tiempo.

Brindamos mi madre y yo con los zumos, mientras deborabamos las tostadas.

  • Mamá? le volví a preguntar.

  • Dime cariño. Dijo mi madre acabando el café.

  • Volveremos, ya sabes. Tú y yo ahhhh...

  • Bueno, hijo. A ti te apetece? preguntó mi madre.

  • Si, y mucho mucho mucho. le contesté.

  • Pues bueno por mí seguimos con esto, pero recuerda hay que tener mucho mucho cuidado que no se enteré tu padre ni nadie.

  • Ok así lo haremos mamá.

Justo cuando acabamos de desayunar sonó mi móvil. Era mi padre

  • Buenos días, que tal ha ido esa cacería pa? Le pregunté.

  • Muy bien hijo, he cerrado un buen contrato estoy muy satisfecho. Mañana te cuento. Por cierto que tal estás?

  • Ah ya estoy bien, estoy en casa he venido a comer con mamá.

  • Ah vale, pues en dos horas llegó yo por allí y os veo vale?

  • Perfecto por aquí estaremos. Le dije colgando el teléfono.

  • Qué dice el cornudo de tu padre? preguntó riendo mi madre.

  • Que ha cerrado un buen trato, más creo que yo abra abierto que cerrado.

Reímos mi madre y yo.

Pues venga vamos a recoger la casa para que no sospeche nada.

Recogimos la casa, y esperamos su llegada, venía muy cansado no me extraña, la zorrita tiene 25 años menos como pa no.

Estuvimos hablando de todo un poco del fin de semana y así.

  • Pues nada, hijo me alegro que estés bien.

  • Bueno yo si lo que no está bien es mi casa mentí. El vecino de arriba se dejó un grifo abierto y ahora parece Venecia me voy a tener que mudar unos días aquí hasta que esté todo solucionado.

Pude ver la cara de alegría que ponía mi madre.

  • Ah, perfecto ya sabes que estaba siempre es tu casa.

Todo era como antes. un padre ejemplar..

Llegó la hora de cenar, mi madre fue la cocina mi padre me contaba el trato que supuestamente había cerrado en la cacería..

  • Bien me voy a ir a dar ducha, dijo mañana firmamos todo, y todo resuelto.

Estoy molido. A ver si empiezas a tomar la riendas del todo y yo me voy con tu madre de fin de semana romántico en vez de cacería dijo el cerdo de mi padre.

  • Claro que si, pa pero antes creo que ya es hora de tener participación en la empresa ya sabes cómo te digo le deje caer.

  • Ahh, si está bien. Esta semana lo hablamos y hacemos una partición te daré un 40% de la empresa. Eres un gran trabajador. Dijo mi padre.

  • y Tú el mejor padre, le dije dandole un abrazo.

Lo vi, perderse por las escaleras y como cerraba la puerta de su habitación, seguro que para llamar a su zorrita.

Yo fui a la cocina, a darle la noticia a mi madre y de paso a meterle un poco mano....

Estaba en la fregadera con el delantal puesto, canturreando una canción en inglés, me acerqué sin hacer el menor ruido, y pegue mi polla contra su culo, con mis manos le cogí las dos tetas, y le di un beso en el cuello.

  • Estas loco, para quiero no puede ver tu padre. Suéltame no hagas esto más. Dijo mi madre.

  • Tranquila, ma, papá ha subido a llamar a su zorrita que la echará de menos y a darse una ducha no nos puede ver. Toque su coño por encima de su ropa.

  • Es igual hay que tener cuidado, yo también tengo ganas de más, pero hay que saber cuándo. Dijo mi madre soltándose de mi.

  • Que sepas que papá, me va a dar un 40% de la empresa, no va hacer falta llevar a cabo nuestro plan...

  • Si? preguntó mi madre que se giró y ahora sí que me dio un beso en los labios.

Me alegro cariño, ahora vete. No quiero que nos vea papá.

Le volví a tocar todo lo que pude y me fui al salón.

Cenamos los tres y recogimos, nos sentamos en el salón a ver la tele pero mi padre se quedaba dormido.

  • Bueno vamos a la cama, estoy muerto todo el fin de semana lo he pasado andando. Dijo mi padre

Mi madre y yo nos despedimos, pero mi padre le dijo a mi madre.

  • Cariño, sabes que si no estás a mi lado no puedo dormir, estas dos noches me ha costado, mucho y a penas he dormido. Anda sube conmigo a la cama.

  • Está bien, hasta mañana hijo, dijo mi madre levantándose del sofá

  • Hasta mañana a los dos.. Le dije.

Visto que no iba a hacer nada con mi madre yo también, me fui a la cama

Pude oír la voz de mi padre que le decía a mi madre.

  • No, cariño está Luisja en la habitación de al lado y nos puede oír. Esta noche no.

Estaba claro que mi madre quería asegurarse que había estado con esa zorrita, para nada tenía ella ganas de follar.

Me dormí, en un instante hasta que algo me despertó de mi sueño.

Era mi madre que se estaba metiendo en mi cama.

  • Mamá, que agradable sorpresa, le dije.

Qué hora es?

  • Son las tres tu padre lleva más de cuatro horas durmiendo ahora no lo despierta ni aunque se caiga la casa... dijo mi madre.

  • Y entonces tú qué quieres? le pregunté a mi madre empezandola a desnudar.

  • Celebrar, que eres socio de la empresa. Todo director tiene su zorrita y yo seré la tuya dijo mi madre tocando mi polla sobre el pijama...

Eso me gustó, así que empecé a chupar los duros pezones de mi madre, mi polla iba a reventar..

Pude sentir como mi madre metía mi polla en su boca y empezaba a chupar con ansia mi dura polla. Sus tetas engulleron mi polla, y empezó a hacerme una cubana.

Joder que gusto me produjo mi madre chupaba mi capullo al bajar sus tetas había abajo.

Tras un rato de una buena cubana yo bajé mis manos para empezar a tocar si coño. Mi madre genia de placer.

  • Mamá, dame tu coño me lo quiero comer. Dije a mi madre.

Ella se tumbo sobre mi y puso su coño en mi boca, mientras que volvía a engullir de nuevo mi polla.

Estuvimos un buen rato haciendo un 69. Me encantaba sentir la tetas de mi madre en mi tripa, mientras le comia ese coño tan jugoso que tenía.

  • Joder cariño, eres un dios. Madre mía qué bien me comes el coñoooooo gimió mi madre..

Paró la situación y se sentó sobre mi polla, comenzó a restregar mi polla con su coño, me hacía una paja con su húmedo coño....

Se puso de cuclillas, y metió mi polla entera en su coño.

  • Ahhh joder mamá que calentito lo tienes.

Dije yo.

Mi madre saltaba sobre mi mientras que incaba sus uñas en mi pecho.

  • Ahhh ahhhh ahhhh síii siiii siiiiiiiii me corroo me corroooo cariño me corroooo hijo me corrroooooo y dejó de saltar sobre mi dura polla.

Yo estaba apunto pero me faltaba algo. Mi madre sacó mi polla de su coño y de rodillas a mi lado, comenzó de nuevo a chupar mi polla. No tardé en avisar que me corría.

  • Mamá me corrooooooooo me corrroooooo y me corrí en su boca.

Mi madre se tragó hasta la última gota de mi leche.

Nos dimos un buen beso y nos despedimos hasta el día siguiente.

Fui el primero a la oficina, hacia mis labores diarias, cuando poco antes de comer me llegó un mensaje.

Era mi madre.

  • Cariño, estoy en tu casa. He preparado la comida. Aquí te espero.

  • Ok, en media hora estoy allí. Mi zorrita.

Terminé lo que estaba haciendo lo antes que pude, y me fui para mi casa.

Al entrar todo estaba en silencio, parecía como si no hubiese nadie.

  • Mamá? Chille desde la puerta.

  • Estoy en tu habitación hijo. Dijo mi madre.

Fui a toda prisa a mi habitación, allí estaba mi madre, tumbada en la cama, con un traje de cuero ajustado, que marcaba todas las curvas de su cuerpo, tenía dos aberturas para sacar las tetas y una gran abertura en el coño, para meter la polla.

Me abalancé sobre ella a chupar sus tetas ellas me quitaba la ropa.

Metí mi mano por la raja de sus coño, lo tenía bien lubricado.

Los dos nos desnudamos y la puse a cuatro patas en la cama, el traje de cuero marcaba la raja de su culo.

Se la metí hasta el fondo, mi madre gemía de placer como una loca, mientras que yo apretaba sus tetas.

Mis embestidas eran rápidas y fuertes, el ver a mi madre así hizo que me pusiera muy cachondo....

No tardamos en tener nuestro orgasmo, y yo corriendome dentro de mi madre.....

  • ahh mamá eres única. Eres la mejor mujer que me he follado nunca.

  • Y tu hijo mío el mejor hombre que me ha follado nunca.

Los dos descansamos un rato en mi cama, nos dimos una ducha y nos pusimos a comer.

Esta es la historia, de como me empecé a follar a mi madre. Ahora llevamos ya 3 años follando como locos, casi todos los días.

Mi padre no sospecha nada, y cuando se va de escapaba con alguna de sus zorras mi madre y yo aprovechamos para follar u vengarnos de él.

Fin.......

Gracias por volver a leer otra de mis historias. Es un placer contarlas. Espero que os guste.

Me gusta mucho leer vuestros comentarios...