Madre busca macho que la monte | capítulo 3

Después de despertar feliz las cosas se complican un poco, pero la naturaleza que dicta como se monta a una mujer ayuda a volver las cosas a su lugar

Al amanecer no me podía creer que había montado a mi madre sin ningún impedimento, no podía creer que ella misma se había acomodado de la mejor manera para subirme en sus nalgas para cogermela, realmente era una buena hembra a quien montar, pero toda esa alegría se esfumo cuando note que en la ducha el agua caía y se escuchaban sollozos, voltee a mi lado y mi madre no estaba, estaba confundido, acaso mi madre estaba arrepentida? o no fui lo suficientemente bueno y ella aun se sentía sola? Quise levantarme e ir a consolarla, pero si estaba arrepentida a mi era la persona a quien menos quisiera ver, así que decidí esperar, cualquiera de las dos situaciones me las aria saber tras salir.

Así fue, cuando salió de su habitación para comer evadía mi mirada, su ropa era normal, unos jeans, una blusa y zapatos para andar.

Ninguno de los dos comento nada durante todo el día, en la noche a pesar de dormir en la misma cama ambos nos arrimamos a las orillas, al día siguiente me fui a la escuela ya eran los últimos días de clases y no podía faltar, aun que realmente no tenia ánimos de quedarme en casa, durante el día recordé las palabras de don Manuel y aquel primer relato filial que leí, quizá podría pasar, pero en mi caso no sería con alguien de mi edad si no con este señor, a pesar de que mi madre me había dicho que ahora era mi hembra y solo yo la montaría, seria capas de por arrepentimiento dejar que don Manuel la montara?

Todo el día estuve pensando en mi madre entre alegría y tristeza, al salir de la escuela me dirigí a casa, todo fue como el día anterior. al día siguiente fui a la escuela pero sin entrar regrese y desde el techo de un local de videojuegos estuve vigilando mi casa no paso nada, el día siguiente volví a ir a la escuela de manera normal, al siguiente día volví a faltar y la misma rutina, vigilar mi casa desde aquel local, en esta ocasión volví a ver a don Manuel entrar a mi casa, me sentí un poco enojado conmigo mismo, pues el señor entro como si nada y eso me hizo pensar que mi madre le tenia confianza apresar de saber de las intenciones de este señor y que tal vez esas diferencias las habían arreglado el día anterior.

Rápidamente fui a mi casa, la puerta de la entrada principal estaba entreabierta, en la sala estaban mi madre y don Manuel, pero desde mi lugar apenas se escuchaban susurros hací que fui por la puerta de atrás para entrar a la casa.

  • Que no don Manuel.

  • Vamos perrita, se que quieres verga, vamos... ponte a cuatro patas.

  • Don Manuel!!! maldita sea ahora veo que fue un error a verle dejado entrar.

  • Sabes que perra, yo se que tienes ganas solo que te ases del rogar maldita zorra.

  • hhaaa!

Mire rápidamente hacia ellos y don Manuel tenia a mi madre contra la pared y este le restregaba la verga en sus nalgas.

  • Siente perra todo lo que te vas a tragar, siente con que te voy a dejar preñada.

Nuevamente interferí con unos celos intensos, aun que esta vez si me lleve algunos golpes.

  • Esperame aquí cariño voy por el botiquín para curarte.

Sin embargo me retire a mi habitación pues no me sentía cómodo estar frente a mi madre sabiendo que estaba arrepentida.

Al llegar a mi habitación pensé, "tal vez es mejor hablar y solucionar esto" en eso ella entra a mi habitación.

  • Por que no me esperaste en la sala?

  • Estoy bien gracias.

  • Como vas a estar bien cariño?

  • En verdad que estoy bien, quiero estar solo, si!

Mi madre suspiro y tomo mi barbilla.

  • Mi amor, tenemos que hablar sobre lo que paso entre nosotros... eso estuvo mal, eres mi hijo y no es para nada bueno lo que paso.

  • Te arrepientes?

  • Si... No... si... haa mira no, no me arrepiento, te amo, pero te amo como a mi hijo y es un amor mas fuerte que cualquier amor, pero una cosa es hacer cosas de madre e hijo y otra el hacer cosas de un hombre y una mujer....

Igual se que te debo una disculpa, me deje llevar estaba muy excitada, creo que escuchaste al primo de tu papá y ahora a don Manuel decir que estaba urgida, la verdad que si, hacia mucho tiempo que no tenia intimidad y ya estaba muy cachonda por eso paso.

No quiero que el tener sexo rompa nuestra buena relación, me entiendes?

No respondí, solo asentí con la cabeza.

  • Igual pensé lo que me habías pedido, y decidí en que si.

  • Si de que?

Lentamente acerco sus labios y beso los mios.

  • Si a esto... decidí que si quieres que nos besemos en los labios estaba bien, te amo y supongo que tienes razón en que no es algo ampliamente sexual y que es una muestra de amor.

  • Ma aun puedes seguir siendo mi novia para invitarte al cine, a cenar y a otros lugares.

Después de unos momentos de pensar, contesto.

  • Si cariño... pero sin final feliz ahora (dijo con una sonrisa coqueta).

Nuevamente las cosas pasaron a una relativa normalidad, en la que la convivencia con mi madre era buena, ella volvió a usar sos body's para andar en casa, en algunas ocasiones se ponía minishorts para no mostrar las nalgas cubiertas por el body.

La semana continua a mi salida de la escuela las amigas de mi madre le llamaron para ver si estaba dispuesta a salir a bailar, aun que acentuaron que en esta ocasión no les molestara la salida, mi madre quedo en silencio para responder, me miro y dijo.

  • Esta bien, pero yo voy ya con pareja, ustedes buscan si quieren.

Escuche en la bocina decir con tono elevado.

  • Mira! quien lo iba decir, tan escondidito que tenias al galán con razón ya andas de buen animo! y que, si la tiene rica, bueno como para estar contigo, ha de tener una verga bien rica.

Mi madre sonrojada voltea a mirarme y contesta.

  • Si, je, je, je... bueno, bueno... entonces nos vemos.

y cuelga rápidamente.

  • Hay con estas muchachas, son unas sucias.

  • Y que ma, vas a llevar a don Manuel?

  • Mi madre voltea a mirarme sorprendida, pero cambia su rostro con una sonrisa, y dice.

  • Si, me lo voy a llegar a el... no como crees, voy a ir con mi novio, que para eso tengo novio, no?

Llego el día viernes, en el que iríamos a bailar, mi madre en esta ocasión llevo un vestido entallado de color rojo con escote y al parecer sin bracier, pues se le marcaban a la perfección sus pezones.

Las amigas de mi madre llegaron.

  • Vámonos Adri.

  • Si... Cariño vámonos.

Las amigas de mi madre estaban espectantes a que la pareja de mi madre saliera.

Para esta ocasión vestí con un pantalón de mezclilla negro, camisa azul marino, zaco y zapatos negros.

Los rostros de las amigas de mi madre expresaban sorpresa.

  • Heee tu pareja para la noche es tu hijo.

  • Si, que tiene de malo.

  • Pues que el plan para la noche era ir a buscar buenas carnes.

  • Que también las de Jose no están para despreciar hee! pero es tu hijo.

  • Si, ustedes van a eso, yo voy a divertirme y el que mi hijo valla conmigo no lo impide, al contrario, me siento mas cómoda llenado a bailar con mi hijo.

  • Que tan cómoda? (preguntó una de las amigas con una sonrisa picara)

  • Bueno, vasta de preguntas, yo voy con mi galán y ustedes haya buscan el suyo.

Tomamos camino al antro, llegando al lugar pedimos una mesa en donde solo dejábamos las bebidas y nos poníamos a bailar, las amigas de mi madre miraban de un lado a otro buscando con quien bailar o tratando de llamar la atención para que les invitaran a bailar, después de unas siete canciones mi madre y yo nos sentamos para descansar.

  • Ahora regreso que ya vi con quien quiero bailar, volteamos a donde la amiga de mi madre miraba, dos tipos se acercaban.

  • Hola hermosas, nos harían el honor de aceptarnos unas copas.

Cada uno de estos tipos se pararon a lado de la amiga de mi madre y de ella, la amiga rápidamente contesto un "claro que si".

Al escuchar esto los tipos se sentaron uno a lado del cada mujer.

  • Pasate de este lado (me dijo mi madre al oído)

Estando justamente el espació para cada persona (pues era un sillón de media luna), mi madre levantó un poco las nalgas del asiento, me deslice bajo de ella pero sin querer roce sus piernas y perdiendo el equilibrio se sentó en mis piernas, nuevamente se levanto y terminamos de cambiar de lugar, ambos tipos quedaron sorprendidos por nuestro actuar.

  • Sucede algo?

  • haa! es que mi amiga viene acompañada, pero no se preocupen yo bailo con los dos.

  • Que lastima... (dijo el tipo que ahora estaba a mi lado), pero si me regalas una pieza de baile, no? (pregunto mirando a mi madre).

  • No, ya oíste vengo acompañada.

Tomó mi mano y la puso sobre su pierna derecha, mientras me abrazaba y acomodaba su cabeza en mi hombro.

Tomamos nuestras copas y nuevamente salimos a bailar, la amiga de mi madre con sus amigos y mi madre conmigo. Después de todo la velada fue de lo mejor, de mi parte no tome mucho alcohol debido a que tenia que cuidar de mi sexy madre.

Al llagar a casa me pidió le ayudara a sacarse el vestido, así lo hice solo para quedar impresionado, nuevamente mi madre llevaban su portaligas y un par de largas en cada pierna. Al ver que no le retiraba la mirada de ese detalle de lencería, me mira, sonríe y dice.

  • Sabia que te iba a encantar ver que traía el portaligas.

  • Si mami, se te ve muy sexy.

  • Gracias mi amor.

La noche paso de lo mas normal, abrazando a mi madre.

Al día siguiente preparamos las cosas para la mudanza al pequeño rancho que mis abuelos le había dejado a mi madre.

  • Cariño antes de ir nos quisiera que habláramos.

  • Si claro ma, de que?

  • Pues que haya nadie nos va a conocer y entonces debemos estar mas unidos y haya no debemos estar como aquí, de dejarnos de hablar, cariño quiero que aquí se queden las dudas entre nosotros, la platica con mi madre continuo entre preguntas del uno al otro.

Como sabias montar si me dijiste que nunca lo habías hecho?

Como es que estabas presente cuando el primo de tu padre me metió la mano y de la misma manera cuando don Manuel me puso contra la pared?

  • Ma, quien era el tipo con el que estabas en la fiesta de tu amiga?

Mi madre me quedo mirando unos momentos seria.

  • Nadie cariño.

  • Entonces?

  • Me da pena decirte, pero apenas lo conocí ese dia, mi amiga me lo presento cuando salimos la segunda vez

Me quede en silencio y con cara sería.

La primera vez que vino me dijo que quizá la depresión era por falta de sexo y en la fiesta, la primera vez que salimos me dijo que tenia solución a mi problema y que llegaría alguien para ayudarme, por eso estaba inquieta mirando a la entrada.

  • La verdad me sentí mal que después de haberme ilucionado de ir a una fiesta con la mujer mas hermosa y vestida tan sexy me dejaras solo para estar con el.

  • Lo se y lo siento cariño, cuando fuiste a la mesa donde estábamos me di cuenta de mi error y mas cuando ellos me dijeron que te dejara ir, que ya estabas grandesito por eso también me salí, también por eso las dos veces que vinieron mis amigas ella no venia con las demás...

Las horas pasaron y llego el camión de la mudanza, la despedida duro lo que los cargadores en subir nuestras pertenencias al camión, mientras esto sucedía vi a don Manuel mirando a nuestra casa, me pare detrás de mi madre arrimandole la verga, la abrace y acaricie su vientre como si de una embarazada se tratara.

En el camino a nuestra nueva casa iba platicando con mi madre de diversos temas mientras acariciaba sus piernas, empecé a ver mucho campo, pasamos por el pueblo y habremos avanzado un kilómetro mas hasta llegar a la entrada del rancho, la casa era mediana, dos habitaciones, una mas para el servició, el patio frontal era el doble del que teníamos anteriormente, el trasero era el triple, teníamos una milpa de siembra de maíz, un establo para ganado, pollos de granja entre otros, agradecí ya no tener clases puesto que había mucho trabajo que hacer, el mismo que empezamos apenas llegando.

Acomodamos la casa, lavamos y desempolvamos, sacamos y metimos pertenencias, hasta la tarde que terminamos de acomodar la casa.

  • Hay cariño termine exhausta, ni para hacer de comer tengo energía ya.

  • Si quieres te invito a comer al pueblo, haber que encontramos.

  • Cariño me viene muy bien tu invitación.

Claramente la gente del pueblo nos veía sorprendidos al ser la primera vez que nos miraban.

Al llegara a casa acalorados mi madre iba a preparar la ducha pero esta no funcionaba bien por el tiempo de desuso.

  • Tendré que humedecer alguna tela para limpiarme un poco cariño que me siento hasta pegajosa del polvo.

  • Si ma.

De las cosas aun en cajas de carton saco una vendas gruesas, se empezó a desvestir, dejándose solo en tanga y empezó a pasar las vendas húmedas por cada rincón de su cuerpo o por lo menos de la parte frontal.

  • Cariño me limpias las espalda, por favor.

  • Si ma.

Cuidadosamente pase la tela limpiando la suciedad, al mirar las nalgas recordé como las había montado.

Al terminar me pidió la tela me dijo.

  • Volteate un poco cariño... Bueno de cualquier manera ya me has visto.

Se bajo la tanga a la mitad de sus piernas y se limpio la zona de su sexo para después volver a subirla. Posteriormente nos fuimos a dormir.

Durante toda la semana estuvimos trabajando en arreglar el resto de la casa y aprovechando el desorden que había mi madre contrato a un albañil para que pusiera la piscina que me había mencionado cuando me planteo ir a vivir al rancho. Los primeros animales que compramos eran pollos eso si, bastantes.

había pasado dos semanas y dos días de la entrega de las aves, al percatarme de las cantidades de alimento que consumían y de la distancia con el pueblo hice un pedido de tres bultos, los cuales a servicio de la tienda nos irían a dejar hasta el rancho.

Me encontraba terminando de retocar unas fotografías que me habían enviado al correo y decidí ir a dar la vuelta con mi madre por los alrededores o por el pueblo para distraernos, la casa estaba en silenció por lo que me dirigí al establo, "seguramente estaría dándole de comer a los pollos con el poco alimento que quedaba". Cuando llego veo a mi madre recargada de lado en la pared y frente a ella un hombre con el brazo recargado de la misma manera en la pared, tipo, chico de bachillerato ligando.

Camine presuroso pues para nada me gusto esa escena. En cuanto mi madre me vio dijo.

  • Cariño, el joven es de la tienda de alimento, ya trajo los bultos.

  • Si.

  • Ahora vengo, voy por el dinero para pagarle.

  • Si señora

El chico de aproximadamente 20 años me vio nervioso.

  • Muy simpática su mamá joven.

Con una actitud seria le contesto.

  • Te voy a pedir que cualquier asunto lo arregles conmigo, estamos.

Solo escuchar vasto para que el tipo cambiara su cara a una seria.

  • Si patrón, usted disculpe.

Mi madre llegó y le dio el dinero al repartidor.

  • De que hablabas con el repartidor ma?

  • Me preguntaba que de donde eramos y cosas así y me dijo que era muy hermosa...

  • Oye venia a decirte que si quieres ir a dar una vuelta por los alrededores o al pueblo.

  • Si cariño, vamos.

Tome de la cintura a mi madre y empezamos a caminar, por la temporada hacia calor y mi madre llevaba un short y una blusa sin brasier marcándole deliciosamente los pechos.

Mientras caminábamos íbamos platicando de diversas cosas, a lo lejos vimos a varias vacas y toros junto a ellos un caballo y una yegua, nos acercamos un poco para ver pues teníamos en mente comprar un par de vacas, estaríamos a veinte metros cuando vimos que el caballo se acercaba a la yegua y este le empieza a oler el sexo, después de unos instantes se apreciaba el sexo se esta dilatándose para empezar a derramar fluidos y a los pocos segundos la monta con tremenda erección, yo nunca había visto algo así, por lo que quede impresionado, voltee lentamente hacia mi madre, su cara también expresaba impresión, también note sus pezones duros y erectos, posteriormente empezó a morder sus labios, sentí que mi madre ya no se enteraba, lo que mas me impresionó fue mirar su mano izquierda dirigirse a acariciar sus pechos y su mano derecha hacia su entrepierna.

  • Me estoy chorreando (dijo en un susurro casi imperceptible)... A la chingada! (elevando la voz).

Gira el cuerpo hacia mi y desabotona el short bajándolo con prisa y lo mismo con la tanga, rápidamente se pone en cuatro y es mas perceptible como fluyen sus jugos desde su vagina hacia la tierra.

  • Montame... montame que necesito que me monten... dios!!! estoy muy excitada, creo que inconsciente replique los actos de aquel caballo pues me impresiono la cantidad de jugos que emanaban de su vagina y solo pude incarme tras de ella para ver mejor como se dilataba su vagina, mi lengua empezó a recorrer esa raja que empezaba a mostrar un tímido orificio, sus jugos abarcaban gran parte de mi lengua como si se tratara de media cucharada de miel.

  • Haaaa, si que rica lengua, haaaa hummmm, si mi amor hummmm, perdoname mi amor por mi estúpido intento de apagar nuestro amor, hummm.

Me despegue un poco, mi intención era meter un dedo y estimularla pero rápidamente ella se levantaba y dice.

  • No... no aquí no, alguien puede venir y vernos, rápidamente se subió la tanga y el short y nos fuimos hacia el rancho.

apenas llegamos al establo y ahí entramos, mi madre casi corriendo, se saca el short, la tanga y la blusa, esta ultima la tiende en el suelo y en la orilla inferior pone las rodillas, mientras llego a ella me voy retirando la playera y el pantalón, lo mismo que con el bóxer.

Pongo la playera a lado de su blusa y trato de acomodar el pantalón con el mismo propósito.

  • Montame amor mio, quiero sentirte dentro mio.

Me coloco en cuclillas a lado de ella, introduzco el dedo índice de la mano derecha en su conchita haciendo presión hacia arriba comienzo a dedearla, mientras con la mano izquierda acaricio su espalda y haciendo presión hago que ponga la cara, el pecho y abdomen contra nuestra ropa tendida en el piso.

Introduzco el dedo medio y continuo dedeandola, esta vez se intensifican los gemidos y al ritmo de los dedos mueve las nalgas de abajo hacia arriba.

  • Ha, ha, ha, ha, hummmmmm ha! que rico mi amor, que rico.

  • ...

  • Montame ya mi amor, monta a tu hembra en celo... Montame mi amor... Montame que estoy en celo, estoy deseando que me dejes preñada mi amor, mi vida, mi macho.

  • Si mami, estas en celo?

  • Si mi amor necesito que me montes, ya no aguanto, quiero que me montes por favor...

Rápidamente me paro tras de ella poniendo los pies separados a la altura de sus rodilla dirijo mi vergas a su vagina y suabemente voy bajando hasta tener toda la verga dentro de su conejito, teniéndola ensartada poso mis manos sobre sus hombros dejando mi peso moderadamente y empiezo el vaivén.

  • Hummm mi amor me encanta como me montas.

  • Te gusta mami, te gusta como te monto?

  • Si mi amor, pero por favor, cuando me montes no me digas mami o ma.

Esa petición de mi madre cambio algo en mi.

Si mi amor, a partir de hoy mas que mi madre eres mi hembra.

  • Si mi amor, soy tu hembra cariño.

  • Adriana, dime que tus nalgas son para mi.

  • Si mi amor, son para que tu las montes, son tuyas mi amor... huuuuuummmmm... que riiiico me... haces chorrearme mi amor.

  • Mi amor, en verdad quieres que te deje preñada?

  • Si mi amor, si, dejame preñada.

  • Huuumm

Después de sentir como me corrí dentro de ella, mi madre fue bajando poco a poco las nalgas, quedamos unos momentos en silencio hasta que mi madre se giro.

  • Vamos mi semental dame tu verga para que te la pare otra vez.

me pare frente a ella y agarrando mi verga se la metió a la boca, empezó succionando para mover la cabeza de atrás hacia delante hasta tenerme a punta.

nuevamente se puso en cuatro pegando al suelo la cara y pechos.

  • Ahí tienes un regalito mi amor?

  • Que?

  • Toma mi colita.

  • Tu que? (dije sorprendido)

  • Metemela en la colita, aun tengo virgen la colita, es para ti mi amor.

  • Pero Adri, papá nunca...

  • No mi amor, me daba miedo que me doliera por eso nunca acepte que el me la metiera por ahí, pero es mi deseó que tu me lo estrenes.

  • gracias mi amor.

Nuevamente agachándome acerque mi cara a sus nalgas y empecé a lamer ese dulce agujerito mientras que con el dedo le acariciaba he intentaba meterlo.

  • Que rica lengua tienes mi amor.

Poco a poco su orificio anal se fue abriendo.

Ahora si mi amor preparare para que te monte.

  • Si mi amor, montame, montame como a una perra en celo.

Nuevamente posicione mis pies dirigí mi verga y di una primera embestida metiendo media verga, nuevamente otra embestida y la verga entro completamente, apoye mis manos al piso bajo el abdomen de mi madre, (de nueva cuenta me encontraba montado sobre las nalgas de mi madre)

  • En verdad mi amor, que me encanta como me montas, (dejo escapar una especie de gemido con un suspiro).

Me empecé a mover lentamente para no lastimarla, pero el morbo me hizo subir el ritmo y con ello la fuerza con el que la envestía.

  • Que rico y excitante que me tengas montada justamente en establo mi amor.

  • En verdad mi amor, te gusta que te monte en el establo.

  • Si, me parece algo morboso.

  • Pues te puedo montar aquí las veces que quieras.

  • Por mi, montame a diario todo el dia.

Después de varios minutos mas de tenerla bien montada me corrí dentro de los intestinos de mi madre.

Entramos a la casa y en la maca la volví a montar