Lumalia: historia de una pasión entre hermanas

Les cuento un poco de mi historia. Soy Luisa tengo 23 años y tengo una relación amorosa con mi hermana adoptiva, Amalia.

Resulta que mis padres llevaban 5 años buscando quedar en cinta al no lograrlo acordaron adoptar a una niña, así llegó Amalia quien en ese momento tenía 2 años… fue entonces cuando dejaron de buscar mi madre quedó embarazada y nací yo.

Regresando al presente... mi hermana en la actualidad es una mujer de 27 años con un cuerpo divino es peliroja natural y un culo de actriz porno gracias a tanto gimnasio. Yo soy un poco más alta mi pelo es liso, uso un flequillo que apenas me deja ver y mi mayor atributo son mis pechos grandes y firmes.

Resulta que hace 6 meses mi hermana me pilló masturbándome y no dudó en ayudarme, fue mi primera vez con una mujer y fu estupenda… aun así nuestra relación ha sido un poco tóxica además de secreta.

Hace unos días estuvimos en un bar, no se si por la bebida o porque soy una puta sin remedios, pero me puse a bailar muy provocativa con un chico quien no dudó en meterme mano al instante comenzó a tocarme los pechos por debajo de la blusa y fue bajando hasta llegar a mi coño que estaba hirviendo y mojado por lo que le fue muy fácil meter los dedos y empezar a follarme en frentes de todos… yo estaba en la gloria pero a mi hermana no le hizo mucha gracia llegó a la pista de baile y me sacó a empujones hasta el coche, ya adentro me dio dos cachetadas y me escupió la cara yo seguía tan caliente que solo atiné a agarrar su cabeza y ponerla entre mis piernas, ya a estas alturas no llevaba bragas…

Mama zorra, sé que es eso lo que quieres, puta-

La muy zorra chupaba mi coño como nadie, su lengua rodeaba mi clítoris y me hacía gritar de placer, iba a explotar

-Siiii asiiii que rica lengua tiene Amalia…

De esa forma llegamos a su piso dándonos cachetadas y besos mientras me decía – eres mía y solo mía, repítelo – yo me negaba y pafff otra cachetada…

Al llegar a la habitación me agarró del pelo y me tiró a la cama quedándome el culo de punta, en donde no dudó ni un segundo en meter su legua, dándome un placer de los dioses.

Me azotaba mientras me gritaba – Eres mía puta de mierda!!!

Mi coño chorreaba líquidos con cada azote y pedía más y más…

Dame más maldita loca-

Me viré y le salté encima, fui directo a su coño que tanto me gusta y lamí mientras apretaba con fuerza sus pezones, ella se retorcía de placer

¡No pares guarra, si paras te mato, si así más!!!!

Ahhhhhh y con el grito llegó un orgasmo que me dejó la cara empapada, la traje inmediatamente para que limpiara sus flujos de mi cara con su boca.

Aproveché para cachetearla y apretarla por el cuello hasta dejarla sin aliento mientras tijereábamos al ritmo de nuestras caderas era tanto el placer que grité

Soy tuya Amalia soy tuya siiii ahhhhh puta no pares siiii

Ella chupaba mis tetas y mordisqueba mis pezones mientras nos frotábamos como perras en celo…

Ahhh siii más quiero másssss ahhhhh si llegó mi tercer orgasmo quedando sin fuerza una arriba de la otra.

Cuando desperté Amalia no estaba, me había dejado una bolsa con lencería y una nota: ponte esto puta… a las 8 paso a por ti, ya que te gusta que te manoseen en público, hoy serás castigada como mereces…

Pero esa es otra historia...

Nota: este es mi primer relato si les ha gustado dejenme sus comentarios para animarme a seguir... Los beso