Luchare por ti vii

El destino les hace una mala jugada a zoe y a cassie pues resultan ser .......

LUCHARÉ POR TI

Por: La Bardita

Zoe: mi carrera no es una estupidez es lo que siempre soñé y deseé y no dejaré de estudiar solo para satisfacer tus necesidades, si quieres dinero gánatelo por ti misma sabrás que sabe mucho mejor el pan ganado por el propio esfuerzo...

Proserpina: ¿me mandas a trabajar a mí? ¡eres una insolente!... (Aristóteles se reía detrás de Proserpina) ¡Aristóteles!... escucha a tu hija...

Aristóteles: Zoe tiene razón, deberías hacer algo con tu tiempo, invertirlo en algo productivo... eres inteligente hija, nunca se me ocurrió que tu madre podría hacer algo para ganar su propio dinero y gastarlo como quiera...

Proserpina: son unos...

Aristóteles: oye... es verdad... nunca has hecho nada por alguien... podrías dedicarte a recorrer los orfanatos, y ayudar a los niños y niñas... con el dinero que gastas, "mi dinero", podrías ayudar mucho a esa gente, a esos niños...

Zoe: mi padre tiene razón... podríamos hacerlo... siempre quise hacer algo productivo, algo por el bien de los demás me parece una idea fantástica, solventar un hogar para niños, para que todos puedan estudiar y tener algo digno donde vivir... mmm... Cassie me dijo que ayuda a un hogar, podría hablar con ella para saber como es el tema...

Proserpina: palabras, palabras... (pensó... otra vez esa Cassie esta en el medio).

Aristóteles: hazlo... o nunca mas verás un euro de mi parte...

Proserpina: ¡ja!... debo hacer compras... me duele la cabeza...

Aristóteles: ¿compras?

Proserpina: sí compras, aun soy tu esposa, tengo mi dinero... y el dolor de cabeza solo se me va haciendo ¡compras!

Aristóteles: ¡mi dinero!... y cuando se te acabe lo que te di, no tendrás mas, hasta que no hagas algo productivo a favor de los que más necesitan...

Proserpina: esta bien, después hablaremos de esto tú y yo... solos... me voy...

Aristóteles: vete...

Zoe: ¡ja! que alterada que está...

Aristóteles: no hablemos mas sobre tu madre... ¿así que Casandra ayuda a un hogar de niños?

Zoe: sí, me lo dijo hace tiempo... mucho no hablamos... hoy le preguntaré todo al respecto...

Aristóteles: me alegro que seas amiga de ella... es una gran mujer...

Zoe: lo sé...

En el departamento a la noche... abrazadas en la cama... Zoe le cuenta sobre la muerte de Pericles el chofer de la casa... Cassie le dice que lo siente mucho... y luego Zoe sigue hablando con Cassie sobre el orfanato nuevo que quería crear junto a su madre y allí Cassie le cuenta su historia pero no le termina de contar todo pues ni ella misma la sabe... solo le menciona el diario intimo de Xenia donde allí esta su vida, su verdad...

Zoe: siento mucho todo lo que tuviste que pasar, mi amor... ojalá te hubiera conocido en esos años, estaríamos siempre juntas y no te hubieras sentido tan sola...

Casandra: gracias amor, pero en esos años tú ni habías nacido...

Zoe: bueno, pero me hubiera gustado...

Casandra: a mí también... (se dieron un besito).

Zoe: y dime ¿así que Xenia no era tu madre biológica?

Casandra: no, no lo era...

Zoe: ¿y nunca quisiste leer ese diario que me dijiste?

Casandra: te confieso que a veces sí... pero luego me digo ¿para qué?

Zoe: sí, es muy difícil... ¿te molestaría que lo leyera?

Casandra: eres muy curiosa... ¿es por naturaleza?...

Zoe: sí, pero más que nada lo haría para saber mas de ti...

Casandra: no me molesta, pero nunca me digas que dice... el día que lo quiera saber, lo leeré yo...

Zoe: esta bien amor... jamás te diré nada... ni siquiera cuando lo haya leído... ¿sabes? Yo también tengo algo que decirte...

Casandra: dime... ¡cuánto misterio! ¿te pusiste nerviosa?

Zoe: es que es algo que me enteré hace poco, y aun no lo asimilo... tengo una hermana...

Casandra: sí...

Zoe: parece que no te sorprendes...

Casandra: soy policía...

Zoe: ¿tú lo sabías? ¡y no me lo dijiste!

Casandra: sí, no te lo dije por tu padre, él me pidió que no lo hiciera, pues quería decírtelo él, me alegro que lo haya hecho...

Zoe: sí, me lo dijo el otro día, ambos lloramos mucho... no puedo creerlo...

Casandra: yo lo supe antes a raíz de tu secuestro, y por lo que leí, pues no quedan muchos documentos en los archivos sobre el caso, fue algo horrible... tu padre ha sufrido mucho...

Zoe: y solo... eso es lo que más me molesto, me lo podía haber dicho antes...

Casandra: debes entenderlo, no lo puedes culpar... seguro no te lo dijo para no causarte el mismo dolor que sentía él... ¿te hubiera gustado conocerla?

Zoe: sí... debe ser lindo tener una hermana... además que era mayor que yo... hubiera sido una amiga, una compañera... además no se sabe nada de ella, si murió o si aun vive... eso es lo que mas atormenta a mi padre...

Casandra: ¿y a ti?

Zoe: a mí algo también... me siento extraña... de la noche a la mañana me dicen que tuve o tengo una hermana... y no saber si aun vive me duele... si viviera quisiera conocerla... saber como es, si esta casada, si tengo sobrinos... ¿te imaginas? ¡que lindo sería!

Casandra: tía, es hora de dormir...

Zoe: jaja...

Casandra: ¿te gustaría tener hijos?

Zoe: me encantaría... ¿y a ti?

Casandra: nunca me lo plantee...

Zoe: ¡ah! (dijo desilusionada, ella quería en un futuro, formar una familia con Cassie y tener hijos).

Casandra: (se dió cuenta de su desilusión) porque nunca me enamoré...

Zoe: ¿y entonces? (dijo ilusionada).

Casandra: y entonces... como aun no me enamoré... no sé...

Zoe: ¡mala!

Casandra: jaja, te juro que daría mi vida por ver correr en nuestro hogar una niña con tu carita, con tus ojos... con tu ternura... Te amo Zoe... y en un futuro me encantaría tener hijos contigo... con los métodos modernos que hay ahora, fecundación in vitro, inseminación, todo se puede...

Zoe: yo también te amo... y yo daría mi vida por ver una Cassie chiquitita aquí a mi lado, con tus ojos, dándole todo mi amor de madre... y cuidándola... y educándola... y esperándola a la salida de la escuela... verla crecer... hasta que se convierta en una mujer tan extraordinaria como tú...

Casandra: gracias... pero me gustaría que fuera como tú...

Zoe: como tú...

Casandra: como las dos... ¿así esta mejor?...

Zoe: como... las dos... será irresistible...

Casandra: jaja, ¿la modesta no era yo?

Zoe: es que me has contagiado, jaja...

Casandra: cierra los ojitos amor... es hora de dormir...

Zoe: soñaré con mi familia... hasta mañana, mi vida...

Casandra: hasta mañana... mi luz...

Pasaron varios días... seguían muy juntas, demostrándose su amor... hasta que llegó un día con una tarde lluviosa, y Zoe se encontraba sola en el departamento mientras esperaba a Cassie que llegara desde la comisaría, y decidió leer ese diario que tanta curiosidad le atraía... para saber el pasado de la mujer que amaba con toda su alma...

Diario de Xenia...

Querido diario... eres el único testigo de mi dolor... no, no, no puedo decirle que no es mi hija... se le vendrá el mundo abajo... ¡¡Dioses!! ayúdenme, díganme como hago para decirle que no es mi hija biológica... pero es mi hija, yo la amo como tal...

Querido diario... ya termina el día y hoy es un día mas que no pude decirle que no es mi hija...

Zoe: pobre mujer cuanta angustia... hay varios días en que no puede ni siquiera escribirlo, seguiré leyendo... a ver... este es otro día, acá algo más cuenta...

Querido diario... dejaré escrito todo aquí tal cual sucedió aquel día... espero que este diario lo estén leyendo cuando ya haya fallecido... hoy le he dicho algo a Cassie sobre que no es mi hija biológica pero no pude decirle el resto, aunque ella tampoco quiso seguir escuchando... me siento mucho mejor después de esto y sobretodo porque fui muy tonta al tener tanto miedo de perderla, Cassie me ama, y sé que ahora es aun mas mi hija... pero igual le escribiré la historia aquí en mi diario por si algún día quiere saber de donde viene, como fue que llego a mis brazos... se lo debo, le debo la verdad...

Mi querida hija... mi querida Cassie... te contaré tu historia... espero que no me juzgues si es que debo ser juzgada por ti, pero siempre guarde este secreto para protegerte tal y como me lo pidió tu madre aquel día en que te dejo en mis brazos, y supe que nunca te abandonaría, supe que a partir de entonces serías mi hija...

Ese día un dos de Noviembre estaba como siempre en el jardín del orfanato... mirando mis plantas... mientras los pocos niños que tenía allí para cuidar estaban desayunando en el salón, junto al personal que los cuidaba... por eso me encontraba sola... bueno, no tan sola, Eunice, mi querida Eunice siempre estaba a mi lado, una niñita de 4 años de edad que no quería quedarse con el resto, le gustaban las plantas tanto como a mí, y siempre me acompañaba para arreglarlas, fue en ese momento cuando vi a una mujer que estaba herida, su ropa tenía sangre y corría desesperada hacia mí, al verla me di cuenta que estaba en muy mal estado... fatigada, herida y sudorosa... me hablo como pudo... la situación me puso nerviosa y no pude reaccionar a tiempo... aun la recuerdo y ahora al recordarla no puedo seguir escribiendo... pero debo seguir por mi hija Casandra... esa mujer me dijo: Cuide a mi hija... por fa... vor... nadie debe enterarse que esta aquí, quieren matarnos... cuídela para siempre como si fuera su hija... se llama Macarena...

Eso fue lo único que alcanzó a decirme y siguió corriendo hacia el lado del bosque, hacia un rumbo desconocido... con la herida que tenía sabía que no llegaría lejos, y fue cuando reaccioné al escuchar el llanto de la niña que tenía entre mis brazos, y le grité desesperada y quise correrla, pero ya era tarde... había perdido su silueta en medio del bosque y la niña seguía llorando y mi mente se nubló al recordar las palabras de esa mujer... "cuídela, quieren matarnos"... la única que había visto todo de lejos era Eunice... por suerte al estar lejos no vio la sangre de la mujer, ni lo que me había dicho... así que luego abracé aún mas a la niña y fui a mi habitación, con Eunice siempre detrás... nunca le dije a nadie como había llegado esa niña a mis manos, es mas, la oculté hasta que pasara el año de aquel suceso, pues luego supe su verdadera identidad al salir todo el secuestro y el asesinato de esa mujer en la prensa, allí supe a quien tenía como hija, y cumplí con la palabra que me pidió su madre, la protegí con mi vida, pues al poco tiempo, comenzaron a venir personas extrañas, sabía que la estaban buscando a ella, aun recuerdo los ojos verdes de aquel hombre, era rubio, y vestía de negro... me hacía preguntas extrañas sobre el orfanato, y cosas banales como queriendo buscar a alguien con sus astutos ojos, me di cuenta que observaba a todas las niñas... por eso siempre dejé a mi Cassie con Eunice, que pese a que era una niña, con sus ya 5 años... la cuidaba como si fuera su hermanita menor, ambas se complementaron mucho a través de los años... y al ser la directora y dueña del orfanato tuve muchas ventajas para ocultarla y así nadie se enteró nunca que existía una niña en mi habitación, sólo Eunice era quien jugaba con ella, la llame Casandra, "la que protege a la gente y de inigualable belleza" sus ojos eran tan azules, su cabello tan negro, tenía y tiene aun tanta belleza que ese era el nombre perfecto... una niña que había conquistado mi corazón, comencé a encariñarme mucho con esa criatura, luego con el tiempo al resto del personal les dije que la había dejado una prima mía lejana, que no la podía atender y con el tiempo quedó así, siempre la protegí, la tuve casi encerrada, recuerdo cuando me ponía su carita triste, ¡mi niña!, cuando no la dejaba salir al jardín a jugar con el resto de los niños, pero es que yo tenía miedo, que supieran quien era de verdad, y me la quitaran, o dijeran que yo estaba implicada en el secuestro y asesinato o aun peor... que la mataran... sé que su padre sufría, pues salía todos los días en el periódico, pero yo estaba cumpliendo con lo que me había dicho su madre, además que ya era imposible separarme de ella, la reconocí como mi hija... muchas veces quisieron adoptarla, los futuros padres que venían y la veían correr por los pasillos, la adoraban, pero yo les decía con orgullo... lo siento, ella es mi hija... y allí comencé a enterrar en mi mente a Macarena Pipolos, hija de Popea Atens y del magnate petrolero Aristóteles Pipolos... para darle la vida a Casandra Aristófane...

Zoe no podía creer lo que estaba leyendo... su garganta se seco... su corazón se paró...

Volvió en sí, a leer de nuevo el nombre de la niña... el aire comenzó a faltarle, se fue a la cocina a beber un poco de agua... la mano con el vaso le temblaba... estaba en estado de shock... volvió de nuevo al diario de Xenia... no podía ser cierto... no podía... luego de un momento siguió leyendo...

Mi hija, tal como la siento, siguió creciendo... y haciéndose una bella niña de 10 años y fue cuando me sentí algo menos culpable al saber que Aristóteles Pipolos había vuelto a ser padre de una hermosa beba... Pipolos se había vuelto a casar, con la mejor amiga de su esposa, esta vez por suerte Aristóteles Pipolos no había salido en la parte de las noticias policiales sino en la de sociales... tenía una hija, y mi Cassie... tenía una hermana...

Luego que Zoe termina de leer el diario de Xenia, y se entera de la cruel verdad, sus ojos no paran de llorar... su desesperación se hizo presente... había descubierto la identidad de la mujer que amaba... era su hermana, no podía decirle la verdad a Cassie, tenía que ahorrarle ese sufrimiento, lo que ella estaba sintiendo, se le estaba rompiendo el corazón, además que ella le había prometido que nunca le diría si había leído el diario de Xenia... lo mejor sería alejarse tenía que inventar alguna excusa... esa tarde, siguió llorando y pensando en como podía alejarse de Cassie, estaba enamorada de su hermana, le había entregado su cuerpo y su alma... cuando pensó en las caricias y en los besos, tuvo un complejo tremendo de culpa...

Zoe: la mujer que amo es mi hermana, ¡mi hermana!... ¡Dioses! ¿por qué? ¿por qué tanto dolor? (se tomaba la cabeza con las dos manos, lloraba desconsoladamente, no sabía como calmarse, pero debía hacerlo ya se acercaba la hora en que regresaba Cassie de la comisaría, así que se fue a duchar para calmarse un poco, pero era inútil, no paraba de llorar...)

Luego de la ducha Zoe, se puso a cocinar para tratar de calmarse, pero no podía, así que mientras cortaba cebolla, seguía llorando sin control... en ese momento llegó Cassie...

Casandra: hola amor... mmm... estas deliciosa... (la tomó por la espalda y le besó el cuello) ese perfume en tu piel me vuelve loca...

Zoe: hola... (dijo como pudo).

Casandra: tienes los ojitos todos rojos, déjame que sigo yo, Xenia me enseñó que para que la cebolla no te haga mal a los ojos cuando la cortas, hay que mojarla primero y así ¡chau lágrimas!...

Zoe: (asintió con su cabeza pues no podía ni hablar, se preguntaba como haría el resto de la noche, para hacerle creer a Cassie que no estaba llorando).

Casandra: ¿qué piensas hacer de rico?

Zoe: ¿mmm?

Casandra: ¿te sientes bien?

Zoe: (tragó saliva y respiró hondo) sí, sí... fue esta maldita cebolla, no sé, me arden mucho los ojos... iré al baño...

Casandra: mójate un poquito, no mucho pues será peor... y no te preocupes sigo yo, haré una salsa y comemos espaguetis...

Zoe: esta bien...(contestó antes de entrar al baño y seguir llorando, pero esta vez debía hacerlo en silencio, Cassie podría escucharla... luego de un rato apareció de nuevo en la sala, ya no podía seguir tanto tiempo en el baño, aunque Cassie estaba tan concentrada en hacer la comida que no se había dado cuenta del tiempo que había pasado, sobretodo porque ese día estaba contenta y cantaba una linda melodía, mientras Zoe la miraba con el alma... y pensando que frente a ella tenía a su hermana...) mmm... que rico aroma...

Casandra: sí, me está saliendo para chuparse los dedos... jaja...

Zoe: tienes una linda voz... nunca te había escuchado cantar...

Casandra: tengo muchas habilidades jaja...

Zoe: estas muy contenta hoy...

Casandra: siempre estoy contenta cuando estoy contigo... además que hoy terminamos un caso importante y todos "presos", por fin acabamos con unos mafiosos que nos tenían locos, peor que los Sanders... ¿y tú qué hiciste?

Zoe: bueno, el día estuvo tranquilo... hice las compras y luego cuando empezó a llover me quedé aquí mirando... (hizo una pausa con un nudo en la garganta) una peli...

Casandra: sí, ¡cómo llovió!... los días así, también me gustan para estar en la camita abrazada a ti, y mirando una buena peli... ¡listo!, esto ya marcha... en un rato cenamos... ayúdame a poner la mesa... ¡mira como tienes los ojos!... todos rojos, no pelarás mas cebolla... es una orden de una jefa de brigada...jajaja...

Zoe: (sonrió tímidamente) no sé que me pasó... debe ser alguna alergia...

Casandra: ven... (Zoe, se acercó despacio... no podía volver a besarla... ¡era su hermana!) ¿qué pasa? no te voy a comer... a menos que tú quieras... ¿mmm?... quiero un abrazo...

Zoe: (se acercó despacio y la abrazó muy fuerte... la necesitaba, estaba pasando por el peor momento de su vida, y era extraño, porque estaba en los brazos de la persona que mas amaba en el mundo, y a su vez de la persona que debía estar mas lejos...)

La cena transcurrió tranquila... Zoe trataba de olvidarse que Cassie era su hermana... pero no podía... ¿cómo haría ahora en la cama para que Cassie no la tocara? Estaba desesperada... levantaron los platos, Zoe los lavó... y Cassie ya la esperaba en esa cama que había sido testigo de un amor inmenso y que ahora se había convertido en un pecado mortal... esa noche fue tranquila, Cassie estaba cansada, y solo durmieron abrazadas... no hubo chiqui-chiqui en esa noche... un... "buenas noches amor", con un beso en la frente por parte de Cassie, la hizo estremecer...

Y trató de dormir pero no pudo, debía hacer algo urgente... si no se dejaba tocar mas por Cassie, debería decirle la verdad, su cabeza le daba vueltas y vueltas tratando de buscar una solución que sabía que le rompería el corazón a ambas... pero era necesario, era inevitable, el destino les había jugado en contra...

Pasaron dos días desde que Zoe había leído la terrible noticia... y trataba de esquivar los besos y caricias de Cassie, le dijo que estaba en "esos días", que necesitaba estar tranquila, Cassie por supuesto que la respetó, aunque nunca había pasado esto...

Necesitaba besarla, abrazarla... Cassie comenzó a observarla y la notaba diferente, algo estaba pasando con Zoe... en la cama, estaba también esquiva, ante solo un abrazo... cuando iba a besarla para darle las buenas noches, le ponía la mejilla... así que al otro día Cassie trata de averiguar el cambio de actitud de Zoe, ni siquiera se le cruza por la cabeza que ella podía haber leído el diario de Xenia, hasta pensó en que Zoe se había enamorado de otra, necesitaba saber si estaba saliendo con alguien mas... aunque para ella eso era imposible, sabía que Zoe la amaba, pero ese extraño alejamiento de golpe, la hizo meditar... sobretodo cuando supo que Zoe salía todas las tardes, a caminar decía ella, pero ¿y si caminaba con alguien más?... Cassie no quería seguirla... confiaba profundamente en Zoe, era la única persona en el mundo que tenía su confianza... así que decidió preguntarle directamente el por qué de su actitud y darle a entender si había alguien mas...

Esa tarde Cassie llega mas temprano a su casa y Zoe no esta...

Casandra: ¡maldición! ¿y si es verdad lo que pienso?... debo hablar con ella... algo le ocurre, no quiere que la toque... se esta alejando, no soy idiota... de pronto sale todos los días a caminar... ¿a caminar con quién? ¿se enamoró de alguien mas y no se anima a decírmelo? Me romperá el corazón, el alma... no concibo mi vida sin ella... (unas lágrimas salieron de sus azules perfectos que hoy estaban tristes).

Zoe caminaba y caminaba, buscando la manera de poder alejarse de Cassie, sin herirla... pero sabía que no podía, ¡maldición! Ella también la amaba con toda su alma... ¿cómo podría seguir viviendo sin Cassie a su lado?... debía ser fuerte, muy fuerte... para afrontar la situación... entró al departamento y se encontró con Cassie... cuando los ojos y las almas se cruzaron supo que Cassie tenía preguntas, y ella le daría "respuestas falsas"...

Casandra: hola...

Zoe: hola...

Casandra: ¿vienes de caminar?

Zoe: sí... estoy cansada...

Casandra: también yo... de tu actitud... quiero y necesito saber que te pasa... si es algo que hice mal, dímelo... no sé, pero no puedo seguir así... me siento mal... no sé que te pasa... no quieres que te toque, me acerco y te alejas, por las noches te duele la cabeza... dime... ¿hay alguien mas? (dijo con lágrimas en los ojos y el corazón en la mano).

Zoe: (también estaba mal, no sabía que decir... ver al amor de su vida llorar por su culpa le rompía aun mas el alma si podía ser mas) Cassie... (dudó, pero supo que era la oportunidad y lo mejor para ambas) sí (dijo con un nudo en el pecho) sí hay (no se animó a decirle que había alguien mas, eso era muy fuerte, así que decidió decirle otra cosa) algo que quiero decirte...

Casandra: dime, te escucho...

Zoe: bueno, es que... tengo que irme...

Casandra: ¿irte? ¿por qué?

Zoe: bueno es que tengo que terminar mi carrera en otra facultad, es donde se hacen las materias del curso final... investigación antigua y demás...

Casandra: ¿y cuánto tiempo es eso?

Zoe: un año... perdóname por eso estuve tan mal estos días... es que no quiero dejarte... (sollozó)

Casandra: (la abrazó) mi vida... shhh... no llores... te juro que pensé que, no sé que pensé... Sí sé, pensé que dejaste de amarme, que había alguien mas... ¿es solo eso?... no te preocupes, buscaremos una solución, no viviremos juntas pero iré a verte todos los fines de semana... nos escribiremos mail, hablaremos por teléfono, pues un año sin ti no podré vivir... eso es seguro... pero también tienes que estudiar y terminar tu carrera... ¿y dónde es esa facultad?

Zoe: (se quedó pensando en que isla le diría) en la isla de Rodas... allí hay mucha historia... salgo mañana...

Casandra: ¡¿mañana?!

Zoe: sí...

Casandra: ¿y cuándo pensabas decírmelo?

Zoe: hoy... y perdona por estos días, en serio... sé que estuve...

Casandra: esquivándome...

Zoe: bueno sí... pero lo hice para ir acostumbrándome... a estar sin ti...

Casandra: eres tan niña... (la abrazó mas fuerte, Zoe tenía ganas de llorar pero sabía que no podía hacerlo, debía seguir siendo fuerte, su corazón palpitaba a mil por hora, le estaba mintiendo al amor de su vida pero era mejor que decirle la verdad, una cruel verdad) yo jamás podré acostumbrarme a estar sin ti... (y la besó con el alma y Zoe no pudo resistirse y se dejó llevar, fue el beso del adiós) uauuu... te extrañé tanto estos días... Te amo... (Zoe se perdió en su mirada, en esos ojos que ya no volvería a ver, ni siquiera pudo hablar... se quedó en silencio mirándola...) no te preocupes por nada... todo saldrá bien... (Zoe asintió, el nudo en el estómago era cada vez mas grande)... si te vas mañana, entonces... ¿ya tienes todo preparado?

Zoe: no, debo ir a la mansión por algunas cosas que no tengo aquí... además debo despedirme de mi padre y de mi madre... (era la excusa perfecta para no compartir la cama esa noche con Cassie).

Casandra: esta bien, te llevo...

Zoe: no hace falta... preferiría... (bajó su cabeza)... preferiría... despedirme ahora...

Casandra: ¿ahora?

Zoe: sí... es que... luego no podré... no me lo hagas tan difícil...

Casandra: esta bien, tranquila... ¡ni que fueras a la guerra! Ja, ja... amor... perdona... yo quería despedirte en el aeropuerto...

Zoe: no, no... no me gustan las despedidas...

Casandra: pero es hasta muy pronto, el sábado estaré allí... debes darme la dirección, ¿tienes hospedaje?

Zoe: sí... tengo una casita... luego te escribo un mail, dándote la dirección... ahora no la recuerdo...

Casandra: veo que preparaste todo, me hubieras dicho antes, me hubiera gustado ayudarte...

Zoe: no te enojes... fue solo porque no podía decirte... ¿me perdonas?

Casandra: sí, nena... te perdono... pero la próxima vez confía en mí... ya sabes que lo que mas me une a ti, es la confianza y el profundo amor que te tengo...

Zoe: lo sé... Cassie... yo... te quiero... ( se abrazó a ella).

Casandra: yo también pequeña... te quiero con el alma...

Zoe: bueno debo irme...

Casandra: esta bien... ¿te llevas algo de acá?

Zoe: solo una pequeña maleta... el resto que necesito lo tengo en la mansión...

Casandra: ¿sabes? además de esa pequeña maleta te llevas mi corazón... siempre estará contigo...

Zoe: lo sé Cassie, lo sé... debo irme... tengo mucho que hacer, y mañana salgo temprano a las 7 de la mañana...

Casandra: bueno, hasta pronto amor... te amo...

Zoe: y yo... (susurró y se abrazaron, Cassie quiso darle un beso en los labios y Zoe la detuvo), preferiría solo este abrazo... pues si nos besamos, no podré irme y debo hacerlo...

Casandra: eres... mmm... esta bien... te quiero...

Zoe: yo también... (unas lágrimas comenzaron a correr por su mejilla y al cerrar la puerta, cuando Cassie ya no podía oírla, le dijo)... nunca te olvidaré... eres lo que mas amo en la vida...

Zoe se dirigió a la mansión, trató de esquivar las miradas de sus padres, y luego de ducharse, se recostó pensando y pensando en Cassie, en como podría vivir separada de ella... sólo sabía que debía hacerlo, al otro día prepararía todo para irse bien lejos, necesitaba meditar...

Al amanecer... se levanta y prepara todo para irse, ni siquiera sabía donde, se iba sin rumbo fijo, para tratar de olvidar algo que sabía que nunca podría lograr... pero debía alejarse, eso lo tenía claro... buscó alguna isla par irse... a pasar un tiempo... en el único que confiaba en ese sentido era en Filipo... así que le pidió que le consiguiera un lugar donde poder vivir lejos de todo, por un tiempo, sin explicaciones, pero sobre todo no debía enterarse Casandra, no debía enterarse en donde se encontraba, Filipo le preguntó: ¿por qué?, pero ella solo le dijo que debía alejarse, que en otro momento le explicaría el por qué... Filipo, le dijo que fuera a la casa de su prima, una mujer mayor que vivía junto con su hija en la isla de Lesbos, allí seguro pasaría unos días tranquilos, era un lugar muy bello, donde se podía pensar, donde nadie haría preguntas... así que preparó todo y se fue rumbo a la isla de Lesbos... era una isla encantada, mágica, tenía poesía, allí tendría mucho que aprender, sobre todo de Safo la gran poetisa griega... había mucha historia en ella... una mujer que le escribía al amor... puro y natural, al amor sin pensar en el sexo...

Así paso un día, dos, tres... una semana y Cassie estaba desesperada sin noticias de su nena... miraba todos los días su mail y nada... la llamó al móvil y no atendía... así que decidió llamar a la mansión al menos para saber si había llegado bien a su destino... estaba preocupada...

Casandra: buenos días... habla Casandra Aristófane...

Filipo: buenos días señorita... habla Filipo... (se puso nervioso sabía que debía ocultar el paradero de la niña Zoe).

Casandra: quisiera saber algo sobre Zoe...

Filipo: ella está de viaje...

Casandra: sí, eso lo sé... pero quiero saber si llego bien... pues no me ha escrito mail ni me ha llamado... además que no contesta mis llamados al móvil y hoy ya es una semana que se fue, ¡una semana!... (se notaba su enfado en la voz).

Filipo: ella esta bien... ha llamado aquí el otro día, es que esta muy ocupada, arreglando todo. Entre los trámites, papeles... de la facultad, ya sabe como es eso... jeje...

Casandra: sí lo se... pero pensé que podía avisarme, pudo llamarme a mí también...

Filipo: no tiene móvil... se lo robaron, pobre, por eso no le contesta sus llamadas... me dijo que me llamaba desde un locutorio...

Casandra: ¡ah! por eso no me contesta... pero un mail podría mandar... sino tiene la pc portátil podría entrar a un ciber... o haberme llamado ese día a mí también...

Filipo: bueno a lo mejor la llamo y no la encontró...

Casandra: tengo contestador... y pudo haber llamado otro día o mandar un mail... no me ha contestado ninguno de los que le mandé, además quería avisarle que este fin de semana no puedo ir porque tengo trabajo, y encima ni siquiera tengo la dirección de la casa en donde está, solo sé que está en la isla de Rodas... (Filipo se quedó pensando... ¿en Rodas? pero no dijo nada por las dudas).

Filipo: la portátil creo que la dejó acá...

Casandra: qué raro... pues seguro la necesitaba para estudiar...

Filipo: bueno, yo no sé mucho de eso... y el ciber le queda lejos... algo trasmano eso es lo que dijo...

Casandra: cuando uno quiere a alguien, y darle una noticia, no existe la distancia... ni los contratiempos... se hace todo lo posible, al menos que ya no te interese...

Filipo: ahora que recuerdo, el error es mío, me ha dicho que la llamara para que no se preocupara, que había llegado bien... lo siento, el idiota soy yo...

Casandra: esta bien, no se preocupe, ya entendí... al menos sé que esta bien...

Filipo: sí, eso es seguro, ella esta bien... cualquier cosa, si vuelve a llamar le digo que la llame...

Casandra: esta bien, no se preocupe... ella sabe que debe llamarme... gracias por todo... (cortó) ¡maldición Zoe! ¿qué diablos te pasa?

Filipo: (cortó) ¡uyy Dioses! que enfadada estaba... tiene razón, esta niña no sé porque quiso alejarse así de esta mujer... la vi muy triste a mi niña... la llamaré y le diré... que al menos le escriba un mail...

Zoe por su parte estaba sumamente confundida, pensaba y pensaba... necesitaba verla, no podía quitársela de la mente, además que sabía que así Cassie sospecharía que había algo mas... así que decidió escribirle un mail, pues no podía llamarla por teléfono ya que no podría soportar oír su voz tan suave, se quebraría en llanto...

Justo en ese momento... Filipo la llamó al teléfono de la casa que estaba habitando junto a la prima de este y le comentó sobre la llamada de Cassie...

Filipo: pero no entiendo... ¿por qué no quieres verla?... esa mujer te ama, tanto como tú a ella, te conozco mi niña... ¿qué te pasa? ¿estas llorando? ¡Zoe!... no llores, dime que pasa...

Zoe: es que... es horrible...

Filipo: ¿te hizo algún daño?... mira que no me importa que sea jefa de la brigada, le rompo la cara...

Zoe: no, ella es un sol... es que... sé quien es...

Filipo: ¿cómo quién es?... no entiendo... deja de llorar por favor, no te entiendo nada...

Zoe: debes jurarme, por lo que mas quieras, que no le dirás a nadie, ni siquiera a mi padre, por favor... es un secreto entre tú y yo... nadie puede saberlo...

Filipo: ¿qué pasa?, dime... por favor...

Zoe: júramelo...

Filipo: te lo juro por lo mas bello que tuve en la vida, mi hija, y por lo que tengo ahora, a ti. No quiero sentirte así, no llores... cálmate...

Zoe: cuando te diga sabrás por qué lloro... estoy así porque Casandra, es mi hermana...

Filipo: ¡¿tu qué?!

Zoe: hermana...

Filipo: ¿estás bien niña? eso no puede ser...

Zoe: sí lo es, es lo peor que me paso en la vida... Casandra es mi hermana... es Macarena Pipolos... la hija de mi padre, la hija que secuestraron, la hija que creyó muerta durante tantos años... esa es Cassie, ¿ahora entiendes? no puedo estar con una mujer que es mi hermana, que tiene parte de mi sangre... no puedo... (lloró desconsoladamente, Filipo casi se desmaya... tampoco podía creerlo...)

Filipo: ¡no puede ser cierto! (dijo con las palabras cortadas)...

Zoe: sí lo es, yo lo leí en el diario íntimo de la mujer que la crió... allí explica como fue todo... el secuestro, el asesinato, la crianza... hasta anotó el día en que yo nací...

Filipo: ¡Dioses!... mi niña... debemos hacer algo...

Zoe: ¡no!, me prometiste que no dirías nada, por favor...

Filipo: y cumpliré con mi promesa... pero tal vez debamos investigar mas, y si es un error y te estas arruinando la vida y también la de ella, ustedes se aman, se nota que se aman con el alma...

Zoe: lo sé... Fil, no sabes lo mal que estoy...

Filipo: ¿y ella lo sabe?

Zoe: ¡Noooo!, por eso nadie debe saberlo, yo leí ese diario por curiosidad, pero ella nunca lo ha hecho, no quiere saber quienes fueron sus padres, los malditos que la abandonaron por eso nunca lo leyó...

Filipo: entiendo... pero...

Zoe: ¡pero nada!... tengo la vida destruída... no sé que hacer, ¿cómo la quito de mi corazón?... la amo tanto... ya ni quiero decirlo... ¡Dioses! es un pecado mortal...

Filipo: bueno Zoe, tranquilízate, tú no sabías que era tu hermana...

Zoe: lo sé, pero... no puedo dejar de pensar...

Filipo: por ahora lo primero que debes hacer, es escribirle... para que no sospeche que hay algo mas...

Zoe: lo mismo pensé hace un momento, tienes razón, le escribiré un mail, le diré que todo esta bien... y luego con el tiempo... dejaré de escribirle... (las lágrimas seguían saliendo sin control) es lo mejor... ir cortando esta relación de a poco...

Filipo: sí, hazlo de a poco... dicen que la distancia hace olvidar el amor... tal vez así se acostumbre a estar sin ti... no sé...

Zoe: yo jamás me acostumbraré... cuando uno ama tanto, la distancia no importa... pero debo hacerlo... otra no me queda...

Filipo: sí mi niña... debes hacerlo...

Por su parte Cassie entra otra vez a su cuenta de mail, como hacía todos los días, cada vez que podía, cada veinte minutos, entraba para ver si Zoe le había escrito, y no había noticias de ella, su corazón volvía a romperse... otra vez se quedaba mirando la pantalla sin noticias de la persona que amaba... ponía el Messenger para ver si Zoe se conectaba y nada pasaba... se quedaba mirando y esperando como una idiota a alguien que nunca venía... sintió como su alma moría noche tras noche esperando detrás de esa pantalla que ya no le daba nada...

Al otro día... Cassie aun mantenía las esperanzas, seguía esperando alguna noticia sobre Zoe... esa tarde recibe el primer mail y Cassie vuelve a sonreír...

Mail de Zoe...

Hola vida!... disculpa que no pude escribirte antes, pero estuve ocupada con varios trámites y esta muy complicado para escribirte y hablar... me robaron el móvil y la portátil no la traje, pues me estaba andando mal... así que la dejé y hay pocas formas de comunicarnos con otras islas... bueno, voy a dejarte... hay mucha gente que quiere usar esto... hoy tengo facultad y llegaré tarde, luego en unos días te vuelvo a escribir, espero que te encuentres bien... no trabajes mucho... cuídate mucho... te echo de menos...

Hasta prontito...

Cassie al leer el mail, se quedo mal, era un mail algo frío... ni un te quiero, y menos te amo... "voy a dejarte" como si estuviera escribiendo por compromiso y no porque lo sentía... "que esta ocupada"... como si yo fuera una molestia... y ni siquiera me dio la dirección del lugar donde está, ni siquiera me contestó algo de todo lo que le dije en los mail que le mandé... (pensó Cassie).

Después de leer mil veces el mail, para tratar de saber que le estaba pasando a Zoe, descubrió que su corazón estaba aun más dolorido que días atrás cuando no le escribía... esto había sido peor... y se sintió mucho peor al ver como pasaban los días y Zoe no había vuelto a escribir...

Por su parte a Zoe le había costado horrores escribir un mal así, tan frío, pero sabía que era la única forma que Cassie dejara de amarla, y que pudiera seguir adelante con su vida sin pensar mas en ella... eso era algo imposible, Cassie la amaba con el alma... y cuando se ama así, no se olvida nunca...

Ese día, en la cafetería, después del trabajo... al pasar el mes y sin noticias de Zoe pues solo le escribió una vez mas, Cassie había vuelto a llamar a la mansión, pero Filipo volvió a decirle lo mismo, ya estaba desilusionada... no sabía que pensar... no sabía si Zoe había dejado de amarla, si tenía a alguien mas como había pensando en aquel momento cuando Zoe estaba tan rara, que ni siquiera quería que la tocara... estaba triste, muy triste y Andrea trataba de consolarla...

Casandra: ya ni me escribe...

Andrea: es lo mejor, debes olvidarla...

Casandra: ¿olvidarla? ¿cómo puedes olvidar al amor de tu vida?

Andrea: no lo sé... fue un comentario para que te sientas mejor...

Casandra: ¿mejor? nunca me sentiré mejor, no podré vivir sin ella...

Andrea: la verdad es algo extraño, no lo entiendo... irse así... ¿no te dijo nada?

Casandra: solo me dijo que tenía que irse un tiempo para terminar sus estudios, quise acompañarla al aeropuerto y me dijo que las despedidas no le gustaban... pero en el último momento supe que algo iba muy mal... no quiso besarme...

Andrea: debiste preguntarle...

Casandra: lo hice miles de veces y no me contestó, no lo sé... mucho no le debo interesar pues me dejó de escribir... en un mes solo recibí dos mail, uno mas frío que el otro, el primero a la semana que se fue y otro así escrito a las apuradas...

Andrea: debe estar ocupada...

Casandra: ¡ja!, un poco de tiempo puedes tener para alguien a quien le dijiste varias veces "te amo"... o ¿fue solo por decir?, ahora me pregunto si realmente me amó alguna vez... (se quedó pensando con los ojos llorosos).

Andrea: claro que te amó, se notaba, por eso no lo entiendo... ¿en que piensas?

Casandra: en Darío...

Andrea: ¿Darío?

Casandra: sí, una vez me dijo... ojalá que sufras lo que yo he sufrido contigo, el amor no correspondido es terrible y ya ves... nunca pensé en enamorarme, y menos en llorar y sufrir por amor... ¡Dioses! ¿que haré sin ella?...

Andrea: tranquila, algo pensaremos...

Casandra: debo irme... perdóname quiero estar sola...

Andrea: sí... no hay problema, llámame si me necesitas...

Casandra: gracias... lo haré...

Esa noche en la soledad de su habitación, esa habitación que había sido testigo de tanto amor, esa noche era testigo de una gran pena de amor... Cassie pensaba y hablaba sola frente a su ventana... luego de ver su casilla de correo y ver un nuevo mail de Zoe después de bastante tiempo... su rostro volvió a iluminarse... pero no por mucho tiempo... en ese mail Zoe le decía que no podían seguir así... que era mejor tomarse un tiempo... pues la distancia era un gran obstáculo para ambas... también le decía que ella no podía contestarle los mail... que no era necesario que le escribiera pues no los podía leer...

Lo imprimió para leerlo una y otra vez, hasta que lo arrugó en sus manos y muy apenada se puso a pensar... entonces ni siquiera le interesa si estoy bien... ¿realmente algo vale la pena en esta vida? creo que no, en el camino de mis 32 largos años, siempre estuve convencida que nada valía la pena, pues la vida tiene un final, luchar, pelear día a día ¿para qué? si todo se acaba... alguien me dijo alguna vez por ahí... "no te tomes tan en serio la vida si al fin y al cabo, no saldrás vivo de ella"... y así fue que nunca tuve amigos, ni personas a quien amar, nada, solo fantasmas en mi imaginación, que hacían lo que yo quería, y vivían como yo quería, hasta que cierto día se me cruzó ella, la única persona en el mundo que logró romper mis principios de vida, mis barreras impuestas sobre mis sentidos, y los derribó, los usó como quiso, me desviví por ella, y al final de cuentas llegué a la conclusión, que nada vale la pena, pues luego de un tiempo de haberme mostrado el camino del amor, ese camino que nunca estuve dispuesta a seguir porque no me llamaba la atención, porque hasta ese entonces no hubo absolutamente nadie que me llegara a lo mas profundo de mi ser, hasta que llegó ella con su ternura y su bondad, llegó tan hondo en todo mi ser que me abrió el alma, solo con una mirada, y luego todos esos días compartidos, con planes para el futuro... hasta que fueron meses, y luego el final, me dijo adiós y mi alma se quebró porque sabía que ya no me quedaba nada de vida sin ella, de esa vida que comencé a ver con otros ojos cuando la tuve a mi lado, de esa vida que descubrí ¡por Dios! descubrí con ella lo que era la vida, sé que nací cuando la conocí, antes vegetaba sin sentido, como un robot creado por algún científico loco, alguien sin sentimientos, sin vida, una autómata, encerrada en mi misma sin permitirme sentir, sin permitir que nadie sintiera algo por mí, pues todo acababa, y ella no fue la excepción, también acabó, y lamentablemente volvió a relucir en mí esa teoría, la teoría de la infinita soledad, pues las cosas mas importantes, al fin y al cabo las hacemos solos, nacemos y morimos solos, el principio y el final... siempre solos... y ahora estoy de nuevo así... con lágrimas en los ojos, que ella no vio, porque ni siquiera se despidió en persona, lo hizo con un mail... ni una carta para sentir el temblor de su mano, se fue sin más... me rompió el alma, un alma que era dura, y se volvió sensible y viva cuando la conoció, un alma, ahora de nuevo sin sentido, sin fe, sin esperanza, sin vida, sin nada, pues todo mi amor ella se lo llevó... quedé vacía, ya no me importa nada ni nadie, como siempre fue... hasta que la conocí, y luché por ella, viví por ella, respire por ella, ¡¡Dios!! cuantas veces quise morir, y cuando la conocí ya no quise hacerlo, le temía a la muerte, pues no quería separarme de ella, pero al dejarme con este dolor, he vuelto a mi tristeza, y a mi teoría, que en la vida nada dura, todo termina, nada es para siempre... y lo peor de todo es que no sé porqué... (la razón que le había escrito Zoe, no la convencía...) ¡maldición!... (golpeó la pared con bronca, lastimándose la mano) y me vuelvo a preguntar... ¿cuál es el fin de la vida? ¿Tiene algún sentido vivir? Aun después de tantos años me lo pregunto, ¿de dónde venimos? ¿a dónde vamos? ¿por qué existimos?, ¿por qué diablos vivimos?, ¿cuál es el sentido de la vida? ¿el amor? ¿enamorarse? vivir feliz un tiempo y luego llega la separación, la muerte y ¿adiós? ¿se termina todo cuando dejan de amarte?... ¡qué deprimida estoy! (se tomó la cabeza con las dos manos) la vida me ha golpeado de nuevo, al menos ahora podré llorar por algo que realmente viví y no por esos amigos fantasmas que me creaba en mi mente cuando era una niña, ahora podré decir, ¡yo sufrí por amor!, he amado mucho, y me han dejado sin nada... mmm... ¡la autocompasión! ¿para qué sirve? para decir ¡joder, yo he vivido!, ¿he sentido algo?... ¿de qué sirve tener ahora el corazón y el alma rota?... (estaba tan confundida por sus sentimientos que se imaginó a Zoe a su lado y siguió hablando sola)... Antes de ti, yo no sentía, ¿y ahora qué hago con este dolor?... un dolor que corroe mi mente, mi cuerpo, por donde sentí tus caricias, tu recuerdo me quema el alma, dime por favor donde te encuentras, no me dejes así... ¿dónde estás? ¿pudiste olvidarme? ¡¡Cómo pudiste olvidarme!!... me dijiste tantas veces que me amabas... yo aun te llevo en mi alma, y duele ¡cómo duele!... ni cuando me hirieron de muerte aquella vez había sentido tanto dolor en mi cuerpo, en mi alma, cuando esa bala traspasó mi carne, quemándome, llegando adentro para alojarse en mi pierna y sangrar como una fuente... eso no es nada comparado con el dolor que siento al saber que no volveré a verte... ¿qué haré sin ti? dime dónde estás... necesito verte, escucharte, sentirte, si alguna vez me amaste devuélveme las ganas de vivir... ¿qué hago? ¡qué hago! ¡Dioses! estoy hablando sola como si estuvieras aquí conmigo... miro de nuevo hacia la ventana y me parece que esta lloviendo, pero en mi subconsciente sé que no es así, que los que dejan caer el agua son mis ojos y no las nubes, mis ojos, ya no me quedan lagrimas, pensé que sería feliz, que nunca me dejarías, ¡que idiota he sido!... me entregué con el cuerpo y con el alma la primera vez en mi vida y me pagas así... ¿cómo se puede salir de este dolor inmenso? ¿cómo puedes olvidar?... cuando amas tanto... como yo te amo... (se dejó caer en silencio sobre su cama y luego de un rato con lágrimas en los ojos se durmió).

Al otro día... con los ojos hinchados de tanto llorar, Cassie decide por última vez darle otra oportunidad a su relación, decide averiguar donde estaba Zoe, no podía dejar las cosas así, con ese adiós estúpido... no podía ser cierto, sabía que Zoe la amaba y lo sentía así en su corazón, en su alma... tenía que saber donde estaba... pero ya no podía llamar de nuevo a la mansión pues ya lo había hecho en muchas ocasiones y últimamente la atendía la arpía de la madre y no le quería decir donde estaba su hija, así que pide unos días de licencia y se va a la isla de Rodas, para averiguar donde podía estar hospedada... con sus contactos en la policía en la entrada del aeropuerto y en el puerto supo que Zoe nunca había estado en la isla de Rodas, además que investigó en las 3 facultades que había allí y no se cursaba en ninguna la carrera de Historia Antigua... así que vuelve a Atenas desilusionada, peor que antes, le había mentido... Zoe nunca estuvo en la isla de Rodas... decide volver a su trabajo para tratar de pensar en otra cosa... pero era imposible...

En la comisaría Cassie ya no sabe que hacer para dar con Zoe para pedirle algún tipo de explicación... su cabeza le daba vueltas y vueltas no podía dejar de pensar en ella, era tanta la angustia que el Comisionado la tenía allí en su escritorio, no quería que saliera a la calle para hacer sus rondas pues tenía miedo por ella, tenía miedo que le pasara algo malo, no estaba en su mejor momento, estar en una operativo sería fatal... así que se quedó en la oficina y es más, se notaba que se sentía mal, pues no se quejó, ya no era la Cassie de siempre, le faltaba su luz interna, su alma y esa luz tenían un nombre, ese nombre era Zoe, era el alma que la iluminaba... estaba tan abstraída que no vio a la mujer que entró para hacer una denuncia de robo...

Casandra: tome asiento ya la atiendo...

Eunice: ¿eres tú?

Casandra: ¿quién?

Eunice: ¿tanto he cambiado?. Tu estas igual que a tus 14 años... sigues estando muy guapa...

Casandra: ¿Eunice?

Eunice: la misma... ¡que alegría verte!... es increíble... ¿que haces aquí?

Casandra: soy jefa de la brigada, pero no estoy de mucho ánimo y me he quedado a hacer trabajo interno... ¿qué es de tu vida?

Eunice: bien... aun estoy con Narciso... tengo dos hijos, se alegrara mucho cuando le cuente de ti... que lindo volver a verte... me traes recuerdos...

Casandra: a mi también... fue una linda época pese a las circunstancias del lugar donde estábamos...

Eunice: sí, pero siempre serás muy importante para mí...

Casandra: tú también...

Eunice: nos hicimos "mujer" juntas...

Casandra: sí...

Eunice: ha pasado mucho tiempo...

Casandra: demasiado...

Eunice: te noto muy triste... ¿qué te pasa?

Casandra: aun después de tanto tiempo me sigues conociendo... siempre me ayudaste y mira... ni que los Dioses te hubieran mandado... estoy enamorada... y me ha dejado y ni siquiera sé por qué...

Eunice: lo siento...

Casandra: también yo... es muy duro...

Eunice: deberías hablar... con, ¿ella?

Casandra: sí ella... me quedé con las mujeres...

Eunice: me alegra... y cuéntame... bueno... aquí no es el momento ni el lugar... vamos a tomar un café aquí enfrente, vi que hay una linda cafetería...

Casandra: preferiría ir a otro lugar, me trae recuerdos...

Eunice: como gustes, vamos donde tu quieras...

Casandra: muy bien traeré mi saco... y dime... ¿a qué viniste por aquí?

Eunice: cierto... el verte me ha emocionado tanto que me olvidé... me robaron la billetera en el bus... vine mas que nada por los documentos para hacer la denuncia...

Casandra: ¡los malditos de siempre!, ¿es que no saben los trastornos que te crean? Tener que hacer todos los trámites de nuevo... al menos podrían dejarlos cerca de la víctima...

Eunice: tienes razón ahora deberé hacer todos los trámites... ¡un horror!...

Casandra: bueno, te tomo la denuncia por las dudas, nunca sabes que pueden llegar a hacer con tus documentos...

Eunice: sí, por eso vine...

Al rato en la cafetería de la vuelta de la comisaría...

Hablando así... de la vida de cada una, sale la conversación sobre el orfanato y Eunice le cuenta que al final supo quien era su padre... y que su madre había muerto cuando ella tenía 2 años en un accidente de tránsito y que a ella la había salvado cubriéndola con su cuerpo, pero no fue suficiente para salvarle la pierna que se rompió en dos partes por eso había quedado renga para el resto de su vida... al seguir hablando sobre el orfanato, Eunice recuerda y le cuenta a Cassie el día que llegó ella...

Eunice: ¿sabes? aunque era muy pequeña aun recuerdo aquellos días en cuando llegaste...

Casandra: ¿te acuerdas de eso?

Eunice: ¡cómo olvidarlo!... fue el día en que conocí a mi muñeca... recuerdo cuando Xenia te puso por primera vez en mis brazos, eras tan chiquitita... y yo también, tenía 4 años, por eso Xenia estaba al lado mío mientras me dejaba apenas sostenerte... ¿y tú? ¿supiste quienes eran tus padres?

Casandra: no...

Eunice: yo siempre recuerdo a un hombre muy guapo de ojos profundamente verdes, que venía seguido a buscar a una beba para adoptarla pero siempre se iba con las manos vacías, decía que no encontraba lo que buscaba... y Xenia, se ponía muy nerviosa cuando venía ese hombre, no sé porqué, recuerdo que siempre te escondía conmigo en una habitación, me decía: Eunice... tienes que cuidar a la niña y por nada del mundo salgas con ella de la habitación...

Casandra: ¡qué extraño!

Eunice: sí, y así fue siempre, hasta que cumpliste 3 o 4 años, nadie podía verte... y nunca supe porqué si eras... y eres bellísima... me alegra tanto verte... (la tomó de las manos).

Casandra: a mí también... me has traído algo de paz...

Eunice: te noto muy angustiada, cuéntame que te atormenta... algo me dijiste es sobre el amor...

Casandra: sí, estoy profundamente enamorada, encontré a mi alma gemela... y no sé por qué me dejó...

Eunice: ¿no sabes por qué?

Casandra: no... y es lo que me tiene mal... pues sé muy bien que me ama...

Eunice: me imagino que lucharás por ella... averigua por qué... sé que lo de tus padres es doloroso, y nunca quisiste saber quienes fueron o son, pero no hagas lo mismo con ella... averigua hasta las últimas consecuencias por qué te abandonó...

Casandra: abandono... siempre es lo mismo en mi vida, todos me abandonan...

Eunice: tranquila... averigua bien, siempre hay un por qué detrás de un abandono... No te quedes con la duda... con tus padres has tenido suficiente... viviste siempre con la duda... y si la amas tanto como veo en tus ojos, lucha por ella...

Casandra: lo haré Eunice, lo haré... (la palabra "lucha" le parecía muy conocida, se repetía una y otra vez..."lucharé por ti").

Eunice: debo irme, los chicos me esperan... toma mi número de teléfono, llámame... Me gustaría que algún día vengas con ella, quiero conocer a la mujer que te ha robado el corazón...

Casandra: ojalá pueda ir con ella, ojalá... (se abrazaron y Eunice se despidió y Cassie se quedó un rato mas en la cafetería, pensando en que no debía bajar los brazos, ella debía averiguar que le había pasado a Zoe, necesitaba verla en persona, a los ojos, no quería seguir con ese dolor en su pecho, con ese dolor que no paraba de taladrar su cabeza con preguntas y mas preguntas... cada día era peor... nunca había sentido tanto dolor... de pronto recordó a Darío cuando ella le decía que podía seguir adelante, hoy lo estaba comprendiendo mas que nunca, pues nunca había sufrido tanto porque nunca había amado tanto... hubo noches en que tomaba un poco de mas... pero no quería caer en el mismo error de su amigo... tomar para olvidar... ella no era así, siempre había sido una mujer fuerte, pero el amor la había cambiado, estaba sensible y ese dolor le estaba haciendo daño...)

Esa noche se pone a pensar en la soledad de su cuarto...

Casandra: ¡Dioses! ¿por qué me hicieron esto? se me desgarra el alma, al saber que nunca mas la veré... ¿por qué no me dejaron con mi maldita soledad?, nunca quise conocer el amor hasta que ella apareció en mi vida, y ahora ¿para qué sirvió todo lo que me dijo?, era todo mentira... ¿nada de lo que me dijo fue verdad? ¿por qué la pusieron en mi camino si me iba a dejar?... como hicieron una vez mis padres, caí como una idiota, ¿como sigo viviendo con este dolor?, cuando se ama tanto a alguien, una ya no encuentra la paz, el dolor se apodera de tu alma, del alma que conoció la vida cuando ella llegó a mi camino... ¿cómo sigo ahora sin ella?, es peor que la muerte pues sé que esta viva, que ya ni me recuerda, que ya no le intereso, me duele tanto este amor, fue tan especial y puro para mí, y ahora esto... me dice que ya no quiere verme... ¡que busque a otra para amar!, ¿acaso no entiende que mi amor siempre será de ella? me siento morir, es la peor herida que he recibido, pues fue directo al corazón, me desgarro el alma, me devoró la vida... mi vida que vuelve a la infinita soledad de mi alma...

Afrodita: lucha por ella... lucha por ella...

Casandra: (seguía pensando) el dolor es mas fuerte de lo que me esta diciendo mi subconsciente...

Afrodita: no la dejes ir así... averigua por qué se fue...

Casandra: no puedo seguir adelante sin ella...

Afrodita: con mas razón, lucha por ella, lucha por ella...

Casandra: ¿quién diablos me habla?

Afrodita: Hades...

Casandra: ¿Hades?

Afrodita: se dice... ¿quién Hades me habla?, mi hermano...

Casandra: ¿mi hermano? me estoy volviendo loca...

Afrodita: ja, ja, no estas loca...

Casandra: si los Dioses antiguos me ayudaran... claro... Hades, Poseidón, Atenea... ¿dónde están?...

Afrodita: aquí... (en un haz de luz apareció la Diosa mas hermosa).

Casandra: me asustaste, ¿quién eres?

Afrodita: ¿tan fácil me olvidaste?

Casandra: ¿te vi alguna vez?

Afrodita: ¡ja! muchas... si habremos tenido aventuras juntas, Xena...

Casandra: ¿Xena? mi nombre es Casandra...

Afrodita: sí lo sé, pero me gusta mas Xena... En aquellos días, te diría hace años, mas bien siglos, eras mi heroína preferida, junto con la pequeña...

Casandra: no entiendo nada... Xena es una serie de televisión... aunque ahora algo viene a mi mente creo que Zoe me dijo algo, como que realmente existió y que por problemas de Estado nunca la dieron a conocer...

Afrodita: exacto, ven, acércate, te mostraré tu pasado, y hazme el favor de no llamar a mis hermanos, pues con ellos no terminaste muy bien, es más, tuviste el valor de matarlos a todos, pero luego el perdón divino, llegó a ellos y les dio una nueva oportunidad a todos, es solo que ya los mortales no creen mucho en nosotros, pero siempre estamos en la mente de los mortales, y tratamos de ayudar a los que nos imploran, sobretodo yo, pues como bien recordarás en un instante, (tocó suavemente la cabeza de Cassie y comenzó a ver las imágenes del día que estuvo en el sótano de la facultad y habló de nuevo con los Dioses) soy la Diosa del amor...

Casandra: pero yo hablé hace poco con ellos...

Afrodita: sí es cierto... te lo acabo de mostrar, y fue para ayudarnos a que la gente no nos olvidara por completo... ellos deben permanecer allí por siempre hasta que la fe vuelva a renacer en ellos, pero contigo ya te dije, no quedaron muy bien las cosas y si no quieres ahogarte la próxima vez que veas el mar, no llames a Poseidón... además tu problema es de amor... deberías llamarme a mí, pero eres tan terca como siempre...

Casandra: ¿tú eres?...

Afrodita: sí soy yo... Afrodita "la Diosa del amor"... ya te lo dije...

Casandra: cierto, ¡que idiota he sido!... estoy desesperada...

Afrodita: lo sé... soy Diosa...

Casandra: ¿mmmm?

Afrodita: mira, ven, te mostraré... algunas de tus aventuras...

Casandra: ¿yo hice todo eso?

Afrodita: y mucho mas, pero ya no tengo tiempo... debemos solucionar este pequeño problema en esta vida... Xena, Gabrielle te ama...

Casandra: ¿Gabrielle? ¿quién es Gabrielle?

Afrodita: la rubia que estaba a tu lado, la acabas de ver...

Casandra: sí muy bonita... pero... ¿quieres decir que esa Gabrielle hoy en día es Zoe?

Afrodita: exacto, siempre tan inteligente...

Casandra: ¿nos volvimos a ver en esta vida?

Afrodita: en todas Xena, siempre juntas vayan donde vayan...

Casandra: no me robes la letra...

Afrodita: ¿te acuerdas?

Casandra: sí algo vino a mi mente... sé que morí de muy mala manera pero era para redimirme... ¿verdad?

Afrodita: sí, habías cometido muchos crímenes... tu alma necesitaba encontrar la paz... y Gabrielle siempre estuvo a tu lado para que lo lograras, es solo que por tu bien tuvo que dejarte ir, y ella sufrió mucho... esperemos que en esta vida no pase lo mismo... (se quedó en silencio)...

Casandra: ¿pasa algo?

Afrodita: no, nada... bueno, vamos... quiero mostrarte donde esta Zoe, en una isla, deberás tener mucha paciencia sé que es algo que nunca tuviste pero la paciencia te llevara al éxito seguro...

Casandra: dime, tú que sabes tanto, ¿por qué se fue así, sin ninguna explicación coherente?

Afrodita: para que luches por ella como hiciste siempre...

Casandra: ¿luchar? ya no sé donde buscarla...

Afrodita: por eso estoy aquí... te daré pistas... ¿eres policía verdad?...

Casandra: sí...

Afrodita: bueno te será fácil encontrarla, pero no te será fácil descubrir toda la trama que hay detrás de todo esto... de tu vida y la de ella...

Casandra: debo encontrarla... nadie quiere decirme dónde esta...

Afrodita: debes ir a la mansión...

Casandra: llamé miles de veces, y nadie me dice nada...

Afrodita: si vas personalmente hay alguien que te lo dirá...

Casandra: ¿por qué no me lo dices tú y listo?

Afrodita: no puedo... él te lo dirá... tiene un gran corazón...

Casandra: ¿él?

Afrodita: ve a la mansión... debes apurarte... (Afrodita desapareció pero antes tocó a Cassie para que no recordará su presencia).

Casandra: (se encontró sola hablando frente al espejo)... esta bien, iré a esa maldita mansión...

Al llegar a la mansión habla con Filipo...

Casandra: hola necesito saber la verdad quiero hablar con alguien que me diga que esta pasando... seguro tú sabes la verdad, ella confía en ti...

Filipo: lo siento, no puedo decirte nada...

Casandra: ¡por Dios! ella me dijo que me amaba y yo también la amo no puedo vivir sin ella... (se puso a llorar desconsoladamente).

Filipo: niña... no llores... yo, yo.. te diré donde esta, pero, prométeme que no le dirás que fui yo, me estoy metiendo en un gran lío...

Casandra: lo prometo, nunca saldrá de mi boca...

Filipo: lo sé niña, tienes los mismos ojos de tu madre...

Casandra: ¿mi madre? ¿que tiene que ver con esto?

Filipo: nada, nada...

Casandra: dime, habla...

Filipo: no puedo, será mejor que vayas a ver a Zoe... ella te lo dirá...

Casandra: ¿decirme qué? ¡maldición! me tienen en un maldito suspenso que agobia mi vida...

Filipo: ella esta aquí, en esta dirección...

Casandra: en la isla de Lesbos...

Filipo: sí, es la casa de mi prima... por eso no la encontraste cuando hiciste tus averiguaciones, no es una casa de los Pipolos...

Casandra: ¡buena policía resulte ser!, he descubierto todo, menos lo mas importante de mi vida... Gracias, siempre lo recordaré...

Filipo: seguro niña, seguro...

En la isla de Lesbos...

Por su parte Zoe también estaba sufriendo... lloraba todas las noches en su habitación, de día salía a caminar para distraerse, pero no dejaba de pensar en Cassie.

Carisa, una joven muy amable, hija de la dueña de la casa, la veía muy triste y se hizo amiga de Zoe, con ella podía hablar de todos los temas, eran muy abiertos en la isla de Lesbos... así que le contó que estaba profundamente enamorada... y que luego descubrió que era su hermana...

Carisa: te entiendo Zoe, es horrible... ahora entiendo porque lloras todas las noches... niña... (la abrazó muy fuerte, era algo que Zoe estaba necesitando, y se quedó así por un buen tiempo, en los brazos de esa mujer que la estaba consolando... y con el tiempo Carisa se fue enamorando, pero para Zoe era muy difícil olvidarse de Cassie).

Carisa trataba por todos los medios de hacerle olvidar a Cassie, de hacerle olvidar su dolor, aunque en el día estaban juntas y compartían muy lindos momentos, sabía que Zoe siempre tendría en su memoria y su corazón a Cassie, por eso cuando la besó en la boca una noche, con timidez, dejándose llevar... luego se sintió culpable al hacerlo pues sabía que Zoe, estaba confundida, pues al principio fue como que no quería sentir sus labios, y luego la sintió mas dulce, como que necesitaba ser besada.

Carisa: lo siento... no debí hacerlo... sé que nunca me amaras...

Zoe: yo también lo siento...

Carisa: pero bueno, yo solo quiero hacerte feliz, quiero darte lo que ella ya no puede darte, sé que la amas, pero con el tiempo la olvidarás y podrías amarme, viviríamos aquí... seríamos felices... me estoy enamorando de ti, Zoe... quiero vivir contigo... sé que es pronto para ti... pero ¡Dioses! ¡qué nerviosa estoy!... no he parado de hablar en toda la noche... dime algo...

Zoe: Carisa, eres una gran mujer, y muy bella por cierto... pero necesito tiempo...

Carisa: tendrás el tiempo que quieras... te esperaré por siempre... ¿te molesto que te besara?, perdona, me deje llevar... eres tan hermosa... y tienes unos labios tan bellos...

Zoe: (se sonrojo)... gracias... también tú...

Carisa: ¿te gustan mis labios?

Zoe: sí... y fue muy dulce tu beso...

Carisa: es lo mas bello que me han dicho...

Zoe: vamos, seguro te han dicho mucho más...

Carisa: en serio... no... además que me gusta que me lo digas tú...

Zoe: es la verdad... Carisa... discúlpame, quiero irme a descansar...

Carisa: sí, esta bien... te acompaño...

Zoe: muy bien...

Al llegar a la puerta de la habitación de Zoe, Carisa le volvió a robar otro beso y esta vez, Zoe le respondió... luego al entrar a su habitación y cerrar la puerta, unas lágrimas comenzaron a caer por sus mejillas, sabía que nunca podría olvidarse de Cassie, la llevaba en el alma... y ahora no podía pensar, había respondido al beso de Carisa, ¿se había dejado llevar? o ¿era mas que una atracción?. A Cassie la tenía que olvidar y alejar de su mente, de su corazón, de su alma, tal vez Carisa la ayudara con eso... tal vez volver a amar y ser amada por otra persona la hiciera olvidar la piel de Cassie... en unos días lo pensaría... ¿podría olvidarse de Cassie, en los brazos de otra mujer?, ¿en otra piel?

Camino a la isla... Cassie estaba muy nerviosa... recordó cada uno de los días que había pasado con Zoe, desde que la conoció... pensaba... me gustó tanto su forma de ser que me abrió el alma y el corazón hacia nuevos sentimientos que nunca había sentido, fue magia, fue pasión, fue deseo de saber si ella era lo que estaba buscando por tanto tiempo, necesito saber si ese fuego aun sigue encendido en mi corazón al verla, ella era la llama que me encendía y me quemaba por dentro, necesito verla...

Carisa por su parte no le pedía nada a cambio, solo quería saber que se sentía ser su amiga, ya que Zoe por ahora no estaba dispuesta a darle mas de sí, quería compartir momentos, un helado de chocolate, una buena película, andar en bicicleta y caminar por esa isla de ensueños, sin pensar que la terminaría cautivando del todo... con su magia, su belleza, su dulzura, su corazón... Carisa se dio cuenta que en verdad se estaba enamorando de Zoe...

Casandra ya estaba en la isla de Lesbos y se disponía a ir a ver a Zoe a la dirección que le dio Filipo, la suerte ya estaba echada...

Llegó a un pequeño hospedaje, era un edificio muy antiguo, pero igualmente le gustó mucho, tenía algo especial... la arquitectura antigua, el aroma a viejo le encantaba... así que decidió quedarse allí, tenía que hospedarse y dejar la maleta, antes de entrar, mientras iba pensando como reaccionaría Zoe al verla, en su cara de ángel, en su dulzura, fue cuando una joven se la llevó por delante...

Casandra: uyyy, me rompiste el pie...

Carisa: lo siento... no te vi... (también iba pensando en la misma mujer).

Casandra: pues soy bastante grande ¿no crees?

Carisa: es que me tapaban la visión las cajas estas, ahora tendré que levantar todo, incluso tus cosas, se te abrió la maleta...

Casandra: esta bien, olvídalo... yo levanto tus cajas...

Carisa: bueno entonces yo levanto tus cosas... hola, mi nombre es Carisa...

Casandra: Casandra... aunque me rompiste el pie, cuando me pisaste, te diré... encantada...

Carisa: jajaja, lo siento, lo mismo digo, también estoy encantada... ¿te alojaras aquí?, soy la encargada...

Casandra: ¿en serio?... ¿me saldrá mas barata la estadía?

Carisa: si puedo remediar la presentación desastrosa que tuve, puedo hacerte precio si quieres...

Casandra: era broma... fue una linda manera de presentarnos, no siempre me pisan tan fuerte... bueno, quiero entrar, así me doy una ducha, tengo cosas importantes que hacer...

Carisa: como gustes... entremos... ya es hora de almorzar, ¿almorzaste?...

Casandra: sí...

Carisa: bueno, quería invitarte si me dejas...

Casandra: en otro momento...

Carisa: que te parece ¿mañana?... no quisiera que te llevaras una mala impresión de mí, y sobretodo de la gente de la isla, acá atendemos muy bien a los turistas...

Casandra: eres muy amable...

Carisa: y tú tienes una linda sonrisa...

Casandra: gracias, también tu...

Carisa: permiso tengo que llevar estas cajas a la cocina del hotel, ella es mi prima te indicará todo, te dará las toallas y te mostrará la habitación, debes firmar en este libro tu entrada...

Casandra: bueno, gracias...

Carisa: nos vemos luego... (¡qué lindos ojos!... pensó)

Casandra: nos vemos... (que chica simpática... pensó)

Al rato después de ducharse, Casandra, se miraba al espejo, en todo lo que había cambiado desde que había conocido a Zoe, estaba mas amable con la gente, pues el encuentro tan cordial que había tenido con esa joven en otro momento de su vida no lo hubiera hecho, no por ser maleducada sino porque era muy cerrada, pero algo había cambiado, Zoe la había cambiado, necesitaba verla, ya no podía soportar mas esa situación... se miró otra vez y sonrió al recordarla, cuando le manchó el saco en la cafetería y así con una sonrisa en los labios, que se producía cada vez que pensaba en ella salió de la habitación... para recorrer la isla...

Al salir se encontró de nuevo con Carisa...

Carisa: ¿sales a caminar?

Casandra: sí, quiero ver la isla... (sobretodo quería pasar por la dirección de la casa donde se encontraba Zoe, pero aun no quería que la viera, quería investigar bien, si Zoe estaba sola, o la estaba engañando con alguien mas, ¿por eso la había abandonado?).

Carisa: ¿tienes algún lugar en especial?

Casandra: sí, quiero ir hacia el sur de la ciudad...

Carisa: yo vivo en el sur... es muy lindo... es muy tranquilo... allí se respira paz...

Casandra: pensé que vivías en el hotel...

Carisa: no, aquí solo trabajo... y dime... ¿viniste a conocer la isla?, o ¿conoces a alguien?... perdona soy muy indiscreta ¿verdad?

Casandra: sí, haces muchas preguntas...

Carisa: disculpa, es que, bueno... tienes unos ojos muy bonitos, pero los veo tristes... y pensé que tendrías algún problema, y bueno... quise ayudarte, quiero que la pases bien, y te olvides de tus problemas...

Casandra: eres muy amable... y muy perceptiva... y te agradezco tu ayuda, pero estaré bien... no te preocupes... y sí vine a ver a alguien... y espero que se alegre de verme, sino creo que terminaré peor de lo que estoy...

Carisa: penas de amor...

Casandra: sí...

Carisa: lo siento... tal vez pueda ayudarte en serio...

Casandra: gracias... quisiera estar sola... me iré a caminar por ahí...

Carisa: esta bien, cuando quieras estoy aquí... ¿sabes? me causas no sé ¿ternura?, te veo tan grande y tan niña...

Casandra: sí, para algunas cosas, sobretodo, sentimientos más que niña soy una tonta...

Carisa: sentir no es ser tonta... es ser valiente...

Casandra: lo sé... eso me lo enseñó la persona que amo... pero a lo mejor le faltó enseñarme un poco más... tal vez le faltó enseñarme como se hace para olvidar cuando amas tanto... (cerró los ojos con fuerza para no dejar escapar las lágrimas).

Carisa: abre los ojos... son muy bellos para tenerlos cerrados... (vi la humedad en ellos, ¿quería llorar?, pensó) oye, tal vez si descansas luego te encuentres mejor... debe ser el viaje, ¿has hecho una gran distancia?... ¿de dónde vienes?

Casandra: de Atenas...

Carisa: nunca fui a Atenas... siempre estuve aquí...

Casandra: es muy lindo, si algún día quieres ir, te hospedaré en mi casa, te advierto que es muy humilde... pero es linda...

Carisa: eres muy amable, nadie me había invitado nunca... gracias... te tomo la palabra...

Casandra: hecho, luego cuando vuelvo te daré la dirección...

Carisa: me encantará ir a verte... bueno te dejo... tengo que ir a mi otro trabajo, aquí ya terminé mi turno...

Casandra: trabajas mucho...

Carisa: me gusta... además ese es el negocio familiar, con mi madre tenemos una pequeña heladería... yo la ayudo por las tardes y noches... te daré la dirección por si te apetece tomar un rico helado... será un placer verte... (escribió la dirección y se la dio) y ojalá, que puedas solucionar tus problemas...

Casandra: gracias... tal vez pase hoy a tomar un helado...

Carisa: cuando gustes... me voy que se me hace tarde... (le dio rápidamente un beso en la mejilla a Cassie, que se quedó sorprendida y pensando en lo simpática que era esa chica).

Luego de caminar bastante llegó después de un buen rato al lugar en que estaba Zoe, se quedó mirando la casa desde la esquina... vio entrar a una mujer mayor... y luego salió ella, su corazón se paralizó... no podía creer que Zoe la había dejado de amar... comenzó a seguirla, caminó dos cuadras hasta un negocio y luego volvió a la casa, Casandra aun no quería que la viera, así que decidió que ese día no estaba para volver a verla y siguió caminando, y después de una hora se fue a la heladería de Carisa, y el corazón se le paralizó cuando vio como jugaba a seducir a otra mujer, ambas comían del mismo helado, rozándose los labios de vez en cuando... Casandra se acercó y le dijo...

Casandra: soy tan fácil de olvidar... ¿tan fácil?, tu amor se alejó de mí... sin explicación alguna... sé que no soy la juventud que ella puede darte, ¿por qué te fuiste dejándome el alma herida?... ¿ya no despierto nada en ti?

Zoe: Cassie...yo...

Casandra: no te preocupes, no acabas de matarme, ya lo hiciste hace tiempo, cuando te esperé durante noches enteras detrás de la pantalla de mi computadora y tú no venías... cuando ni siquiera me mandaste un mail para saber si habías llegado bien, no me llamaste nunca, me tuve que enterar por Filipo, me escribiste dos veces... dos miserables veces... ¿y sabes lo que mas me duele? que no puedo curarme de amarte... será una enfermedad que me acompañara por siempre...

Carisa se quedó en silencio viendo el dolor de ambas... allí supo que esa mujer que le había atraído físicamente en el hotel era el amor que no podía permitirse Zoe, Cassie se fue con lágrimas en los ojos y Zoe cayó rendida en los brazos de Carisa, llorando...

Llegó la noche que estaba fresca, Cassie no podía dormir y era otra noche mas de dolor, pero ahora era peor, pues confirmaba sus sospechas, confirmaba que Zoe tenía otro amor, otra mujer... esa suave brisa y fresca la hizo cerrar sus bellos ojos, y cayendo lágrimas de pena recordó aquellas noches cuando se sentaban juntas en la reposera... con Zoe delante de ella, entre sus piernas y la abrazaba tiernamente mordiéndole la orejita, susurrándole palabras de amor, cuando le besaba su cuello, cuando se abrazaban fuerte para calmar el suave frío que las invadía bajo la luz de la luna, esa brisa liviana que quería helarlas, pero no lo lograba porque eran una sola, abrazadas tiernamente, fuertemente, y en el silencio de la noche cerraba los ojos luego de ver las estrellas y solo escuchaba la respiración de Zoe sobre su pecho... abrió los ojos y comenzó a hablar sola, como venía haciendo los últimos días, tratando así de saber el por qué de su desgracia... ¡qué lindos momentos que pase contigo mi amor!, y ahora que no te tengo mas, los añoro tanto, me desespero de pensarte con alguien que no soy yo, ¿por qué te fuiste?, ¿por qué me dejaste?, es algo que hasta el día de hoy no entiendo, ¿la amas a Carisa? ¡Dioses!, mi alma llora y llora sin consuelo... ¿qué fue lo que te pasó?, ¿que fue lo que te hizo huir así de mi lado?... ¿sabes? miro de nuevo la luna y quiero sentirte junto a mi piel, como hacíamos antes, y me doy cuenta que no estas, que solo es un sueño... ¿sabes por qué? porque el frío no se me va, el frío me dice que ya no te tengo, el frío de la noche, ese frío que lograba calmar con tu cuerpo, hoy no puedo hacerlo, ya no tengo tu abrazo ni tu corazón... (su recuerdo siguió con una música de fondo, que le devoraba el alma, sonaba suavemente desgarrándole el corazón si podía ser mas... "Solo, hilando recuerdos que hablan de ti... Es mi soledad, la que me insulta pegada a mi piel, la que me grita tienes que aprender, es mi soledad. Es mi soledad la que no quiere ser, la que tiene el rencor, la que me lleva siempre a suplicar por esos versos y caricias que me enseñó tu amor. Es mi soledad la que se deja ver, la que me hará aprender, la que me lleva siempre a recordar lo que es la amarga, pura y dura, soledad. Es mi soledad. Por más que lo intento, no entiendo. Por más que lo siento, por más que me acuerdo, por más que me enredo, sin más que en silencio me acuerdo de ti"... había vuelto a su infinita soledad... como siempre había vivido...

La música terminó pero no así su dolor así que Cassie decidió volver al otro día, no podía quedarse con ese dolor... para calmar su angustia había ido hasta la isla, así que hablaría de una vez por todas con Zoe...

Casandra: hola, necesito hablar con Zoe...

Carisa: ella... esta muy mal...

Casandra: también yo... necesito saber por qué me dejó... y luego no la molestaré más... y será tuya para siempre...

Carisa: Casandra... Zoe nunca será mía...(dijo resignada)... será mejor que hables con ella, tienes razón, lo mejor será que te aclare las cosas que la atormentan...

Casandra: ¿qué puede atormentarla tanto como para dejarme?

Carisa: ella te lo dirá... solo te digo que luego que te lo diga, la comprenderás, y sabrás que ella tuvo razón en irse... pese a todo lo que sufrió, porque ella también sufrió mucho con esta separación... no fuiste la única...

Casandra: pues no parece, estaba muy alegre contigo...

Carisa: fue solo un momento para distraerse, llora todas las noches...

Casandra: ¿llora? No entiendo, si me ama tanto... ¿por qué se aleja?

Carisa: no puedo contarte, ella te lo dirá... solo dale tiempo... y tú también deberás ser muy fuerte...

Casandra: ¿se esta muriendo? ¿esta enferma?

Carisa: no... será mejor que pases... las dejaré solas... habla con ella, aprovecha que mi madre no está... estarán solas para decirse todo...

Casandra: hablaré con ella... este suspenso me esta matando...

Carisa: pasa... es la segunda habitación... nos vemos luego...

Casandra: nos vemos...

Casandra, entró a la casa, y subió la escalera que la llevaba a la habitación de Zoe, estaba muy nerviosa, no entendía la actitud de Zoe, pero seguro era algo muy complicado por la forma en que estaba actuando, golpeó la puerta con decisión... no se iría de allí sin una buena explicación...

Zoe: adelante...

Casandra: permiso...

Zoe: ¡Cassie! ¿qué haces aquí?

Casandra: debo hablar contigo... y no me iré hasta que me digas toda la verdad, quiero que me digas por qué me dejas, si sé que me amas... como yo a ti... dime por favor que te atormenta... no puedo mas con este dolor... (las lágrimas comenzaban a rodar).

Zoe: no llores por favor... (también sus lágrimas comenzaban a rodar).

Casandra: pero es que no entiendo... ¿por qué me dejaste? Yo, yo, no puedo vivir sin tu amor...

Zoe: no llores... (se acercó y la abrazó)...

Casandra: te extrañé tanto... te amo tanto... (el abrazo se hizo mas intenso).

Zoe: shh... no digas eso... ya no... (se soltó del abrazo y le dio la espalda).

Casandra: pero es verdad... te amo con el alma... ¿por qué no puedo amarte?

Zoe: porque no, no puedes... no debemos amarnos... ya no...

Casandra: pero dame una razón... donde quedaron nuestros sueños de vivir juntas para siempre, de formar una familia...

Zoe: no sigas por favor...

Casandra: explícame... ¿por qué somos mujeres? eso nunca te importó, al diablo la sociedad... al diablo los que no toleran el amor puro que te ofrezco...

Zoe: (llorando casi ni se le entendía nada)... sabes que no es por eso...

Casandra: ¿entonces?

Zoe: no podemos amarnos porque eres... mi hermana (susurró)...

Casandra: ¡¡¿tú qué?!!

Zoe: ¡¡mi hermana!! ¡¡eres mi hermana!! ¡¡Dioses!!... (gritó y se arrojó sobre la cama y lloró desconsoladamente, Cassie se quedó de pie, tratando de asimilar las duras palabras que le había dicho Zoe).

Casandra: ¿tu hermana? ¡estás loca!

Zoe: no lo estoy... que mas quisiera yo que fuera un error... leí el diario de Xenia...

Casandra: ¿hiciste qué?

Zoe: leí el diario... y allí relata como llegaste a sus brazos... eres la hija que secuestraron de Aristóteles Pipolos... mi padre...

Casandra: no puede ser...

Zoe: sí, lo es... lee el diario y allí sabrás la verdad...

Casandra: no necesito leer eso...

Zoe: debes hacerlo... allí esta tu identidad... tu pasado, tu vida... tu familia... nunca te abandonaron, fuiste secuestrada... eres Macarena Pipolos... mi hermana... (las lágrimas seguían rodando sin parar) ¿ahora entiendes por qué no podemos amarnos?

Casandra: yo te amo... no me importa quien soy...

Zoe: a mí sí... no podemos amarnos, somos hermanas...

Casandra: no puede ser, estás equivocada, Xenia estaba equivocada... todo debe ser un error...

Zoe: no lo es... ¿para que escribiría algo así si fuera mentira?... hay una forma de averiguarlo...

Casandra: sí, un estudio de ADN... nos haremos un estudio y verás que no somos hermanas...

Zoe: el estudio te lo harás con mi padre... con nuestro padre... (bajó su cabeza).

Casandra: hasta que no tenga el resultado... no es mi padre... ¿quién mas sabe de esto?

Zoe: solo Filipo... mi padre no lo sabe aun... pero debe saberlo, él ha sufrido mucho por ti...

Casandra: volveremos a Atenas y allí te demostraré que no soy su hija... y volveremos a ser felices mi amor...

Zoe: no me llames así, por favor... es muy duro para mí... necesito acostumbrarme...

Casandra: yo jamás me acostumbraré a estar sin ti...

Zoe: si resulta verdad, deberás acostumbrarte a estar sin mí...

Casandra: me pides lo imposible...

Zoe: a mí también me cuesta pero no podemos seguir hasta saber la verdad...

Luego que se enteran que son hermanas y todos en la mansión lo saben cada uno lo toma a su manera... Proserpina estaba que volaba del odio, había otra heredera, Aristóteles estaba emocionado, y no podía creerlo, volver a encontrar a su hija después de tantos años era un sueño... Filipo estaba muy contento por Aristóteles pero sabía que para Zoe era una desgracia y Zoe estaba muy triste... pues siempre quiso saber desde que se enteró que tenía una hermana como era, como sería vivir con ella y cuando supo la cruel verdad que su hermana era su mujer, su amante, se volvió loca... al igual que Casandra...

Las cosas en la mansión habían cambiado radicalmente para todos, la vida de Cassie también... ya no era para muchos la jefa de la brigada, era la hija primogénita de un hombre muy poderoso, de un hombre multimillonario... pero para Proserpina las cosas no quedarían así... deberían tener pruebas fehacientes que Casandra era hija de Aristóteles, así que urgentemente necesitaban hacerse el examen de ADN... aunque estaba entre la espada y la pared pues si descubrían que Cassie era en realidad la hija de Aristóteles no había marcha atrás, había que compartir la herencia, ¿pero cómo haría para que eso no se llevara a cabo y Casandra no tenga pruebas para demostrar su identidad?... debía pensar mucho, tal vez la solución era deshacerse de Casandra o de Aristóteles... además estaba muy nerviosa tratando de descubrir como había surgido esa teoría... al enterarse que había sido por medio de un diario, escrito por la persona que crió a Casandra, quería y necesitaba leerlo al detalle, para saber si allí decía algo sobre ella... si había pruebas en su contra estaría perdida... y se lamentaba mucho de su error, luego recordó aquella zona cuando fue varias veces con Pericles a ver a las niñas de ese maldito orfanato... y nunca pudo encontrar una niña parecida a Popea...

Pasaron varios días y se encontraban de vez en cuando en los pasillos de la mansión...

Pues Cassie siempre buscaba una excusa para no cenar con ellos, solo se había quedado esos días para demostrarle a Zoe que estaba equivocada... las miradas eran tristes por parte de ambas... había roces pequeños, noches de llanto y soledad en diferentes cuartos... ninguna de las dos soportaba la situación... ¿cómo se vivía con ese dolor, después de haber conocido el amor?... era curioso, para ella el rostro del amor, de la persona que mas amaba en el mundo y el rostro de la persona que mas lejos debería tener en el mundo, tenían el mismo rostro... el rostro de Zoe... así que Zoe al cabo de unos días se fue de la mansión, necesitaba encontrar de nuevo su paz... Proserpina no estaba de acuerdo con ello, pensaba que si alguien debería irse era Casandra, no su hija... pero ella no sabía que había detrás de esa huída... aunque algo sospechaba, no le gustaba la forma en que se miraban su hija y Casandra, entendió que allí había algo más que un amor de posibles hermanas... si Aristóteles llegaba a enterarse de algo así, que su hija era homosexual la desheredaría inmediatamente... era un hombre con ideas muy antiguas, al menos eso aparentaba, Zoe le dijo que se iría un tiempo a vivir al departamento de Filipo... necesitaba estar tranquila para seguir estudiando pues en la mansión no podía concentrarse...

Llegó el dos de noviembre... el cumpleaños de Cassie... "Macarena" para su padre...

Aunque Aristóteles sabía bien que ese no era el día en que había nacido su hija mayor ese año la respetó y le festejó el cumpleaños como siempre lo hizo Cassie, el 2 de Noviembre en lugar del 2 de Junio que ya había pasado.

Aristóteles: Zoe, necesito que estés en el cumpleaños de tu hermana... es el primer cumpleaños que pasarán juntas... quiero verte aquí...

Zoe: padre... no puedo estar allí... además no es el día en que nació...

Aristóteles: para ella sí lo es... siempre lo festejó en esta fecha y nosotros respetaremos su decisión... ¿pero qué diablos pasa entre ustedes?... tú vienes a la mansión y listo... quiero ver a mis dos hijas juntas... Zoe por favor... no debes estar celosa, las quiero a las dos por igual, sabes que te quiero mucho, pues a ti te vi crecer pero ella merece también mi atención... dale una oportunidad... si la quiero a ella, no dejare de quererte a ti...

Zoe: padre, no es por eso, al contrario, me alegra que hayas encontrado a tu hija... pero...

Aristóteles: ¿pero qué?

Zoe: nada, esta bien padre iré... lo haré por ti...

Aristóteles: gracias hija...

En la fiesta de cumpleaños...

A la noche ya comenzaba la fiesta en la mansión... las cosas no están muy bien entre Cassie y Proserpina, ésta no soporta a Cassie, en cuanto puede la trata mal, pues le dice que solo está allí por la herencia y que no se acercara a su hija por nada del mundo y Aristóteles estaba muy contento por ver a sus dos hijas juntas festejando el cumpleaños de Cassie... a la mitad de la noche Cassie ya estaba ebria...

Casandra: ja,ja, vengan a festejar mi cumpleaños 33, brindo por...

Andrea: aun no han llegado todos los invitados y ya estas borracha, por favor ya basta...

Casandra: déjame, quiero brindar...

Andrea: por favor, no vale la pena...

Casandra: sí que vale la pena... ella vale la pena... brindo por mi hermanita, por Zoe...

Selene: vamos... Cassie...