Los vecinos (3)
Raúl dió buena cuenta del culo y el chocho de mi mujer
Raúl se encaminó hacia Pilar y Mari que seguían comiéndose el coño con auténtica devoción. Se puso detrás de Mari la levantó el culo y empezó a lamerlo, Mari estaba encantada de sentir la lengua del muchacho. Sin mediar palabra, Raúl paró y le acercó el capullo hinchado de su gran verga y de un solo golpe se la metió entera provocando un grito entre placer y dolor de Mari. Raúl empezó un mete saca acompasado en el culo de mi mujer lo cual le provocó un nuevo orgasmo, su chocho chorreaba todo tipo de jugos estaba muy mojado lo cual valió para que tres dedos de la mano de Raúl le entraran sin apenas resistencia.
Ricardo y yo veíamos la escena y nuestras pollas empezaron a levantarse dispuestas a tener otra ración de buen sexo.
Yo me acerqué hacia Pilar que tenía el coño rojo de tanta lengua que le pasa Mari, así que la levante las piernas sobre mis hombros y le metí mi polla de un solo golpe, estaba como en éxtasis, se pellizcaba sus pezones sin parar y solo pedía más polla. Yo a la vez se la empecé a chupar a Ricardo, apenas me entraba en la boca ya que su polla era de campeonato. La verdad es que Ricardo me excitaba mucho y era un placer sentir su capullo en mi garganta a la vez que sus huevos golpeaban mi cara
Raúl seguía follándose el culo de mi mujer, sudaba y se meneaba como un auténtico experto, Mari no podía ni hablar al sentirse absolutamente empalada por la polla del niño. Fue cuando Raúl la sacó del culo y se la metió de un solo golpe en su chocho absolutamente mojado y enrojezido,
No pares de follarme Raúl, me estas volviendo loca, lléname el chocho con tu leche.- suplicaba Mari
Sin esperar un segundo más Raúl empezó un mete saca salvaje, parecía que el chocho de Mari era una aspiradora, el niño se pellizcaba los pezones, era una maravilla ver a aquel niño gordito follar con tanta maestría aquello hacia que yo me excitara cada vez mas y chupara la polla de Ricardo ya sin apenas dificultad. De repente Raúl paro de follar y le dejó su enorme polla absolutamente enterrada en el chocho de Mari,
Toma toda la leche Mari, me cooooorroooooo.- gritó Raúl
El niño empezó a tener espasmos mientras se corría, Mari estaba absolutamente destroza, Raúl no paró hasta que su polla salió por si sola del coño de mi mujer, ambos cayeron rendidos a nuestro lado mientras yo seguía follando a Pilar que tenía los ojos cerrados ya que tuvo otros dos orgasmos más lo cual ayudó a que mi polla entrará y saliera cada vez con más velocidad debido a la cantidad de jugos que soltaba el coño de Pilar. Ricardo empezó a resoplar y a follarme la boca más rápido, sentía todo el vergón en mi boca a punto de estallar. De repente empezó a correrse en mi boca, yo intenté tragar todo ese manjar pero era mucha cantidad así que algo resbaló por mi boca hasta llegar a mi pecho, eso me excitó a cien se la saqué a Pilar me puse de pie y le solté toda mi leche sobre sus tetas, cara y barriga, ella lo iba cogiendo con sus manos y llevándoselo a la boca.
Acabamos los cinco tumbados absolutamente exhaustos y llenos de satisfacción. A partir de aquel día nuestros vecinos también fueron nuestros amantes