Los Sueños de Maria: Soñando con un Trio

María lleva toda la semana muy cachonda, su marido no le hace caso, hace un tiempo empezó a meterse en chats, necesitaba soltar todo lo que llevaba dentro, necesitaba hablar y calentarse con otros hombres, sentirse deseada, y estar constantemente cachonda, como a ella le gusta, con todas las conversaciones, al final encontró a alguien como ella, con pareja pero con necesidad de más, a veces jugaban, disfrutaban del sexo, de tocarse, de pedirse cosas, de oír y ver los orgasmos del otro, pero un día, él le propuso algo más, ¿y si jugaban con más gente?, ¿y si en sus juegos metían a alguien más?, ¿nunca has fantaseado con ello?, y con ese pensamiento, María se durmió y empezó a soñar

María estaba en casa, nerviosa, esperaba visita, su amigo Carlos iba a verla en breve, le había propuesto un juego, verse, y no hablar, no decir nada, solo disfrutar, sin presentaciones ni preliminares, un encuentro sexual rápido y placentero, llevaría a una amiga, quería ver como María disfrutaba de su primera relación lésbica, verlo y participar de ella.

Sonó el timbre, estaba nerviosa y excitada, solo vestida con un sujetador negro, sexy, muy sexy, con transparencias, tanga a juego, un largo collar de perlas colgado al cuello y unos zapatos de tacón de aguja, una coleta alta bien apretada y los labios pintados de rojo, abrió la puerta, y se quedó un segundo parada mirando

El, alto, con vaqueros y camisa, ella con un vestido blanco, se adivinaba la ropa interior bajo el vestido, María sin hablar los invito a pasar, tras cerrar la puerta, tanto su amigo como la invitada se despojaron de la ropa que llevaban, él se quedó solo con los bóxer, ella sin embargo, vestía exactamente igual que María, pero todo en color blanco, pasaron a la habitación

-          Sé que dije sin hablar, pero no me explique bien, yo si os hablare a vosotras, os pediré cosas, no habrá nombres, tu obviamente serás Negra, y ella será Blanca, solo hablareis cuando yo os pregunte algo, y haréis lo que yo os pida, empezare observando, y cuando me apetezca unirme a vosotras lo hare, ¿estáis de acuerdo?

Ambas asintieron con la cabeza, y se quedaron de pie mirándose la una a la otra, María estaba muy cachonda, Blanca era guapa y morena, como ella, tenía unos grandes pechos, más delgada, y un culo redondo y firme

-          Veo que os gusta lo que veis en la otra….bien, demostrádmelo, besaros, comeros, lameros, quiero ver como disfrutáis de la otra, quiero que hagáis que la otra se corra mientras os miro y os ordeno

Blanca, empezó a sobarle las tetas a María por encima del sujetador mientras ella le comía la boca a Blanca, entrelazando sus lenguas, saboreándose, notaba como su tanga se empapaba.

-          Desnudaros la una a la otra

Blanca empezó a arrancar la ropa interior de María, mientras esa, suavemente quitaba el sujetador de Blanca y bajaba su tanga notando su piel suave, Blanca la tumbo en la cama, con las piernas bien abiertas

Y noto una lengua húmeda y caliente en su coño, lamiéndola lenta e intensamente, estaba muy excitada, cachondisima, quería que esa lengua se metiera en ella y le diera placer, más intenso, más hacia dentro, la cogió de la coleta y la empujo más contra su coño empapado, gemía sin control.

Recostada sobre su cama, disfrutaba de la mejor comida de coño que le habían dado en su vida, mientras apretaba la cara de Blanca contra ella y gemía de placer, veía como su amigo tenía la polla en la mano dura y brillante, lo miraba fijamente, sin dejar de gemir, y el la miraba a ella, sin parar de pajearse, de mostrarle lo dura que tenía la polla viendo el espectáculo, noto como los dedos de Blanca entraban en su coño, y noto un placer extremo al sentirse follada y comida, echó la cabeza hacia atrás, sin parar de gemir.

Se dejó llevar, sintiendo el placer de sentirse comida y llena, Blanca metía y sacaba sus tres dedos del coño de María, mientras no paraba de lamer su clítoris, succionarlo, morderlo. Y su amigo, se levantó, con la polla en la mano, subió a la cama

-          Vamos, cómetela, lo estas deseando, abre bien la boca

María abrió bien la boca, noto como su amigo le metía la polla en la boca hasta notarla chocar con su garganta, sin dejar de mirarlo forzó su cabeza para tragarla más al fondo, hasta atragantarse, mientras disfrutaba de la follara y comida de coño que le estaba brindando Blanca

-          Quiero que te corras, vamos, córrete mientras te sientes llena, venga, sé que vas a ser mi puta esta noche, Negra, córrete, quiero oírte, quiero que le llenes la boca a Blanca con tu corrida mientras te follo la tuya

María al oír a su amigo llamarla puta se desato, y se sintió como tal, noto como llegaba su orgasmo, los dedos de Blanca entraban y salían rápido, al igual que la polla larga y dura de su boca, se quedó quieta un segundo, abandonándose en un largo e intenso orgasmo. Cuando aún sentía el orgasmo noto como la polla de su amigo salía de su boca, y los dedos y la lengua de Blanca se alejaban de su coño

-          Ahora, quiero que pruebes tu primer coño , Negra, haz que Blanca se corra en tu boca, fóllatela con la lengua, con tus dedos, bébetela

Cambiaron posiciones, Blanca se quedó tumbada boca arriba con las piernas bien abiertas, María observo un momento el coño que tenía frente a ella, empapado, tenía pinta de estar delicioso, quería hacerle disfrutar tanto como aún estaba disfrutando ella, se colocó a cuatro patas y paso su lengua por el coño de Blanca, húmedo y caliente, le gusto, ese sabor fuerte, quería más, quería bebérselo todo, y sin pensarlo dos veces, se entregó a ello.

Empezó a lamerla, pasando su lengua por los labios y terminando en su clítoris, lenta, oyendo sus gemidos, entreteniéndose en pasar la lengua por todos los rincones de ese delicioso coño, metió su lengua todo lo que pudo dentro de ella, y empezó a mover su cabeza como si la estuviera follando, le gustaba oír como gemía, notar como se retorcía de placer, pero quería darle más, tenía que conseguir beberse toda su corrida

-          Vamos mi puta, métele los dedos, fállatela mientras no paras de comerle el coño, y prepárate, que te voy a follar, ábrete bien de piernas

En el instante que empezó a meter dos de sus dedos en el coño empapado de Blanca, María noto como su amigo le metía la polla hasta el fondo en su coño empapado, el placer máximo llego a ella, y sin dejar de comerle el coño a Blanca, solo del empujón de su amigo metiéndole la polla, llego a su segundo orgasmo, soltando un grito de placer que ahogo en el coño empapado de Blanca.

Su amigo empezó un movimiento rápido e intenso, notaba entrar su polla dentro de ella hasta el fondo a cada envestida, que ella aprovechaba para meter sus dedos hasta el fondo del coño de Blanca sin dejar de comérsela, estaba a punto de correrse otra vez, notaba como la follada rápida y salvaje que estaba recibiendo iba a proporcionarle un orgasmo más, uno largo e intenso, pero no era la única, Blanca, también estaba a punto de llegar, noto como le cogieron de la coleta, era Blanca, igual que ella hizo antes, la agarro fuerte y llevo su cara contra su coño, casi no podía respirar, cuando noto como su boca le llenaba de un líquido caliente y fuerte a la vez que sentía un orgasmo brutal en su coño, se corría mientras bebía la corrida de Blanca, no podía moverse, solo disfrutar.

Cuando Blanca soltó su coleta, su amigo la volvió a agarrar, estaba desatado, la cogió bien fuerte y empezó a follarla aún más rápido, intenso, fuerte, salvaje, mientras estaba saboreando la corrida de blanca, y aun sintiendo el orgasmo, notaba como llegaba otro, mientras su amigo se corría dentro de ella, llego al mejor orgasmo de su vida.

Despertó de un gemido, con la mano metida en el coño, empapada y sintiendo el orgasmo.