Los pies de elena
Estábamos en una cena con nuestros vecinos de al lado Elena y Juan en mi casa cuando mi esposa Angie me dijo que metiera al gato. Desde que me levante de la mesa me di cuenta de que sus patas estaban mojadas. Angie levanto la voz para que yo pudiera escucharla en la habitación contigua y grito «Pues
Estábamos en una cena con nuestros vecinos de a lado Elena y Juan en mi casa cuando mi esposa Angie me dijo que metiera al gato. Desde que me levante de la mesa me di cuenta de que sus patas estaban mojadas. Angie levanto la voz para que yo pudiera escucharla en la habitación contigua y grito «Pues entonces, solo chupa sus dedos!» Luego escuche que Elena le preguntó a Angie, «Chupar sus DEDOS?», «Claro, a Omar le encanta chuparme los dedos de mis pies,» Angie respondió. Me quede atónito por un momento. Yo soy totalmente reservado para todo aquello acerca de mi fetichismo, y la ultima cosa que quiero, es que nuestros vecinos tengan una detallada descripción de el. Corrí hacia aquella habitación y pregunte si alguien quería mas vino. Cuando me senté, comenzé a hablar acerca de el caso O.J. Simpson. Eso parecía funcionar, y me dio la oportunidad para darle una mirada sucia a Angie.
Nunca mas se volvió a hablar acerca de aquel tema.
Mas tarde esa noche, en la cama, regañé a Angie por hablar acerca de como me encanta chupar sus dedos de los pies a nuestros vecinos de a lado. Ella me explico que Elena y Juan básicamente no tienen vida sexual, y que Elena estaba muy triste. Ella creyó que si hablaba de sexualidad y de fetichismo podía lograr que Juan reaccionara.
No lo podía creer, Elena es preciosa. Yo ya se lo hubiera hecho en dos segundos. Juan es un perdedor.
De todas maneras, yo le dije a Angie que la mayoría de la gente no encuentra sensual chupar los dedos de los pies. Ella me dijo que ella pensaría lo mismo si no me hubiera conocido. Después se deslizo debajo de las sabanas. Después solo recuerdo, que su pie desnudo encontró mi boca, y empece a besarlo como si fuera la cara de Angie. Ella se retorcía con placer.
Después de uno o dos minutos de gran intensidad, estábamos a punto de venirnos, cuando salto encima de mi y comenzó a saltar sobre mi verga, adentro y afuera de ella. Nos venimos rápido y reposamos exhaustos en la cama.
De pronto Angie dijo, «Creo que Elena hubiera disfrutado esto… Pero no creo que Juan lo hubiera hecho. Esa es la parte triste»
Le pregunte que porque era triste y me dijo «Nunca has visto los pies de Elena? Por lo que tu me has dicho, son PERFECTOS! Hasta yo… bueno… no lo tomes a mal… pero yo… yo estaba fantaseando acerca de chupar sus dedos de los pies ahora mismo.»
BOING! Mi verga se paro inmediatamente. «Angie realmente te gustaría chupar sus dedos?» yo pregunté tratando de mantener la calma.
«Si, Yo… yo lo haría. Solo que no se como seducir a una mujer, mucho menos seducir sus PIES. Es algo en lo que nunca había pensado… hasta que conocí a Elena.» Ella murmuró tímidamente.
Solo pensaba en cuan preciosos eran los pies de Elena para que Angie estuviera actuando de tal manera. Ella había tenido amigas bonitas con pies bonitos, pero ella nunca había tenido ninguna atracción.
Luego tuve una brillante idea. Se la explique a Angie, y nos pusimos tan calientes que cojimos toda la noche teniendo mas y mas ideas.
El día siguiente, las dos damas estaban en la casa de Elena después de los aerobics tomando jugo de zanahoria. Yo estaba en mi casa, escuchandolas vía el mini micrófono que Angie traía. Ella también tenia un audífono para que yo le pudiera dar instrucciones.
Revise la primera parte del plan en su oreja, y escuche a ella decir, «Elena, porque haces aerobics?»
«Uh… No lo se… Mmm yo creo que porque no quiero estar gorda… Tu porque los haces?»
«Sexo» Angie dijo rápidamente.
«Sexo?» Escuche a Elena responder. «Quieres decir que obtienes mas sexo? Ja! Eso nunca me ha funcionado. A Juan no parece importarle mi apariencia… por lo menos no desde que me embarace de Elenita.»
«Oh… que triste! Odio escuchar eso!»
«No es divertido. He tratado todo… y yo… bueno… por lo menos yo se que no estoy completamente sola. Estefania y Ricardo solo hacen el amor uno o dos veces al mes… pero yo PAGARIA para tener tal cantidad de sexo! Juan y yo solo lo hacemos dos veces al AÑO.»
Por poco y me muero en ese momento. pero Angie mantuvo la calma.
Elena dijo: «Que tan seguido lo hacen tu y Omar?»
«Dos veces al día… casi diario… solament
e si estoy indispuesta… pero lo hacemos mas los fines de semana.»
Escuche la risa de Elena, y luego ella dijo «Estas bromeando! No puedo siquiera imaginarme MASTURBARME tanto asi! Como lo haces… como te mantienes tan caliente?»
Angie dijo. «A Omar le encantan los juegos eróticos. A la mayoría de los hombres con los que he estado no les gusta, pero EL lo ha vuelto un arte. El me ha enseñado cosas que toda mujer debería experimentar. El me hace sentir taaaan bien. Como… la primera vez que estuvimos juntos, el me dio ese masaje de PIES que me mando hasta la LUNA.»
«Ooooo… Me encanta que me soben los PIES… pero Juan nunca los ha tocado. El piensa que todos los pies son feos.»
Hora de la fase 2. Angie lo esta haciendo PERFECTO. Casi no tuve que darle instrucciones.
«En SERIO?» Angie dijo sorprendida. «Esta loco? Yo leí un articulo en una revista que decía que 7 de 10 hombres eran atraídos por los pies femeninos! Lo lamento pero, pienso que tu tienes uno de los 3 que no. Que desperdicio!»
«Que quieres decir con desperdicio?» Elena pregunto.
Escuche un movimiento, y luego escuche la voz de Angie nuevamente «Escucha Elena, si tu esposo no piensa que TUS pies son preciosos. Esta estúpido. Muchísimos hombres se morirían por… bueno… por darte un masaje de pies todos los dias… como YO!» Angie dijo rápidamente, pero yo sabia por el tono de su voz que se estaba comenzando a excitar.
Yo me moría por saber si Elena estaba descalza, entonces le pregunte a Angie, y escuche un gemido.
Angie dijo «Escucha, dame tu pie.» Escuche un pequeño gemido de Elena y dijo que ella debía estar descalza.
«No, no me quites mi tenis… no… Angie, no tienes que…»
Escuche al tenis de Elena caer al piso, y luego escuche un quejido de Elena pero de placer. Escuche la voz de Angie «Ahora, que tal se siente esto?»
«Mmmmmmmmmmmm, pero me puedo dejar mi calceta puesta» Escuche a Elena rogar.
Tuve que apresurarme porque las señoritas podrían perder el nervio si terminaban ahora. Le di a Angie algunas instrucciones rápidas, y le respondió a Elena «Oh, soy yo. Pero, estas calcetas se estan interponiendo en mi camino.»
«Ahhh! Mi calceta no!» Elena grito. Seguramente Angie ya le había quitado dicha calceta. Buena chica!
Luego Angie dijo con un hermoso tono de voz «No permitas que el recuerdo de tu esposo arruine esto. Ok?»
«Ok…» Escuche a Elena rendirse con un suspiro. «Es solo que tengo muchas cosquillas en mis PIES.»
«Deberas? Los mios también. Seré cuidadosa. Solo siéntate bien y relájate. Te encantara esto.» Angie dijo con la misma voz.
La conversación termino por varios minutos, mientras yo escuchaba a Elena gemir con placer. Yo no quería decir nada porque Elena sonaba tan erótica. Casi me vine, pero no quería arruinarlo, en caso de que esto se pusiera mejor. Después ella dijo suavemente «Esto es tan hermoso de ti. Crees que pudieras hacerle lo mismo a mi otro pie?»
Escuche a Angie decir «Claro» y al otro tenis de Elena caer al piso.
Luego Elena siguió gimiendo de gran placer de pies. Estaba pensando si Angie iba a perder los nervios y terminar después del masaje. Yo quería que fuera por todo, asi que decidi hacer unos trucos. En lugar de darle mas instrucciones y ponerla nerviosa. Decidi excitarla aun mas. Comience ha hablar acerca de los pies de Elena y cuan preciosos eran… y que tanto Angie le encantaría saborearlos, probarlos… que suaves… y cosquilludos… y curvos eran. No se que le estaba haciendo a Angie, pero me estaba pasando un gran rato.
Después de varios minutos, Elena dijo. «No puedo creer que tu recibas este tratamiento todos los dias! No es justo!»
«Quieres saber que mas te falta?»
«Claro, porque no. Ya estoy celosa… puedes continuar.»
Angie dijo «Ahora, yo se que tienes muchas cosquillas en los pies, pero tienes que confiar en mi… ok? Voy a correr mis dedos suavemente a traves de tus pies… y lentamente. Te hará cosquillas. pero confía en mi.. es GRANDIOSO. Solo confía y NO TE MUEVAS. Me lo prometes?»
«Ok» Elena respondió con un tono de voz un tanto asustadizo.
«Ahora recuerda, no te muevas. Esto es fabuloso.»
Durante los siguientes minutos, Escuche a Elena gemir y quejarse con placer y retorcerse. Todos los sonidos eran pe
queños, como tratando de no gritar.
La tensión causada por los dedos cosquilludos de Angie debía ser muy intensa ya que después escuche a Elena retorcerse mas fuerte y quejarse y gemir de placer. Siguieron los minutos, yo no podía creer que Elena no le rogaba a Angie detenerse. Ella había llegado mucho mas lejos de lo que Angie podía llegar, pero ella parecía estarlo disfrutando muchísimo. Le dije a Angie que se detuviera porque no sabia que estaba pasando con Elena.
«Es mejor que me detenga.» Escuche a Angie decir.
«Ah… Ah… gracias… Yo creí… que me ibas… a…matar.» Elena dijo.
«Oh perdoname, cosita linda. Es mejor si nunca lo hubiera hecho. Hubiera parado cuando tu me lo dijeras.» Angie dijo con una voz muy tierna.
«Yo…realmente…no quería…que te detuvieras. No puedo recordar…la ultima vez que…Juan…me hizo sentir de esta manera.» Escuche a Elena decir entre gemidos en el aire.
«Oh, dulzura, eso es Increíble!» Escuche un beso mientras Angie hablaba, pero yo no sabia en que parte de el cuerpo de Elena se lo había plantado.
Escuche otro beso y otro antes que Elena dijera «No…» Su voz estaba lejos del microfono, entonces ya sabia que Angie no estaba besando su cara. Otro y otro beso. «Angie, por favor, no…»
«No puedo creer lo que ese bastardo te ha hecho! Amor, tus pies son tan preciosos. No dejes que nadie te vuelva a decir algo!» Escuche el sonido de Angie besando los pies de Elena una y otra vez apasionadamente mientras Elena gemía y se retorcía apasionadamente. Angie dijo sensualmente «Tienes los dedos mas pequeños y hermosos! … mmmmmm… …si…Quiero comermelos todos… mmmmmmmmmmm!»
Era claro que Angie estaba finalmente chupando los dedos de Elena. A traves de los sonidos de Angie de apasionado chupar de dedos y de pies, podía escuchar a Elena casi llegando al climax. Ella se vino realmente despacio y suavemente, yo podía escucharlas desde mi casa sin la ayuda del micrófono. Después me di cuenta de que Angie había sobado el clitoris de Elena con su dedo gordo del pie y además hizo que se viniera mientras le chupaba los pies.
Mas tarde, mientras Angie se despedía, Elena le agradeció, y le dio un beso francés en la boca, y dijo «Mmmm. Mis pies saben delicioso!» Las dos se rieron, y luego Elena dijo «Mañana, quiero saber como saben los TUYOS.» Angie vino a casa y toda la noche hicimos el amor salvajemente. Ella estaba tan caliente y yo lo tenia tan parado que lastimaba. Algún día a lo mejor VERÉ los preciosos PIES de ELENA.