Los Ferrer...: Nicol desvirgada
Por fin, Nicol, consigue lo que tanto ansía... Con doble ración de polla
CAPÍTULO 9º
NICOL DESVIRGADA
El curso escolar ya ha comenzado para los estudiantes de la ESO y entre ellos, cómo no, se encuentran Lua Ferrer y su amiguita Nicol.
Las dos niñas se encuentran felices de volver a ver a sus viejos compañeros y amigos de clase, sin embargo, Nicol no se siente feliz, sobretodo después de que su mejor amiga Lua le contase que ella hacía tiempo que había perdido la virginidad, justo después de retozar juntas en el establo de Genaro, en el pueblo de sus padres.
Pero más se sorprendió Lua cuando Nicol le confesó lo que había pasado en su casa entre su hermano y su amiga.
Pero como es su mejor amiga y la quiere con locura, su calenturienta mente comienza a elucubrar un plan para lograr que Nicol logre su objetivo…: ¡Ser desvirgada por Rubén!
Y así, el primer fin de semana después de iniciarse el curso, por fin Lua lo tiene todo previsto.
Ha aprovechado que sus padres han dejado el chalet para llamar a Nicol e invitarla a darse un chapuzón en la piscina. Y lo que es mejor, su hermano Rubén también se encuentra en casa.
Sólo queda esperar a que Nicol ponga en marcha sus técnicas de seducción, o lo que es lo mismo, sus dotes de calientapollas consumada.
Todo está preparado.
Su hermano acaba de bajar a la piscina, encontrándose con Nicol bañándose en el agua.
-¡Hola, Rubén! –Saluda la lasciva chiquilla sacando una mano del agua-. ¿Te vas a bañar?
Sin embargo, el hijo mayor de los Ferrer no responde en seguida, en lugar de eso saca su móvil y marca un número.
Luego se acerca al borde de la balsa y le dedica un guiño a la amiguita de su hermana.
-He invitado a un amigo a que venga. ¿Te importa?
Por un momento, Nicol queda pensativa, mas luego lanza una divertida risita y niega con la cabeza al tiempo que responde en un tono de lo más sugerente y sensual…
-Dos mejor que uno… ¿Verdad?
Poco después, Rubén sale a recibir a su invitado, y regresa a la piscina, seguido de un joven alto y espigado que saluda con una mano a la jovencita que, cansada de nadar al parecer, ha salido del agua y se ha echado en una de las tumbonas.
-Nicol, este es mi amigo Julián.
-Encantada –la chiquilla, muy cortés, da un beso en la mejilla del recién llegado.
-Le llamamos “Trabuco” –añade entonces Rubén con una extraña sonrisa en los labios-. Pronto sabrás por qué.
El llamado Julián también sonríe, mientras se acaricia la entrepierna del pantalón, donde se adivina una herramienta de muy buen calibre.
-¿Así que tú eres la niña que quiere ser mujer? –Inquiere luego, al tiempo que una de sus manos comienza a acariciar uno de los hermosos pechos de Nicol.
-S-sí –replica la chiquilla con voz jadeante por la excitación.
-Y tengo entendido que te gustan las buenas pollas. Cuanto más grandes y gordas mejor.
-Mmm… Sí –el morbo de Nicol crece por momentos, imaginándose ya jodida por estos dos jóvenes y guapos sementales.
Mientras su amigo y la amiga de su hermana hablan, Rubén ha aprovechado para meterse en el agua y darse un chapuzón.
También él está excitando, y piensa en lo divertido y morboso que será desvirgar el coñito de la amiguita de su hermana pequeña y, ¿quién sabe? Quizás también les deje follar su culito.
Este último pensamiento hace que su gruesa polla se ponga dura de golpe y, ni corto ni perezoso, sale del agua acariciándose el tremendo paquete que abulta la entrepierna de su bañador.
-¿Estás lista para saber lo que son dos pollas de gran calibre? –Pregunta mientras se acerca a Nicol por detrás, agarrándole las tetas y estrujándolas con lujuria, logrando que la chiquilla lance un gemido de pura lascivia y un ahogado…
-Mmm… ¡Sííí! ¡Quiero vuestras gordas pollas en mi boquita y en mi coñito caliente!
Poco después, en el dormitorio de Rubén, y con ambos sementales ya completamente desnudos, con sus enormes vergas totalmente enhiestas y listas para hacer gozar a la caliente y lujuriosa chiquilla.
-¡Joooder! –Exclama Nicol mientras acaricia ambas trancas con sus manitas.
La que más llama su atención es la polla de Julián, una tremenda minga de casi veinticuatro centímetros de longitud y tremendamente gruesa, aunque sin llegar al grosos de la de Rubén, un poquito torcida hacia la izquierda y surcada de hinchada venas, que parecen palpitar contra la palma derecha de Nicol.
-¿Te gustan nuestra pollas, putita? –Inquiere “Trabuco” mientras acaricia los rubios cabellos de la niña, antes de acercar su pollón a los labios de Nicol y obligarla a abrir la boca para meterle su pollón.
-Mmm… ¡SÍÍÍ, JODER, SÍÍÍ! –Gime Nicol mientras se va turnando ambos vergones para metérselas en la boca y lamer y chupar como si de dos tremendos caramelos de carne se tratase.
-¡Joder, macho! –Exclama Julián visiblemente complacido antes las artes mamatorias de la jovencita-. ¿De dónde coño has sacado a esta pequeña mamapollas?
-Ya ves –Rubén guiña un ojo a su amigo-. Te dije que te iba a gustar.
Seguidamente, Nicol se tumba sobre la cama de Rubén, y abriéndose el coñito con sus deditos gime con voz lasciva y lujuriosa.
-Venga, Rubén… ¡Fóllame con tu gorda polla! ¡Rómpeme el chichi con tu pollón!
El hijo mayor de los Ferrer no se hace repetir la orden, y cogiéndose la gorda tranca de carne con la mano derecha se acerca a la cama donde la espera la caliente amiguita de su hermana pequeña.
Tal y como ambos esperaban, penetrar a la chiquilla resulta sumamente gratificante para él y sumamente doloroso y placentero para ella, que nota como gruesos lagrimones se escapan de sus ojos mientras ahoga un grito mezcla de gozo y sufrimiento.
-¡DIOOOSSS, CABRÓÓÓN! –Grita finalmente Nicol sin poder aguantar más, mientras se aferra a los fuertes brazos de Rubén-. ¡ME VAS A MATAR DE GUSTOOO!
Mientras, “Trabuco” ha aprovechado para acercarse a la chiquilla y pasarle su enorme pollaza por las tremendas tetas, mientras pellizca sus pequeños y duros pezones.
Luego, acerca su verga a la boquita de la niña y le da unos golpecitos en los labios mientras le sonríe desde las alturas.
-Vamos, preciosa, cómeme la polla, sé que te gusta.
Nicol no se hace repetir la orden, y abre su boquita para tragar el hinchado capullo de Julián, que gime complacido.
Luego es Rubén quien sonríe de forma extraña mientras saca su gruesa tranca del recién estrenado chochito de la amiguita de Lua.
-¿A qué viene esa sonrisita? –Inquiere la niña con aire inocente antes de volver a meterse ambos pollones en la boca.
-Sí. ¿A qué viene esa sonrisa? –Pregunta también Julián mientras acaricia una de las tremendas domingas de la lujuriosa chiquilla.
-Pues que me encantan los culitos, y desde que me follé a mi vecina, no he tenido la oportunidad de desvirgar uno.
-¿¡Q-quieres meterme esa cosa por el culo!? –La expresión de Nicol cambia, al momento, del interés y la lujuria al más completo espanto-. ¡De eso ni hablar!
-Vamos, niñita –Rubén se agacha y comienza a lubricar con su lengua el estrecho orto de la jovencita-. Verás como te encanta.
-Mmm… No sé –muy a su pesar, Nicol comienza a sentirse atraída por la idea y, antes de que se dé cuenta, ya tiene el gordo glande de Rubén en la entrada de su virginal culito, empujando por meterse dentro.
El grito de dolor que lanza la chiquilla resuena en toda la casa.
Luego, sin embargo, se deshace en gemidos y jadeos de puro y lujurioso placer mientras es penetrada doblemente por los dos jóvenes sementales.
-¡SÍÍÍ! ¡FOLLARME BIEN, CABRONES! –Grita Nicol sintiendo ambos pollones dentro de su delicado y frágil cuerpecito-. ¡QUIERO VUESTRA LECHE EN MIS TETAS! –Exclama entonces arrodillándose en el suelo mientras sus dos amantes se masturban, dispuestos a soltar toda su carga de semen sobre el desnudo cuerpo de la joven y caliente niñita.
-¡TOMA LECHE, PUTA! –El primero en correrse es “Trabuco”, soltando sobre Nicol una tremenda cantidad de esperma espeso y caliente.
Luego, y como es de esperar, le toca el turno a Rubén, que no se conforma con la idea de eyacular sobre las tetas de la chiquilla y la obliga a abrir la boca y a tragarse su leche, cosa que Nicol hace con apreciable deleite.
Una vez la sesión amatoria ha termina y los tres participantes se han vestido, la chiquilla besa a ambos jóvenes en las mejillas.
Es un beso casto e inocente, que no hace sospechar la puta que se esconde dentro de la pequeña y bonita Nicol.