Los Deberes de Biología (fanfic)

No todo es lo que parece, ¿O tal vez sí? Vamos a descubrirlo aqui :3 (UlrichxOdd)

Volví a mi habitación frotándome la nuca a la vez que bostezaba, entré y me encontré a Ulrich dormido con la lámpara de su cómoda aun encendida, me siento sobre la mía y le observo por un segundo, no puedo evitar fijarme en que tiene un bulto a la altura de la cintura tapado por la sábana, se ve que está teniendo sueños entretenidos...

Froto mi nuca bostezando y me tumbo mirando al techo, creo que aun no hice los deberes de biología, saco los libros de la mochila, en efecto, sin hacer.

Cojo un par de bolis y al girarme hacia la mochila mi vista se va sola hacia su bulto, creo que ha crecido más... Muerdo la punta del útil y trago saliva intentando quitarme eso de la mente... Que le jodan.

Me levanto de la silla y vuelvo a la cama, antes apropiándome de un rollo de papel, para bajar mi pantalón de pijama acompañado de mi ropa interior, apoyándome contra la pared y clavando la vista en el movimiento de la silueta escondida por las sábanas blancas, preparado para comenzar a acariciar el tronco de mi miembro tras empapar la palma de mi mano en saliva. Al principio lentamente fingiendo que mis roces son los suyos de arriba a abajo para continuar subiendo la velocidad mientras un par de gemidos se escapan de mi garganta, incitando al casi despertar de mi compañero, obligándome a taparme lo más rápido que puedo cuando siento como comienza a levantarse.

-Ey Odd, ¿qué haces a estas horas?-se sienta sobre la cama, por suerte me ha dado tiempo a hacerme el dormido-no, chaval, tú no me engañas, no te voy a regañar por dejar los deberes para última hora-siento como se levanta y se mueve hasta el escritorio, rápidamente me levanto y freno ante él, no puede ver lo que estaba leyendo...

-Nada, tranquilo, ya lo guardo, me entró el sueño y lo dejé a medias-me intento excusar guardando las cosas a carreras.

-Ey Odd, ¿desde cuándo duermes sin pantalones?-pregunta volviéndose a su cama para cambiarse al pijama.

-¿Qué?-recuerdo mi jugarreta de antes y me giro hacia él, pillándole mientras se quita la camiseta, aparto la mirada de su figura y me voy hasta mi cama para comenzar a cambiarme tambien-me quedé dormido mientras me cambiaba...

Mis palabras terminan en un hilo de voz al sentir su tacto sobre mi espalda abrazándome con una mano y recorriendo mi torso con la otra, bajando peligrosamente hasta la zona abdominal.

-Llevo despierto desde que entraste-me susurra al oído apoderándose de mi miembro.

Un escalofrío recorre mi espalda obligándome a apartarme.

-No juegues a estas cosas Ulrich, ya somos mayorcitos-suspiro sentándome sobre la cama para poner las perneras de mi pijama sin mirarle.

-¿Jugar a qué?-pregunta con tono burlón posando sus rodillas en el suelo, frente a mí, frenando mi intento de vestimenta.

-En serio, a dormir ya-trago saliva cuando pasa una de sus manos por mis muslos, bajando de nuevo los pantalones mientras me mira a los ojos sonriente.

-Venga, después de esto te dejo dormir todo lo que quieras-insiste mi atacante apoderándose de nuevo con una de sus manos de mi pene.

-Te he di...dicho que no... no hace falta...-aparto la vista y comienzo a notar el rubor en mis mejillas.

-No me importa lo que digas-me saca la lengua acercando su boca a mi aparato para comenzar a lamerlo por el glande lentamente.

Comienzan a brotar unos pequeños gemidos por mi garganta y no puedo evitar apoderarme de su cabello cuando la introduce entera en su boca, comenzando un pequeño mete saca que pretende dejarme con ganas de que coja intensidad, me obliga a recitar su nombre en alto sin gritar, no queremos despertar a los demás dormitorios, algo complicado contando con el nuevo cambio de posición.

-Colócate en cuatro, quiero entrar ya-susurra mi compañero levantándose antes de que logre correrme.

Como un perrito faldero me coloco en posición y siento como comienza a entrar dentro, convirtiéndonos en uno...

Sin poder evitarlo caigo hacia delante tras un par de embestidas que me hacen gemir y obligan a que me apodere de mi almohada para sofocar los gritos que se escapan de mi garganta, es demasiado rudo... Voy a perder el sentido como siga así...

-Ul...Ulrich...-susurro cuando me obliga a nombrarlo entre suspiros y mordiscos.

-Así me gusta-se echa hacia delante para mordisquear mi columna vertebral con suavidad mientras aumenta el ritmo de sus embestidas contra mi cadera, necesito más, mucho más.

Cuando siento como mi interior es regado por un líquido caliente caigo a la cama destrozado, y antes de que pueda correrme baja rápidamente hasta mi pene para darle un último lengüetazo que me hace orgasmar de forma bestial inundando la boca de mi compañero y haciéndome caer sobre él.

-Ul...-intento nombrarle.

-No te creas que esto acaba aquí-suspira sonriéndome mientras limpia los restos de mi sustancia con su lengua para sentarse frente a mí y mover su mano sobre su propio miembro durante unos segundos para volverlo a erectar, no se si es cosa mía, pero parece más grande que antes...

-Estoy reventado...-me quejo cuando mueve una de mis manos hacia su pene, aun empapado por los fluídos.

-Quiero continuar-me ayuda a colocar mi cabeza sobre su miembro mientras acaricia lentamente mi cabello.

Me quedo unos segundos pensativo, a la mierda, esto luce demasiado apetecible...

Me lo llevo a la boca y comienzo a limpiar con la lengua sus restos mientras sigue creciendo en mis manos, le miro a la cara, se nota que le está gustando.

-Eres un pervertido-cierra los ojos y aguanta un rato en esa posición, pruebo a metérmela entera en la boca, no entra.

Doy un par de mamadas superficiales pero él quiere más, así que agarra mi cabeza y la empuja con fuerza inundando mi garganta por gran parte de su glande, casi ahogándome, pero es tan delicioso que intento continuar comiendo, llegando cada vez más profundo y sintiendo como empieza a mover su cadera contra mi boca dándome pequeñas sacudidas, hasta que se corre y siento todo su líquido, calienten y espeso, atravesando mi garganta, incluso desbordándose entre mis pequeños labios.

-Odd, quiero hacerlo otra vez-tiene ya su miembro completamente rojo.

-No creo que sea buena idea, déjalo descansar- niego tumbandome sobre su pecho.

-Vamos... Si quieres mañana te doy los deberes de biología. -Hm... vale.. Pero se dulce esta vez-termino cediendo, esos ejercicios son para nota.

Me besa con suavidad y empieza a frotar mi pene de nuevo, está muy loco...

Lo hacemos un par de veces más hasta que termina de romperme con sus bestiales embestidas y rompo mi almohada, por fin consigo conciliar el sueño entre sus brazos...