Los celos de mi tia
Al mudarme de mi apartamento hacia el de mi tia, esta se pone celosa, por mi relaciones con mis amigas, lo que hace que se ponga mas caliente, explotanto su sexualidad, y aprovechando para coger lo mas rico que se pueda.
Cuando se dio la relación con mi tía, después de algunos meses de estar continuamente cogiendo, ella me sugerio que alquilara mi apartamento, y que me trasladara a vivir con ella, conversamos sobre los inconvenientes de la propuesta, dejando las cosas tal y como estaban, a ver que sucedía con el tiempo Recientemente una de sus amigas, que residía en el exterior, decidió volver al país, por lo cual, me sugerio nuevamente que me mudara a su casa, y le alquilara mi apartamento. Nuevamente le señale el riesgo que alguien de la familia se enterara de nuestra relación, y además de que como ella sabia, yo cogía con alguna que otra compañera de la universidad, cosa le agradecía que hasta ese momento ella, no hubiese hecho problema alguno. Ella me señalo que mi vida podía seguir siendo normal y después de tanta existencia acepte, y me mude a vivir con ella, y alquile mi apartamento a su amiga.
Las cosas caminaban de lo mejor, ella y yo cogíamos con tranquilidad, en casa sin estar saliendo a escondidas y sobre todos, todos los parientes venían la actitud de ella, como que trataba de ayudarme, y ala vez veían con buenos ojos, que ella no estuviera sola, así que estabamos en el paraíso, hasta que a ella, le empezó a incomodar mis relaciones con mis relaciones casuales con amigas de la universidad. Conversamos y conversamos, alejándose un poco, cosa que yo sabia que no duraría mucho, ya que ella le encanta el sexo, sobre todo ahora, que después de vivir recatada y viviendo del que tiran, le había dado rienda sueltas a sus intentos, cosa que yo decidí aprovechar y hacerla reventar,
Todo sucedió porque descubrió que me acostaba con una compañera de la universidad (Teresa). Desde el principio le afectó bastante, pues mientras que no vivíamos juntos, a veces que lo sabia, no se sentía engañada. En mas de una ocasión la encontré llorando, pro sabia que no podía dar paso atrás, porque eso nos podría afectar en el futuro así que llegue a la conclusión de que no hay mal que por bien no venga y decidí sacar partido al estado de celos en que se encontraba mi tía.
Su costumbre era llegar del trabajo, darse una ducha y recostarse unos 15 minutos antes de bajar a cenar, así que me dispuse a producirle un tormento diario.
Llego cansada, tirando el bolso sobre la mesa junto a las llaves; con la mente agotada se dirigió al baño buscando refrescarse un poco. Pero al abrir la puerta me consigue todo desnudo e imponente saliendo de la ducha, con la toalla secando su rostro y dejándome a la vista el pene parado entre las piernas. Solo pudo ahogar un grito y cerrar la puerta pidiendo disculpas, pero ese instante era bastante para perturbarla toda.
La seguí, discretamente, cuando salió del baño, se dirigió a su cuarto temblando un poco por la impresión del ver mi verga erguida y luego por lo que vi, pude entender que el arranque de celos que padecía la tenia arrecha permanentemente y en un estado sexual de erupción total, ocasionándome también una sensación de querer cogérmela en esa condición. Su mano instintivamente fue hasta el pubis, necesitaba acariciarse y bajar esa calentura imprevista, las ganas tanto tiempo acumuladas desde la ultima ves que cogimos, ya no era uno, sino dos y hasta tres dedos que invadían su orificio sin darle descanso tampoco al clítoris...AHHHH.. siii. .AHHhg!!...UHMMMMMMMM... empezó a correrse con descargas fuertes de electricidad... otra vez... AYYYY!! Sii.. SII..SIIIII! Descanso sus manos y las llevo a su pecho. Se acaricio suavemente mientras busco recuperar mi ritmo de respiración normal. Quedo agotada y se relajo tanto que quedo dormida. Despierto luego a la media horas y se doy cuenta de su estado impropio a la vista de cualquiera, con la falta subida y sin ropa interior y los pechos fuera del sujetador. Se paro y se dirijo a la puerta de la habitación porque vio que no esta totalmente cerrada. La cierro entonces y busco cambiarse de ropa y reordenar sus pensamientos. en realidad le preocupaba que yo la hubiera visto y que me aprovechara de su sensibilidad cada vez que viera mi rabo.
Al día siguiente, tras un sueño agitado pero como si nada, nos vemos a la hora del desayuno. Nos damos un beso y le sirvo su café un cambio noto, como una extraña sonrisa Le pregunto que tal su noche y me contesta que bien, Me pregunta por la mía y volteo a verle: Mi noche? En casa, descansando. Me le quedo mirando y baja la vista a mi taza, pues los colores se me suben al rostro.
Nos despedimos y nos dirigimos ella al trabajo y yo a la Universidad. Al llegar la noche llego, primero que ella, le escribo una nota, diciéndole que me recosté un rato, buscaba motivar su curiosidad y que subiera a mi cuarto a verme, la siento llegar, sientos sus pasos diriendose a mi cuarto, por lo que me doy cuenta que consgui mi proposito, la habitacion esta algo calurosa, asi que me consigue sin arroparse y en interiores. La veo observarme el pecho sudoroso, duermo con unos boxers cortos y holgados, con el proposito de dejar sobresalir una pierna parte de la cabeza de mi pene. Su mano no se resiste y acaricia muy sutilmente el contorno de mi verga, con tal caricia empieza a sobresalir un poco más. Se sienta en el piso muy cerca de ella (mi verga) y vuelve a tocarlo, con un poco más de presión hasta que sobre su interior vuelve a recorrer con una suave paja toda mi herramienta. Es gorda, bastante gorda... Viendo que sigo dormido, pero algo más agitado, se acerca hasta mi verga y exhala mi aliento. Percibo en sus dedos cierta humedad viscosa que brota de su ojete. ahhhhhj, lo reparte un poco por la cabezota de mi verga y prueba un poco llevando los dedos a sus labios.... riqu¡simo! Siempre viendome al rostro, pendiente de cualquier cambio que me despierte vuelve a mi paja lenta y torturadora. Su otra mano hace mucho rato que esta acariciedose por encima de su hilo. Estira la cuerda para que entre en sus encharcados labios y frota con una cadencia profunda y continua. Mi verga a crecido mucho y tensa la tela de su interior con el trozo que queda oculto. Se limita entonces a frotar solo el pedazo largo que ha salido y el glande. Esta muy caliente y como un llego ardiente me va abrazando desde mis dedos hasta el centro de mi entrepierna. No se resiste y acerca sus labios arropan la cabeza de mi verga por completo... le cuesta por la posición y el tamaño, su movimiento se acelera... vuelve la vista y nota mis ojos fuertemente cerrados. Vuelve nuevamente a mi verga, y no bastandole besarla, uso su lengua para jugar desde dentro con su glande le cuesta por no tener mucho espacio, pero es tan delicioso el calor y lo liso de su piel que le da algo de succion... no puedo evitarlo.
Fue el detonador de sus sensaciones porque el tronco empieza a palpitar con fuerzas.. su tamaño aumenta más de lo que me podia ya imaginar y empieza a escupir fuertes chorros de leche espesa.. golpean su garganta, y en un instinto de no toser ni hacer ningun ruido todo viene a parar a sus ojos, nariz, mejillas.. No quiere que nada se pierda y pone tambien sus manos a recibirlo. Finalmente empieza a decrecer ese hermoso miembro y limpio lo que puedo con sus dedos y labios... Su corrida tambien fue impresionante, tanto que se tiro un rato en el piso para relajarse mientras iba comiendo todo los restos de semen que tomaba de su cara y manos. Lo terrible es el retorno de la consciencia y de darme cuenta donde estaba y lo que habia hecho... salio rapidamente de la habitacion y entro en la suya cerrando con seguro.
Me levanto de la cama, ya se habian cumplidos dos los pasos que habia diseñado de mi estrategia, solo faltaba una, y de darse, sabia que estaria cogiendo nuevamente con mi tia.
Al dia siguiente, le converse a mi tia, que Teresa iria a visitarme, por lo cual, en esta ocasión, me preocupe por llegar despues que ella. Me serciore que estuviera en casa, recostada, llegamos Teresa y yo, y nos acomodamos en el sofa, lo movi un poco, para observar cuando mi tia, saliera de su cuarto, producto del ruido que hariamos Teresa y yo cuando estuvieramos cogiendo.
Efectivamente, siento cuando desde su habitacion, pasos sigilos salen y se detienen en la escalera, estamos en un lugar, donde ella nos puede observar perlados de sudor sintiendo todo lo que desencadena el acto sexual. Teresa esta montada frente a mi cabalgandolo en el sofa . Sus labios brillante formando una O en un estado de ahogamiento pleno, entre mezcla de dolor y placer. Yo, por mi parte ayudo con mis manos en el acoplamiento al sostenerla por la pequeña cintura. Trato de hundirle todo el tronco pero es realmente imposible. Sabia que mi tia se perturbaria, ver mi verga, ya no en reposo, sino en todo su explendor brillante por los jugos y atacando con furia a ese pobre colito, que no podia tragarselo todo, Teresa gemia y gritaba que no se lo metiera todo,, todo no por favor...! Eso sabia yo, que debia tener a mi tia , con su vagina dandole punzadas en su entrepierna, no tuve que esperar mucho, para verla sentar, para no perder el equilibrio, sentarse en los peldaños, lejos de nuestra vista. No podia retirarse. La suave curva de la espalda delicada Teresa era recorrida cada tanto mis manos. Estabamos parcialmente vestidos, pero nuestras ropas estaban todas mojadas y el calor en la habitaci¢n se hacia presente. Las manos de mi tia se amasan fuertemente de las barras de la escalera y cada espasmo de su coño le hacia apretar con fuerza cada barra, cual si de dos vergas se la tratasen. Cuando sus ojos nos observan, mis manos acarician al orificio del culo de Teresa, y uno de mis dedos de forma sutil empieza a rozarlo al ritmo de sus contracciones. Humedece el dedo con los flujos que brotan de su vagina y vuelvo a insistir, lentamente hasta que consigue penetrarla con el dedo medio. Teresa arquea toda su columna hacia atrás como si hubiese sido apuñalada, pero luego con sus mejillas mas coloridas se regresa a besarme. Insisto con el dedo y la doble penetraci¢n que trae a Teresa enfebrecida. Miro hacia la escalera y veo a mi tia, humedeciendo tambien sus dedo con sus propios flujos y penetrando su culo. Ufff! La sensacion es infinita! Es una mezcla de dolor y placer adictiva. Ahora son dos los dedos los dedos con que penetro a Teresa, mi tia nos imita; nuestra respiraci¢n se hace cada vez mas irregular y el corazón se me agita de manera mas brusca cada vez. Teresa se saca entonces todo el vergon de su entrada y busca acomodarlo en el ano. Entonces se escucho un corto y apagado grito de Teresa cuando logra introducir el glande. En ese momento sucede su primer orgasmo, mi tia insiste con sus dos dedos en el ano, pasa a con tres dedos....Ihhhhg, se sacudo toda y no se da cuenta que penetro a Teresa. Ella se disculpa por no lograr soportar mi herramienta dentro de su ano, la consuelo y vuevo a la penetracion vaginal. Mi tia , se coloca en una nueva zona visual, para acomodarse a nuestra vueva postura.
Teresa, recuesta su estomago en uno de los laterales del sofa y abrazando un cojin. Sus nalgas resplandecen suaves y hermosamente curveadas, incluso arqueando un poco la cintura para darleme una mejor vision. Disfruto de la vista que se me ofrece de ese culito tentador, las dos nalgas prietas y entonces arremete completamente por la vagina: una mitad primero para que se acostumbre, y luego un mete y saca cada vez más acelerado y profundo, tomando posesion deTeresa. Se nota que ella lo disfruta al máximo no solo por la sonrisa que expresa sino por lo brillosa y mojada que entra y sale la verga en su concha. Los sonidos de la copula tienen loca a mi tia, quien ahora son sus dos manos las que la van penetrando al mismo ritmo que Teresa y yo.
Teresa se correo, y observo que mi tia, lo hace al mismo como locas, Teresa soltando una serie de calladas incoherencias y mi tia reprimiendo sus gemidos en lo posible. El placer la ciega, y me ve eyacular, descargando toda mi leche en la espalda y nalgas de Teresa, dandole golpes con ese pedazo de verga en esas duras nalgas y volviandola a penetrar para hacerla venirse nuevamente mientras, a mi lentamente se le va relajando toda la sangre acumulada en el tronco.
Teresa y yo quedamos agotados en el sofa, mientras, mi tia va subiendo a gatas hasta su pieza y cerrando la puerta cae agotada en su cama.
Se habian cumplido los tres pasos que habia programado para estar nuevamente cogiendome a mi tia, pero no contaba con que ella tambien sabia hacer sus jugadas, las cuales les contare la proxima oportunidad.