Los celos de mi hijo.
Deseo a mi hijo y con él he tenido los mejores encuentros sexuales de mi vida.
Me había mudado con mi hijo de la ciudad, nos instalamos en una casa en el centro, mi hijo tiene 19 años, mide 1,85 pesa 90kg, tiene los color miel claro, su pelo es negro y lo tiene a lo afro muy corto, su piel es negra y en el último año su aspecto se ha modificado gracias al basket ha ganado en musculatura.
Yo tengo 42 años, mido 1,68, peso 58 kg soy de complexión delgada, tengo una melena por los hombros castaña, mi piel es blanca (quiero aclara y para que no halla confusión que mi marido era negro) y tengo los ojos color miel como mi hijo.
Llevábamos 4 meses en la ciudad. Era viernes, mi hijo se había ido con sus amigos y vendría al día siguiente así que decidí subir a Roberto a casa mi amigo con derecho a roce por así llamarlo.
Estábamos en el salón, tomando una copa de vino y las cosas empezaron a calentarse, Roberto puso su mano en mi muslo e iba subiendo por mi pierna mientras me besaba, desató mi vestido que estaba atado a mi cuello dejando a relucir mi sujetador negro, mis manos se perdían en su camisa y desabrochaban los botones. Sin esperarlo mi hijo le agarró por detrás de mala manera, propinandole dos golpes a Roberto. Lo echo de casa y doy un portazo.
Yo me levante enseguida y abroche mi vestido. Mi hijo muy indignado fue a su habitación esperaba otro portazo pero no fue así, fui a la puerta de su habitación. Estaba recogiendo su ropa y metiendola en la maleta.
¿Qué estas haciendo?
Me voy mai… Así podrás subir a quien quieras y hacer lo que quieras.
Creí que no estabas.
Dejame en paz me vuelvo a mi piso, Olvidate de mi.
Eric, tu padre hace muchos años que no esta y soy una mujer. ¿No puedes entender eso?
¿Qué cojones me estas contando de papá? No es por eso, ni siquiera recuerdo su cara.
¿Entonces por qué este arrebato?
¡Joder no lo entenderás!
¿Qué no entenderé? Al menos si me lo dijeras sabría porque esa reacción.
Me da asco que te toque otro ¡Aquí estoy yo!
No daba crédito a lo que acababa de oír. Le mire perpleja y el continuo hablando.
¿No lo entiendes? No entiendo porque cualquier tío puede tocarte y yo no. Ninguno de los hombres con los que puedas estar te tratara como yo lo haría.
¡Soy tu madre!
Eso no es mi problema.
Se acercó y tomo mi cintura entre sus manos. Me besó con suavidad y empezó acariciar mi cadera, se pegó a mi y me abrazo, note el tórax de mi hijo pegado a mi, grande fuerte y muy duro. Pase mis brazos por encima de su nuca, entre susurros le dije: Cariño... Me abrazó con más fuerza y comenzó a besar mi cuello, sus manos recorrían mi cuerpo, llegó a mi culo que lo agarro con las dos y fue donde se entretuvo, sin parar de besar mi cuello. Fuimos al salón, empezó a quitarme el vestido, con suavidad lo desató de mi cuello, lo deslizó por mi cuerpo dejándolo caer al suelo, quede en ropa interior mostrando mi sujetador negro sin tirantes y un tanga de hilo en negro también.
- Cielo, ¡Soy tu madre!
Mi hijo parecía no oírme. Me besó en la boca y su lengua encontró la mía. Desabrocho mi sujetador dejando mi pecho a su disposición, mi pecho no esta caído porque en el año 2010 me reafirmaron los tejidos, empezó a besarlos dibujando círculos con su saliva alrededor de mi pezones los cogió entre sus dientes, provocandome mucho placer y consiguiendo que algún gemido que otro saliera de mi. Me echo sobre el sofá con delicadeza y cogió los hilos de mi tanga.
Si dices basta pararé. Sus manos fueron bajando mi tanga hasta dejarme completamente desnuda. Junte las piernas el besó mis rodillas y cogiendo cada una separo mis piernas, paso su lengua desde mi rodilla subiendo por mis muslos hasta llegar a mi ingle lo mismo hizo con la otra pierna sin tocar mi vagina.
Cielo por favor soy tu madre.
Hundió su lengua en mi vagina pasando por mi clítoris que a esas alturas estaba empapado. Sin pensarlo dos veces puse las manos en el estómago de mi hijo dejándole de pie sobre la alfombra desabroche su bragueta y baje un poco su boxer dejando a relucir su gran miembro de unos 26 o 28cm, ancho, se podían apreciar con gran facilidad sus venas. Metí su cabeza en mi polla mi lengua pasaba por ella y le gusta me metí hasta donde pude, me la saque y empecé a lamer su tronco saboreando el miembro erecto de mi hijo, arrodillada frente a él cogí su polla frote su cabeza por mis pezones y la pase entre mis tetas.
Acto seguido mi hijo me echo sobre la alfombra frente a la chimenea y paso cada una de mis piernas a cada lado de él, convirtiendose en un cinturón en su cintura, puso la punta de su polla en la entrada de mi rajita, impaciente esperaba que me penetrara con esa enorme polla, fue introduciendola suavemente pero con firmeza la humedad de mi coño era desbordante y así empezó a meterla y a sacarla aumentando el ritmo haciendo que gimiera, cuando esa sensación apoderó todo mi cuerpo había llegado al clímax, mis gemidos envolvían todo el salón, mis uñas desgarraban la piel de las costillas de mi hijo y mis fluidos manchaban la polla de mi hijo.
Ves mi amor como no te hace falta otro aquí estoy. Te quiero nena.
Si cielo, hazme tuya enterita amor. Aaaaaag. No puedo evitar ver a mi hijo como lo que es, me hace sentir como una hembra en celo que necesita de su néctar para calmar mi instinto, ese que no conocía y que él había despertado.
Me puse a cuatro patas para dejar mi coñito a su entera disposición, lo lamio absorbiendo fluidos míos, provocando que nacieran más, puso su cabeza en la entrada de mi coño y volvió a meterla con sus movimientos continuos sin para hizo que llegara al orgasmo en dos ocasiones más, después nos sentamos y cruzamos nuestras piernas uno con las del otro, siguió penetrandome con rapidez hasta que escuché a mi hijo :
Me corro...Aaaaaaag ...aaaaa
mmmmm... Mi amor yo también.
Notaba como el cuerpo de mi hijo se tensaba y unos instantes después descarga sus chorros de semen dentro de mi. Ambos quedamos exhaustos tendidos sobre la alfombra nos quedamos dormidos pero antes bese el pecho de mi hijo chupando sus pezones y tocando sus abdominales y sus enormes pectorales. Fue muy sencillo conciliar el sueño abrazada a él...
Espero que le halla gustado la historia comenten o critiquen acepto todo tipo de criticas, para mejorar.