Los buenos amigos de mi novio (Parte 3 de 3)
Llegaron Miguel y los demás a cobrar el trato que habíamos hecho...
Ya estaba por cumplirse la hora de llegada de Miguel y los demás. Revolví un buen rato mi armario buscando qué ropa ponerme, no sé para qué si apenas lleguen los chicos de seguro me dejarán desnuda en un par de segundos. Finalmente me decidí por mi tenida que más me acomoda, que es un short de jeans y para arriba algún top.
No es nada del otro mundo pero hace que me sienta cómoda y al menos, creo yo, los jeans cortos acentúan mi cola, por eso los uso la mayoría del tiempo.
Me apliqué un poco de perfume, ordené mi cama, mi habitación y fui a la cocina para comer algo. Busque en el refrigerador y no encontré mucho, así que opté por unas frutas. Cogí una manzana y un plátano. Partí la fruta roja en rebanadas, comí una. Luego quité la cáscara de la banana y me pasaron pensamientos morbosos por la forma alargada y curva de la fruta. Me llevé el plátano a la boca simulando un pene y lo introduje lo más profundo que pude. El sólo realizar esa acción me hizo temblar al pensar que en minutos tendría seis similares, incluso más gruesas y largas, todas dispuestas a clavarse en mi boca. El plátano se partió en la mitad y lo tuve que mascar y tragar. Me causó gracia.
En eso suena mi teléfono. Es Miguel.
-hola- contesto yo.
-hola amor, estamos abajo-
-OK suban, es el 402-
-nos vemos- dijo Miguel cortando la llamada.
Me puse muy nerviosa, el corazón me palpitaba como si hubiera corrido una maratón. Me miré en un reflejo de la ventana y ordené mi cabello. Me veía sexy y me gustaba. No sabía qué pretendía con eso, pero verme así me hacía sentir bien. Siempre que me acuesto con alguien me arreglo y busco estar bonita para la otra persona. Creo que inconscientemente esta vez no fue la excepción y no es por nada pero en el reflejo de mi ventana me veía irresistible, como si mi cuerpo estuviera pidiendo a gritos ser manoseado y penetrado por seis grandes miembros.
Sonó el timbre de mi departamento. Abrí la puerta y me encontré con Miguel y compañía.
-usted hizo un pedido de seis hombres?- bromeó miguel y todos reímos.
-cállate estúpido- le respondí dejándolo pasar y recibiendo un beso de cada uno en la mejilla. El último fue de Daniel, el tipo que conocí en la disco y culpable de todo esto que estaba pasando. Tan idiota que fui de haber ido a su casa a tener sexo, y bueno, no sabía que todo esto iba a pasar a consecuencia de ese desliz. Aunque puedo decir que no me arrepiento porque la verdad es que estuvo bastante rico.
Algunos se sentaron en el sillón del living y otros quedaron de pie. Miguel se apoyaba contra una pared. Todos me recorrían de pies a cabeza con sus miradas. Sentía sus ganas de abalanzarse sobre mí y hacerme su esclava sexual dispuesta a satisfacer todos sus deseos más pervertidos.
-trajimos unas cervezas y algo para picar- dijo Miguel señalando unas bolsas de supermercado que dejaron sobre la mesa. Fui a buscarlas, con todos los ojos de los presentes puestos en mi cuerpo. Cada parte de mí, cada movimiento que hacía era observado por ellos.
Saco latas de cerveza y empiezo a repartirlas. Cojo el paquete de papas fritas y lo deposito en una fuente, lo ofrezco a todos.
-voy a poner música- dijo Miguel acercándose a unos parlantes para conectar su celular. Empezó a sonar reggaeton. Todos rieron. Había un ambiente de nerviosismo y ansiedad en todos los presentes, incluyéndome a mí.
-¿por qué no nos bailas a cada uno?- dijo Miguel.
-estás loco-
-sí, que baile, lo hace muy bien- dijo Daniel.
-ves? te delataron- sonrió Miguel.
Miré a Daniel y éste me sonrió coquetamente. Se me vino la imagen de esa discotheque, de él bailando a mi espalda y yo meneándome de manera desenfrenada y desinhibida. Sentí que me sonrojaba. Miguel le subió el volumen a la música y empezaron a alentarme. Entre risas y silbidos me animé a bailar pero aún con timidez. En eso Miguel se me acerca y me toma de la cintura para empezar a bailar muy cerca mío. Yo me voltee para bailarle de espaldas y él se aprovechó de eso para coger mis caderas y empujarla hacia su entrepierna frotándose contra mi cola con fuerza. Ese movimiento inesperado me descolocó absolutamente. Luego de eso Miguel me giró para quedar frente a su cara. Me besó en la boca con tanta fuerza que me no pude resistir, sus dientes mordieron mi labio con violencia. Todos rieron. Me volteó para yo quedar mirando a los demás, que ya se empezaban a tocar la entrepierna sobre sus pantalones.
-ahora la rica ale nos va a bailar a cada uno como una verdadera puta. cierto amor?- dijo Miguel sujetando mi mandíbula y sacudiéndola. Todos empezaron a gritar como animales. el miedo entró en mí. Me di cuenta que definitivamente yo no iba a tener el control de nada y esto iba a ser peor de lo que esperaba.
-parte con Andrés- dijo Miguel señalando al tipo sentado a la orilla del sillón. Miré a Andrés quién se estaba tocando un notorio pene erecto bajo su ropa. Miguel me empujó para que me acercara a su amigo. Me puse cerca y le bailé lentamente.
-agárrala amigo, si esta puta es toda nuestra por hoy- dijo Miguel dándole confianza a su compañero, el cual no tardó en hacer caso. Me cogió de las nalgas con ambas manos y me arrojó sobre su miembro. Quedé sentada sobre él como si lo estuviera cabalgando. Me manoseó toda la cola, espalda y muslos mientras buscaba besar mi boca, lo cual traté de evitar hasta que Andrés sujetó mi cara con fuerza y me comió los labios y lengua. Luego volvió a sujetarme de las nalgas y me empujó contra su pene. a pesar de que estábamos vestidos lo sentí en mi entrepierna.
-ok, es el turno de Claudio- dijo Miguel- anda nena vamos.
Me levanté y fui donde Claudio. Lo primero que hizo él fue voltearme para que me sentara en su zona genital. Al sentarme sentí lo duro que también estaba su verga. Me tomó las caderas con tanta fuerza que se frotó sin problema su pene con mi cola. Luego, comenzó a besar y morder mi nuca y con una mano me cogió del pelo con rudeza. El tirón me dolió levemente. Andrés y Jaime, el chico que venía a continuación, me manoseaban los muslos.
-qué culo más rico- dijo Claudio y luego de eso me levanté para ir donde Jaime. Éste me sentó en uno de sus muslos. Con una mano recorría mi cintura y con la otra acariciaba mis piernas desde donde terminaba mi jeans hasta los tobillos. Su mano de pronto subió a mi entrepierna y empezó a simular que me masturbaba sobre mi ropa. presionó con tanta fuerza que casi podía sentir sus dedos dentro mío. Le quité la mano de ahí y Miguel dijo:
-hey! sin rehusarte amor- miré a jaime quien se sonreía perversamente. Volvió su mano a mi entrepierna y ahora lo hizo con más fuerza que antes. Ya mi vagina se empezaba a mojar, por más que yo no quisiera excitarme, pero no podía no sentir algo de placer con esos dedos jugueteando con mi coñito cubierto por mi tanga y mi short. Miguel dio la señal de que era el turno de Esteban.
Fui donde Esteban quien se levantó del sillón y me pidió que me sentara en su lugar. Hice caso y luego se acercó de pie frente a mí para tomar mi cabeza y empujarla contra su miembro erecto. Me refregó por el rostro su pene bajo el pantalón. Se sentía duro y largo como un bate.
-dale unos besos- dijo Esteban. Lo miré y luego empecé a besar su pantalón recorriendo la zona donde se marcaba su verga. Me sujetó bien fuerte del pelo e hizo un movimiento con sus caderas como si se estuviera follando mi boca. Luego, me dejó libre para que fuera el turno del último y único conocido por mi cuerpo: Daniel.
Cuando me acerqué, él también se levantó. Me pidió que me sentara pero dándole la espalda, con la cola levantada, con las rodillas apoyadas en el sillón y mis manos en el respaldo. No vi lo que él hacía, sólo sentí como tomó con firmeza mi culo y empezó a resfregarse su bulto entremedio de mis nalgas. Luego de pasarlo de arriba y abajo, golpeó su pene contra mí como si me follara. Lo hizo con mucha fuerza y repetidas veces.
-toma puta!- dijo, mientras todos los demás lo alentaban. Luego de terminar con su juego, Miguel me cogió de un brazo para levantarme y llevarme a su lado.
-bueno bella, llegó tu hora ¿algunas palabras antes de sucumbir ante estos 6 hombres sedientos de sexo?- me dijo él y quedé en silencio observando a todos, que no paraban de estar atentos a mí.
-nada...sólo no me hagan daño por favor...-dije con voz temblorosa.
-tranquila amor, te vamos a tratar bien...dentro de todo- me dijo Miguel y luego me besó en la boca metiendo su lengua hasta mi paladar.
-ok chicos, a desvestir a esta preciosura- ordenó él y todos se abalanzaron sobre mí.
Me quedé quieta y sentí las manos de los seis hombres manoséandome e intentando quitarme la ropa con torpeza. Mis nalgas, cintura y pechos fueron el blanco de todos esos dedos recorriendo, peñiscando y presionando mi carne. Era una sensación extraña pero excitante. Desde atrás me empezaron a quitar el top, así que levanté mis brazos para facilitarle la tarea, mientras de adelante buscaban desabrochar mis shorts. En dos segundos ya figuraba en ropa interior. Todos se detuvieron a mirarme. Vestía una tanga y sostén negros con encaje, muy sexys. Luego de observarme con perversión y frotarse sus penes sobre el pantalón, continuaron con su labor de dejarme en cueros. Me desabrocharon el sostén y bajaron mi tanga. Al quedar mi entrepierna expuesta a la mirada de los varones presentes, me sentí cohibida y mi primera reacción fue taparme. Jaime dirigió sus dedos hacia mi coñito semi depilado y le empujé la mano. Entonces Miguel que estaba atrás mío, me sujetó ambos brazos y los puso en mi espalda. Todos aprovecharon eso para empezar a manosear mis partes íntimas. Mientras Andrés me chupaba los pezones, Jaime comenzaba a jugar con mi clitoris y sus dedos. Esteban me besaba en la boca y Claudio y Miguel me agarraban el culo. Daniel estaba un poco más atrás de sus compañeros y se masturbaba mirando la escena. Desde mi lugar podía ver su enorme pene ya expuesto, ya que fue el primero en quitarse la ropa. Luego todos lo imitaron y se desnudaron delante mío. Cada uno tenía una verga enorme, unas mas gruesas, otras más largas, pero ninguno se quedaba atrás con sus dotes. Apenas les vi sus herramientas erectas cerré instintivamente mis piernas.
Miguel me tomó en brazos y me llevó al dormitorio, me arrojó sobre la cama y todos cayeron sobre mí. Una cantidad de manos se abalanzaron sobre mi cuerpo. Sentí muchísimos dedos explorando mi vagina, acariciando mis senos y mi piel en general. De pronto alguien me toma del pelo con fuerza, era Miguel que se había arrodillado a mi lado. Volteó mi cara y choqué de frente con su enorme palo. Era un pene grueso, venoso y algo curvo.
-abre la boca ale- me dijo sujetándose su verga con la otra mano. no hice caso y él me tiró del pelo hacia atrás con firmeza. abrí la boca de dolor y aprovechó esa mueca para insertar todo su pene entre mis labios. sujetando fuerte mi pelo empezó a zamarraear mi cabeza para que le hiciera una mamada. su pene rápidamente penetró hasta mi garganta en uno de sus tantos movimientos y me ahogué. cayeron dos lágrimas por mis mejillas.
-uffffff que rico aleee, cuántas veces te imaginé chupándomela así mmm- dijo Miguel extasiado mirando como me tragaba su pene. sus dedos se clavaban en mi cabeza y cada vez tiraba con más violencia. en eso sentí una boca comerse mi coño entero. era andrés que se chupeteaba mis jugos agarrándose de mis muslos. yo los cerraba pero él rápidamente volvía a abrir mis piernas para seguir chupando y jugando con su lengua en mi clitoris. me lo mordía y yo levantaba mis caderas para intentar evitar ese exceso de placer que ya me tenía toda mojada.
daniel tomó una de mis manos y la puso sobre su polla gigante. empezó a masturbarse con ella, yo lo ayudé menéandosela con fuerza. claudio me chupaba los pezones y los mordía sin cuidado. jaime y esteban acercaron sus penes erectos a mi cara, y empezaron a azotarme el rostro. miguel cedió mi boca y la tomó jaime, quien me clavó su pene sin piedad llegando de una hasta la garganta. empezó a moverse como si me estuviera follando. al sacármelo un montón de saliva cayó afuera. no tuve tiempo para respirar cuando ya esteban hacía lo mismo con su miembro y mi boca. así se fueron turnando y mientras esperaban me golpeaban la cara con sus penes.
miguel me tomó y me llevó al suelo. quedé arrodillada frente a los seis hombres, parecía tan indefensa en esa posición. todos me rodearon y dejaron caer sus penes sobre mi rostro, empecé a chuparlos uno por uno por iniciativa propa. me sujetaban del pelo y me tironeaban, me escupían. me violaban la boca sin piedad. cuando yo mostraba claras señales de ahogo no les importaba y seguían intentando llegar a mi garganta.
-chúpanos perra!- dijo miguel sujetándome la mandíbula con fuerza y acercando su pene. lo tomé con una mano y mientras lo masturbaba le di una mamada de esas ricas que yo sé hacer. en cada mano tenía una verga en todo momento y en mi boca siempre había una o a veces dos penes intentando entrar, cuando por momentos buscaban meter más de una a la fuerza. mis ojos lloraban, mi maquillaje se corría por completo. me quité el pene que tenía en la boca, ya ni sé de quien era qué cosa. entonces todos empezaron a azotarme la cara con sus vergas. era tan morboso ver como esos seis hombres me daban golpes en mi rostro con sus pollas, sentir que eso les excitaba y ver como yo era el centro de atencion me estimulaba y me hacia mojarme de sobremanera.
luego de eso, miguel me levantó y me recostó boca arriba al borde de la cama. me tomó de los muslos y puso mis piernas sobre sus hombros. agarró su pene y fue directo a mi vagina.
-hey ! ponte condón- le dije asustada al ver que iba a penetrarme.
-para que? si tomas pastillas, no te preocupes, nadie te va a contagiar nada-
-pero...-no alcancé a decir más cuando ya tenía su pene dentro mío. era tan grueso que me dolió un montón. grité de placer y sufrimiento, a pesar de que ya estaba tan lubricada y mojada. me agarró de las caderas y me la clavó aún más adentro. con fuerza empezó a embestirme sin piedad.
dos de los chicos fueron a pelearse mi boca y me la follaban por turnos. mientras los otros se masturbaban o usaban mis manos para estimular sus miembros. entre toda la acción me gustaba ver el rostro de placer de miguel, veía como gozaba entrando y saliendo de mi vagina, cada vez que me penetraba me miraba excitado. se veia tan satisfecho de lograr su fantasia, quizás de cuanto tiempo que miguel me queria tener asi, y solo en sus sueños mas humedos habia ocurrido
en un momento sacó su pene de dentro mio y dejó el puesto a otro. esteban rápidamente agarró su verga y la dirigió a mi orificio. me empezó a penetrar tan rapido y fuerte como pudo. con las embestidas de esteban apenas podia comerme los penes de los demás, que tuvieron que sujetarme del pelo para poder meterme sus miembros en la boca. los dedos de esteban se clavaban en mis caderas mientras intentaba llegar más hondo dentro mio, como si quisiera llegar a mis intestinos.
miguel le hizo una seña a esteban para que cediera el puesto, él era como el lider del grupo y daba ordenes. eso me excitaba en cierta forma, era el jefe y todos le haciamos caso. vino claudio, tomó mis piernas pero las dobló juntas hacia mi cuerpo, por lo mi coñito quedó apretado. en eso tomó su verga con su mano derecha y la llevó a mi entrepierna. entró de golpe, haciendome gemir con desesperación, alguien me calló poniendome su pene contra mi paladar. claudio entraba tan apretado dentro mio que me hacia doler. el placer en mi cuerpo era impresionante, nunca habia sentido tantos estimulos a la vez.
luego de claudio vino andres, que me puso de lado, follandome asi por un buen rato. lo hacia lento y luego rapido, y con una mano aprovechaba de rozar mi clitoris lo cual me hacia mojarme por montones. mi boca seguia ocupada a cada momento. despues fue el turno de jaime que me abrio de piernas y deslizó su verga dura sobre mi clitoris, lo frotó un buen rato excitandome.
-vamos jaime, métesela de una vez- le dijo miguel.
-déjalo- protesté yo, porque además me excitaba mucho el roce del pene en mi clitoris
-tú callate puta de mierda- respondió miguel cogiendome del pelo, tirando mi cabeza hacia su pene y clavandomelo dentro de mi boca.
-espera jaime, deja mover esta perra- agregó miguel, que sacó su pene de mi boca, me agarró de los brazos y me arrastró hacia el borde de la cama. mi cabeza quedó colgando hacia el suelo, entonces miguel acercó su pene a mis labios. yo abri la boca y él comenzó a follarse mi garganta sin ningun cuidado. yo me estaba ahogando, mentras senti como jaime me empezaba a penetrar. un grupo de manos atacaban mis pezones y los peñiscaban sin sutileza.
en un momento no di mas y trate de quitarme de encima a miguel, este se detuvo y sacó su pene de mi boca. logré respirar con desesperación.
-buen trabajo ale- me dijo para luego darme una cachetada en la cara. levante mi cabeza para ver que pasaba. jaime habia cedido el puesto a daniel, quien se acercaba a mi adolorida vagina.
-es el turno del campeón, sin él nada de esto seria posible- dijo miguel riéndose para luego agregar- adelante daniel, sirvete de nuevo a esta perrita alejandra.
daniel se acercó , me tomó de las caderas y me volteó. entendí de inmediato que me quería follar en cuatro.
-pero que buena elección!- dijo miguel.
-por supuesto, lo mejor de esta hermosura es este culo que tiene- dijo daniel, acariciando mis nalgas y comenzando a frotar su enorme pene contra mis labios vaginales. mis piernas temblaron y mis brazos igual, pero ya estaba lista para recibirlo dentro mio. todos los demas se acomodaron detras como si fueran a ver un espectaculo, los miré de reojo y veia como se deleitaban y se masturbaban mirando mi trasero inclinado, desnudo y sudado. daniel me tomo de las caderas y entró lentamente en mí. el placer fue inmediato, además de ser mi pose favorita daniel tenia un pene delicioso, muy grueso y largo. él empezó a entrar y salir de mi lentamente y yo estaba extasiada de inmediato, casi ya iba por mi primer orgasmo.
-esto es como ver una porno!- dijo miguel mientras se la jalaba mirando la escena.
daniel me tomó con mas fuerza y aumentó su velocidad. me dio unas fuertes nalgadas que me pusieron a mil, yo ayudaba a la acción meneando mis caderas, pero daniel me contenia y afirmaba con fuerza demostrandome que él mandaba y llevaba el ritmo. empezó a penetrar con más velocidad, luego me cogió de mi cabello jalando con fuerza, eso me hizo mojarme aun mas.
en eso miguel se pone frente a mi, tenia su pene erecto a mas no poder. me cogio de la quijada y me hizo mirarlo hacia arriba.
-te gusta perra?, te gusta como te folla daniel?-
-que crees tu pedazo de imbecil?- le dije, todos rieron.
-yo creo que si, putita. y esto te va a gustar mas- me tomó el rostro y dirigió su pene a mi boca, no tardó en penetrarla sin problemas. entonces tenia a daniel follandose mi vagina a todo dar y a miguel al mismo ritmo pero en mi boca. el morbo era enorme y yo estaba que me corria. la verdad me gustaba que miguel me tratara mal, me excitaba demasiado.
daniel abandonó mi orificio y luego vino otro, pero miguel lo detuvo, para tomarme de un brazo y levantarme, se acostó en la cama y me hizo montarlo. me subi sobre su pene y me lo meti de una a mi coño. comence a cabalgarlo con velocidad, él me sujetaba de mis caderas empujandome hacia abajo cuando yo me levantaba un poco.
-ven aca puta- me dijo tirandome contra él para besarnos, me mordio los labios y lengua y me besaba con demasiada excitacion.
-que alguien se lo meta en la boca- en seguida vino andres y jaime a poner sus pollas cerca de mi rostro, comencé a mamarlas con demasiado placer, seguian duras, venosas y gigantes. me encantaban. estaba chupando dos penes y otro me penetraba por abajo. era demasiado para mi, pero lo estaba disfrutando al maximo.
-bueno quien se anima por el culo de la ale?- dijo miguel y claudio le respondio que él se atrevia.
- no no no, por ahi no- aclaré de inmediato.
-pero por que no? - preguntó miguel.
-porque eso lo tengo guardado para mi novio, sera algo especial-
-tu novio no se merece nada ale-
-por que dices eso?-
-porfa que alguien le muestre el grupo de whatsapp que tenemos...- ordenó miguel. claudio fue a buscar su celular. lo encendió y abrió whatsapp, se acercó a mí para mostrarme unas fotos que había enviado mi novio joaquin. salía él teniendo sexo con una chica morena. yo no lo podia creer.
-y .. y eso es ahora?- pregunté desconcertada
-si, fijate en la hora- dijo miguel- por eso te dije que él no iba a estar hoy, porque nos contó que se iba a ir a follar a esa chica de su trabajo. joaquin te ha engañado con muchas chicas, alejandra. siempre nos envía fotos follándoselas, nosotros le celebramos porque es nuestro amigo pero nos parece mal que te haga esto, siendo que eres una preciosa chica.
-desde hace cuanto tiempo que me engaña?- pregunté
-uff, mucho tiempo no chicos?- dijo miguel, y todos respondieron que sí.
-hijo de puta, qué se cree, idiota asqueroso-
-por eso te dije que nos ibas a agradecer por hacer esto- agregó miguel.
-sí, tienes razón...-dije convencida- y sabes qué? si me quieren desvirgar el culo adelante-
-así se habla, claudio, tu eres el experto, manos a la obra- ordenó miguel.
mientras andres y jaime me daban sus penes para comer, yo meneaba mi cadera para clavarme la verga de miguel que estaba abajo mio y se entretenia chupando mis pezones. en eso siento como claudio roza mi pequeño agujero con su enorme polla. fue entrando de a poco pero el dolor fue inmediato, no pude ni gritar porque jaime se follaba mi boca con total descuido. rapidamente claudio ya estaba dentro mio.
-entró sin problemas- dijo él
-viste putita, estás hecha para el sexo anal- comentó miguel.
de pronto estaba siendo penetrada por todos lados, claudio empezó a moverse, miguel abajo mio, jaime y andres se turnaban en mi boca. y daniel y esteban hicieron que los masturbara con mis manos. no podia creer la escena que estaba protagonizando, era una real puta y me encantaba. estaba tan excitada que deseaba que no se acabara nunca. los dos penes entrando en mis entrañas me hacian mojar como nunca antes, era una sensacion tan rica y nueva para mi. lo estaba disfrutando al maximo, aunque tambien era doloroso pero no por eso menos placentero.
claudio se entusiasmó y me empezó a coger con más fuerza, me tiró del pelo y comenzó a quejarse hasta que eyaculó dentro de mi culo.
-oh perra, me hiciste acabar tan rapido- dijo.
sentí como su leche se desparramaba dentro mio, era delicioso.
-oh yo tambien voy a acabar- avisó miguel- chicos corramosnos en su cara- ordenó.
miguel sacó su pene de mi vagina y me quitó de encima de él, yo sola me puse de rodillas en el suelo y todos me rodearon masturbandose. golpeaban mi rostro con sus vergas aun duras y ganosas de explotar. comencé a chupar algunas y besarlas. en eso jaime acabó un gran chorro en mi cara, le siguió de inmediato andres. luego daniel y esteban tiraron su leche en mi rostro, tuve que cerrar mis ojos porque era demasiada cantidad. faltaba miguel que se masturbaba con fuerza para lograr llegar al orgasmo. yo esperaba con mi lengua afuera y mi boca abierta, en eso miguel se acerca, mete de golpe su polla en mi boca y eyacula todo lo que tenía dentro. mi boca se llenó de su semen atragantandome con su liquido y su pene.
-comelo perraaaaaaaaa!- grito miguel extasiado.
me tragué su semen para poder respirar. cada uno de los hombres en mi habitacion se sentó en mi cama o en el suelo, estaban todos agotadísimos, yo igual, mi cuerpo no daba más de tanto sexo.
-alejandra, eres increible- dijo miguel. yo lo miré y sonreí.
luego de un rato se vistieron y se fueron del departamento. ordené el lugar, limpié el semen que estaba en todos lados, abrí las ventanas para que se fuera el olor a sudor y sexo, y luego me metí a la ducha. me sentía muerta pero satisfecha como nunca. después de todo habia sido una buena venganza en contra de joaquin y sus engaños. incluso mientras me bañaba fantaseaba con seguir haciendolo con sus amigos en secreto, dejandome follar por estos 6 hombres. mientras lo pensaba no pude evitar deslizar mis dedos hacia mi clitoris. nuevamente me empecé a excitar, pero mi cuerpo no daba más. creo que esta noche soñaré con lo que pasó hoy y con lo que podría seguir pasando...
FIN