Los amantes
La habitación estaba a oscuras y en silencio. Yo no podía verte y sin embargo podía sentirte a mi lado. Quise tocarte pero no pude... Mis manos estaban atadas al dosel de la cama.
La habitación estaba a oscuras y en silencio.
Yo no podía verte y sin embargo podía sentirte a mi lado.
Quise tocarte pero no pude
Mis manos estaban atadas al dosel de la cama.
Cuando traté de decirte lo que sentía, acercaste tu mano a mi boca y me silenciaste,
Lentamente te acercaste a mi oído y susurraste: "Confía, déjate llevar"
Durante unos minutos nada ocurrió, me sentía ansiosa y excitada
Te conozco lo suficiente para saber que no me lastimarás
Y que todo lo que hagas me dará placer.
Mientras imaginaba que pensabas,
Comencé a sentir y ya no pude pensar
Solo podía hacer lo que me habías dicho al principio "Dejarme llevar"
¿Quieres volar? - dijiste
Al principio no comprendí tus palabras,
Quise preguntarte y tomaste mi boca
Fue un beso suave solo el roce de tus labios
Abrí mi boca para que pudieras penetrar en ella y no lo hiciste.
Tus labios fueron descendiendo lentamente por mi cuerpo
Tu lengua se deslizaba por mi cuello no habías hecho casi nada
Y sin embargo sentía la humedad entre mis piernas.
Cuando tu boca tomo uno de mis pezones me sentí morir
Quería tomar tu cabeza entre mis manos para que no me soltaras
Pero no podía, porque me habías atado
Me miraste a los ojos y te sonreíste
Me conoces, sabes lo que pienso y lo que quiero
Después de unos minutos pasaste al otro pezón, lo mordías, lo chupabas
Cada vez estaba más excitada, más mojada
Seguiste bajando, tu lengua se detuvo en mi ombligo y jugaste con él.
Desde mi ombligo tu boca se fue deslizando hacia abajo
Y finalmente me hiciste el amor con tu boca
Sentía como me ibas abriendo
Como me penetrabas con ella
Yo ya no podía pensar, solo sentir
El orgasmo fue tan fuerte que me sentí morir
Mientras mi cuerpo estaba laxo, no podía moverme
Mi mente estaba adormecida como drogada
En ese instante entre mis piernas
Sentí como tu sexo se deslizaba en mi interior duro, caliente
Mi cuerpo se fue adaptando a tu contacto
Comenzaste a moverte en un baile excitante y sin fin,
Solo se oían nuestros gemidos, las pieles estaban calientes.
Tus manos recorrían mi cuerpo
Como si se tratase de un instrumento musical,
Mi cuerpo respondía a todo lo que pedías,
No necesitabas decirlo con palabras,
El solo roce de tus labios o el mínimo movimiento de tus manos,
Excitaban mi piel exigiéndote y rogándote que finalizaras con esta dulce y mortífera agonía.
Momentos después cuando me penetraste por última vez,
Gritaste mi nombre,
Mi cuerpo se elevo,
Mis ojos se abrieron y quedaron fijos,
No veía ni oía, solo sentía tu cuerpo duro y húmedo sobre el mío.