Lolitarellenita. Mi señor soy tu putita.

MI SEÑOR. SOY TU PUTITA (1)

PREPARACION

Llegué nerviosa a casa. No podía borrar de mi mente las palabras de aquel desconocido en Internet.

"Vístete como una putita de lujo, con clase. Nos vemos en el msn mañana a las nueve. Es una orden".

Le había conocido en un Chat de amistad. Era simpático y ocurrente. La lectura de sus frases tecleadas ágilmente en el ordenador se hacia amena y adictiva. Mezclaba trato exquisito, piropos bellos y delicados, lisonjas de todo tipo, un anecdotario medido y algo que no se explicar. No era autoritarismo, ni era rudo, pero emanaba ese algo que ejercía sobre mi un dominio creciente según le iba escuchando.

"¿Cuantos años tienes?"

Me había preguntado después de decirme que el tenía 53 y de describirme un montón de detalles de su vida.

Yo le había contestado que 19, un poco acomplejada al hablar con un hombre de esa experiencia. Me propuso establecer entre ambos una relación a través de la red. Pero una relación peculiar. Seríamos amo y esclava.

"Vas a conocer las más altas cimas del placer conmigo. Te llevaré a un universo de sutil excitación que no has vivido nunca"

No se porqué acepté. Curiosidad, morbo, intuición, no lo se bien, pero el caso es que me tenía enganchada y había aceptado. Total, pensé, si no me gusta lo borro de mis contactos y se acabó.

Eran las ocho y media. Faltaba media hora para mi cita ante el ordenador. Me desnudé frente al espejo. Bajita, morenaza, rellenita pero con unas curvas de impresión. Me gusto.

Cogí unas medias de rejilla negras. Me senté en el borde de la cama y las enfundé lentamente en mis piernas. Me ceñí un liguero de cintura y sujeté en él las medias con las pinzas. Me puse de pie y me observe de nuevo en el espejo.

Mi chochito depilado a lo brasileño resaltaba enormemente, enmarcado por el ligero y las medias. No sabía porqué pero estaba excitadísima y nerviosa. Mis pezones se erizaron eléctricos y duros de forma automática.

Dudé si ponerme tanga o quedarme con mi almejita al aire. Al final opte por el tanga más provocativo que tengo. No solo es pequeñísimo sino que su transparencia es casi total. Su finísima tela de gasa cristalina deja ver mi rajita, es más, yo diría que la embellece. Y si abro las piernas más de lo normal, lo exiguo de su tamaño provoca que se cuele en mi raja.

Abrí el zapatero y extraje unos tacones negros de aguja.

Me los puse y caminé como una zorrita, como una gatita en celo.

De frente el tanga había mejorado mi imagen, pero era tan pequeño y transparente, que apenas se veía. Pero de espalda la tira negra que emergía de mis glúteos, los enmarcaba y resaltaba enormemente.

Mi culo contundente y hermoso, algo excesivo y respingón aparecía rodeado de las negras prendas interiores.

No lo puede resistir y me propiné una sonora palmada en él. Me hice daño pero me gustó, así que la repetí en el otro cachete más fuerte. A los pocos segundos el pálido tono de mis traseras esferas se vistió de tonos rosados y fucsias que dibujaban una mano en ellas.

Al andar noté que los labios internos de mi sexo se encontraban ya totalmente inundados y resbalaban el uno sobre el otro. Estuve tentada de tocarme en ese mismo momento pero preferí aguantarme las ganas.

¿Qué ponerme arriba? Era un gran dilema.

Tras darle muchas vueltas al asunto decidí improvisar. Tengo un rollo de cinta transparente de esa que es adhesiva por ambos lados. Corté dos trozos pequeños y me los pegué en los pechos, justo por encima de los pezones. Luego cogí y recorté un trozo de tela de un salto de cama viejo de color negro que ya había decidido tirar.

Tenía la anchura justa para llegar desde un pezón al otro y su caída no tapaba mis tetas por completo. Pegué sus extremos en la cinta transparente de forma que en el centro tuviese una ligera caída.

¡Joder! Como me quedaba aquella minúscula pieza de tela. La tela traslucía de forma nítida toda la rotundidad de mis duros pezones pero los embellecía con los tonos negros de su color.

Deslicé la yema de uno de mis dedos sobre la tela, reconociendo la dureza y volumen de mi pezón.

Me había gustado tanto lo de las palmadas en mi culo que me pellizqué con fuerza los dos mameluquitos hasta hacerme de nuevo daño en ellos.

De nuevo me paré ante el espejo, y de nuevo sentí la misma tentación

Esta vez no lo pude remediar. Faltaban cinco minutos para mi cita en el ordenador y estaba tan excitada que metí mi mano bajo el tanga y me dediqué una caricia entre mis rosados belfos, calientes y aceitados.

El dedo penetró como si me hubiese untado con mantequilla caliente y se entretuvo jugando con el botoncito superior y haciendo viajes hacia adentro y hacia fuera.

No sin un gran esfuerzo retiré mi dedo del interior del cálido cobijo, me coloqué el tanga de nuevo y me fui para el ordenador a iniciar la sesión de msn.

LA PRIMERA SESIÓN

Me equivoqué un par de veces al teclear la contraseña. Estaba como un flan.

Al abrirse la sesión él ya esta conectado. Observé su muñequito verde entre mis contactos, y el corazón me dio un vuelco cuando se abrió la ventana.

Hola mi niña

Hola

Como te ha ido desde ayer

Bien

Cielo. A partir de ahora cuando termines de teclear lo que me digas, di siempre detrás mi amo, o mi señor

Si mi señor

Te vestiste como una putita como te dije?

Si mi amo

Cuéntame con detalle

Llevo tacones de aguja negros mi amo, con una media de rejilla negra sujetada por un liguero de cintura, un tanga de gasa transparente y un velo negro tapando mis pezoncitos. Espero que le guste a mi señor.

Me estaba gustando el lenguaje de sumisión a aquel señor desconocido y me iba metiendo en el papel sin trabajo alguno.

Poco a poco me encontraba más deseosa de leer su siguiente frase, poco a poco me encontraba más dispuesta a obedecer sus órdenes y poco a poco mi excitación se hacia mas evidente, sentada en el sillón giratorio de cuero con mi culo al aire sobre él.

Miraba bajo el teclado y veía mi triángulo bajo la seda transparente, mis muslos enfundados en la malla, mis tetas bajo el velo negro y me excitaba aún más.

Añade la dirección de msn que te doy a tu lista de contactos

Si mi amo.

Es la de un esclavo mío, un chico de 24 años, mejicano. Vas a verle desnudo en tu ventana.

Como usted diga mi señor.

Puse la dirección en mi lista de contactos y al abrirse la ventana recibí la invitación para recepcionar la cam del chico. Tardó unos segundos pero en seguida se abrió. Un inmenso falo se presento ante mis ojos. Adecué el tamaño de la ventana al máximo.

Con la excitación que tenía lo único que me hacía falta era aquel pollón en mi pantalla. Mi chochito mojaba ya sin parar.

A partir de ahora te insultaré. Has de saber que te adoro y que el maltrato es para aumentar el morbo. Comprendes.

Si mi señor. Tráteme como mi amo guste.

Bueno zorrita. ¿Ves ya el pene de mi siervo?

Si mi amo.

Te gusta verlo

Me encanta mi amo

Estás excitada como una puta barata

Si mi señor, mas excitada que una puta

¡Qué guarra eres!, seguro que tienes el coño empapado.

Si mi amo, chorreando.

¡Ponme tu cam puta! Lo primero que quiero ver es tu boca de zorra

Si señor, como usted guste

Como llevas pintados los labios?

De rojo intenso mi señor

Bien

Le envié la invitación a recibir mis imágenes y aceptó. Acerqué la cam de forma que solo pudiese verse mi boca y comencé a recorrerla con mi lengua para él.

Para la lengua puta asquerosa! ¿Quién te dijo que hicieras nada?

Estas aquí para obedecerme.

Perdone mi señor

No quise molestarle. No lo haré más.

Mete un dedo en la boca empieza a follarte con él.

No escribí más, tomé mi dedo anular y comencé a follarlo con mis labios rojos, mojándolo de saliva bien, para que resbalara, metiéndolo y sacándolo de mi boquita y chupándolo con mi lengua. Mete y saca, mete y saca y chupa, y mete y saca.

Mientras mira la polla de mi esclavo, cerda.

Imagina que es esa estaca la que chupas

Yo le diré a mi esclavo que la moje

Vi como el chico de la cam se escupía en la mano y se mojaba aquel inmenso cipote hasta hacerlo gotear.

Me sentía como una furcia obedeciendo ciegamente las ordenes de mi amo, mirando el cipote encharcado del chico y metiendo mi dedo en mi boquita de diecinueve años. Pero me excitaba como nunca había soñado. Sentía mi vulva palpitar, mi coño tenia convulsiones automáticas el solo sin ayuda.

Para. Retírate de la cámara quiero ver tu cuerpo entero

Si mi señor

Me alejé un par de metros y él contemplo mi atuendo de putita.

Date la vuelta, cerda, quiero ver tu culo.

Obedecí poniendo mi culo en pompa, agachándome un poquito

¡Qué buena estas hija de puta!. Métete el dedo de antes en el culo.

Pero agáchate bien que yo lo vea y acerca tu culo a la cam.

Parecía que leía mis pensamientos, y me ordenaba lo que deseaba hacer en cada instante.

Podía ver al girarme mi propia imagen en le msn. Agachada con el dedo penetrando bajo la fina tira del tanga en mi culito. Follándolo lentamente.

Para ya cerda.

Siéntate.

Si mi amo

Estas caliente

Si mi señor, como una perra en celo

Me deja mi señor que me toque el chochito

No

De repente la conexión con el chico se cortó y su pene desapareció de mi ventana. Además cerró la sesión

Has de sufrir. Mi putita.

Gozar y sufrir.

Date la vuelta y palmea tu trasero.

Si señor, como mi amo diga

Lo hice mientras me insultaba una y otra vez. Mis cachetes se pusieron irritados y rojos pero me gustaba. Dolía y gustaba. La pantalla permanecía muda, el teclado de mi amo inactivo.

Le enseñaba mi culo abierto y lo palmeaba y lo palmeaba sin cesar

Ábrelo bien, al máximo.

Puse mis manos a ambos lados del culo y tiré con todas mis fuerzas hacia fuera.

De nuevo se hizo el silencio en la pantalla.

Ya me corrí cerda.

Para ya

Mañana a esta misma hora te dejare correrte a ti

Y te traeré una sorpresa que te gustará

Vistote de colegiala.

Si mi amo.

En la pantalla recibí el aviso de la conexión del chico de antes

Acéptala, zorra. Y ponle las tetas en la cam. Mi siervo fiel merece correrse con tus tetas de furcia.

Si mi señor.

Le envié al chico la invitación de mis imágenes y la aceptó, además de enviarme el la suya.

Al cabo de unos instantes tenia aquel inmenso pene de nuevo en mi pantalla y mis tetas estaba en la suya

Moja tus pezones y pellízcalos.

Si mi amo

Los acariciaba y pellizcaba. Ahora con dulzura, después con rudeza.

El chico aceleró los movimientos de su mano y vi el chorro de esperma salir de su pene y correrle hacia los huevos. Abrí mi boca delante de la cam para él. Para que supiese que lo que más me apetecía en ese momento era recibir su leche en mi boca.

Se cerraron todas las ventanas y tuve que terminar yo sola con mis recuerdos.

Pdt: continuará, hay segunda parte. No os la perdáis

Si os gustó no dejar de enviar vuestros votos y comentarios

Gracias