LOLI (2ª Parte)

Para un servidor, hoy en día, no hay nada más excitante y morboso que pescar en corral ajeno... por suerte, hay infinidad de preciosas mujeres en donde la monotonía entro un día en sus matrimonios por la puerta y el amor junto con el deseo salieron por la ventana.

Como ya me imaginaba, fue ella la que casi una semana mas tarde, es decir, el jueves siguiente, se puso en contacto conmigo dejándome una escueta nota en el buzón…

-¡Tenemos que hablar… pásate por el trastero mañana viernes sobre las 5 de la tarde!- me decía en aquella nota…

No acudí a la cita con demasiada puntualidad que digamos, de echo llegue a propósito casi quince minutos tarde, únicamente para asegurarme de que no diera nada por sentado y que llegara a pensar que nuestra relación, si es que continuaba, se basaría en que yo seria como un perrito que acude a la llamada de su dueña moviendo el rabo de felicidad cada vez que ella tendría un buen hueso que ofrecerme…

-¡Joder… ya pensaba que no vendrías!- me dijo nada mas verme asomar la cabeza a través de la puerta de su trastero…

-¡Vamos a “hablar” a mi trastero… no quiero que ningún vecino empiece a decir cosas raras si nos ven en el tuyo!- la conteste antes de girarme para abrir mi trastero que estaba justo al lado del suyo…

-¡He pensado mucho en lo que paso el otro día y no creo que sea una buena idea que vuelva a pasar!- me dijo nada mas entrar a mi trastero…

-¿Y por que crees tu que va a volver a pasar?- la pregunte adoptando un gesto de extrañeza mientras cerraba la puerta por dentro y me giraba para mirarla…

-¿Tu no lo has pensado?... ¡Repetir lo del otro día me refiero!- me contesto claramente sorprendida…

-¡Pues la verdad es que no!- la conteste con aparente frialdad…

-¡Haber… no te ofendas… estas muy buena y te tenia ganas… pero la verdad es que follando eres un poco “sosa”… me gustan las tías mas atrevidas… no se… mas morbosas!- añadí para desconcentrarla aun mas…

-¿Sosa yo?... ¿Follando?... ¡Anda tío… no me jodas!- me contesto como me esperaba, claramente ofendida…

-¡No me entiendas mal… tienes un cuerpo de infarto… solo con mirarte, ya me la pones morcillona… pero, no se… te falta iniciativa… yo no quiero una aburrida relación para follar de uvas a peras cómodamente sobre una cama… busco una chica que me ofrezca el morbo de un polvo inesperado, no algo ya planificado!- la conteste tras acercarme acariciándola la cara y haciendo que levantara la cabeza para mirarme a los ojos…

-¡No soy ninguna sosa follando… y te lo pienso demostrar!- me contesto ya sonriendo mientras sentía una de sus manos acariciándome el paquete…

Desde luego que no pensaba que era ninguna sosa, simplemente me había imaginado que me vendría con “el cuento” de que aquello no estaba bien y quise darle la vuelta a la tortilla…

Desde luego tengo que reconocer que mi preciosa vecina me demostró un par de cosas en aquel trastero… primero que era toda una artista con su boquita, pasándose mas de diez minutos babeando sobre mis cojones mientras me los comía antes de empezar a tragar polla… lo segundo, que claramente la excitaba comer pollas, pues sin tocarla nada, excepto la nuca, pude ver como ella misma se desabrochaba sus pantalones y se los bajaba junto con las bragas sin dejar de comérmela para empezar a acariciarse ella sola todo el coño, empezando a llenarme toda la polla de babas a medida que sus placenteros gemidos aumentaban de ritmo y de intensidad…

Recostada de bruces sobre una vieja mesa, me lo pase en grande escuchando como me apremiaba para que se la metiera mientras se la restregaba por toda la entrepierna, observando como la muy puta se abría cada vez mas de piernas como si estaría esperando que se la metiera aunque solo fuera por equivocación…

Cuando me pareció que ya estaba suficientemente cachonda, se la metí sin miramientos hasta los cojones con un solo movimiento de mis caderas, viendo y escuchando gratamente sorprendido como la muy guarra se corría de inmediato, obligándome a dejar de follarla para silenciar sus placenteros gritos tapándola la boca con una mano…

-¡Joder tío… ha sido brutal!- me dijo riéndose…

-¡Ya lo he notado… pero eres un poquito escandalosa!- la conteste mientras me inclinaba para cerrar una de mis manos sobre sus bragas y arrancárselas de un fuerte tirón…

-¡Contigo no voy a ganar para bragas!- me dijo entre ahogadas risitas mientras me quitaba la braga de mi mano para metérsela ella misma en su boca…

Aquella tarde en el trastero en ningún momento me dijo que parara, que ya no se correría mas como me había dicho solo una semana antes… aquel polvo me lo tome con tranquilidad dispuesto a saber si mi cachonda y casada vecina estaba tan mal follada como yo me imaginaba, tirándomela a un ritmo bastante lento mientras jugaba con sus tetas para de vez en cuando acelerar mis movimientos…

Así fue como conseguí que se corriera cuatro veces mas antes de sacársela para ver como se giraba con rapidez antes de inclinarse para empuñar y tragarse mi polla varias veces hasta los cojones, sacándola de su boca justo antes de que me corriera para recibir mi lefa sobre su rostro con la boca abierta y la lengua fuera…

-¿Cuándo y donde quieres que quedemos?- me pregunto mientras usaba mi polla a modo de “escoba” para recoger los chorretones de lefa de su cara antes de llevársela a la boca y chupármela ruidosamente…

-¡El donde lo tengo claro… para que, también… el cuando, depende mas de ti que de mi!- la conteste…

-¡No se… dime que tienes pensado!- me dijo sin soltarme todavía la polla…

-¡La próxima vez será en tu casa… se que te dará morbo!- la dije así, sin mas…

-¡Joder!- fue lo único que exclamo, ni tan siquiera fingió que la idea no la gustaba…

-¡Y por supuesto pienso romperte el culo… seria de gilipollas dejar escapar un culito tan prieto y apetitoso como el tuyo!- la comente para ver su reacción…

-¡Uffff… no se yo… la idea no me hace mucha gracia… además de que seguro que me haces daño, no creo que me guste!- me contesto dejando de lamerme la polla…

-¡Pues yo creo que si te gustaría, pero hay una manera muy sencilla de saberlo!- la dije mientras me apartaba para sacar de su caja una esterilla para extenderla sobre el suelo…

-¡Túmbate boca arriba!- añadí señalándola la esterilla…

-¡Vale… pero dime que me vas a hacer!- me contesto mientras se acercaba ya a la esterilla…

-¡Es secreto profesional… pero te aseguro que no te dolerá… palabra de boyscaut!- la conteste alzando la mano como si estaría jurando mientras se tumbaba…

Apenas cinco minutos mas tarde ya chorreaba y se retorcía de placer sobre la esterilla con las piernas exageradamente abiertas mientras la comía lentamente el coño y la acariciaba las tetas… a punto ya de correrse, deje de acariciarla el coño con mi lengua para lamerla y morderla la cara interior de uno de sus muslos escuchando como protestaba entre jadeos mientras retiraba mis manos de sus pechos para pasarlas por debajo de sus nalgas, cerrándolas con fuerza como un cepo al mismo tiempo que la metía un dedo anular por el culo y concentraba mi lengua en su clítoris…

Su orgasmo fue tan instantáneo como largo pese a que retire mi boca de su sexo para mantener únicamente mi dedo dentro de su culo en movimiento, metiéndolo y sacándolo de su ano lentamente por la zona mas ancha de mi dedo, dejando que se recuperara por completo antes de volver a ponerme a comerla el coño solo para comprobar que apenas tardaba un par de minutos en volver a correrse…

-¡Para no gustarte lo disimulas muy bien!- la comente mientras se recuperaba sin dejar de mover el dedo…

-¡Si… vale… me gusta… no se, es un placer diferente… pero no será lo mismo un dedo que tu polla!- me contesto mientras me acariciaba la cabeza…

-¡No… lo mismo seguro que no… multiplica lo que sientes por diez y te harás una idea aproximada!- la conteste entre lametones a su sexo…

-¡Si claro… pero seguro que me duele un montón… tienes la polla muy gorda!- me contesto entre risas y jadeos…

-¡No es que yo tenga la polla muy grande… mas bien es que tu maridito la tiene mas diminuta que un crio de diez años!- la conteste consiguiendo arrancarla una sonora carcajada…

Ciertamente no conseguí que me dijera que si a mi propuesta, pero tampoco fue un no rotundo… después de darme su dirección de correo y antes de marcharse, me demostró que sabia ser muy agradecida al regalarme con una de las mejores y mas largas mamadas que me habían echo nunca, tragándose hasta la ultima gota de semen antes de dejarme la polla mas reluciente que si me habría duchado…