Locura y amor por Sandra

Sandra era la madre de mi mejor amiga. Jamás me interesaron las mujeres, hasta que una ruptura sentimental me llevó a cobijarme en sus brazos

Cuando esto sucedió yo tenia 18 años, y fue en la casa de Griselda mi mejor amiga. Era verano más precisamente los primeros días de enero y yo me quedé en su casa unos 15 días. Ella vivía con su mamá Sandra a quien yo consideraba como mi segunda mamá ya que nos conocíamos desde la primaria.

Los padres de Griselda estaban separados, ella vivía con su madre.  Yo me sentía con ella como en mi casa, hicimos juntas la primaria y la secundaria. Yo estaba en casa de Griselda, Sandra era abogada y ese mes no trabajaba porque estaban de feria.

A la semana el padre de Griselda adelantó sus vacaciones y se fueron antes, yo pensaba ir a mi casa pero Sandra me pidió que me quede, y yo acepté. Yo venía de una desilusión sentimental ya que hacía unos días había terminado con mi novio. Así que terminé aceptando la propuesta.

Pero decidimos ir a la casa de los padres de Sandra, ellos no estaban y había un parque al fondo con una pequeña pileta, yo estaba mal anímicamente porque me había peleado con mi novio y en forma definitiva. Lo había encontrado con otra chica y ese fue el fin de mi noviazgo.

Sandra tenía 38 años, aparentaba menos, era algo más alta que yo, muy bonita y con un físico exuberante. Cuando salía con ella era una amiga más, y no nos faltaban pretendientes

Salimos bastante esos días, cenas fuera de casa, cine (a las 2 nos gustaba ir) y alguna vez a bailar.

A la semana fuimos a un restaurante a cenar y en él estaba mi ex novio, eso me puso mal porque estaba con una chica y eso me molesto. Sandra notó mi malestar y le conté mientras cenábamos. Ella supo quién era y dijo si quería que nos fuésemos a otro lado. Le dije que no y ella me ayudo para demostrarle que no me interesaba su presencia

Cuando salimos lo hicimos riéndonos y me hizo caminar sin dirigir la mirada donde él estaba. Al salir y caminar unos metros 2 chicos nos encararon como para levantarnos, a ninguna nos interesó por lo que volvimos  a casa. Apenas subimos ella dijo riéndose:

S- No eran feos, pero me parecieron medios bobos

C- Si no reunían las condiciones para estar a nuestro lado

Las dos nos reímos y ella me abrazo dándome un beso en la mejilla y diciendo:

S- Asi me gusta chiquita ningún hombre merece que derrames una sola lágrima por él.

Compramos helado y fuimos a comerlo en casa, yo me cambie de ropa por un pijama es shorcito negro con pequeños lunares blancos y un top negro por el que asomaban parte de mis senos , Soy alta 1,72 mt, y mis medidas son 95-65-98, seguía con la misma ropa Sandra un pantalón beige y una blusa color celeste holgada pero muy sexi ya que  tenía una abertura que según se moviese permitía ver sus senos  muy y sensualmente supuse que debajo no llevaba corpiño, cabello rubio, 1,75 y sus medidas 105-75-105 al llegar dijo:

S- Me encanta tu pijama, es muy sexy…

C- Gracias, a mí me encanta tu ropa, el mozo hacia lo imposible para buscar la posición donde pudiese ver tus senos

S- Y si encontró la posición los pudo ver…no llevo corpiño

C- Lo supuse porque se notaban tus pezones marcados en la blusa…sos muy linda y tenes muy buen cuerpo.

S- Gracias, vos también sos muy linda y me gusta mucho estar con vos

Tomamos el helado y le pusimos whisky y luego subimos la escalera rumbo a nuestras habitaciones y al llegar dijo:

S- En lugar de haber vuelto  a casa podíamos haber ido a caminar un poco…a mirar vidrieras… bah al menos yo no tengo sueño

C- No yo tampoco.

S- Bueno pasa y seguimos charlando

Entramos a su habitación yo me senté sobre la cama y ella a mi lado y dijo:

S- Yo no soy tu madre pero te quiero mucho te conozco desde los 5 años así que es como silo fueses y me siento culpable por haberte llevado a cenar a ese lugar y que hallas visto a tu ex novio….

C-No… ¿cómo te vas a sentir mal? Además tus consejos y tu apoyo me sirvieron de gran ayuda además el verlo y tus consejos me ayudaron para que supere el momento y que ya no piense en él

Yo tenía mis manos sobre las rodillas y Sandra apoyo una de sus manos sobre la mía acariciándola suavemente

S- Mejor así cielo…sos muy hermosa y una gran mujer, sos hermosa fisicamente, pero sos mucho más, te quiero mucho  hermosa como persona…te quiero mucho…

C- Yo también te quiero mucho….sos como mi segunda mamá y mi mejor amiga porque a vos te cuento cosas que no le contaría a mi mamá ni a Griselda

S- así me gusta hermosa cuando sonreís… yo también te quiero mucho

Me miró dulcemente me acomodó el cabello que caía sobre mí frente me miró a los ojos y dijo:

S- Así te quiero ver siempre, con esa sonrisa y esos ojitos de mirada dulce…Te amo

Yo la miré a los ojos ella siguió acariciando mi cabello, me miró sonrió muy dulcemente, yo sentí una extraña sensación ella acerco su boca y besó mis labios suavemente por escasos segundos, luego sonrió dulcemente y dijo:

S- Te amo…

Yo no atine a nada estaba sorprendida

Acercó su cara y volvió a besarme pero ahora su beso fue húmedo, su lengua entró en mi boca uniéndose a la mía, yo no podía reaccionar, su mirada era dulce, yo estaba atónita sin poder reaccionar, los besos continuaron, dulces, suaves, tiernos. Su mano acarició mi tórax, yo seguía sorprendida, volvió a tomar mi cara dulcemente y su boca volvió a entrar en la mía nuestras lenguas se unieron nuevamente el beso ahora fue más prolongado en un momento mi boca emitió un leve gemido.

Nuestras bocas se separaron  me miró y dijo:

S- Mi amor… fue hermoso ese gemido, temía que no te gustasen mis besos, no sabes lo feliz que me siento….te amo tanto…¿vos?

C- Yo…estoy sorprendida…nunca pensé estar haciendo esto con una mujer…siempre sentí…no se asco, repulsión cuando veía escenas así en el cine…pero…con vos es distinto, me gusta estar así con vos

S- Hay mi cielo…me hace tan feliz oírte decir eso, tuve sexo 2 veces con mujeres pero esto es distinto, no solo porque te deseo, sino porque te amo, y lo más extraño es que no sé cómo catalogar lo nuestro…si amor lesbiano, o amor filial, porque te quiero como a mi hija.

C- Yo también te quiero Mamu

S- Me hace muy feliz oírte decir eso

Me eche sobre la cama, ella mientras sus manos me acariciaban, su boca besaba y chuponeaba mi cuello, segundos después nuestras bocas se unieron en un beso interminable y apasionado

Mi cuerpo se estremecía y vibraba con cada beso, luego tomo la remera de mi pijama y la retiró de mi cuerpo, dejando mis senos totalmente desnudos, los miró y dijo:

S- Tenés unos senos preciosos

Paso dulcemente su mano entre ambos, luego tomó uno de ellos en su mano, abrió su boca lamió mis pezones, luego lo besó e hizo lo mismo con mi otro seno, yo me sentía extraña pero muy excitada extraña; Sandra me estaba comiendo los senos como nadie jamás lo hizo el placer que sentía era infernal

Después fue en busca de mi boca y nos dimos unos besos muy dulces… poco a poco ella me estaba llevando al mundo del lesbianismo, y yo no hacía nada por impedirlo.

Ella se levantó se quitó la blusa y el pantalón, sus senos eran redondos de gran tamaño, firmes y duros, de piel blanca y pezones rosados, muy duros y parados. Así desnuda sus curvas resaltaban más, solo llevaba una pequeña bombacha celeste se echó sobre la cama nos dimos un beso intenso de boca que duró 10 o tal vez 15 minutos, luego me miró y dijo:

S- Cielo prometo hacerte pasar la mejor noche de tu vida, yo sé que para mí lo va a ser porque vas a estar en mis brazos

Luego ella me pidió que me saque el short de mi pijama y me quedé totalmente desnuda, ella se quitó su bombacha, las dos teníamos la concha depilada. Me acosté  ella se arrodillo en el piso a los pies de la cama, yo estaba nerviosa, asustada, casi a punto de no aceptarla.

Me miró y dijo:

S- Tranquilízate, disfrutemos este encuentro, a mi gustan los hombres, pero también las mujeres, hace algo más de un año que no tengo relaciones lesbianas, pero hace 3 o 4 años que deseo acostarme con vos…me gustas mucho, y los besos que nos dimos me turbo, no es mentira lo que voy a decirte, los besos que nos dimos fueron hermosos, vos sos hermosa…te amo…

Su mano se deslizó suavemente sobre la raja de mi concha, mi boca gimió, sentir un placer extremo cuando ella acarició mi concha, ella se acercó a mi vagina, sentí el cálido aliento de su boca, besó mi vagina y un tremendo alarido de placer se escuchó en la habitación, sus manos acariciaban mi cuerpo que se revolcaba de placer y dijo:

S- Así hermosa, quiero que te entregues a mí y que disfrutemos este encuentro, ahora abrí un poco tus piernas

Cumplí su pedido, ella volvió a besarme, deslizó su lengua por mi vagina, separó mis labios vaginales e introdujo su lengua en mi vagina sentí un placer indescriptible cuando ella me poseyó, gritaba, gemía, me sentía en otro mundo, más aún cuando su lengua se apoderó de mi clítoris, me sentí desfallecer de tanto placer, el gozo era terrible nunca había sentido tanto placer…entonces con voz agitada dije:

C- No puedo más voy a acabar

S- Si hacerlo mi amor…quiero sentirte mía, nunca voy a olvidar este momento, por primera vez vas a ser mía…

Un gemido profundo anunció la llegada de mi primer orgasmo con ella…mis jugos vaginales brotaban de mi sexo, pegó su boca a mi vagina y lamió mis labios vaginales, mi clítoris, y mis jugos apoderándose de ellos.

Minutos después mi cuerpo comenzaba a estabilizarse, ella subió por mi cuerpo hasta acostarse sobre mí y literalmente me comió la boca en un profundo e interminable beso, pudiendo sentir en mi boca el sabor de mis líquidos vaginales. En la calentura de la situación yo quedé sobre ella y la besaba con locura, nuestras lenguas unidas y mi manos acariciando sus majestuosos senos, besaba su cuello, las dos gemíamos de placer, luego bajé por su tórax en busca de su sexo , y mi boca se hundió en su sexo, estaba tan excitada que mis tapujos desaparecieron, mi calentura era tal que deseaba saborear su vagina, y me apoderé de ella, ahora ella se agitaba en la cama y mi boca se apoderó de su vaina, de su clítoris y ella se revolcaba en la cama y me entregaba sus gritos, sus gemidos y un alarido infernal surgió de su boca cuando me apoderé de su clítoris…y en medio de sus gemidos dijo:

S- No puedo más cielo…me vas a hacer acabar

C- Es lo que más deseo

S- ¿Queres mi orgasmo en tu boca?

C- Si mamuni…quiero sentirlo en mi boca y en mis entrañas…

Pasaron apenas unos segundos, ella gritó su cuerpo se convulsionó y mi boca se apodero de sus líquidos vaginales. Cuando la quietud se apodero de nosotros nos abrazamos y nos besamos apasionadamente

S- Esta noche va a ser inolvidable al menos para mí disfrute esto como nunca, te amo Claudia, tenía tanto miedo de hacerlo…tenía miedo a perderte

C- para mí también va a ser inolvidable Yo también te amo, mamina

Nos besamos durante largos minutos ella estaba acostada y yo fui en busca de sus senos los lamí, los chuponee, me excitaba al hacerlo mucho más al ver que Sandra enloquecía de placer, los acaricié y los masajee, ella gemía y eso me enloquecía, luego de ello nos besamos en la boca durante muy largos minutos donde hubo roces, provocaciones y caricias, ambas nos excitamos sobremanera, y mi cuerpo quería más.

Ella pidió que so subiese que me tomase de la cama, porque deseaba hacerme otra vez sexo oral

Yo obedecí, abrí mis piernas y coloque mi vagina a la altura de su boca, sus manos tomaron mis piernas, y bajé mi cuerpo ella besó mi vagina y comenzó a introducir su lengua en ella, mi boca volvía a gemir en un placer inolvidable, alaridos y gritos cada vez más intensos a medida que el deseo se apoderaba de nosotras, sus manos acariciaban mi cola para que luego sus dedos jugaran en mi ano, deslizándose por sus bordes, mis gritos aumentaban constantemente, el final era inexorable, y cuando ambas comprendimos que ya no lo podíamos detener más su dedo mayor entró en mi ano haciendo que el placer sea aún más intenso, mi cuerpo estalló en un nuevo e intenso orgasmo y su boca saboreó hasta la última gota de ellos.

Pero la pasión aún seguía viva

Volvimos a besarnos como toda la noche apasionadamente, las caricias… los besos… los chupones nos volvían locas hacían estragos en nuestra pasión, Sandra se acostó sobres mi nuestras conchas estaban en contacto y eso fue muy hermoso, mucho más cuando Sandra empezó a moverse haciendo que nuestro roces fueran más profundo, nuestras bocas gemían y gritaban.

Sandra se movía simulando una penetración peneana, ella desde esa posición dominaba la situación yo gozaba y ambas nos acariciábamos las tetas.

Ella cabalgaba sobre mi la excitación era inmensa a medida que le tiempo transcurría la pasión se apoderaba de nosotras nuestros gritos invadían la habitación… los gemidos eran cada vez más intensos, hasta que al mismo tiempo nuestros cuerpos se sacudieron juntos en un interminable orgasmo doble, mucho más hermoso porque por primera vez nuestras vaginas compartieron sus efluvios, luego de esto nuestras bocas y lenguas se unieron en un apasionado e interminable beso, la pasión, el deseo y la lujuria nos invadía , habíamos tenido sexo varias veces esa madrugada pero jamás se aplacó nuestro deseo  al mirarme a los ojos dijo:

S- Ay Claudia me enloqueces, no puedo contenerme, más te poseo y más te deseo no puedo dejarte te amo con locura

C- Yo también mamina, nunca se me pasó por la cabeza que pudiese desear a otra mujer pero a vos si… te amo y te deseo.

Esas palabras se sellaron con un beso apasionado e interminable Luego la mire a los ojos acaricie su cara y dije

C- Mamina me siento tan feliz, nunca se me cruzó por la mente estar con una mujer peo lo que hicimos hoy fue maravilloso, te amo

S- yo también te amo bebé.

Cuando nos acostamos nos dimos cuenta de la hora, los rayos de sol ingresaban tenues por las hendijas de la ventana eran las 6 de la mañana, hacia 4 horas que todo había comenzado.

Ella me miró sonriente y pasando su dedo por mis labios dijo:

S- Es hora de dormir un poco, para tomar fuerzas y vivir una tarde y una noche más hermosa y más intensa que esta noche

C—Quiero dormir con vos

S- Por supuesto…no quiero hacerlo sin vos quiero dormir abrazada a vos sabiendo que nuestros cuerpos ahora son uno solo

Y así dormimos unidas, y sabiendo que ambas vivimos un día muy especial juntas, en especial yo porque jamás había tenido tantos orgasmos juntos. Lo nuestro duró un año Durante ese tiempo estuvimos juntas, tuvimos sexo y también tuvimos parejas masculinas y sin darnos cuenta lo nuestro llegó a su fin y fue algo realmente hermoso. Sandra fue mi única pareja femenina…nunca sentí nada así por otra mujer, lo nuestro nació impensadamente y no tuvo un final con un adiós…