Lo que un Ipod trae
. A la hora acordada llego el muchacho, el cual nombrare Fernando, el cual llego y para mi sorpresa era un hombre de aproximadamente mi edad (la cual es de veinte años, sin muchos creerme, ya que suelo verme más joven)
Antes que nada un saludo, llevo aproximadamente un año o más leyendo relatos de esta página, los cuales (por qué no decirlo, me ponen a tono) sean ciertos o no, en fin creo que para no romper la tradición debo de describirme físicamente; soy de una estatura promedio, como solía decir un ex-novio, mido 1.65, con unas tetas que vuelven locos a todos, sin exagerar, digamos que la talla del bra es 36B, una cintura mediana, piernas bien formadas y con unos kilitos de más, sin exagerar. Ahora bien en mi forma de ser puedo decir que soy una chica liberal, pero cien por ciento heterosexual, que ha probado de todo con algunos chicos, (aquí les confieso que lo que más me agrada es dar un rico sexo oral), lo que les voy a contar es una fantasía que se me ha ocurrido desde hace un par de días, y que por lo que sea, me encantaría que se hiciera realidad.
Bueno pues para esto debo decirles que soy la encargada de un ciber por las tardes y cierto día una de mis habituales clientas me pidió de favor sino podía descargarle algo de música al ipod de su hijo, al ver la lista me imagine a un niñato de secundaria que comienza a conocer lo rudo de la música (o sea el Metal) y sin más le dije a mi clienta que se lo tendría dentro de dos horas, ella me dijo que mandaría a su hijo por él. A la hora acordada llego el muchacho, el cual nombrare Fernando, el cual llego y para mi sorpresa era un hombre de aproximadamente mi edad (la cual es de veinte años, sin muchos creerme, ya que suelo verme más joven) alto, con una sonrisa realmente hermosa y unos ojos, en verdad unos ojos que derretirían a cualquiera, me pidió su ipod, le pregunte el nombre que me había dado su mamá, cosa que me sorprendió, ya que su mamá se ve bastante joven y bien conservada, pero eso no importa, total que ese día para mi fortuna llevaba una linda blusa gris que deja ver un sexy, pero no vulgar escote y al decirle que me había faltado algo de su música, que regresara más tarde, lo sorprendí viéndome el escote, cosa que si hubiera sido otro hombre, me habría molestado, pero con él hice una excepción y sólo le lance una sonrisa coqueta, cosa con lo cual él se puso de mil colores, el me dijo que lo mejor sería que pasara al día siguiente, le dije que por mí no había problema y que lo esperaba.
Así pasaron dos días y aquel hombrecito no aparecía, comenzó a resignarme y de pronto al tercer día justo cuando me encontraba cerrando el local, siento que alguien me coje por la cintura y se acerca a mí y me susurra:
“Que rica estas”
Uff! Eso me puso a mil, francamente no me importaba quien lo había hecho, simplemente su olor y la silueta que podía imaginar me hipnotizaron, al girar la cabeza me doy cuenta que es aquel hombre que tanto había esperado (por su música claro, jajaja) y para mi sorpresa me planto un beso que hasta la fecha no olvido, en un principio me deje llevar, pero en la zona soy bastante conocida, y si bien dicen que la vida laboral es otra, no podía dejar que alguno de mis clientes pasara y me vieran en tal situación, así que le dije que lo mejor era que nos metiéramos, para mi suerte el local también se puede cerrar por dentro, que es lo que hice y al entrar el me miraba con una cara de adicto, eso me puso muy mal, me lance a besarlo, en verdad su forma de recorrer mi boca con esa lengua tan hábil me hizo que comenzara a mojarme, el sólo me tocaba las tetas, que si no hubiera sido por la calentura que me había provocado, me habría hecho daño o al menos le hubiera soltado una bofetada, pero eso no sucedió, comencé a sentir a la altura de mi ombligo algo sumamente duro, con mis manos, que pasaron de su cabeza, cuello, pecho a su pantalón, comencé a desabrocharlo, él me miro con un poco de sorpresa, le dije que era un plus por el trabajo, jajaja, si como no, era un plus para mi, y baje a hacer lo que tanto me gusta, hacer una rica mamada, al bajar me di cuenta que tenía una grande, bueno aproximadamente 20 cm, de rica verga, que sin pensarlo dos veces me metí a la boca, en un principio por que debido a que también es bastante gruesa, no entraba del todo, pero gracias a la habilidad que poseo hice meter casi toda, sentía como él me agarraba del cabello para marcar un ritmo un poco más lento, pero como me encontraba yo, quería que me diera esa lechita que tanto me gusta, el me dijo que aun no quería terminar, que me levantara, cosa que hice, para que él en un rápido movimiento me subiera al mostrador y me abriera las piernas para tener un acceso más cómodo a mí, (ya que ese día llevaba una falda, de esas que son largas y que suelo usar en la playa, pero debido al gran calor de la ciudad decidí usarla ese día, que suerte para mí) y sentí como con sus dedos se iban introduciendo y jugaba con mi tanga, para moverla de su lugar, eso en verdad me ponía mal, le pedí que por favor no fuera cabrón y que me la metiera toda ya, pero él sólo me dijo espera, aun quiero probar un poco de ti, en ese momento bajo hacia mi cuevita, la cual me gusta mantener bien depiladita y arreglada, y al primer lengüetazo sentí un escalofrió que casi hace que llegue al orgasmo, así se mantuvo algunos minutos hasta que le pedí de mil formas que me la clavara ya, el se levanto y con la punta de su verga me acariciaba, en verdad que me torturo por algunos minutos, yo quería tenerlo y comenzaba a moverme hacia adelante, cosa con lo cual él se hacía para atrás, clave mis uñas en su espalda y le dije que basta de juegos, y de un solo empujón me la clavo toda, que por lo mojada que estaba entro perfectamente y nos adaptamos de una forma, que parece que estamos hechos el uno para el otro, nos quedamos quietos por muy poco tiempo para comenzar con el vaivén de las caderas, con el cual a los pocos minutos comenzaba a sentir los primeros espasmos de mi orgasmo, en verdad que lo estaba disfrutando, por la forma en que me besaba, creo que él también lo disfrutaba, quería ahora ser yo la que controlara la situación así que lo senté en la pequeñísima sala de espera que tenemos en el local y me monte como una hábil vaquerita, el no paraba de sobar mis tetas, las cuales ya estaban desnudas y eran succionadas por él, no quería que terminara tal situación así que baje un poco la rapidez, pero al tener tan próximo el orgasmo hice que fuera lento para terminar de una forma genial, ufff!!! Lo que paso después fue uno de los mejores orgasmos que he tenido, tuve que arquear demasiado la espalda y dejar en su cara mis tetas que el tocaba y lamia sin cansarse, él seguía bastante bien parado, ya que después de mi orgasmo el cambio la posición para ahora recargarme sobre el sillón y metérmela desde atrás, era su perra, y lo sigo siendo jajaja entonces sentí como sus embestidas eran más fuertes, señal de que se aproximaba su orgasmo, el cual no tardo mucho en llegar y en llenar mi cuevita de su leche, el se recargo y solo acarició mi cabello de una forma linda, con lo cual me gire y le dije que era lo mejor que me había pasado en el día, el sólo me lanzo una sonrisa y me dijo que ya tenía bastante tiempo observándome, pero que no se atrevía a acercarse, por vergüenza, en verdad en ese momento solté una carcajada y le dije que era un sinvergüenza que había llegado y me había cogido por la espalda, cosa por la cual se disculpo y me dijo que no encontraba otra forma, que tenía que arriesgarse, pero en ese momento le dije que fue lo mejor que había hecho.
Después caímos en cuenta de que no habíamos usado preservativo y digo llevo dos meses sin novio, así que no tomaba pastillas desde hace algún tiempo, el ofreció acompañarme a comprarlas, a lo que yo accedí, en el camino parecíamos un par de novios que se tocan y se besan a la primera oportunidad, compramos dichas pastillas y me acompaño a mi hogar, en el camino me dijo que era la segunda mujer con la que estaba, yo me sorprendí y no le creí, ya que es un hombre sumamente guapo que puede tener a la mujer que quiera, pero me dijo que ese primera chica le hizo un poco de daño al engañarlo con uno de sus amigos y que no va por la vida con quien acostarse, a lo cual respondí: “¿y yo que soy?” el me dijo que quería que fuera su novia, cosa con la cual me sorprendí bastante, ya que digo, tener sexo por calentura está bien, pero ya formalizar tan rápido me daba un poco de miedo, digo porque no sea como sea realmente, pero no me importaba en verdad lo que acababa de pasar me tenía mal y le dije que estaba bien, llegamos a mi casa y en la puerta como en una salida romántica nos despedimos con un beso que tardo bastante, me pidió mi numero de celular y me dijo que mañana en la tarde pasaría a verme al ciber, cosa que le dije que estaba bien y que hasta la fecha seguimos haciendo, ahora bien lo último que les quiero comentar es que descubrí que es un gran amante el cual me pide cosas tan hot, que no pienso separarme de él en un buen tiempo, espero les guste el relato, sé que tal vez me emocione un poco con los detalles, pero si ponía solamente sexo sexo sexo parecería aburrido, en fin espero comentarios, un besito Susana J