Lo que soy para mi Ama

Afortunadamente el año pasado navegando por internet, conocí a la que en un futuro sería mi ama, y que lo sigue siendo hasta el día de hoy al menos de manera virtual.

Vi sus videos de humillación verbal en YouTube, me hice seguidor de su canal, comenté sus videos, y tímidamente me animé a contactarla.

Ella me recibió con toda cordialidad, yo en un principio solo deseaba tener un video personalizado en el que me humillara un poco, pero mi ama ya sabía que con el tiempo yo mismo acabaría por pedirle que me deje ser su esclavo aunque sea de manera virtual.

Y así se dio, pasados un par de meses yo mismo volví a escribirle pidiéndole si por favor me permitía ser su sumiso financiero. Ella accedió gentilmente, y desde septiembre del año pasado hasta hoy, soy su feliz sumiso. Tengo mi nombre de esclavo (en femenino, ya que me gustó el ser feminizado por ella)

Yo le pago su tributo semanalmente, mi ama a cambio me humilla por chat, me da órdenes (al menos simbólicas) las cuales yo me empeño en cumplir, y me trata siempre de forma humillante y en femenino (todo de previo acuerdo entre ella y yo)

La respeto y admiro, y le tengo gratitud porque me ayudó a liberar mi lado sumiso que siempre guardé.

Para ella yo soy su alfombra, su sirvienta, su putita, su mascota, su reposapiés o su felpudo. NO soy una persona, sino un objeto que solo está para complacerla. Yo me siento dichoso y privilegiado de poder formar parte de su legión de esclavos masculinos.

Aunque no puedo verla personalmente por razones de distancia, todas las semanas me tomo unos minutos para comunicarme con ella vía chat y sentir como me humilla, o simplemente ser ignorado por ella, que me niega toda respuesta a mis saludos y pedidos, lo cual también es una forma de denigrarme (todo habiéndolo charlado antes obviamente)

Ella es mi dueña, y le envío feliz mi tributo cada vez que puedo, para que mi ama lo disfrute como desee. Me pone contento estar virtualmente bajo sus pies, ser humillado por ella, y que me mande a limpiar la casa, lamer sus zapatos, tragarme mi propio semen, o hacer castidad forzada. El solo hecho de que me hable como a una cualquiera riéndose de mí ya me hace sentir dichoso.

Mi ama es toda una experta en el arte de la humillación; nunca me forzó a nada, todo fue pactado y acordado previamente, y ante todo está el respeto a ella. Acepto mi realidad, sé que estoy en posición inferior a mi dueña. Ella es quien lleva las reglas, y si no le pago mi tributo como corresponde, seré ignorado, aunque le ruegue una respuesta o la salude con todo el respeto del mundo.

Ya que no puedo servirla de otra forma, mi ama recibe el miserable tributo que yo le ofrezco cada vez que está en mis posibilidades. Siempre que yo cumpla con mi obligación, ella me dará un minuto de su tiempo para responder a mis mensajes y terminar la charla humillándome invariablemente.

Sé que viniendo de ella la orden, yo haría de todo: desde limpiar su casa vestido de mucama, hasta dejarme pisotear por ella o recibir alegremente sus escupidas o su lluvia dorada en todo mi cuerpo.

Ella sabiendo de su dominio sobre mí, se burla tranquilamente de lo patético que soy, al igual que el resto de sus esclavos, que pagamos felices nuestro tributo tan solo por oír una palabra humillante suya.

NO hay más que trato de ama y sumiso, yo la respeto sobre todo, y acepto que soy una basura para ella, le sirvo únicamente con mis tributos.

Escribo este texto no por vanidad ni por querer promocionar a mi ama, solo lo hago como muestra de felicidad y gratitud hacia ella por aceptarme como uno más de sus esclavos financieros hasta hoy.

Si alguien está interesado en contactarla, escriba en los comentarios y nos comunicamos por privado. Pueden ver sus videos en internet, y también es posible ser su esclavo financiero (previo tributo y charla con ella por Skype o correo electrónico) y aceptando siempre nuestra inferioridad ante su poder. Es un ama vocacional, toda su dominación es dentro del respeto, la confianza y la comunicación.

A quien le guste la dominación financiera, el ser humillado verbalmente, por chat o video llamada, le recomiendo animarse y probar el entrar en contacto con esta excelente dominatriz.

No me lo pidió expresamente, pero como gesto mío de sumisión hacia ella, me gustaría traerle más esclavos a su harén.

Por lo demás, yo vivo una vida normal, no estoy las 24 horas en contacto con ella, además que pasaría a ser un acosador, claramente, y esa no es mi idea. Ella tampoco me molesta de ningún modo, si no le tributo, no está acosándome permanentemente ni nada parecido. Es toda una profesional, sabe del dominio que tiene sobre mí, pero no hace abuso del mismo.

Esto es todo, gracias por leer mi texto. Este sí es un escrito íntegramente de mi propiedad y es real, mi ama existe, no doy su nombre por respeto, el que quiera entrar en contacto con ella como lo dije antes, puede escribirlo en los comentarios y le paso el contacto en privado.

Saludos.