Lo que pudo ser y no fue...

La noche que no fue

Dedicado a Venenosamortal

Encendí la PC como todos los días. Comencé a bajar los mails, todo parecía ser normal, hasta que uno de los mensajes me llamo la atención, el remitente era "Mafi", hasta ese momento para mi desconocido, el mensaje decía que había leído mi relato, gentilmente lo respondí, a los pocos segundo "Mafi" me responde, era obvio que estaba en línea, al igual que yo, luego de un par de mensajes cortos convenimos en contactarnos por el MSN.

Abro el MSN y estaba ahí, en línea, grande fue mi sorpresa al ver la foto de su avatar, una foto que dejaba entrever bajo una pollera corta.

‘Hola' fue mi saludo, y así empezó nuestra conversación...

Pero, allí junto con su mensaje, estaba ella!, gentilmente a pedido mío conecto su cámara, ¡Un cuarto de mi pantalla tenía un cuadro de ella, sentada a su computadora, mientras esperaba por mi contestación!

Me sentí magnetizado por su sonrisa, a la vez que otros mensajes surgían.

Mi mente estaba en una vuelta rápida, y así nosotros empezamos una inusual sesión de charla.

Nuestra charla progresó, e intercambiamos algunas fotos. Me atreví a pedirle que me mostrara más de ella, pero en vivo.

Miré cuando ella sonrió, regalándome otra hermosa sonrisa suya. Ella se sentó más atrás en su silla y subió lentamente su larga remera sobre sus muslos largos. Viéndole hacer esto, casi me hizo olvidar de preguntar lo que ella llevaba puesto, pero por suerte, pude tomar nuevamente el control de mí y debidamente le hice la pregunta. Yo había visto fotos de ella, al igual que ella de mí, pero viéndola así en carne, por así decirlo de alguna manera, era maravilloso. Ella quiso regalarme algo más, Y despacio subió mas aun su remera, no tenía ropa interior!!!. Ella me dijo que solo eso tenia puesto, que nunca en su casa usaba ropa interior, solo una remera y nada más.

Pregunté si ella podía estar desnuda para mí esa noche, y ella respondió si me gustaría?

‘¿Si me gustaría? No podía esperar ver su cuerpo desnudarse frente a la webcam.

‘Claro que me gustaría‘. Ella empezó a quitarse la remera por sobre su cabeza , despacio, más que despacio, lo hizo como para ser fotografiada, cuadro a cuadro, su cuerpo se fue desvelando ante mis ojos, en mi cabeza se sucedían los mensajes que mis manos escribían. Tecleé diciendole cómo yo amaría tocar su piel lisa suave y sus dedos caminaron en su cuerpo como si fueran los míos. Su mecanografía era mínima, le dije que si permitía a mis dedos acariciar, y jugar con sus pezones muy sensibles. ¡Todavía no podría creer que yo estaba viéndola!

Mi verga estaba rígida y dolorida a punto para ser descargada, pero tenía más para ver todavía, antes de que yo me permitiera esa eyaculación dulce.

Ella estaba respirando bastante rápido y su cara parecía carmesí, cuando ella pellizcó y tiró cada uno de sus duros pezones. Le pedí sentarse más atrás y abrirse de piernas para mí e imaginar mis manos recorriendo a lo largo de los interiores de sus muslos. Ella cambió su posición ligeramente y alegría de alegrías, yo podía ver todo, su concha floreció abierta e incluso pude notar la humedad que bañaba sus labios, como las gotas del rocío en los pétalos de una rosa roja. Ella con un dedo recorrió a lo largo de su abertura mojada hasta llegar a su clítoris que se notaba duro dentro de su capucha protectora. Recordé una de las fotos que me había enviado, y le pregunté si ella quería usar su vibrador a lo que ella contestó,

‘Siiii'.

Entonces, metió la mano en su cajón del escritorio, yo esperé, ella estaba fuera de imagen, Y gradualmente, apareció nuevamente ante mi vista, desnuda, acariciando su vibrador

Yo había visto fotos de ella jugando con un vibrador, y era definitivamente ese mismo.

Ella no perdió tiempo y se sentó, con las piernas muy abiertas, tomó el vibrador , fácil y rápidamente empezó a hundirlo en su concha mojada, su cara denotaba placer, una y otra vez empujaba hacia su interior con una mano apretaba sus pechos mientras con la otra le placer a su concha, ¡y a mi!.

La observe con placer hasta que ella acabo, su concha dejaba escapar su miel y fue entonces que ella tecleo,

‘¡Quiero que acabes tu también! ‘y puso el vibrador en su boca saboreando su propia miel,

Acelere el movimiento en mi verga y acabe yo también

Cuando nos habíamos reestablecido y relajado, nos despedimos enviándonos algunos abrazos y besos

Esto es lo que pudo pasar una noche y no fue