Lo que nunca espere 4

ya me había calmado un poco tome la decisión de regresar a mi casa a solucionar las cosas con Juan, no puedo estar peleada con el, ya que el es el pilar de mi vida sin el, simplemente me derrumbaría además tengo que buscar una solución con Alex ya que si el lo niega todo y no es capaz de admitir lo que hicieron con Juan va a seguir insistiendo en que vuelva con el, y ni loca vuelvo con una persona así, es mas no me entiendo, tanto era mi miedo a la soledad como para estar tanto tiempo con el, la mayoría de gente dice que preferible sola q mal acompañada, pero me aterra tanto la soledad, y hora esta atracción que siento por Fernanda, será que lo que me daba miedo era enfrentarme a mis verdaderas preferencias y si estaba sola de seguro me analizaría como lo estoy haciendo ahora y saber la respuesta de todo esto es lo que mas me asusta...

Después de ese psicoanálisis a mi misma, me levante con dirección a la cocina, la vi. sentada en la mesa de espaldas a la entrada de la cocina por lo cual no me vio, me quede contemplándola unos segundos solo el verla me producía un sentimiento de paz se veía tan relajada su respiración era sumamente lenta, sostenía con ambas una taza de un te aromático  manos como queriendo que el calor de aquella taza no escapase, me acerque a por detrás procurando que aun no se de cuenta de mi presencia, solo puse ambas manos sobre sus hombros y empecé a darle un cariñoso masaje acariciando su esbelto y largo cuello, ella solo alzo la vista y me sonrío, lo tome como una aprobación para seguir, y lo hice con caricias suaves pero firmes en los hombros y subiendo por su cuello, haciendo que sienta mis uñas por detrás de sus orejas y bajando nuevamente, hacia pequeños círculos solo con mi pulgares aplicando una ligera presión, y cada vez bajando un poco mas, hizo su cabeza hacia atrás sabia que lo estaba disfrutando, volví a pasar mi uñas por su cuello y acercándolas de a  poco a su pecho, tanto ella como yo teníamos los ojos cerrados.

Yo disfrutando de las reacciones de su piel ante las caricias de mis dedos, con eso se le salio un pequeño suspiro que llego a mi como un choque eléctrico, el cual hizo que ella y yo abriéramos los ojos ella seguía con su cabeza echada hacia atrás, encontrándose nuestras miradas, sus pupilas estaban dilatadísimas y su respiración se encontraba aun agitada. ella solo se puso de pie yo no me moví lo cual hizo que nuevamente quedáramos muy juntas casi que respirábamos la exhalación de la otro, ya no me podía contener mas necesitaba mas de ella, deje todos mis miedos e inseguridades atrás  y roce con mi mano sus mejilla y bajando hasta su cuello para acercarla lentamente y así pude al fin sentir el roce de sus labios, eso fue solo un roce pero, yo necesitaba mas.

ella no me correspondía, mis miedos y el rechazo hicieron me separe de esos labios que nunca creí anhelar de esta manera, de  verdad sentí rechazo y una lagrima se acomodaba en mi parpado inferir esperando por salir, no quería q me viera así y baje la cabeza, y ella paso su brazo por mi cintura y de manera fuerte apego mi cuerpo al de ella haciendo que la mirara tenia una mira tierna, mezclada con lujuria con su otra mano acaricio mi rostro y ahora fue ella quien  se acerco a mi rozando mis labios con los suyos, separo un poco nuestra bocas haciendo que yo vaya en busca de ella, de una manera calmada alcance su labio inferior y mordiéndolo ligeramente, era el beso mas rico y sensual que me hayan y que yo haya dado.

Todo se estaba acelerando, desde nuestros latidos, respiración, movimientos y ese beso tan magnifico. Nos separamos para tomar aire, ella me miro a los ojos:

• nunca espere que me pasara esto, no se que me pasa contigo pero no tienes idea de cuanto miedo siento. Solo sonreí ante lo que dijo para darle seguridad y que no se sienta de esa manera.

• y a que tienes miedo, a que sea una mujer o a que sea una alumna, a la edad o al que dirán?

• no precisamente, es miedo a el hecho de que no me puedo controlar contigo y no se a donde me llevara esto, miedo a el hecho de que me paso algo tan nuevo contigo que desatara cosas que complicaran demasiado nuestras vidas.

• yo también tengo miedo, pero no lo pudimos evitar, yo intente poner barreras desde ayer y tu lo intentaste el día de hoy  esto es demasiado fuerte y creo que si  te conocí un día donde mas te necesite es por algo, es mas me atrevería a decir que es cosa del destino- esto le dije con una sonrisa a la cual ella correspondió.

Con ella sentía esa paz, sentía que con ella tenia mi complemento de vida a pesar de no conocer cada detalle de su vida sentía que conocía lo mas importante su esencia como persona como ser humano, en ese momento supe que ella estaba ahí para mi y yo para ella, que esto no era solo una gran atracción como yo creía o mejor dicho como me obligaba a creer, este beso mágico me ayudo a abrir los ojos y estoy segura  que no solo a mi sino también en ella pude notar que en esos ojos hermosos ya no había miedo, sino que brillaban para mi y por mi al igual que los míos brillan desde hoy por ella y para ella.

Me separe un poco, ese beso me estaba calentando en exceso pero no quería apresurar las cosas y la abrace no quise que pensara que me había arrepentido, pasamos

Abrazadas un buen rato pero esta vez no fue como las anteriores que fueron para consolarnos, esta vez fue por sentirnos más y a la vez calmar nuestra excitación. Nos dirigimos a la sala pasamos esa tarde abrazadas, hablando de nuestros gustos, riéndonos, durante esas horas dejamos de lado todos los sufrimientos y problemas que teníamos ambas dedicándonos a disfrutar de la compañía de la otra. Ya estaba atardeciendo y escucho un sonido de vibración que proviene de abajo del sofá me agacho a ver que es y veo mi celular con una llamada entrante de mi hermano, dudo unos segundos si contestar o no, sabia que ya era hora de enfrentar la situación pero no sabia como hacerlo, decidí contestar.

• halo- dije con la voz un poco temblorosa y mirando a Fernanda que se dio cuenta que era mí hermano.

• diana por dios!! Hasta que al fin me contestas, creí que te había pasado algo, por favor necesitamos hablar..  El tenia la voz bastante ronca y se le notaba preocupado

• tranquilo me encuentro bien, y es verdad necesitamos hablar en una hora estoy en la casa adiós- no le deje decir mas solo cerré la llamada y me senté en el sofá nuevamente, mire a Fernanda se le notaba triste sabia que ya me tenia que ir, y eso también me tenia bastante triste.

-  se que te tienes que ir- me dijo en un tono bajo y bajando la mirada.

• si pero sabes que... ella me interrumpió y solo me abrazo

• se que lo que te voy a decir tal vez te suene algo apresurado pero prométeme que lo pensaras..Me dijo esto al oído.

• si pero primero dime que es lo que tengo que pensar

-  tu sabes que yo aquí vivo sola y quería preguntarte si quieres compartir el depa conmigo como veras tengo una habitación desocupada.

Yo no sabia que decir me tomo por sorpresa, pero no era una mala idea se que en mi casa las cosas no van a volver a ser las mismas y no quiero vivir en un ambiente tenso

• si, si quiero vivir acá- y  volvió a abrazarme tan fuerte que casi siento como me tronaron uno que otro huesito de la columna, ella estaba feliz y me encantaba verla así...

• OK fer voy ha hablar con mi hermano y de paso voy por mis cosas te parece-  dije ya levantándome del sofá para ya ir saliendo.

Tome mis cosas fui por Jonás a la terraza iba bajando las gradas ya casi llegando a la puesta de salida y fer me tomo del brazo arrinconándome a la pared yo la tome de la cintura haciendo que nuestros cuerpos estén apretaditos y nos besamos, estuvimos despidiéndonos unos cinco minutos, me dio un abrazo y en mi oído dijo- por favor  no te tarde y metió su mano en el bolsillo de atrás de mi pantalón apretándome la cola- te dejo mi numero de cell por si me llegas a necesitar- dios esa mujer con esa conversaciones con mi oído me tenia loca... nos separábamos tome aire y salí.

Llegue  a mi casa, bueno a mi ex casa deje a Jonás en el patio trasero con agua y comida, y entre a la casa en la cocina no había nadie,  fui hacia la sala y estaba Juan en el so con un trago en su mano y mirando hacia el  fuego de la chimenea.

-hola- dije yo no sabia como empezar con todo esto. El inmediatamente se acerco, me abrazo y empezó a llorar, correspondí su abrazo y no pude evitar que mis lagrimas salgan al igual que la de Juan, el solo repetía por favor perdóname.

• es mejor que nos sentemos, te voy a contar todo absolutamente todo Diana creo que mereces saber la verdad. Juan ya estaba mas calmado se le veía muy mal, por lo general siempre es una persona risueña y amable, sus cabellos estaban recogidos y el que siempre odio eso, sus ojos claros Igual a los míos estaban rojos e hincados, esta con la misma ropa con la que estaba aquel viernes, se lo veía tan pequeño e indefenso a pesar de medir 1.90.

Yo no decía nada, solo estaba esperando a que el me cuente que paso desde un principio como empezó su aventura o saber si era una relación lo que tenia con Alex, pero antes le mostré el mensaje que me mando Alex intentando inculparlo a el, lo vio hizo un gesto de negación con su cabeza y empezó a hablar:

• diana yo, yo conozco a Alex mucho antes que tu, lo conocí en una disco cuando tenia 15 años siempre estuvimos en contacto por medio de Messenger, hasta que un día  me confeso que yo le gustaba.....yo lo interrumpí

-antes que me cuentes tu historia con Alex, quiero que me digas primero cuando fue que te diste cuanta de que eres gay?

• pues creo que desde siempre, en la niñez no me preocupaba pero a partir de los doce años me empezó a atraer un amigo, al principio creí que había algo mal en mi, negaba lo que sentía, hasta que un día no lo hice mas, todo estaba bien e incluso se lo dije a nuestros padres, en un inicio lo tomaron bastante mal, me castigaron, pero con el tiempo creo que lo aceptaron- me dijo esto con alivio al parecer se quito n peso de encima.

• y por que nunca me lo dijiste, porque no confiaste en mi- dije esto con una lagrima recorriendo mi mejilla, me dolía que mi hermano no haya confiado en mi cuando yo siempre  lo hice.

• perdóname se que fue un error, pero tenia miedo a que me rechazaras como mucha gente hizo cuando yo confesé quien realmente soy, y sabes que no podría vivir sin ti.

• cuantos y quienes saben que eres gay?

• pues lo saben mis tíos por eso no insistieron mas en que vivamos con ello, creyeron que yo iba a pervertir a mis primos y algunos amigos.

• y como conociste a Alex

• a el lo conocí unos 6 meses antes de que empezaras a salir con el,  fue en una bar de ambiente por unos amigos.

• en que momento empezaron verme la cara de tonta?

• uuff pues yo lo conocí antes que siempre estuvimos en contacto hasta que un día me propuso salir y desde allí teníamos sexo, yo nunca quise una relación formal con el, seguíamos saliendo pero yo siempre fui claro, el comenzó a ser bastante intenso y decidí alejarme, cuando el vino contigo y tu me lo presentaste como novio  me sorprendió pero no por el hecho de que estuviese con una mujer ya que el era bisexual, pero el no es una buena persona y muchas veces te lo dije y tu siempre me decías que a ti nunca te hizo nada malo. Así que no podías decir algo como eso o darme la razón, vi que eras feliz y decidí no meterme y siempre estar al margen de tu relación y lejos de el.

• ni tan lejos- lo dije con sarcasmo

• te voy a explicar lo que paso ayer: ayer Alex vino cuando no estabas lo deje pasar por que tu dijiste que no demorabas, estaba saliendo de la sala y el me pidió que me quedara que por favor habláramos, me quede en la sala y el empezó a decirme que regresara con el, que contigo intento olvidarme dijo que sus planes en un inicio fueron de vengarse de mi através de ti, le dije que estaba loco que se alejara nuestras vidas para que ninguno de los tres resulte herido, comenzó a amenazarme me dijo que si no volvía con el te iba a hacer sufrir como nunca lo ha hecho, le insistí en que no y me intento besar y le di un golpe bastante fuerte, en el suelo me dijo que hiciéramos un trato, me dijo que si yo me acostaba con el por ultima vez se alejaría de nosotros para siempre.

• y  acepte el trato, Diana se que estuvo mal que debí negarme desde un principio a todo esto y hablarte siempre con la verdad- me dijo esto llorando nuevamente- enserio perdóname- se arrodillo frente a mi sujetándose a mis piernas- si no fuera por mis entupidas mentiras. No estuviera  a punto de perder a la única persona que me importa, entiende no quería que sufras- por favor perdóname- Y se abrazo a mis piernas mas fuerte.

Me hacia daño ver a la persona mas fuerte que he conocido de esa manera me rompía el corazón sin darme cuenta mis lagrimas volvían a correr y baje del sillón donde estaba hacia al piso para abrazarme a el.

• Juan entiéndeme, tu nunca me vas a perder por que tengas preferencias sexuales diferente, lo que mas me duelo es el hecho de haber sido engañado por dos personas en las que yo confiaba plenamente, yo puedo perdonarte pero necesito que me des tiempo, por eso es que he decidido irme un tiempo- le dije eso esperando su reacción

• OK, entiendo eso pero por favor no vuelvas desaparecer como lo hiciste, te daré tu tiempo es mas hoy mismo me voy del departamento- me dijo el ya secándose sus lagrimas.

• Juan no te preocupes de hecho la que se va soy yo, si me quedo aquí probablemente solo me deprima, me mudare con una amiga ya todo esta arreglado, solo tengo que llevarme algunas cosas. Me ayudas por favor.

Y así ves en donde voy a vivir, con quien y todo eso, para que no te preocupes y créeme yo no quiero dejarte siempre hemos sido los dos y lo seguiremos siendo, pero necesito este tiempo para aclarar todo.

Nos quedamos un rato abrazados en calma, y le dije que era hora de irme, nos levantamos y subimos a mi habitación. Estaba empacando en una maleta  mi ropa y me llego un mensaje de Fernanda:

msj: hola preciosa te extraño, ya acomode todo en la habitación para que te quedes espero no hayas arrepentido.

No pude evitar sonreír, Juan se dio cuenta de eso pero no pregunto nada siempre a respetado mi privacidad. Terminamos de recoger todo y lo íbamos subiendo a su camioneta, y arrancamos hacia mi nuevo hogar, en el camino todo era silencio bastante incomodo en el camino le mande un mensaje diciéndole que no me arrepentía que incluso ya estaba en camino. Llegamos a aquel edificio y empezamos a subir todas las cosas, no eran muchas, solo era mi pequeña cama de tres plazas, mi lap, un par de mesitas y mis tres maletas de ropa.

• Juan te presento a Fernanda

• hola mucho gusto- dijo Fernanda-

• igual- se quedo viendo como analizándola pero no me dijo nada.

Juan se despidió de nosotras, yo le dije que me comunicaría con el apenas logre superar esto, lo abrace y me dijo solo que no demorara tanto que me va a extrañar y que siempre estará pendiente de mi, ni medio se cerro la puerta corrí a abrazar a fer, necesitaba que me abrace y le conté todo lo que paso con mi hermano, ella solo me dijo que me apoyaba en todo y me miro con esos ojos que me encantan, me fui acercando a ella hasta poder sentir el roce de sus labios puse mis manos sobre su cuello y ella me agarro de la cintura, se separo un poco y paso la punta se su lengua delineando sus labios, y empezó a introducirla suavemente dándole golpecitos a la mía, el beso era ya mas intenso yo acariciaba sus brazos y todo el costado derecho de su cuerpo muy suavemente pasando mis uñas por su piel, sintiendo como se le erizaba la misma y ella hacia lo mismo con mi espalda, sentía como su mano bajaba un poco mas empezando a rozar mi trasero, tome entre mis dientes su labio inferior haciendo que saliera un poco de sangre y succionándole enseguida a ella se le salio un pequeño gemido desde su garganta el cual calle con un beso, ella seguía acariciando me trasero al parecer le gustaba, me lo apreso fuertemente juntándome mas a su cuerpo lo cual provoco que se me escapara un gemido haciendo mi cabeza hacia atrás lo cual ella aprovecho para besar mi cuello haciendo que mi respiración comience a acelerar, besaba mi cuello, pasaba su lengua y luego soplaba sobre el camino que dejaba eso me excitaba a tope, fui subiendo desde su vientre acariciando su cintura hasta llegar a sus pecho empecé a acariciar suavemente por encima de la blusa y sentía como se endurecía, mientras ella daba pequeños mordiscos mi clavícula, tenia su mano apretando mi trasero y fue abriendo paso hasta llegar a mi entrepierna, me dio un apretón que se sintió delicioso haciendo que vuelva a gemir nuevamente, gire un poco que dando yo sobre ella, la bese mientras acariciaba su rostro tiernamente, estaba subiendo mi camiseta lentamente mientras acariciaba cada parte de mi espalda que quedaba descubierta, la subió hasta poder sacármela, me dio un poco de vergüenza la que desapareció solo con ver sus ojos y no importo nada ella me dijo que no podía tener un bra mas sexi, era un bra de media copa, color morado con encajes que quedaba perfecto con mi piel blanca, estaba sentada sobre ella con mi intimidad acariciando la suya solté mi cabello negro y la mire a los ojos, y ella volvió a pasarme su uñas por mi espalda.