Llego la hora de pagar la apuesta perdida - 5

Continuación de lo acontecido durante la semana en la que fui la putita de mi mujer y de nuestra amiga, en él os relato lo acontecido con el mensajero que nos trajo el pedido que habiamos hecho por internet y como disfrutamos con mujeres testigos de jehová

LLEGÓ LA HORA DE PAGAR LA APUESTA PERDIDA – 5

Continuación del relato LLEGÓ LA HORA DE PAGAR LA APUESTA PERDIDA – 4 http://www.todorelatos.com/relato/81198/

Hola aquí estoy nuevamente con la quinta entrega de lo acontecido en el pago de la apuesta que perdí, y contar como fueron desarrollándose los hechos, decir que somos un matrimonio, de muchos años de convivencia mutua, manteniendo una relación abierta, pudiendo cada uno mantener relaciones sexuales plenas fuera de la pareja, pero siempre bajo dos premisas, en caso de que una de las partes no este presente, se le deberá de contar todo lo acontecido y la segunda, que solo se podrán llevar los ligues a casa si ambos toman parte activa, si es uno el que realiza una conquista sin que el otro este presente, no podrá llevarla a casa.

En esta ocasión seré nuevamente yo, Juan, el que os relate como se desarrollo la semana en la que tuve que ser la putilla de mi mujer, Carmen, y de Monika, nuestra amiga y vecina, que cuando se enteró comentó que ella también se apuntaba, todo ello como consecuencia de la apuesta que perdí con mi mujer, debido a mi terquedad.

Aunque no hemos tenido tiempo de charlar ni de conocernos tú y yo, espero poder hacerlo pronto y poder degustar este serrano cuerpo que tienes, entre tanto cuídate y cuida bien a esta preciosa hija que tienes, le dije a Marga.

  • Yo también espero que me hagas gozar, por lo menos tanto como me ha dicho mi hija que le ha gozado ella contigo, y eso que no te las ha follado,  espero que nos veamos pronto nos dijo Marga al tiempo que nos daba un morreo a cada uno.

Una vez que nos despedimos de la madre e hija, nos encaminamos los cinco de regreso a casa de Virginia, donde preparamos algo para cenar, de lo que dimos cuenta los cinco sentados en el porche en compañía de Rex, el cual ya poco a poco iba congeniando conmigo, una vez que terminamos de cenar, recogimos la mesa antes de preparar el postre.

Cuando ya todo estuvo recogido, Virginia me hizo colocarme al igual que la noche anterior para extraer el yoghurt con el que en la playa me habían rellenado el culo, siendo el mismo degustado entre todos, para a continuación tomar unos cafecitos, y tras ducharnos y vestirnos emprender nosotros, el camino de regreso a casa.

  • Bueno nos tenemos que ir, como hemos prometido el domingo estamos de vuelta para pasar un par de días con vosotros, lo que no os puedo asegurar la hora en que llegaremos, pero a las 19:00 horas a más tardar estamos aquí, para que nos dé tiempo a cenar antes de que vuestra hija, Eider se tenga que volver y nos de tiempo a conocerla, le dijo mí mujer a Virginia.

  • De acuerdo, nos vemos el domingo, ir con cuidado, contesta ella, al tiempo que nos intercambiábamos nuestros fluidos a través de los morreos que nos fuimos dando unos a otros, terminadas las despedidas y tras saludar a Rex, al cual acaricie efusivamente, siendo correspondido por él lamiéndome la mano y la cara.

  • Ya veo que vas haciendo migas con Rex, me dijo Virginia después del morreo.

Es que no me queda otro remedio que ganarme su confianza si quiero acercarme a ti, la verdad que tienes un buen escolta, bueno cuídate y nos vemos el domingo.

Sin perder más tiempo, y tras recoger todos los accesorios sexuales en mi bolso, nos acomodamos en el coche y partimos con rumbo a casa, comentando durante el regreso lo mucho que habíamos disfrutado durante los dos días, tanto que hasta habíamos hecho nuevos amigos.

  • La verdad que hemos pasado unos días estupendos, comenzando desde el domingo en que cruzamos la apuesta hasta hoy, días en el que he gozado lo indecible, y no digamos mi coño, comentó mi mujer, ahora como mañana espero la visita de la señora menstruación, y esta es puntual siempre, dejare que descanse un poco, aunque eso nunca se sabe, ya que hay tíos a los que no les importa follar aún estando con la regla, cosa que a mi tampoco me disgusta.

  • Pues a mí me viene la próxima semana, el martes, por lo que tendré que aprovechar este sábado, y luego descansar durante los primeros día en Almería, le respondió Monika.

Una vez que llegamos a casa nos desnudamos, procediendo mi mujer a quitarme el cinturón, como premio al buen comportamiento y para que estuviera más cómodo, para a continuación colocarse ella un tampón para prevenir las consecuencias de la regla.

Una vez que estuvimos todos cómodos, me dedique a preparara unos Gin-Tonic, los cuales tomamos mientras charlábamos de los acontecimientos vividos durante los últimos dos días, hasta que ya rendidos nos metimos a la cama en cuanto acabamos con los pelotazos.

A las 9:30 de la mañana nos despertamos, colocándome mi mujer el Cinturón de castidad, para después desayunar tranquilamente los tres, mientras planificamos lo que íbamos a realizar a lo largo del día, teniendo en cuenta que nos llamarían de la agencia de transportes para realizar la entrega del pedido realizado al Sexshop, a lo largo de la mañana, comentando ellas que aprovecharían el Sábado por la mañana para pasar por la peluquería, por lo que llamaron a la misma, a fin de coger hora.

También decidimos entre todos el menú de la cena del sábado, que consistiría en unos entrantes (paté y un poco de embutido ibérico), una ensalada templada con langostinos y Vieiras, Merluza en salsa con unas almejas, y para rematar como postre un surtido de pastelitos.

Después de desayunar y recoger todo, llamamos a la pescadería y a la charcutería, para encargar los ingredientes necesarios para la cena del sábado, los cuales recogeríamos el mismo sábado por la mañana, aprovechando el resto de la mañana para tomar el sol en la terraza, en espera de que nos llamasen para entregarnos el pedido.

Una vez que terminamos de realizar todas las gestiones nos encaminamos a la terraza a tomar el sol, colocando para ello unas colchonetas y unas toallas sobre ellas, pidiendo yo a ver si alguna me podía poner la crema de protección solar.

  • Ya te la pongo yo, dijo Monika, y a ti también, le dijo a mi mujer, tras coger la crema y colocarse a horcajadas para comenzar a embadurnarme bien la espalda, para seguir con la parte delantera una vez que me hizo girar.

  • Ya estoy contigo, le dijo Monika a mi mujer, una vez que termino de darme crema, al tiempo que se colocaba de rodillas junto a ella, comenzando a masajear las piernas mientras le iba aplicando la crema, para ir subiendo poco a poco hasta llegar a su soberbio culo, aprovechando para sobárselo bien a conciencia.

  • Uhmmm, que bien me siento cielo, aunque eres una bruja, ya que estas aprovechando el ponerme la crema para meterme mano, haciendo con ello que me derrita de gusto, pero no pares.

  • No te preocupes, que te voy a dar un buen masaje además de ponerte bien de crema para que no te quemes, relájate y disfruta, que luego yo quiero recibir el mismo tratamiento, le contesto Monika a mi mujer.

Monika continuo poniendo crema por la espalda a mi mujer a la vez que la iba masajeando todo el cuerpo, haciendo que ella se relajase, comenzando a gemir levemente.

  • Esto ya esta, ahora date la vuelta que siga por la parte delantera, le dijo Monika a mi mujer, al tiempo que le daba una palmada en el culo.

  • Uhmmm que bien me siento, no sé si voy a ser capaz de ponerte la crema, ya que estoy como en una nube, totalmente relajada, le contesto mi mujer mientras se giraba para que continuara aplicándole la crema y el masaje por la parte delantera.

  • Ya veo ya, relajada y cachonda, la humedad y el brillo de tu coño te delatan, le contesto Monika, y eso que llevas el tampax colocado.

Cogió Monika un poco de crema en sus manos y comenzó a masajearle las piernas lentamente, progresando en dirección a su coño, del cual paso de largo para seguir con su estomago primero, antes de dedicarse de lleno a sus tetas, las cuales masajeó a fondo, aprovechando la ocasión para pellizcar sus pezones, haciendo que mi mujer comenzara a gemir.

Antes de proseguir, Monika se puso a horcajadas sobre la cara de mi mujer, al tiempo que le decía que le fuera comiendo el coño, mientras se dedicaba a ponerle crema por las ingles y el pubis, acariciando su coño a la vez que le pellizcaba el clítoris, logrando con ello que Carmen se esmerara en comerle el coño, deteniéndose de vez en cuando para respirar y gemir como consecuencia del placer que Monika le estaba proporcionando.

  • Así me gusta zorra, cómeme bien el coño, que vas a lograr que me corra, le decía Monika a mi mujer, a la vez que intensificaba las caricias sobre el coño y el clítoris de mi mujer.

  • Siii, no puedo aguantar más me corrooo, comenzó mi mujer a chillar, presa de un rico orgasmo al tiempo que jugaba con sus dedos en el coño de Monika, introduciéndole un par de ellos en el coño y follándola con ellos a la vez que le pellizcaba el clítoris.

  • Ohhhh sigueee no pares que ya me viene, gemía Monika, presa también del placer que mi mujer le estaba proporcionando, quedando tumbada junto a mi mujer, dándose un morreo con ella, mediante el cual ambas compartieron los jugos que ella había depositado en la boca de mi mujer.

  • Ahora te pongo la crema, voy a cambiarme el tampax que lo tengo empapado, le dijo mi mujer a Monika al tiempo que se levantaba y se dirigía al baño.

En cuanto volvió Carmen del baño tras cambiarse el tampax se dedico a ponerle la crema a Monika, para una vez terminado con dicho menester dedicarse ambas a disfrutar de los rayos del sol, mientras se reponían del reciente orgasmo.

Bueno chicas son las 12:00, voy a bajar a por la prensa y me paso por el super para coger alguna lechuga y algo para preparar una ensalada y de paso cojo unos filetes en la carnicería para preparar la comida, mientras seguís vosotras disfrutando del sol, les dije al tiempo que me levantaba y me encaminaba a la casa para ponerme un chandal y salir a la compra.

Cuando estaba en la carnicería, cogiendo los filetes, antes de subir a casa me llamaron al móvil, era el transportista para decirme que en 15 minutos me llevaría a casa el paquete, les comente que no habría problema que habría gente a esa hora en casa, tras colgar, recogí los filetes, previo pago al carnicero y me subí para casa.

Ya estoy de vuelta chicas, me acaba de llamar el transportista, así que estar atentas, que voy a la ducha, antes de ponerme a preparar la comida, les dije a las dos mientras me iba al baño, ya que aunque conectemos el timbre de la puerta, este no suena cuando nos llaman desde abajo, por lo que estar un poco al loro.

  • Vale ahora vamos, contesto mi mujer.

Me desnude y tras poner en marcha la cabina de hidromasaje con la sauna, me abandone al placer de la sauna durante unos 10 minutos para a continuación accionar el hidromasaje, momento en el que oí sonar el timbre del portero, al cual respondió mi mujer.

A los dos minutos sonó el timbre de casa, procediendo a abrir la puerta mi mujer tras comprobar que era el mensajero, llevándose esté una grata sorpresa al ver aparecer a mi mujer completamente desnuda tras abrir la puerta.

  • Hola buenos días vengo a traer un paquete para xxxxxx, le dijo el mensajero una vez repuesto de la primera impresión, sin levantar la vista de las tetas de mi mujer.

  • Soy yo, pero pase a la sala, ya que si no le importa me gustaría comprobar que el envío esta en perfectas condiciones y que viene todo, ya que en alguna otra ocasión hemos tenido problemas por que no llego en buenas condiciones, y como no comprobamos delante del repartidor, nadie se quiso hacer responsable.

  • Como me iba a importar, está en su perfecto derecho a inspeccionar el paquete, le respondió el Mensajero, accediendo al interior de la vivienda.

  • Ahí a la derecha le indicó mi mujer mientras cerraba la puerta antes de seguir al mensajero hasta la sala.

Una vez en la sala, mi mujer procedió a abrir el paquete poniendo sobre la mesa todo su contenido.

  • A ver vamos a comprobar que este todo lo que figura en el albarán, comento mi mujer, comenzando a repasar el mismo.

  • Según esto debe de haber 2 huevos vibradores inalámbricos, que aquí están, 1 disfraz de sirvienta, que también está, muy bien viene todo lo indicado en el albarán, comento mi mujer, ahora solo nos falta comprobar que este cada cosa en perfectas condiciones y que funcionen.

  • Hola, que hacéis?, pregunto Monika entrando en la sala, también en pelotas, haciendo que el mensajero comenzara a sudar, sin poder contener a su polla, la cual ya se marcaba perfectamente bajo su pantalón.

  • Aquí que acaba de llegar el pedido que hicimos el martes, y comprobando delante del Mensajero que todo este correctamente, para que no haya problemas a la hora de la reclamación si algo no está o se encuentra defectuoso, le contesto mi mujer.

  • Ahora iba a comenzar con los huevos vibradores, así que para probarlos, ten el huevo, ya le he puesto las pilas, e introdúcelo en tu coño, mientras yo pongo las pilas en el mando, le dijo mi mujer a Monika.

  • Antes tendré que lubricarlo un poco, contesto ella, comenzando a chupar el huevo, mientras miraba fijamente al mensajero.

  • Quieres ayudarme e introducírmelo tú?, le pregunto Monika al mensajero, mientras se acercaba a él y le acariciaba el paquete que tanto se le marcaba bajo el pantalón.

  • La verdad que si no le importa, para mí sería un placer ayudarla, le contesto esté, al tiempo que la cogía por la cintura comiéndole la boca ala vez que con la otra mano le acariciaba el coño, el cual comenzaba a encharcarse.

  • Por lo que veo, esto esta preparado para acoger al visitante, ya que lo tienes totalmente húmedo y lubricado, le dijo el mensajero, tras liberar la boca de Monika.

Lentamente el mensajero comenzó a introducir la bala vibradora en el coño de Monika hasta que esté engullo toda ella, haciendo que escapara algún gemido de la garganta de está.

  • Ten y comprueba si marcha bien el aparato, le dijo mi mujer al mensajero, entregándole el mando inalámbrico, mientras yo voy preparando el otro.

El mensajero puso en marcha el huevo, alternando los distintos ritmos, mientras el huevo iba realizando su trabajo, él aprovechaba para sobarle las tetas a placer, haciendo que de la garganta de Monika comenzaran a aflorar, cada vez con mayor intensidad, suspiros y gemidos indicadores del placer que su cuerpo estaba experimentando.

Ante semejante panorama, el mensajero, al que le dolía la polla debido a la presión a la que estaba sometida dentro de su jaula, se deshizo de sus pantalones y del slip, para ponerle la polla a Monika en la boca.

  • Ten putilla, cómeme la polla y calla, le dijo a Monika el mensajero, mientras volvía a hacerse con las tetas de ella, las cuales estrujaba a la vez que pellizcaba sus pezones, mientras programaba el ritmo más vertiginoso de los que el huevo vibrador poseía, llevando con ello a ella a las puertas del clímax, momento en el que paraba el huevo hasta que Monika se relajara, para volver luego a la carga de nuevo.

Así estuvo durante un buen rato, consiguiendo que ella disfrutara, parando el huevo cuando la veía al borde el orgasmo, haciendo que Monika comenzara a insultarlo, dejando de comerle la polla.

  • No, cabrónnnn no lo pares ahora que estoy a punto de correrme, por favor dale marcha de nuevo, no puedo más necesito relajarme más que nunca y para ello tengo que  dejar que mi cuerpo sea abrazado por el orgasmo que esta a punto de apoderarse de él pero que tu impides, así mismo necesito que descargues en mi boca la rica crema que este tremendo biberón contiene, por favor dale marcha y déjalo hasta que explote de placer mientras saboreo la rica crema de este biberón, suplicaba una y otra vez Monika al mensajero.

  • Calla y sigue comiéndome la polla, no voy a permitir que te corras tú sola, lo haremos los dos a la vez, así que ya sabes esmérate en lograr que comience a fluir la crema del biberón y te dejare que te corras, le dijo el mensajero.

Ella no se hizo de rogar y se aplico nuevamente en comerle la polla a la vez que con una mano se la acariciaba y con la otra jugaba con el culo de él, introduciendo en él mismo un par de dedos, con lo que consiguió que el chico comenzara a gemir presa del placer.

  • Así me gusta puta sigue que ya me viene y prepárate para tragar todo la crema que voy a depositar en tu boca, no quiero que se pierda una sola gota, comenzó a rugir él, síntoma de que estaba próximo a llegar.

  • Si cabrón córrete y lléname la boca de rica crema, me encantara tomarme un rico aperitivo como este, sigueee asíii no pares por favor que yo también me voy a correr, ya dame tu leche, siiiiii, gemía ella.

No pudiendo resistir por más tiempo, se abandonaron ambos al placer que sacudía sus cuerpos, experimentando un intenso orgasmos que hizo que los dos quedaran desmadejados sobre el suelo de la sala, teniendo que apagar huevo vibrador para que Monika se relajara y recuperara.

A que se deba tanto escándalo?, dije yo, apareciendo en la sala, cuando aún ellos se estaban recuperando.

  • Nada que estamos comprobando que el pedido este bien y probando que los artículos no tengan ningún defecto, me dijo mi mujer, por cierto mientras terminan de recuperarse estos dos para probar el otro huevo vibrador, vete probándote el vestido de sirvienta que llevaras el sábado, de esta manera comprobamos que este en perfectas condiciones.

Ayudado por mi mujer me fui poniendo el vestido, se trataba de un minivestido de tul semitransparente con la espalda descubierta, un minidelantal blanco con un lazito rosa, complementado con un tanguita negro y unas medias autosujetadoras en negro. La verdad que todo estaba en perfectas condiciones.

  • Uhmmm, estas preciosa putita, me dijo mi mujer, ahora extrae con cuidado el huevo vibrador que tiene Monika en el coño, para que probemos esté otro, ya que como estoy con la visita de la señora menstruación, es mejor que lo pruebe ella esté también.

Lentamente fui extrayendo el huevo del coño de Monika, la cual lo tenía empapado debido al reciente orgasmo, por lo que aproveche para saborear los ricos jugos y aprovechar a dejárselo limpio.

  • Mientras le limpias el coño, ten este otro huevo vibrador y vete insertándoselo con cuidado, una vez que termines de alojarlo en el interior del coño de la putilla está, te pones a saborear la polla del mensajero, quiero que la prepares para que me folle el culo con ese pollón que tiene, me dijo mi mujer.

Tal y como me había ordenado mi mujer, en cuanto acabe de insertar el huevo en el coño de Monika, me dedique a poner apunto la polla del mensajero, antes de que esté procediera a follarse el culo de mi mujer, la cual entre tanto se entretuvo en probar el huevo, haciendo que nuevamente su amiga comenzara a gemir de placer al experimentar los diferentes ritmos del mismo.

  • uhmmm, veo que has hecho un buen trabajo, me dijo mi mujer, mientras acariciaba la polla del mensajero en todo su esplendor y ya lista para perforar lo que se le pusiera por delante, retírate que lo voy a cabalgar.

Una vez que me aparte ella se puso de cuclillas sobre la polla del mensajero, de cara a él, y poco a poco se fue insertando la misma en el culo, hasta que los huevos de este chocaron con su culo, comenzando a cabalgar lentamente mientras aprovechaba para acariciarle el pecho pellizcando sus pezones.

-uhmmm siii que buena polla siento que me vas romper el culo, pero que placer tan grande me esta proporcionando, gemía mi mujer incrementando el ritmo, hasta comenzar a cabalgar frenéticamente sobre la polla del mensajero a la vez que seguía atormentando a Monika con los diferente ritmos del huevo que esta llevaba en su interior.

Mi mujer estaba ya totalmente desatada, síntoma de que estaba gozando lo indecible y a punto de sucumbir al orgasmo, por lo que aproveche para acariciar sus tetas a la vez que le mordisqueaba los pezones, cosa que le encanta y le enciende aún más, hasta que finalmente un intenso orgasmo se apoderó de ella, cayendo desmadejada sobre el pecho del mensajero, totalmente desfallecida.

Una vez que se hubo recuperado, ella misma se descabalgó de la polla del mensajero, a la vez que le decía a este que se follara a su amiga, que necesitaba urgentemente una buena polla, por lo que se fue hasta donde estaba Monika y tras extraer el huevo que esta llevaba en su coño, le ensarto de un solo golpe su pollón en el fondo del coño, haciendo que ella emitiera un breve gemido de placer.

Mientras el mensajero no cesaba en follar a nuestra amiga, yo me dedique a limpiar, con mi lengua, los jugos que mi mujer había soltado como consecuencia del reciente orgasmo, una vez que deje su coño bien limpio y tras un buen morreo con ella, me dedique a acariciar las tetas de Monika, la cual no dejaba de gemir de gozo, tumbada en el suelo, mientras el mensajero la follaba con un ritmo endiablado.

  • Toma rabo puta te voy a rellenar de rica crema, le dijo el montador, mientras le agarraba las tetas pellizcando los pezones, a la vez que seguía follándola duro sin bajar el ritmo, lo cual hacía que ella comenzara a gemir.

  • Si fóllame cabrón dale duro y relléname el coño con tu crema, quiero sentir como me rellenas este coño de zorra que tengo, asíiii sigue dame más fuerte, le decía Monika, sigue que ya me viene.

  • Espera cabrona vamos a corrernos juntos, que ya casi estoy yo también, le dijo el mensajero.

Monika que ya no podía esperar mucho más, comenzó a meterle un par de dedos en el culo al montador, para acelerar el orgasmo de este, cosa que logró ya que al poco ya estaba en puertas del mismo.

  • Ya zorra córrete que ya me vengo, comenzó a gemir el mensajero al tiempo que de su polla comenzaba a brotar la crema que se iba depositando en el coño de nuestra amiga, la cual también fue pasto de un intenso orgasmo, quedando ambos desfallecidos en el suelo de la sala.

Cuando se recuperó el mensajero mi mujer le dijo si quería ducharse, cosa que él aceptó, mientras se duchaba, tras indicarle Carmen donde estaba el baño, yo aproveche para recoger la mayor parte de la crema que había depositado el mensajero en el coño de nuestra amiga, una vez se hubo duchado procedió a vestirse, y tras agradecernos los momentos vividos se fue.

Una vez que el mensajero nos abandonó, yo compartí con ambas los últimos restos de la rica crema extraída del coño de Monika, para a continuación mientras ellas se duchaban, dedicarme a preparar algo para comer, tras quitarme el vestido de sirvienta, para preservarlo para el sábado.

Cuando estuvieron listas las dos, nos sentamos los tres a la mesa, en la terraza, para dar cuenta de lo que minutos antes había preparado, cuando estábamos comiendo llamo Juncal para decirnos que su madre iba a preparar un flan como postre para la cena de sábado, comentándole yo, que entonces cogeríamos un poco de helado, en lugar de unos pastelitos, que era lo que habíamos pensado.

Una vez que terminamos de comer y recogimos la mesa, preparamos unos cafés que nos los tomamos tumbados al sol, en la terraza tranquilamente tras volvernos a poner un poco de crema para evitar quemaduras solares, y conectar el timbre que tenemos en la terraza por si llaman a la puerta, para de esta manera estar más tranquilos, así mismo cogí el monitor portátil de la cámara de vídeo instalada sobre la puerta de entrada y que graba todo lo que ocurre en las cercanías de la misma, la cual tiene la opción de conectar con la central de alarmas, para cuando nos vamos de vacaciones, pudiendo ver las imágenes desde el móvil,  o tenerla en modo local, que solo se ven las imágenes en tiempo real en el monitor que tenemos en casa, además de grabar las últimas 48 horas.

Sobre las 17:00 horas sonó el timbre, señal de que alguien estaba llamando al timbre, por lo que mire en el monitor para ver de quien se trataba, se trataba de dos mujeres, una de unos cuarenta y tantos años y la otra algo mas joven de unos 25 años, llevaban un libro o algo parecido en la mano, seguro que son testigos de Jehová, comente yo.

 Pues déjalas, ya se cansarán me dijo mi mujer.

Como voy a dejarlas, iré a ver que es lo que quieren, y si como pienso son testigos de Jehová, las invitare a pasar, a ver si nos convencen o somos nosotros los que las hacemos que participen en una caliente fiesta, por que hay que reconocer que están para mojar pan, sobre todo la madurita, dije yo levantándome y dirigiéndome hacia la puerta de entrada, tal como estaba en pelotas y con el cinturón colocado.

Hola, buenas tardes, dije al abrir la puerta, que se les ofrece.

 Buenas tardes, contestaron ambas, pero por favor tápese, me dijo la más joven.

Perdonen pero es que en esta casa somos naturistas y nos gusta andar desnudos, además de disfrutar del sexo sin tabúes, les dije, ahora si quieran puedan pasar, dentro se encuentran mi mujer y una amiga, al igual que yo también desnudos, y charlamos de sus propuestas y de las nuestras mientras nos tomamos algo fresquito, toman un respiro, que las veo algo acaloradas, lo que ya no se si ello es debido al calor o por tenerme a mi delante en pelotas.

 No sé si debiéramos, me contesto la más madurita, que van a pensar los vecinos si nos ven entrar o salir, y si es verdad que al menos en lo que a mí respecta estoy algo sofocada, y aunque este mal decirlo, la causa principal es el tener delante un cuerpo macizo como el suyo totalmente en pelotas, bueno con el cinturón ese, que lo que hace es poner más morbo al asunto, y a una le alegra la vista cuanto menos.

Que piensen lo que quieran, pero no se preocupe que nadie les va a ver, ya que en la planta los únicos vecinos somos nosotros, y la amiga que esta con nosotros, por lo que al terminar la visita bajan en el ascensor y nadie sabrá nunca de donde salen, me alegra que le guste la visión de este cuerpo al desnudo, seguro que algo más que la vista le habrá alegrado, lo mismo que a su compañera, que decir no dice nada pero la vista no se aparta de mi entrepierna, y no se preocupen que puedo garantizar que no harán nada que no quieran mientras estén en nuestra casa.

Así que ustedes deciden si quieren pasar o no, les dije yo haciéndome a un lado para que entraran si les apetecía, tras consultarse con la mirada, la una a la otra durante unos instantes, finalmente accedieron a entrar.

 Maitane, esto queda entre nosotras y lo que aquí ocurra no se lo contamos a nadie, por que como se entere mi marido, termina conmigo y después se lo cuenta a su hermano, o sea tu padre, y este hace lo mismo contigo, dijo la madurita dirigiéndose a la otra, que resulto ser su sobrina.

 Si tía, pase lo que pase quedara entre nosotras, por la cuenta que nos trae, de todas las maneras, aunque no pase nada, merecen la pena estos minutos por el placer que supone contemplar un cuerpo como este, respondió la sobrina.

Lo que es por nosotros no va a tener ningún problema, lo único que podría ocurrir es que al final seamos nosotros los que lleguemos a convenceros para abandonar esta secta, con todos mis respectos lo de secta, y os integréis en una vida, en la que sin meterse con nadie, podáis disfrutar libremente de los placeres de la vida, en los que esta incluido el sexo en todas sus variantes, y de lo que seguro se alegrarán vuestros maridos o compañeros, les comente yo, mientras cerraba la puerta y las guiaba hasta la terraza.

 Por cierto que no me he presentado, me llamo Pilar, y como ya has podido escuchar esta es mi sobrina Maitane, comento la madurita cuando llegábamos a la terraza.

Encantado, yo soy Juan, ella es mi mujer Carmen, y esta es nuestra amiga y vecina Monika, dije yo tras dar un par de besos a cada una de ellas, presentando a mi mujer y nuestra amiga.

 En cuanto a lo que comentabas, puedes estar seguro que el primero que se alegraría si decidiera dejar esto sería mi marido, el cual no profesa para nada con esto, y alguno de los amigos de esta criatura también, ya que seguro que así podrían catar algo de su hermoso cuerpo, comento Pilar, después de saludar y dar los correspondientes besos a mi mujer y a Monika, al igual que su sobrina, esta algo más cohibida.

Sentémonos a la mesa, y a ver que queréis tomar, dije yo al tiempo que les señalaba la mesa, acercando una silla más.

 Para nosotras unas cervezas sin alcohol con limón, comentó mi mujer.

 A mí otra, comento Pilar.

 Yo tomare una coca cola, dijo Maitane.

Marchando unas cervecitas y una coca, dije yo mientras me dirigía en busca de las bebidas, mientras ellas comenzaban a conversar, siendo Monika la que rompió el fuego, comenzando a hablar de temas cotidianos, para que se relajaran, ya que para ellas no debía ser nada fácil, con sus convicciones religiosas, hallarse ante tres personas en pelotas.

Regrese con las cervezas y el refresco, sentándome con ellas a la mesa e incorporándome a la conversación que ellas mantenían, mientras dábamos cuenta de la bebida.

En cuanto a lo que os ha traído aquí, y antes de que comencéis con vuestro habitual discurso, voy a exponer mi punto de vista, ya que el discurso de los testigos de Jehová lo he escuchado en repetidas ocasiones, ya que nunca dejo de atender al que llama a mi puerta y que se puede resumir en dos puntos, que sois un cáncer para la humanidad y unos intransigentes, no solo vosotros si no todas las religiones, además según vuestras creencias toda la humanidad estamos abocadas al peor de los destinos sin remedio, comenzando así una discusión en la que yo iba rebatiendo uno por uno los argumentos que ellas aducían.

Además os permite vuestro credo disfrutar libremente de vuestra sexualidad con alguien distinto a vuestro marido?, y digo marido, no amigo o pareja y ya no hablemos si se trata de disfrutar con alguien del mismo sexo.

  • Pero para disfrutar del sexo no hace falta tener que buscarlo fuera del matrimonio, comento Pilar.

Claro que no hace falta, pero a veces es bueno experimentar cosas nuevas, máxime si ambas partes de la pareja están de acuerdo, lo mismo que se pueden probar los placeres del mismo sin necesidad de atarse a una persona de por vida, o se trata de truncar la vida a los jóvenes teniendo que atarse a una persona para poder follar?.

Es mejor vivir en una hipocresía permanente, pregonando la abstinencia y la confesión, hay que ser castos y puros, y si caes en la debilidad de la carne, hay están los gurus, los cuales se está demostrando son los mayores pederastas y puteros, para que te acerques a contarles que has sucumbido a los placeres del sexo y tras imponerte una penitencia ya estes de nuevo en condiciones de poder pecar, remarqué.

  • La verdad que tienes razón, me dijo Maitane, por que hasta masturbarte es ilícito, con lo cual una chica joven como yo, o se mete en un congelador, o si no los gurus como dices tú, se van enterando de todas mis noches de soledad, tras haber estado con los amigos y tener que autosatisfacerme con mis dedos o lo que mejor tenga a mano en esos momentos, para terminar algo calmada pero con una gran carga de culpabilidad por haber transgredido los preceptos.

Crees tú que es licito que una mujer hecha y derecha, como tu sobrina, tenga que vivir con ese sentimiento de culpabilidad cada vez que decide dar rienda suelta a su propia sexualidad, y que a sus, que 25 años?, aún no haya podido contemplar y acariciar un cuerpo desnudo diferente al suyo, ya sea de hombre o mujer, le dije a Pilar, y no hablemos de temas como las transfusiones.

  • Y que hay de malo, en que dos mujeres nos acariciemos y nos enfrasquemos en una batalla sexual, si esta es querida y consentida por ambas?, le pregunto a Pilar mi mujer mientras comenzaba a acariciar los pechos de Monika, si solo se trata de disfrutar de los placeres que la vida pone a nuestro alcance.

  • No te gustaría unirte a nosotras, preguntó Monika a Maitane.

  • La verdad que no me importaría, y sí, tengo 25 años, respondió ella, lo mismo que acariciar el cuerpo de él, lastima que lo más sabroso lo tiene encerrado en esa especie de cinturón, señalándome a mí, al tiempo que se levantaba de la mesa y se acercaba a Monika para acariciar suavemente sus pechos.

  • Si como dijiste al principio, al final has sido tú el que con tus irrefutables argumentos has terminado convenciéndonos para que nos apuntemos a disfrutar de la vida, y puedo asegurarte que el que más va a disfrutar con este cambio es mi marido, al cual en cuanto lleguemos a casa voy a hacer que despierte de su letargo, contándole todo lo que aquí pase si fuera necesario, me dijo Pilar, al tiempo que se desnudaba ofreciéndome su boca, seguro que conociéndole como lo conozco, tu tío me entenderá y perdonara.

  • La verdad que llevas una ropa interior de lo más sensual, no te imaginaba yo embutida en este tipo de corsetería, le dijo Monika, al comprobar el conjunto de lencería que llevaba

  • Como premio a vuestra reconversión, voy a liberar del cinturón a mi marido por unas horas, para que de esta manera podáis disfrutar del sexo en toda su expresión si así lo deseáis, por que aunque no lo parezca, él no es ningún sumiso a mis ordenes, en estos momentos se encuentra así debido a su cabezonería y como pago de una apuesta que él planteo y finalmente perdió.

En cuanto mi polla estuvo libre de su jaula, Maitane dejando a Monika se abalanzó sobre ella, tras postrarse de rodillas ante mí, comenzando a acariciarla torpemente, pues era la primera polla que veía al natural y que acariciaba, se entretuvo a besarla y acariciarla recorriendo con la lengua toda su longitud, haciendo que está, ante tales caricias, fuera despertando de su letargo.

Mi mujer y Monika se acercaron a ella, y comenzaron a desnudarla para que estuviera más cómoda con la colaboración de la chica, comprobando que también ella llevaba un conjunto de lencería de lo más sexy, al tiempo que mi mujer se entretenía en saborear sus tetas, aprovechando para pellizcar sus pezones, logrando que la joven comenzara a mojarse, mientras tanto Monika tumbada en el suelo con la cabeza entre sus piernas le comía el coño, en tanto yo acariciaba las tetas y el coño de la tía, al tiempo que le comía los morros, repasando con mi lengua sus encías.

  • Ahora métete la polla en la boca, como si fuera un rico helado y comienza a saborearla como haces con los helados cuando no quieres que se acaben, aprovechando para jugar con la lengua, a la vez que con la mano le vas acariciando los huecos, le dijo mi mujer a Maitane, al tiempo que acercaba mi polla a su boca, mientras que Monika intensificaba el tratamiento que estaba aplicando al coño de la Joven, la cual comenzaba a gemir.

  • Si, que rico, no tiene ni punto de comparación el hacérselo una sola o en que se lo hagan, como es el caso, nos comento Maitane, dejando de saborear por un instante mí polla, seguir que ya siento la llegada del orgasmo.

Tanto mi mujer como Monika intensificaron su trabajo, haciendo que ella comenzara a convulsionar a la vez que se aplicaba con mas ganas en comerme la polla, hasta que finalmente sucumbió a un intenso orgasmo, quedando desfallecida en el suelo, siendo reconfortada por mi mujer que se dedico a acariciar su cara y a darle mimos.

  • Que tal, te ha gustado?, le pregunto mi mujer a Maitane cuando esta se reincorporo ya más repuesta.

  • Ha sido increíble, en mi vida había disfrutado tanto en mis solitarias sesiones de autosatisfacción, le respondió ella, y eso que todavía no he follado.

  • Me alegro de que hayas disfrutado, le respondió mi mujer, en cuanto a lo de follar, yo te aconsejo que medites bien con quien quieres perder el virgo, para lo cual debes de tomarte tu tiempo, no hace falta que explores todo en un día, mi consejo es que lo pierdas con alguien experimentado, para que el recuerdo sea de total satisfacción, y no con el primer jovencito que se te ponga a tiro, pero eso como te he comentado es una decisión que solo tú debes de tomar, sin ningún tipo de presión, pudiendo ser él si así lo decides, quedando cualquier otro día.

Entre tanto Pilar se arrodilla a mis pies aferrándose a la polla que su sobrina había liberado, comenzando a mamármela lentamente, notándose su inexperiencia en el tema, lo mismo que había ocurrido con su sobrina.

  • Es la primera polla que me voy a comer, me dijo, así que tendrás que tener un poco de paciencia e irme enseñando, quisiera que para finalizar la mamada te vinieras en mi boca y probar por primera vez el semen. Ten en cuenta que vas a ser el segundo hombre al que vea en pelotas y que me acaricie el cuerpo, ya que hasta ahora solo lo había hecho con mi marido, por lo que me gustaría terminar saboreando la rica crema, y si queréis otro día, con la presencia de mi marido, si el quiere después de que le cuente esta noche todo, o sin el quedamos de nuevo para que me folles.

Me parece fantástico, y no creo que haya ningún problema en quedar en otra ocasión, como os he comentado al principio aquí no ibais a realizar nada que no quisierais, en cuanto a lo de mamármela, como bien le ha dicho mi mujer a tú sobrina, comienza suave como si estuvieras degustando un helado que no quieres que se acabe, y poco a poco tu misma iras cogiendo confianza y experimentando cosas nuevas, también puedes usar la lengua para estimular el glande, mientras tienes la polla en el interior de la boca.

Por la crema no te preocupes, cuando este apunto de correrme te aviso para que este preparada, aún así la primera vez es posible que no puedas con todo, no te preocupes, deja que fluya por tus labios al exterior o apartarte para que termine sobre tus tetas, que ya se encargaran mi mujer o Monika de recogerlo y dárselo a probar a tú sobrina, que seguro que quiere degustar el exquisito manjar.

 La verdad que tu mujer tiene razón en cuanto a follar por primera vez y que me desvirguen, pero si que me gustaría probar el semen, dijo Maitane, así que acuérdate de tu sobrina y guarda algo para que lo saboree, ahora mientras tú le comes la polla, yo voy a recompensar a estas, comiéndome sus coños, cosa que será la primera vez que haga en mis 25 años de existencia, espero que me guste y quedéis satisfechas vosotras.

Sin más preámbulos Maitane comenzó por Monika, en cuyo coño se amorró al tiempo que sus manos jugaban con los pechos de esta, aprovechando a pellizcar sus pezones, tal y como anteriormente habían hecho con ella, haciendo que del mismo comenzaran a emanar los fluidos, síntoma de que comenzaba a gozar, fluidos que la joven se encargaba de saborear ante de tragárselos.

 Así putilla que pronto aprendes sigue no pares, sii muérdeme la pepitilla, que rico no puedo más me voy a correr, comenzó a gemir Monika mientras la joven intensificaba la comida de coño hasta lograr que finalmente se viniera en su boca, encargándose Maitane de recoger todo lo que fluía del coño de nuestra amiga, hasta dejarlo bien limpio, dándose a continuación un morreo con ella para compartir sus propios jugos.

Mientras tanto Pilar seguía saboreando mi polla, con un ritmo cada vez más cadencioso, aprovechando también para jugar con sus dedos en mi culo, aumentando con ello la intensidad de mi placer.

Una vez que termino con Monika se dirigió hacia mi mujer, a la que comenzó por acariciarle con sus manos las tetas y el coño, a la vez que tras comerle los morros comenzó a descender lentamente con su boca en dirección a sus tetas primero, donde se entretuvo en succionar y morder los pezones, mientras que sus manos seguían librando una ardua batalla en el coño de mi mujer, haciendo que esta comenzara a gemir sin control, señal de que estaba disfrutando de lo lindo.

 Pues si que aprende pronto esta putilla, va a lograr que explote en un antológico orgasmo, así sigue como siento tu lengua torturándome el clítoris si dale más rápido que ya llego siiii, me corrooooooo.

Justo en el momento en el que mi mujer anunciaba su llegada a la gloria, yo también comencé a sentir los primeros síntomas de la inminente corrida, avisando de ello a Pilar para que estuviera preparada.

Si sigue así que me ya me viene prepárate que hay te va toda la crema, ohhhh siiii, exclame lanzando las primeras andanada en la boca de Pilar que ella acogió sin inmutarse, una vez que acogió las tres primeras se retiro dejando que el resto cayera sobre sus tetas, cogiendo a su sobrina que estaba expectante y dándole un impresionante morreo en el que le paso parte de la crema saboreando entre ambas, mientras mi mujer y Monika se dedicaban a limpiar lo que había caído en sus tetas, así como las últimas gotas que quedaban en mi polla.

Cuando terminaron de limpiarle las tetas ella se levanto y se fundió en un morreo conmigo en el que compartió parte de la crema que se había reservado para degustarla conmigo.

Una vez repuestos todos, nos tomamos otras cervecitas, mientras charlábamos de lo acontecido y nos intercambiábamos tanto los teléfonos como los E-mail.

Que tal te los ha pasado Maitane, dispuesta a seguir explorando los placeres del sexo?, le pregunte a la joven.

 Como ya os he comentado no tiene ni punto de comparación con lo que disfrutaba en mis solitarias sesiones, por lo que puedes asegurar que voy a seguir explorando las diferente maneras de gozar del sexo, y como bien me ha aconsejado tu mujer, tras meditarlo bien durante unos días quizás os llame para que seas el primero en hacerme gozar tras follarte mi coño.

Ahora ya sabes como encontrarnos, aunque comentaros que nos vamos a ir unos días de vacaciones a partir del  Martes, ya que antes tenemos unos compromisos, y no vamos a volver hasta el domingo día 7 de septiembre, por lo que a partir de ese día podemos quedar si os apetece, si bien tenemos que desplazarnos unos días a Barcelona por asuntos profesionales, les comente.

 No os preocupéis, que tampoco hay tanta urgencia, comento Pilar, además así tengo algo de tiempo para convencer a mi marido, si no quiere que sea yo sola la que comienza a disfrutar del sexo, cosa que conociéndole como le conozco, dudo que desaproveche esta ocasión, ya os contare.

 Cuando terminéis podéis ducharos antes de vestiros, así estaréis mas frescas, dijo mi mujer, lo que si me gustaría es quedarme con vuestros tangas, me gusta coleccionar las braguitas de las chicas con las que estoy por primera vez.

 Por mi no hay problema, dijo Pilar, así cuando esta tarde llegue mi marido a casa le contare todo, enseñándole que estoy sin bragas y a ver si como espero me folla y se apunta al carro de la exploración del mundo del sexo,  o de lo contrario tengo claro que lo explorare sin él.

 Por mi parte, tampoco hay problema, lo único me gustaría que me dejarais alguna de vosotras algunas usadas para ponérmelas y hacerme un solitario esta noche.

 Eso esta hecho, la única pega que no tenemos ninguna que este todavía mojada con nuestros jugos, pero estas como puedes comprobar se nota que estuvieron bien empapadas, le dijo Monika entregándole unas de las usadas por ellas los días anteriores que cogió de la Lavadora, ya que hasta la noche no teníamos previsto ponerla.

Una vez que nos hubimos duchado todos sobre las 19:30, abandonamos todos juntos la casa, ya que nosotros habíamos decidido salir a dar una vuelta y picar algo fuera de casa.

Como ya me he extendido bastante, y con solo recordar aquellos intensos días me he puesto como una burra en celo, voy a ver si me alivio tomando una ducha fría, ya que en estos momentos me encuentro solo en casa, y no tengo a nadie que me vacíe las marmitas, en  próximos relatos os contaremos como fue transcurriendo el fin de semana, en el que puedo asegurar que a pesar de ser la putilla de ambas disfrute tanto o más que ellas.

Un beso a todos y todas  los lectores y lectoras, los comentarios son bien recibidos.