Liz (5: la esclava p.i.)

Este relato es solo para personas con un criterio formado, personas maduras, pero aún así algunas partes podrían darle asco y sentirse moralmente heridos, para todas aquellas personas sensibles, o que no estén acostumbrados a emociones fuertes, les ruego que no lean este relato.

A medida que iba avanzando unida a la cadena de los sumisos sentía muchas manos que la iban tocando por todos lados, no podía ver quien la tocaba pues estaba vendada, de pronto sintió una caricia en su vagina, era muy tierna la mano que la acariciaba, era la mano de una mujer que dijo: "que rico chochito este". Liz se congeló al escuchar la voz de la mujer, era Mariza, la esclava se detuvo, dejo de caminar, pensaba que no quería estar allí con aquella mujer, cuando Liz se detuvo paró la fila completa, pues iban todos enganchados a una cadena. Solo cuando una picana eléctrica se descargo en una de sus nalgas Liz salió de su transe.

Los sumisos escuchaban todo tipo de insultos y manoseos, uno que otro golpe con la mano y más de alguna patada, luego la fila se detuvo y estaban todos los sumisos y sumisas en línea, luego los amos comenzaron a ponerse a su alrededor, detrás de Liz se colocó un hombre, que le amasaba el culo con mucho afán, y decía:

Que rico culo tiene esta perra, ¿De quién es? – y leyendo la chapa del collar de la esclava preguntó otra ves - ¿De quién es Liz?

Es mía – dijo Carlos, que estaba por ahí follando a otra chica – esa perra es mía, ¿A hecho algo que te disgustó?

No, pero tiene un culo de putamadre – y sacó el plug anal que llevaba

Liz respiró aliviada, ya le empezaba doler aquel plug, lo traía desde que había salido de casa, respiró aliviada con la boca, pero en el momento en que abrió la boca el tipo metió el plug hasta su garganta, ella saboreo su culo y sabía a mierda, pero lo podía tolerar.

Pronto a eso sintió la voz que mas odiaba en el mundo, la culpable de su esclavitud, la persona con la que su amo gozaba, era Mariza que le decía: "que bueno que nos volvemos a encontrar, así podremos divertirnos un poco".

Dicho esto Mariza no perdió tiempo y comenzó a besar los pechos de Liz, mordiendo sus pezones y tirando de los anillos con sus dientes, también sintió que el hombre que estaba atrás de ella posaba la polla en su entrada posterior, otra vez su culito sería penetrado, pero como traía un plug ya estaba algo dilatado, así que no le dolería tanto, la folló con mucha fuerza, mientras tanto Mariza metía tres dedos en la vagina de Liz, Mariza podía sentir el pene de Aníbal (así se llamaba el hombre que enculaba a Liz en ese momento) en el culo de Liz a través de su vagina, esto volvía loca a Liz que se corrió sin poder impedirlo, esto lo sintió Mariza que dijo:

Esta maraca se ha corrido

Si, lo e sentido – agregó Aníbal – ¿Qué castigo le daremos?

¿Que sugieres que le hagamos Carlos? – preguntó Mariza a Carlos.

Son libre de hacer con ella lo que gusten – respondió Carlos que orinaba la boca de otra esclava que había por allí.

Mariza se dirigió a una mesa que había en el salón y saco de un frasco chiquito dos píldoras, con las píldoras en la mano llamo a dos esclavos hombres que habían por allí, les saco la venda de los ojos a ellos (que hasta ese momento aun estaban vendados) y luego le saco la venda de los ojos a Liz, que prácticamente era la única que quedaba vendada, Aníbal se limitaba a mirar con una gran sonrisa en la cara.

Mariza ordenó a los chicos que tenían alrededor de 25 años traer una "sabana de ensuciamiento", Liz no sabía lo que era eso, pero pronto lo averiguaría, los chicos volvieron con una sabana blanca que pusieron extendida en el piso, luego Mariza puso en la boca de cada chico una de las pastillas que tenía en la mano y se las hizo tragar su orín, que los sumisos tuvieron que beber directamente de su vagina, arrodillados delante de Mariza bebieron con asco mientras ella meaba sus bocas, cuando ambos tragaron la píldora con el meado de la mujer le dieron las gracias, ella les explicó, les acabo de dar un laxante, cuando les haga efecto quiero que cubran de mierda a esta perra.

Mientras tanto Aníbal saco el plug de la boca de la perra y lo coloco en cu culo otra vez, y le ordeno tocar sus tobillos con sus manos sin doblar las rodillas, cuando Liz lo hizo quedó con su sexo totalmente expuesto al igual que su culo, con el plug en él, se veía claramente aquel plug, y el Amo Aníbal se divirtió azotando con la palma de la mano las carnes de las nalgas y la parte interior de los muslos de Liz

Ella estaba acostumbrada a ser humillada y castigada, pero no podía evitar sentir vergüenza y ponerse roja al ser azotada por alguien que no conocía y delante de tanta gente, pasaron cerca de 5 minutos y los chicos dijeron:

Ama, estamos listos.

Esperen – respondió Mariza, los chicos aguardaron.

Pasaron cerca de 5 minutos más y Mariza no les ordenaba evacuar, comenzaban a sentir calambres de tanto aguantar, esto lo percibió Mariza pensó: "ya esta bien", colocaron a Liz acostada de espaldas sobre el piso, encima de la sabana, luego colocaron a los chicos de cuclillas sobre Liz, con un pie a cada lado del cuerpo de la esclava, a uno lo colocaron a la altura de su vagina, y al otro a la altura de su cara.

"Abre la boquita preciosa", ordenó Aníbal, ella lo hizo, los chicos no podían aguantar más, ya sentían un dolor muy intenso pero no se quejaban, solo cuando Mariza dio la orden de "liberen" los chicos soltaron su mierda en Liz aquel lugar apestó a diablos, y la boca de Liz los degusto sintiendo repulsión, tenia la boca llena de mierda al igual que sus tetas, su pecho, parte de sus piernas, prácticamente todo su cuerpo. Los chicos se sintieron muy aliviados, aunque con vergüenza.

"Levanta las piernas y enséñame tu culo perra" digo Mariza, cuando ella lo hizo, la ama volvió a sacar el plug de su culo, "baja las piernas ordeno luego" ella obedeció nuevamente, Mariza untó el plug en la mierda que estaba sobre Liz y lo metió en su boca, Liz sintió tanto asco que vomito sobre si misma. Todos los amos en el lugar rieron de ella, y ella lloró por la humillación, también pensó que la iban a castigar por no haber aguantado tanto, pero lejos de eso le ordenaron salir del salón con la sabana de ensuciamiento, Liz ya sabía por que se llamaba así.

La sacaron a un patio muy amplio y ahí la dejaron durante unos 20 minutos, salían algunas chicas vomitadas, otras con el culo roto sangrante, chicos con el cuerpo lleno de surcos, algunos sangraban, de pronto salió Amara, venia muy adolorida, la habían pateado mientras comía la mierda de otra esclava en una sabana de ensuciamiento.

Liz con Amara se quedaron arrodilladas muy juntas mientras esperaba que salieron los demás esclavos:

Amara, esto es terrible, tenías razón, nunca había sufrido algo parecido a lo que he vivido acá.

Te lo dije, pero a ti no te hicieron nada, yo tuve que comer mierda de otra chica y como no vomitaba me patearon en el estomago, y no pude contener el vomito.

Yo pensé que me castigarían por vomitar – dijo aun con asco Liz

No, no pueden castigarte por eso, es natural que vomites, es mas, eso es lo que querían, ¿Me as escuchado? A mi me han incitado al vomito y a patadas. Pero bueno ya paso lo peor.

¿Cómo es que esto no acaba aun? – preguntó Liz

Pues no, ahora nos asearan y nos llevaran al comedor para que sirvamos la cena y luego viene el show de noche

¿Y como es ese show?

Es lo mismo que lo de recién nos hacen lo que quieren, disfrutan de nosotras, por cierto tu amo tiene una pija muy grande, me la ha metido por el culo y casi me lo desgarra.

Liz no dijo nada, pues ella debía cumplir ordenes, cambio el tema y preguntó - ¿Y como as sabido que mi amo es Carlos?

Es que me fije que mi ama le ha preguntado al tuyo que castigo sugería para ti.

Así que tu ama es Mariza – agregó Liz

Amara afirmó con la cabeza.

Cuando terminaron salió el último esclavo se dio cuenta que había contado bien anteriormente, en efecto los sumisos eran quince; cinco hombres, entre ellos los que la habían cagado y 10 chicas, entre ellas Amara y ella misma, paso un momento y los hicieron ponerse en una fila, las quince personas lo hicieron de inmediato, luego un tipo vestido totalmente de cuero con una mascara en su cara y con una manguera en la mano. Ordenó: "abran los brazos y las piernas", cuando todos estuvieron abiertas de brazos y piernas el tipo con la manguera descargó un chorro de agua a presión lavando a todos los sumisos, luego por atrás las mojo también, el agua estaba muy fría y los pezones de las chicas se pusieron duros y grandes por el contrario del penen de los chicos, que se encogieron mucho con el frío.

Luego llego otro hombre muy grande también vestía de cuero, traía un bolso también de cuero que dejo en el piso cuando vio a los chicos desnudos comenzó a mofarse de que sus penes estuviesen encogidos decía cosas así como: "mira estas maracas mas que pene tiene clítoris" o "mi gato tiene la pinga mas grande que estos putos" a uno de los chicos obviamente no le gustó lo que decía aquel hombre y era muy novato en el mundo de del sado, miraba con rabia al hombre vestido de cuero, este último se fijó en eso y se le acerco diciéndole: "que me ves puto" se iba dar la vuelta para marcharse y seguir burlándose en general de los sumisos y rápidamente se dio una vuelta y le dio una tremenda patada en las bolas a el muchacho, que con agudo grito cayo al piso llorando del dolor, se retorcía en el piso por el dolor.

El tipo que acababa de golpear al sumiso saco del bolso que trajo una botella pequeña con una solución, que fue vertiendo en los sumisos, era una especie de jabón, con ella los sumisos se lavaron el cuerpo y el pelo.

Luego todos tuvieron que abrir la boca y sentir los dedos del tipo de la manguera, los metía en sus bocas para lavarla, lo hacía con brutalidad, algunas de las esclavas sintieron nauseas, cuando terminaron de lavar sus bocas la orden fue: "todos inclínense en 90 grados". EL tipo de la manguera les miraba los culos a todos, se acerco y fue metiendo la manguera en el culo de todas las sumisas, el agua helada que inundaba el ano de las esclavas era muy molesto y a muchas les causaba dolor, después de que les llenaban el culo les ordenaban evacuar, para las chicas era un alivio, luego llego el turno de los varones; muchos algunos gritaban cuando les metieron la manguera, los cuales fueron amordazados y nalgueados.

Terminado el baño pasaron unos minutos antes de que los esclavos volvieran a entrar a la casa, entraron a la cocina donde habían platillos preparados, los cuales fueron llevando al comedor, donde estaban los comensales sentados en una gran mesa a Liz le todo servir a algunos entre ellos Mariza que no desperdició la oportunidad de nalguearla y tocarle la concha a su gusto, - "este es el plato que yo quiero comer" - dijo Mariza pinchando con un tenedor una nalga de Liz. Jajajaja ya habrá tiempo para eso dijo otro comensal por ahí.

Tres de las chicas más pequeñas fueron escogidas por uno de los amos para ser los candelabros de la mesa, es decir, fueron subidos a la mesa puesto en la siguiente posición: arrodilladas, inclinadas hacia delante, posando las tetas sobre la mesa, con el culo en pompa y con las manos en la espalda, una ves que las tres chicas adoptaron esta posición fueron colocadas velas en sus culos y cuando comenzó la comida fueron encendidas estas velas, al principio no hubo problemas, pero cuando las velas comenzaron a derretirse y la espera de estas comenzó a quemar a las niñas estas se quejaban muy despacito, esto gustaba a los comensales.

Todos comieron muy a gusto, tenían a los esclavos como sus mozos para atenderlos y a veces uno que otro amo tiraba algo de comida al piso para algún esclavo que tenían que comerlo como los perros.

Antes de que llegara la hora del postre sacaron las velas del culo de las chicas y se divirtieron quemando con la esperma de las velas la espalda, culo, coño y tetas de las mismas esclavas al terminar fueron enviadas a ser lavadas otra ves y a las jaulas, había sido mucho para ellas por ese día, así que las vendaron de ojos, taparon los agujeros de les que correspondían a esas esclavas, en este caso a una le metieron un plug anal en el culo y a otra una bola de goma con un cordón que estaba atado a la nuca en la boca.

Llegó la hora del postre, esa noche todos comieron frutas tropicales de la estación, Aníbal llamó a Amara a su presencia y ella acudió rauda, le ordenó agacharse y exponerle su culo, cuando lo hizo Aníbal tomó varias uvas y comenzó a meterlas en el culo de Amara una por una, a ella no le desagradaba, era muy pervertida, por eso Mariza la había elegido para hacerla su esclava, fueron metidas 13 uvas, luego fue llamada Liz, era obvio que Aníbal tenía una fijación con ella, y le ordenó sacar las uvas del culo de su amiga usando su boca, solo podía usar sus manos para abrirle el ojete y nalguear a la otra sumisa.

Antes de empezar Carlos le hizo una apuesta a Mariza, si Liz lograba sacar todas las uvas del culo de la chica en 5 minutos o menos, Amara sería castigada, por el contrario si no lo conseguía sería ella la castigada, Mariza aceptó y dijo a Amara: "será mejor que aprietes bien ese culo perra" a lo que Amara respondió: "si ama, como lo desee", Carlos por su parte dijo a Liz: "usa bien ese lengua de puta que tiene o te ira muy mal" Liz respondió aterrada "si amo, lo haré". EL tiempo comenzó a correr y Amara estaba parada con las rodillas levemente dobladas y las manos en las rodillas con el culo hacía Liz, la que se lo tomó y sin contemplaciones se lo abrió muy fuertemente con la manos, se podía ver una uva, Liz metió su lengua en lo profundo del ano de Amara y consiguió sacar la primera, la mostró a los comensales, luego una orden de Aníbal hizo que dicha uva fuera pasada de boca en boca por todos los esclavos y el ultimo la comiera, mientras tanto Liz ya estaba buscando la segunda uva, algo se podía ver de ella, pero estaba muy adentro, con la lengua la trajo hacia sí y con una nalgada muy sonora la uva salió, se la pasó a una esclava cerca suyo de boxea en boca para que el ultimo en recibirla la comiera, "esto será muy fácil" pensó Liz, "me he librado del castigo que me impondrían", cuando ya faltan por salir 4 uvas el trabajo se volvió muy dificultoso, por mas que chupaba y chupaba y nalgueaba a Amara las uvas no salían, estaba muy adentro.

Todos los comensales expectantes veían el show y reían y se mofaban de los esclavos, Amara lo estaba pasando de maravillas, ya había tenido tres orgasmos e iba por el cuarto, la cara de Liz estaba llena de los lujos de Amara que hacia lo imposible por apretar su culo y dejas las uvas en su sitio, hace mucho que era esclava de Mariza y sabía que sus castigos eran ejemplares al tratarse de apuestas, Liz consiguió otra uva del culo de su amiga y los aplausos no se hicieron esperar, las mofas tampoco. Cuando ya solo faltaba un minuto para que se cumpliera el tiempo reglamentario a Liz le quedaba una sola uva que extraer, todo el mundo estaba expectante, no se podía negar que lo estaba haciendo muy bien, y chupaba y chupaba y seguía nalgueando a Amara, la uva ya venía y Amara estaba loca de placer, logro llegar al orgasmo una ves mas en la boca de Liz, sintió en su culo que Liz tocaba la uva, eso la bajo de la nube en que estaba y se aterro al mirar a su ama, que la miraba con ojos de sádica.

Tengo que pensar en algo rápido pensó Amara, cuando Liz estaba por alcanzar la uva sintió un líquido muy caliente correr por su cara, escurrir por sus tetas, bajar por su lisa barriga y caer al suelo, Amara se estaba meando en ella, otra ves todos rieron y burlaron, pero Liz se aprovecho de que Amara relajara su esfínter y dio una muy fuerte nalgada a su compañera y la uva salio de su culo y Liz la tenía en la boca.

Alguien por ahí consulto el tiempo, para la sorpresa de todos, Liz lo había logrado justo cuando se agotó el tiempo, la disputa comenzó:

la apuesta era que si lo lograba dentro del tiempo permitido – decían unos

Al igual que Amara debía mantener las uvas mas de 5 minutos para que Liz perdiera – decían otros

Ambas fueron puestas en cruces de madera en la muralla del salón, de espaldas a los amos, fueron azotadas con una látigo durante 10 minutos, otra ves todos reían, escupidas, Mariza se paro se su asiento y llamo a uno de los esclavos y le pidió que le trajese algo, el esclavo pronto llego con un consolador de esos que se ponen las mujeres para follarse, pronto mariza lucía una verga que en su tronco tenia granitos, eran como bolitas muy pequeñas adheridas al dildo, se puso detrás de Liz y pozo su verga en la entrada de su ojete y le dijo: "será mejor que seas buena conmigo, porque esto si que te va a doler", tomó de los anillos de sus pezones y tiro muy fuerte de ellos, el grito de Liz no se hizo esperar, pensó que le sacaría los pezones, los retorcía y apretaba sin ninguna delicadeza, cuando pensó que el dolor era insuperable Mariza metió toda la verga con granitos el hoyo trasero de Liz, ella gritaba y lloraba desesperada, trataba de moverse pero la ataduras se lo impedían, esos granitos le estaban destrozando el culo, no sabía que era peor, que Mariza le estuviera arrancando los pezones halándolos desde los anillos y la bestialidad con la follaba por el culo con ese maldito dildo con granos.

Dime que te gusta que te follé así – dijo Mariza, pero Liz no quería decirlo

Dilo, di que te gusta que te folle por tu ano – insistió, pero Liz no cedía, a base de nalgadas muy fuertes y puñetazos en las tetas Liz finalmente dijo: "me gusta que me folle por atrás"

Mas fuerte – ordenó Mariza

Me gusta que me folle por atrás – dijo Liz un poco mas alto

Mas alto pedazo de puta – grito Mariza y le tiro los pezones tan fuerte que Liz estaba segura de que si no le daba en el gusto ahora si cortaría sus pezones.

Me gusta que me folle por atrás!! – dijo muy fuerte Liz.

Así esta mejor – dijo complacida Mariza mientras le soltaba los pezones. – Y si te gusta tanto no te privare de ese placer – agrego Mariza riendo.

Liz se preparó para volver a sentir como ese dildo lleno de granos entraba otra ves en su culo, de pronto sintió quejidos a su lado, era Amara que estaba amordazada con el culo en pompa, atada al igual que ella viendo como le acercaban un fierro al rojo vivo con la marca de Mariza, la iban a marcar al igual que a el ganado. Liz no podía creer lo que veía. Mariza la comenzó a follar, a Liz le asombró que Mariza tuviera la tranquilidad de estarla follando mientras marcaban a su esclava.

Cuando el fierro tocó a Amara ella chilló por la quemadura, brotaron lagrimas de sus ojos, se quejaba como nunca, era inhumano, todos los chillidos quedaban ahogados en su mordaza, Mariza susurró a su oído: "¿te gusta eso? Pronto te lo haremos a ti, y yo estaré presente amorcito" y comenzó a follarla con mas fuerza, a Liz le dolía mucho como la estaban montando.

Amara se desmayo, la desataron y se la llevaron a una jaula, mientras tanto Liz chillaba por el dolor de su culo, era insoportable, gritaba como nunca, pero a Mariza eso le daba más ánimo para seguir en lo suyo, de pronto sintió que algo se rompía en su ojete, y era precisamente eso. La fricción de los granitos había terminado por rajar el culo de Liz, con razón el dolor era tan intenso, se estaba rajando, sentía la sangre corre por sus piernas, las cuales temblaban al igual que todo su cuerpo, luego Mariza sacó el dildo del culo de Liz lleno de sangre y lo puso frente a su boca para que lo chupara, Liz solo abrió la boca, pero en ese momento se desmayó del dolor, le habían rajado el culo.

Continuara

Se que el relato es muy fuerte y podría herir la sensibilidad de algunas personas, pero e juntado muchas sugerencias que me han llegado para hacer este relato, si no es del gusto de toda la gente, que estoy seguro que no lo será, espero que por lo menos le guste a toda esa gente que me pedía algo así.

Envíenme más sugerencias a mi mail: SONI_DL18@HOTMAIL.COM

Y gracias a los que me mandaron sugerencias, las mas fuertes no las e puesto en este relato, pero en relatos siguientes los pondré.