Lithium 5

Aqui me tienes de frente a ti, no rompo un plato parezco feliz, y mientras por dentro me quemo tan lento, quisiera besarte hasta el ultimo aliento.

Su cadera empujo con más fuerzas contra la mía, y sentí que me rompía en mil pedazos entre sus brazos. Un orgasmo tan arrebatador como intenso se apodero de mí, y no pude más que entregarme a él gimiendo su nombre, una y otra vez, suplicando un porque. La ultima suplica fue apenas audible, a causa del terremoto de sensaciones que emanaban de mí. Sentí que su cuerpo se apretaba más fuerte al mío, haciendo que lo sintiese de nuevo hasta lo más profundo. No pude evitarlo, mi cuerpo convulsionaba de nuevo sobre el suyo, haciendo que llegase a otro orgasmo tan intenso como el primero, ansiosa busque sus labios, presa de lo agónico que era el momento y sobre todo presa del dolor que me habían causado sus actitudes.

Lo sentí temblar en las dos últimas y salvajes embestidas, haciendo que explotase dentro de mí, sin dejar de jadear y gemir. Sus labios no dejaron de rozarme hasta que me di cuenta de su agotamiento y satisfacción entre mis brazos.

  • Por qué coño me llevas a hacer esto?- Pregunto ahora esquivando mi rostro y yo busque su mirada desconcertada.

  • Que mierda me has hecho hacer- Corto secamente, aun con nuestras respiraciones agitadas, seguimos así de perdidos en la mirada del otro. Unos minutos después sentí que tragaba saliva- Dom, esto es un asco, pero no pude evitar sentirme desesperado por tu dolor en ese momento.

Rápidamente supe de que hablaba y me sentí morir, mi cabeza comenzó a dar vueltas, cambiaria en algo que lo hubiera hecho porque así lo sintió? Me conformaría con solo eso? Abriría mi corazón por un breve tiempo de dulzura con él?

  • Adrián porque no te pones de acuerdo en algo de lo que dices y haces?- Le dije un poco molesta, saliendo de él, incorporándome en la cama, el me observo con intensidad.

  • Sabes que no lo puedo evitar- Ahora parecía decaído y quise abrazarlo- Es parte de mis múltiples personalidades ser desconfiado, frio, distante al igual que otras veces dulce y amable, es algo que no puedo controlar.

Al acariciar su cabello en señal de compresión hacia él, me dijo:

  • Que voy a hacer contigo Dom? A veces siento que me quiero morir cada vez que te lastimo- Me regalo un pequeño brillo en sus ojos y acaricio mi mejilla con el dorso de su mano, de nuevo algo me oprimió el pecho, Porque sentía ganas de llorar ante ese contacto? Porque tenía que ser tan bipolar?

Mi hermano parecía pensativo, se levantó y comenzó a vestirse, suspire con tristeza...había acabado la sesión de dulzura.

  • No quiero irme Adri- Susurre acercándome para acariciar su rostro, Como podía calmar su dolor?

  • Quizás tampoco me gustaría que te vayas- Temblorosa busque su mirada con desesperación, necesitando que me estuviese pidiendo que no me fuera, pero su máscara de hielo estaba entre nosotros de nuevo, Como saber que pensaba o sentía si a cada momento se ocultaba ante mí?- Dom por favor, es mejor que vuelvas a tu cuarto, quiero estar solo ahora, necesito pensar.

Cuando se apartó, sentí que de verdad lo necesitaba conmigo, sentí pánico de volverlo a perder, aunque sabía que iba a volver a pasar.

  • Dom...Me has perdonado?- Su pregunta fue intensa, rápidamente busque su mirada ilusionada, el tenía un efecto muy importante en mí, asentí temblorosa apoyando mi frente sobre la suya con ternura.

  • Solo prométeme algo, vale? Le dije.

  • Tratare...dispara.

  • Vuelve a tomar el litio por favor.

  • Esta bien- Suspiro- Hoy lo tomare de nuevo, vale?

Le di un fugaz beso en los labios y me retire a mi habitación.

Ahora sí que ya no sabía que pensar ni que hacer, había hecho el amor con mi hermano como nunca lo había hecho con nadie, no sé si a él le paso lo mismo, yo solo sé lo que estaba comenzando a sentir, era muy fuerte y no se iría así como así. Me coloque el pijama, eran como las 8 de la mañana ya, iba a tratar de dormir un poco, aunque sea para servir de algo más tarde.

Volví a despertar al mediodía, eran ya como las 12, increíble porque yo jamás me levantaba tan tarde, me vestí como siempre, aunque cada movimiento que hacia me recordaba como se sentía el tacto de su piel en la mía, había sido tan intenso, demasiado fuerte.

Baje a la sala y vi a mi madre limpiando, le pregunte por Adrián y me dijo que hacia un rato había salido, trate de no preocuparme, solo recé que no fuera a darse de ostias con nadie por el camino. Me puse a ayudar a mi madre, en cuanto acabe necesitaba una buena ducha después de todo. Fui al baño y poco a poco fui quitándome la ropa, cerrando mis ojos, nuevamente imaginando que era mi hermano quien me la quitaba, joder, estaba enloqueciendo de deseo y pasión, sentía que lo necesitaba nuevamente dentro mío, ya se estaba convirtiendo en una básica necesidad, el tenerlo piel a piel, amándonos, aunque nunca dijo nada al respecto, en algún lado de mi interior me decía que el también sentía algo por mí, que me quería de la misma forma en la que yo lo quería, con estas ansias, con este hambre voraz.

Por fin metí mi cuerpo bajo el agua tibia, las gotas golpeaban mi rostro, yo aun mantenía los ojos cerrados, por un momento sentí ganas de masturbarme, pero a la vez sabía que ni siquiera eso podría satisfacerme ya, necesitaba de sus manos.

Acabe de bañarme, fui a mi habitación, me quite la toalla y me mire al espejo desnuda, quería ponerme algo bonito de ropa para él, era un mujer poseída, quería excitarlo con algo provocativo, me coloque una falda de jean bastante corta, una blusa escotada, y unos borcegos, me perfume y arregle mi cabello, cuando termine como una cría ilusionada me quede esperando sentada en mi cama a que volviese de la calle.

Al rato me pareció oír la puerta de calle, me puse bastante nerviosa, no sabía si bajar e ir a echarme en sus brazos o hacerme un poco la indiferente, opte por la segunda, no quería hostigarlo demasiado tampoco, en el fondo deseaba que el viniese a mí. Para mí decepción no vino a buscarme a mi cuarto, oí como se cerraba la puerta del suyo, espere un rato más para ver si venia y nada, entonces decidí lanzarme yo.

  • Adri puedo pasar?- Dije ya adentrándome en su cuarto.

  • Ya estas dentro no?- Me respondió sarcásticamente.

  • Te he estado esperando sabes?- Le dije en un tono dulce, pero el ni siquiera me miraba.

  • Mama se ha ido, la crucé cuando entraba, así que estaremos solos- Dijo dándose la vuelta, sonriéndome un poco, inmediatamente note como me miraba de arriba abajo.

  • Por tu mirada creo entender que te gusta como me he vestido hoy.- Y me sonroje al decir esto.

  • Pues...para que negarlo, aunque tu siempre estas hermosa- Me decía mientras se acercaba a mí.

Me volvió a sonreír y luego me beso, un beso tremendamente caliente y cálido, esta vez su lengua me buscaba sin prisas, haciendo que aquel momento fuese dulce y tierno. Su boca me succionaba y la mía le devolvía el beso con esa misma ternura, haciendo que nuestros labios encajaran en uno solo, su boca era mi perdición, porque una vez presa en ella ya no podía parar, lo deseaba en todo momento con una fuerza sobrenatural. Luego de deleitarme con sus labios pase ansiosa a su cuello, no podía creer que iba a sentirlo de nuevo, pero....de pronto vi algo muy morado en su cuello, y no parecía ser un golpe, más bien era un chuponazo de alguna zorra! Con un desprecio descomunal lo aparte de mí.

  • Que cojones es eso que tienes en el cuello?

  • Que? Que tengo?- Me miro desconcertado.

  • Mírate al espejo.

  • Joder...- Susurro dejando caer sus parpados, era más que obvio que no lo había visto, y odio que lo haya descubierto.

  • Con quien estuviste Adrián?

  • No es lo que crees.

  • A no? Crees que soy gilipollas? Que mierda es entonces?

  • No es nada, te lo juro, ni se como me lo hice.

  • Dime con quien coño estuviste!- Le grite.

  • Que te importa! Me estás haciendo cabrear.

  • Yo te hago cabrear? Tienes la cara de piedra! Dime quien te ha hecho ese chuponazo en el cuello?

  • No tengo que decirte nada! Es mi vida! Quien te crees que eres para montarme este numerito?

  • Tienes razón, no soy nadie, no soy nada- Dije dándome la vuelta para irme, queriendo morir, una vez más...

El rápidamente me cogió del brazo, me empotro a la puerta con violencia y me puso las manos por encima de mi cabeza, sujetándolas con las suyas fuertemente, hasta hacerme daño, sus rodillas me abrieron con fiereza las piernas, quedando expuesta ante él, sentí que lo odiaba de nuevo, Como podía ser así?

  • Ni lo intentes- Advertí fríamente.

Pero no hizo caso, con una mano me tomo fuerte las dos y con la otra mano comenzó a apresurarse en bajarme las bragas.

  • Me vas a forzar?- Pregunte consumida por la rabia, mi hermano no dijo palabra, continuo desnudándose, mientras yo forcejeaba contra el- He dicho que no!- Grite soltándome de él, cuando aflojo el agarre para desnudarme a mí.

  • A que viene esto?!- Grito furioso atrapándome de nuevo y sin pensarlo lo abofeteé.

  • Cabron!- Le grite sintiendo como las lágrimas brotaban de mis ojos- Como te atreves?

Sin mirar atrás me encerré en mi cuarto y me deje caer en el suelo abrazándome de las rodillas, descargando todo el dolor que me hacía sentir ese niño. Ese niño el cual sin mi permiso se había colado en mi corazón, yo no quiero amarlo! Me grite a mí misma. Adrián me hacía daño, un día tras otro y siempre era así, solo quería ser yo de nuevo.

  • Enana! Ábreme por favor!- Suplicaba tras mi puerta.

  • No saldré hasta que no te vayas- Llore con amargura.

Lo oí golpear las cosas, sentí que volvía a descargar su rabia o su dolor, yo ya no sabía lo que producía en él ni porque, y entonces todo quedo en silencio, se había ido...

Lunes, martes, miércoles y hoy jueves por la tarde, sin hablar con él, sin siquiera mirarlo, tratando de no estar en casa a la hora de las comidas para no tener que verlo en esos momentos, esquivándolo en todo momento, para colmo esa misma mañana mi padre había viajado a una reunión de negocios y mi madre lo había acompañado, tendría que sobrevivir el día entero sola con mi hermano, que duro iba a ser, pensé en irme a casa de mariza, pero aun tenía que hablar con ella.

Me dirigí al baño a dejar unas prendas para lavar y tras el canasto de la ropa sucia, lo que encontré fue la gota que derramo el vaso, todos los frascos de litio llenos de Adrián, me había mentido descaradamente, había roto su promesa y no los había tomado como debía, me volví loca de rabia, salí del baño hecha una furia a buscarlo, pero en ese preciso instante suena el teléfono, atendí y era la psiquiatra de mi hermano, diciendo que hacía semanas que no concurría a la terapia, quería saber si iba a seguir con el tratamiento, enfurecí el triple, ahora si me iba a escuchar ese niñato mentiroso, pero antes de que pudiera colgar el teléfono lo vi salir con prisa, decidí seguirlo sin pensarlo.

Con la mayor cautela del mundo fui tras él, lo seguí bastantes cuadras, hasta que lo vi entrar en un bar lleno de drogadictos y borrachos, el lugar era un asco, no me hiso falta entrar para darme cuenta, mi rabia se trasformó en tristeza y desesperación, que hacia mi hermano ahí? Acaso ahora también se drogaba? No era prudente armarle un escándalo ahí, volví a casa y decidí esperarlo allí.

Tardo horas en volver, era ya de noche, lo sorprendí cuando llego sentada en el sillón de la sala, cuando le vi la cara note que había tomado.

  • De dónde vienes?- Le pregunte.

  • Pues fui a la psiquiatra y luego me entretuve mirando unas cosas.

  • Y has tomado el litio hoy?

  • Si.- Mintió nuevamente.

  • No es momento de mentir Adrián.

  • No es mentira.- Respondió volteándose para mirarme atentamente.

  • Has ido a un bar verdad?- Inmediatamente me torció la mirada- Mírame!- Le replique.

  • Solo he ido a tomar algo.

  • A ese sitio van los drogadictos.

  • No solo va esa gente, van otras personas.- Se excusaba.

  • Ahh...Personas como tu?

  • Si.- Afirmo como altanería.

  • Esta tarde ha llamado tu psiquiatra sabes?

  • Esa bruja...- Susurro molesto.

  • No me contaste que hacía semanas que tampoco asistías a la terapia.

  • Es que no me hacía falta, ya tenía dosis de litio para rato.

  • Aja...Me imagino que si sigues escondiendo los francos en la ropa sucia te duraran años.- Automáticamente mi miro con odio y tiro las llaves de la puerta con fuerza contra la mesa, para irse rápidamente a su cuarto, yo lo seguí por supuesto.

  • Te emborrachaste.

  • No.- Negó sentándose en la cama, pellizcando el puente de su nariz.

  • Te emborrachaste en un bar de drogadictos!- Le reclame apuntándole con el dedo.

  • Como sabes que van drogadictos?

  • Porque en la puerta hay tipos inyectándose!

  • Me estas siguiendo?

  • No...un conocido te vio entrar.- Mentí.

  • Eso no quiere decir nada, porque mejor no le dices a tus conocidos que se ocupen de sus asuntos!

  • Eso dije.

  • Y porque sigues discutiéndome entonces?

  • Porque a veces puedo sumar 2 más 2 y me da un puto cuatro, no soy estúpida sabes?

  • Entre a tomar un trago, gran cosa joder! Todos los chavales del barrio lo hacen.

  • Pero seguro que no todos van a ese lugar asqueroso de mala muerte.

  • Otros consumen droga y yo no lo hago.

  • ESPERO QUE NO!- Le grite ya sacada de las casillas.

  • Mejor vete a dormir y déjame tranquilo.- Me dijo quebrando su voz en llanto, acostándose en la cama en posición fetal, dándome la espalda.

  • No puedo dormir Adrián.

  • No es mi asunto, a mi déjame en paz joder!

  • Porque no hablas conmigo?

  • Estoy cansado.

  • Por favor Adrián habla conmigo!

  • De que?!

  • Soy tu hermana!- Cuando exclame esto último pude sentir como se intensificaba su llanto, como el de un crio asustado cuando lo regañan.

Era demasiado para mí, no tenía fuerzas ni para hablar, me sentía tan angustiada, tan derrotada, me fui desarmándome dando pasos hacia atrás poco a poco, hasta irme de allí, volví a encerrarme en mi cuarto, una vez más caí de rodillas al suelo, no podía mas, sentía que iba ahogarme, me dolía el pecho, me lo agarraba y presionaba con dolor.

Vi el reflejo de mi hermano pegándose a mi puerta, sentándose allí, yo solo lloraba sin parar, escuche ruidos, mis padres habían llegado y esta vez no podía esconder la situación, todo iba a desmoronarse en minutos...

Continuara...

A todo muchas gracias por sus comentarios y halagos espero que me sigan leyendo, mmm unas cosillas para decir, los que quieran agregarme al facebook que me hice pueden hacerlo a este link http://www.facebook.com/chica.bohemia.5, espero recibir muchas mas solicitudes, tambien estuve hablando por whats up con algunos de ustedes, el que le interese tambien puede pedirmelo, encantada de estar en contacto con todos, le dejo besos.