Linda y sandy comparten sus puterias

LINDA Y SANDY COMPARTEN SUS PUTERIAS

Quiero comentarles que los relatos anteriores así como este son el inicio de mis puterias, las cuales no se pueden considerar como infidelidad, porqué hasta esas fechas era soltera, bueno madre soltera por culpa de Alberto, mis infidelidades empiezan después de que me case, ya les relatare esa parte desde el momento que me convertí en la esposa de Alberto.

Después de esa noche de sexo con Sandy, Tony y Fernando al otro día nos levantamos a desayunar y tomamos una ducha, solo platicamos ya no tuvimos sexo. Cuando me llevó Tony a mi casa me dijo que iba a salir otra vez, pero que tardaría más tiempo porqué sus negocios así lo requerían, con mi cara de niña dulce y coqueta le dije:

-¿Yo que voy hacer sola? ¿Quién me va consolar?

-Jajaja ¿piensas que te voy a creer? Jajaja de seguro apenas me vaya ha vas a tener alguien para coger - muy seguro me lo dijo pero tranquilo.

-No mi amor ¿cómo crees? Solo soy tuya - le dije tiernamente, viéndole a los ojos.

-No seas tonta jajaja una vez te lo dije hay que disfrutar la vida y tomar las oportunidades, eres una zorrita por naturaleza yo solo la desperté y mira que lo has aprovechado.

-Entonces ¿puedo portarme mal papi?

-Tú sabrás lo que haces, ya platicaremos a mi regreso.

Esas palabras no las he olvidado: Disfrutar la vida y aprovechar las oportunidades, así lo he hecho, como lo comenté al inicio de mis relatos Tony fue mi maestro.

Pasaron los días, nada extraordinario en mi vida, sin señales de Don Matías, Facundo, Mario ni Fernando, estaba inquieta como leona enjaulada y en celo, solo mi mano era mi consuelo jajaja jajaja, así fue como un mes, hasta que una tarde que salí de trabajar allí me estaba esperando.

-¡Hola preciosa! ¿Cómo estás? Tenía ganas de verte, después de esa noche no he dejado de pensar en ti, pero las ocupaciones no me daban tiempo.

¡Wow! quedé petrificada al escuchar sus palabras, ¿qué hago?, perturbada le contesté:

-¡Ho-ho-hola! E-e-estoy bien, ¿y tú?

-También estoy bien, pero no te pongas nerviosa que no te voy a comer jajaja aunque eso es lo que quiero jajaja, vamos a tomar un café

-Ok Sandy vamos

¡Ay cabron! No me esperaba esa visita ni mucho menos lo que me dijo, que me deseaba, nerviosa fui durante el trayecto, casi no hablamos hasta que llegamos a su casa.

-¿Porque venimos a tu casa? Se supone que vamos a tomar un café - estaba hecha un manojo de nervios y alterada.

-Así es, pero no te dije dónde jajaja jaja ja - ella estaba tranquila y segura de sí misma.

Nos sentamos en la sala, me dijo que iba a ponerse cómoda porque tenía mucho calor y entró a su cuarto, a los diez minutos regresó, llevaba un short de mezclilla entallado y una blusa de tirantes que le llegaba al ombligo sin brasier, la verdad se veía muy bien como lo comenté en el relato anterior ella tenía un buen cuerpo. Preparo té helado para las dos porque hacía mucho calor, me pidió que me pusiera cómoda, solo me quite la chamarra ese día me vestí con jeans, tacones y una blusa de tirantes ajustada, la verdad cada día iba preparada los más coqueta por si Tony me llamaba o tenía suerte con alguien, jajaja jajaja no perdía tiempo tenía ganas de sexo pero con machos y con Sandy no sabía qué hacer.

Empezó a platicar acerca del encuentro que tuvimos con Tony y Fernando, me dijo que le había encantado y más cuando tuvo sexo conmigo. Yo le cambie el tema, la verdad me sentí incomoda, le pregunté de su amistad con Tony y Fernando, me dijo que tenía más de seis años de conocerlos y de llevarse muy bien, ella noto mi incomodidad por lo que siguió platicando de cosas triviales, hasta llego a un punto íntimo, mi relación con Tony.

-¿Cómo conociste a Tony?

-Pues lo conocí por una amiga, se llama Beatriz, ella era su novia y me pidió que hablará con él porque ya no quería ser su novia.

-¿Entonces todo fue por Beatriz? Mmm que raro que ella terminó con Tony, creo que ya tenían planes de boda.

-No lo sé, solo un día de buenas a primeras me pidió ese favor.

-¿Y qué fue lo que te atrajo de Tony?

-Me atrajo sexualmente.

-¿Y cómo conociste esa faceta de él? -Es que Beatriz me platicaba todo lo que hacían, me decía que él era un excelente amante, como le hacía el amor, donde lo hacían, cuando lo hacían, todo a detalle y me daba curiosidad conocerle, hasta que se presentó la oportunidad por el favor que le hice a Beatriz, y de allí en adelante el me invitó a salir.

-Te entiendo él es un hombre muy ardiente le encanta el sexo y hace disfrutar a las mujeres, solo que tiene un defecto, es muy egoísta aunque las mujeres lo pasamos muy bien con el solo le importa su placer, estar bien con quien se le dé la gana.

-La verdad lo he pasado muy bien, y en este tiempo que llevo de conocerlo he tenido mucho sexo.

-Te voy a dar un consejo Linda, no te confíes de él, en cualquier momento te puede mandar a volar, él no es hombre de una mujer y todas las que hemos sido su puta te lo podemos contar, puedes pasarlo bien con él pero jamás pienses que vas a llegar a algo serio, me imagino que Beatriz lo dejó por lo mismo se cansó de ser su puta y le mandó una sustituta, joven, simpática y sobretodo inocente ¿o me equivoco?

No le contesté porque sus palabras me dejaron atónita, pareciera que sabía todo, me sentí estúpida pusilánime, me había noqueado.

-Vamos Linda no te sientas mal, yo también fui su ramera, su hembra incondicional, me conoció cuando tenía dieciocho años y durante tres hizo de mi lo que quiso, cuándo terminó nuestra relación lo odiaba sin embargo también entendí que fue culpa mía, porque creí que con él iba a aprender todo del sexo, y me deje llevar por él, pero llegó otra y deje de ser la favorita, me costó mucho asimilar lo que me sucedió y al final terminamos con una buena amistad y de vez en cuando sexo.

-No sé qué decir, te confieso que solo lo quise conocer por cuestiones de sexo, como te comenté Beatriz me platicaba sus aventuras, pero lo que me dolió es pensar que Beatriz me mandó con toda la intención de que fuese su sustituta.

-No te mortifiques disfruta mientras puedas con él, pero no pierdas de vista en tener una relación seria con un hombre que si te ame, te lo digo de corazón.

Así seguimos platicando otro rato acerca de nuestras familias, como nos llevamos con nuestros padres y hermanos, le conté de mi hijo y del tonto de su padre, conforme fuimos platicando me sentí más cómoda y con confianza, hasta que ella rompió la barrera de nuestros espacios cada vez se acercaba más a mí, me acariciaba el cabello o mis mejillas, ya no me sentía incomoda.

Me levante y fui al sanitario tardé más menos cinco o siete minutos, al salir estaba Sandy en el pasillo cerca de la puerta de su recámara, me detuvo tomando mi mano y me llevó dentro de su recámara, sin decir más palabras me dio un beso cálido y profundo, sentí un cosquilleo como una descarga eléctrica recorriendo mi espalda, en mi estómago como se contraía de la emoción, como cuando era chiquilla y algo me emocionaba.

¿Que hice? Simplemente le correspondí no podía negarme al placer que ella me ofrecía, nos besábamos con mucha pasión como si la vida se nos fuese en esos instantes, ella arariciaba mi cuerpo poco a poco me quito la ropa primero mi blusa y brasier, dejando mis senos a su total disposición los lamia, besaba mordisqueaba suavemente mis pezones erectos, yo le quite también su blusa le acariciaba despacio sus senos, y pegaba mi cuerpo al suyo para sentir el roce de sus senos con los míos, seguían los besos.

Era muy intenso nuestro encuentro, me volteo y besaba mi espalda, mi cuello me decía con palabras suaves en mi oído:

-Eres mi chica, me encantas, te voy hacer mía.

-Si Sandy, soy tuya, me gusta.

Desabrocho los botones de mis jeans bajándolos junto con mi tanga hasta los tobillos, de inmediato me despoje de ellos, seguía detrás de mí cuando metió sus dedos en mi vagina la cual estaba húmeda y muy sensible, comenzó a masturbarme despacio fue subiendo el ritmo, hasta que mis gemidos era lo único que se escuchaba en su cuarto, me estaba dando con sus dedos muy rico me hizo tener pequeños orgasmos, hasta que explote cayendo en su cama con un intenso cosquilleo en mi vagina.

Dejo que me recuperará unos minutos, mientras ella se desnudó y sacó unos juguetes de su closet.

Yo estaba recostada en su cama dejó los juguetes en el buró, se recostó a mi lado, dándome un beso y con sus manos acariciando mis senos me dijo:

-Ahora te toca a ti, cómeme

Solté una pequeña risa y le dije:

-Pero no sé qué hacer, como lo notaste la otra ocasión creo que soy muy torpe.

-No te compliques, solo hazme lo que te gustaría que a ti te hicieran, y verás que poco a poco te soltaras.

Empecé besando sus senos y pezones como si saboreara un par de dulces y carnosos duraznos, fui bajando lentamente por su abdomen hasta llegar a su vagina, la cual le di primero unos besos chiquitos después le pasaba mi lengua a todo lo largo, por primera vez sabía cómo era el sabor de una vagina, no se salado o agridulce obviamente lo comparaba con el sabor de la verga de mis machos, pero me gustó, seguí pasando mi lengua hasta que me quede en su clítoris que ya estaba hinchado del placer.

-¡Aaahh aahh! Sigue mi amor no te detengas - me decía Sandy muy cachonda.

-Mmm ¿Te gusta? ¿Lo hago bien? Mmm.

-¡Seeee seee! ¡Ay ay ay chiquita!

Le metí mis dedos con cuidado pero la masturbaba rápido, otra vez le daba con mi lengua y succionaba su clítoris hasta que le hice venirse en mi boca.

-Mmmm chiquita se ve que te gusta y aprendes rápido.

-¡Si! Jajaja jajaja

-No estuvo mal para ser tu primera vez solo con una mujer, espero te guste lo que sigue.

Tomo del buró uno de sus juguetes, era un dildo doble, empezó a frotar mi vagina con un extremo del dildo, lo hacía suave sin dejar de mirarme como me excitaba más y más, introdujo parte del dildo, sentí un poco raro porque no era igual su textura a la de una verga real.

Me gustó como me lo que hacía, siguió metiéndome el juguete hasta que empecé a mover mis caderas, inconscientemente por la excitacion estaba con mis ojos cerrados, después ella se acomodó el dildo en su vagina y comenzó a empujarlo hacia a mí, yo lo recibía muy gustosa y le correspondía también empujándolo.

-Sigue Linda ¡quiero sentirlo hasta el fondo! ¡Aaayyy aayyy que rico!

-¿Así te gusta Sandy? Mmmm mm mm

Nuestros movimientos estaban muy bien sincronizados, ese juguete nos daba mucho placer, nuestros cuerpos estaban bañados en sudor, las vaginas empapadas que bien nos sentimos, duramos un rato hasta que ella alcanzó un orgasmo seguido del mío.

-¡Ufff mi amor quiero seguir cogiéndote!

-¡Yo también Sandy quiero que me cojas!

¡Y lo cumplió! Tomo el otro juguete del buró, otro dildo doble con arnés el cual se colocó en su cintura y se introdujo parte de él en su vagina, sin darme tiempo a que me recuperará, se acomodó en medio de mis piernas metiendo el juguete en mi vagina, entrando con facilidad por lo mojada que estaba de mis jugos vaginales y el sudor de mi cuerpo, empezó a darme una estocada tras otra.

-Saaandy daaameee deeespaaacitoooo que soy virgen-le dije muy coqueta

-¡A que putita! Ahorita te voy a quitar tu virginidad, jajaja jajaja

Sandy se movía muy bien me cogía como toda una experta, lo hacía lento de repente rápido, sabía que ella también lo disfrutaba, luego de un rato de cogerme en posición de misionero cambiamos, se sentó en un sillón y me pidió que la montará.

-Linda metete esta verga, te voy a dar más rico.

-Si Sandy como tú digas.

Me senté en el falo de mi amiga bajando despacio, sentía que me partía, debo confesar que fue un poco incómodo al principio, pues como lo escribí anteriormente, no es igual un falo de látex a uno natural ¿o ustedes que piensan amigas?

Sandy se comía mis senos los saboreaba, y yo de momento le robaba ricos besos, le mordía los labios.

-¡Ay ay Sandy  mm mm que rico me vengo aahh aahh aahh aaaaahhhh!

-¡Toma putita toma! Ahora sabes lo que es coger de verdad jajaja jajaja

Fue una tarde increíble, Sandy me hizo su puta y me gustó mucho sin embargo les confieso que me encantan más los machos y con ellos soy más puta.

Después de la cogida que me dio Sandy descansamos un rato en su cama, le pedí que me llevara a mi casa, nos vestimos y nos fuimos. Al llegar a mi casa mis padres también iban llegando con mi hijo, Sandy los vio y de inmediato se bajó a saludarlos, se presentó y les dijo que era su nueva amiga, a mis padres les agradó por lo que la invitaron a pasar la casa. Yo me incomode un poco, claro que no lo demostré, la charla fue amena ella les platico de su familia a mis padres, les dijo que ella vivía sola ya que su familia estaba en Monterrey, por lo que aprovecho y les dijo a mis padres:

-Señora Bianca, señor Moisés ¿puedo pedirles un favor?.

-Si dinos - contestaron muy amables.

-Acabo de llegar a la ciudad y estoy sola, ¿Dejarían a Linda pasar el fin de semana conmigo? Para que me ayude a poner orden a mi casa y me acompañe a comprar algunas cosas que faltan - se los dijo con su voz melosa como la de una chiquilla.

-¿Como ves Moisés la dejamos?

-Si Bianca, esta niña trabaja mucho y merece distraerse.

-Gracias Señor Moisés es usted muy bueno como mi papá - intervino Sandy

Yo también le agradecí, pero a la vez seria le dije que me llevaba al niño, pero por dentro deseando no hacerlo, entonces comentó mi papá que no que el niño que iba hacer en cosas de mujeres, que ya tenía planeado llevarlo al cine el sábado y el domingo a ver el fútbol al estadio, y mi hijo se emocionó diciendo que se quedaba con su abuelito. Uff la verdad hasta descanse y vi la expresión en el rostro de Sandy, también de alivio, y así quedaron los planes el fin de semana lo pasaría sola con Sandy.

Pasaron los días Sandy me llamó dos veces a mi casa para recordarme el encuentro, y de paso me decía que tenía ganas de hacer travesuras conmigo. Llegó el sábado salí de trabajar ya estaba Sandy esperando en su coche, tan pronto me vio se bajó y me saludo con un beso en la mejilla, me preguntó si quería comer en algún lugar en especial o compraba comida para llevar a su casa, le dije que como ella quisiera, pasamos por un par de pizzas y sodas para llevar. Llegamos a su casa me dijo:

-Voy a encender el boiler para darnos una buena ducha y en lo que está listo comemos.

-Ok, voy a la cocina por unos platos y vasos para comer, también me voy a poner cómoda.

Ella estaba en el patio de servicio encendido el boiler mientras yo puse la mesa, no tarde mucho, pase a la recamara de Sandy me desnude por completo solo me quede con los tenis puestos, ya que ese día había ido a trabajar con ropa tipo sport. Cuando Sandy entró al comedor ya la estaba esperando desnuda, al verme se quedó sorprendida.

-¿Qué quieres comer primero? ¿La pizza o el postre? O sea mi conchita mojada con miel de deseo.

-¡Hija de mi vida! Eres una zorra me estás provocando, sabes bien que quiero comerte - lo dijo llena de lujuria tomándome por la cintura y a la vez besándome.

Yo estaba caliente puesto que ya sabía a lo que iba, el dilema era el temor a mi duda en cuanto a mi sexualidad si era lesbiana pensaba en el que dirán, en mis padres mis hermanos, sin embargo esta etapa que viví con Sandy me enseñó también a disfrutar del sexo sin prejuicios, ella ha sido mi única relación lesbiana completa, porque ahora solo he tenido pequeños roces con otras mujeres.

Al tomarme por la cintura me pego a su cuerpo, se sentía como estaba caliente desbordando pasión y deseo, se comía mis labios una y otra vez sus manos se apoderaron de mis nalgas, hasta que su boca buscó mis otros labios que ya estaban húmedos esperando su lengua. Me acomodó en el sofá separando mis piernas para comer a gustó mi conchita, metía su lengua jugaba con mi clítoris de repente metía sus dedos, estaba a su merced entregada a ella mis gemidos eran intensos. Se levantó y comenzó a desnudarse, le ayude desabotonando sus jeans y bajándolos hasta sus tobillos, mi cara estaba a la altura de su vagina por lo que aproveche y la empecé a besar, me tomó de la cabeza y la pego a su vientre.

-¡Anda niña comete esta conchita! Quiero sentirte.

-¡Si mi vida! Yo también tengo ganas de ti, mmm mmm.

-¡Aaahh aahh aahh aaaahhh! Así que rico me la chupas mmm mmm.

Luego nos acomodamos quedando yo con la espalda en el sofá, deteniendo mis piernas con las manos y ella paso una pierna encima de mí para apoyarla en el sofá y la otra en el piso, empezamos a rozar nuestras vaginas muy rico, ella lo hacía como si quisiera penetrarme movía su pelvis con fuerza y ritmo durante un buen rato.

-¡Ay ay ay Sandy mm mm! ¡Que rico me coges! ¡Ah ah ah ah!

-¡Mmm mmm aahh aaaaahhhh aahh!

Se vino en un orgasmo intenso, acompañado de un squirt con el que baño literalmente mi vagina escurriendo por mi culito, acto seguido yo también me vine en otro orgasmo intenso.

Inmediatamente se separó de mi e hizo que mantuviera la posición, se comió mi panochita y mi culito limpiando sus jugos, lo hizo despacio sin dejar de saborear cada centímetro de mis cavidades, yo hice lo mismo le limpie su panochita saboreando los restos de su squirt.

Nos quedamos abrazadas unos minutos en el sofá, mientras me decía que le gustaba mi forma de ser y mi entrega cuando teníamos sexo, le dije que quería disfrutar de ese placer ya que tiempo atrás no sabía nada, solo lo que Alberto había practicado conmigo.

Pasamos al comedor, tuvimos que calentar otra vez la Pizza para comer, me preguntó si me gustaba el rodeo santa fe para ir a bailar, le dije que sí. Terminamos de comer tomamos unas toallas y juntas nos metimos a la ducha, el agua tibia mojaba nuestros cuerpos, estaba detrás de mi sentía sus senos suaves y erguidos en mi espalda, con una mano me masturbaba y con la otra metía sus dedos en mi culito, yo también con una mano le masturbaba y con la otra tomaba su cabeza.

-Linda tienes un culito apretado, mmm se siente chiquito tu ano.

-Ay si todavía paso como virgen jajaja.

Tuvimos otro orgasmo pequeño, tallamos nuestros cuerpos con la esponja y jabón, lo hicimos delicadamente, nuestra ducha duró bastante.

Nos estábamos arreglando cuando recibió una llamada.

-¡Hola bebe! ¿Cómo estás?, Yo bien pasándolo chévere con una amiga, ¿Cuándo llegaste? ¿El jueves? Me hubieras avisado para ir por ti al aeropuerto, vamos a salir a bailar, si no hay problema pasas por nosotras

-¿Quién era? Te oías muy emocionada

-Es mi amigo de Colombia, William acaba de llegar a la ciudad, ¿Te molesta si viene con nosotras?

-No para nada, ya tenemos con quien bailar, ¿Y qué tal está?

-Tranquila Linda jajaja jajaja está, está ay ya lo verás.

-Anda dime no seas mala onda.

-Bueno….. está, está como quiere, es un macho apetecible, Tony y Fernando se pones celosos de él, porque está muy bien dotado ese moreno.

-Mmm ¿crees que yo le guste?

-Si yo creo que sí, eres una putita golosa, no pierdes el tiempo.

-Ay amiga me gusta cómo me coges, pero ya quiero una verga jajaja jajaja

-Jajaja ok les voy a dar permiso para que cojan.

Nos arreglamos ella de short color negro sin nada debajo, con una blusa strapless color blanca y tacones, no uso brasier porque la blusa le amoldaba bien sus senos. Yo una blusa top de tirantes color negro sin brasier, también un short color rojo de licra sin nada debajo porque se marcaba y tacones.

William llegó a las nueve de la noche por nosotras, Sandy nos presentó.

-Willy te presento a Linda, Linda él es Willy.

-¡Hola chica! Mucho gusto - con el acento colombiano que los distingue.

-¡Hola el gusto es mío!

Willy era un tipo de unos 35 años de edad aproximadamente, no muy alto como de 1.65 de estatura, tampoco muy guapo, pero de cuerpo se veía que iba al gimnasio, se notaba en sus brazos y pecho y de su virilidad ya me había dado referencias Sandy.

Nos fuimos en el carro de Willy los tres en la parte de enfrente, el manejaba, Sandy de copiloto y yo en medio. Llegamos al rodeo santa fe nos instalamos en el salón de música tropical, también había salón de música de banda y música disco. La mesa estaba cerca de la pista de baile, pidieron una botella de tequila yo como siempre bebida sin alcohol, empezamos a bailar Willy y yo música de salsa bailaba muy bien, se movía al ritmo de la salsa y a mí me movía a su antojo, pegaba su cuerpo al mío, su pecho con mis senos, su mano se apoderaba de mi cintura en momentos la bajaba a mis nalgas las agarraba a su antojo,  lo cual me gustaba y me iba calentando también restregaba su paquete en mi entrepierna, y cuando bailaba dándole la espalda podía sentirlo en mis nalgas ¡qué hombre! Sentía su verga hinchada aún sobre la mezclilla de su pantalón.

Aquí en México cuenta una leyenda urbana que un hombre que sabe bailar bien a una mujer, también la sabe coger bien, y creo que sí.

Después Sandy y Willy bailaron un buen rato, mientras yo bailaba con otro chico que me invitó, no hay mucho que contar el chico era más o menos de mi edad y algo inocente, me dijo que estaba estudiando la universidad que si podría verme otro día, le dije que si sin problema. Luego de un rato de estar en el salón de música tropical nos fuimos al de música disco, bailamos un rato los tres juntos, ahí empezamos con el cachondeo, Sandy y yo le hacíamos sandwich a Willly, él se dejaba apapachar en momentos nos tomaba de la cintura o bajaba sus manos a nuestras nalgas, lo hacía como buen macho incluso escuche decir a algún chico:

-Mira ese tipo está bailando con dos chavas.

-Se ve que son bien putas, las agarra de las nalgas y de repente las besa.

En efecto Willy tenía dos putas a su disposición, los tres estábamos en nuestra onda no nos dimos cuenta que éramos observados por los demás. De repente Sandy me pidió que fuéramos al sanitario.

-¿Qué te parece Willy?

-Está más o menos pensé que estaba más galán jajaja jajaja.

-Olvídate de eso, su atractivo está entre las piernas jajaja jajaja ni pero le vas a poner.

-Esta noche tendré una verga más entre mis piernas.

Regresamos a la mesa seguimos platicando, Willy estaba en medio y una de cada lado, empezó a besarme muy cachondo, también besaba a Sandy, metía sus manos debajo de mi blusa, yo estaba muy caliente le acariciaba la verga por encima del pantalón, así jugamos un rato, los tres ya estábamos con ganas de coger, por fin Willy dijo que fuéramos a un lugar más íntimo.

Sandy dijo que fuéramos a su casa pero Willy no quiso, así que optó por llevarnos a un motel, llegamos y al pedir la habitación pidió la más lujosa, el gerente le dijo que tenía un costo extra porque no podíamos pasar los tres, Willy pagó sin problema, cuando avanzó el carro escuché al gerente y su amigo comentar:

-Ese wey es un suertudo, se va a coger dos chavas.

-No mames dos nalgas para él solito.

Acomodó el carro en el garage, subimos a la habitación, estaba muy elegante con jacuzzi, sala de estar pequeña, cama King size un sillón especial que no conocía hasta que lo use con Willy jajaja jajaja.

Sandy y yo nos quedamos en la salita mientras el pedía algo de beber y botanas, empezamos el cachondeo Willy me tomo de la mano dirigiéndome a la cama, me acostó y se puso encima de mí, me quito la blusa:

-¡Que par de tetas! Mmm están como me gustan mmm - las mamaba muy rico.

-¿Te gustan papito? Aahhh aahh

Seguía mamándolas, bajo la cremallera de mi short y al meter los dedos, sintió mi conchita mojada y depilada, frotaba suavemente mi clítoris, levantó mis piernas y me quito el short, comenzó a comerse mi conchita y mi culito metía su lengua en mis dos orificios, luego los dedos:

-¡Ay ay ay! Papito mmm sigue no te detengas, ¡aaayyyy!

-Tranquila nena esto es el comienzo.

Sandy solo nos observaba, seguía estimulando mi culito y panochita, hizo que me viniera dos veces en su boca. Se levantó para desnudarse, yo lo observaba, primero se quitó la camisa, que hermoso abdomen todo marcado cada músculo, los brazos y pectorales muy definidos y abultados, espalda ancha, se notaba el trabajo del gimnasio, cuando se quitó el pantalón parecía que el bóxer se rompería de lo excitado que estaba, también las piernas muy marcadas todo su cuerpo se veía hermoso como un escultura griega, exquisita sin defecto alguno además de lucir un bronceado perfecto. Al quitarse el bóxer por fin se liberó ese animal se levantó como activado por un resorte, era grande, grueso su cabeza brillaba, Willy me hizo seña con los dedos, me acerque lo tomé con las dos manos se sentía caliente y firme. Empecé besando la cabeza, pasando mi lengua en ese hongo bajando por el tronco, abrí la boca al máximo para poder engullirlo.

-¡Agghhh, mmm, aagghh! Papi estas enorme, mmm.

-Chupa también mis huevos

-Si mmm mmm papi

Tremendo pedazo de carne estaba comiendo, me tomo de la cabeza y empezó a cogerme por la boca, su glande tocaba mis anginas provocando arcadas, lo sacaba y me daba golpecitos en mi cara, estaba embadurnado de mi saliva.

Me llevo al sillón especial, se acomodó e hizo que lo montará.

-¡Ouch ouch! Papito no me entra ¡ah ah! - a pesar de que estaba muy mojada.

-Ten calma putita tenemos toda la noche.

Poco a poco fue entrando, sentía el glande hasta el fondo de mi vientre, me quedé un rato quieta, hasta que mi panochita se amoldo a ese mástil, ya que me sentí cómoda empecé el movimiento primero lento luego subí el ritmo, movía mi cadera en círculos.

-Willy cógeme, hazme tu putita, ¡que rica verga tienes! Mmm mm ah ah

-Así putita date tus sentones, así muévete.

Luego de un rato de cogerme así, me levanto para recargarme parada en el sillón, se puso detrás de mi jalando mis caderas acomodo su verga en mi rajita y otra vez a cogerme, esa posición me gustó mucho su verga me partía en lo más profundo de mi panocha.

Sandy seguía observando disfrutaba del espectáculo, luego nos pasamos a la cama se acostó y me puso a mamar su verga, yo estaba de perrita mamando con mi culito bien parado, cuando de repente sentí la boca de Sandy comiendo mi ano, lo llenaba de saliva y metía sus dedos.

-Prepara bien ese culito Sandy, ahorita lo voy a reventar.

-Está muy estrecho, y eso que ya se la cogieron varias veces por ahí jajaja jajaja, ¿o no amiga?

-Ay sí, pero este Willy me va a matar con ese animalote, hazlo despacio mi amor.

Sandy siguió estimulando mi ano, le unto lubricante metía uno o dos dedos me daba nalgadas, después le dijo a Willy que ya estaba lista, me acomodo para montarlo dándole la espalda y de cuclillas, puso su glande en mi ano apenas entró un poco sentí una punzada, casi me pasaba una desgracia.

-¡Ouch ouch aaayyyy! Espera papi, no me entra, ¡aaaayyyy aayy ay!

-¡Ufff que rico, se siente apretadito! Baja poco a poco, eso putita así.

-¡Mmm mmm, está enorme! No puedo.

Efectivamente estaba enorme no me entraba, me levante y le unte más lubricante, también me echo más en mi ano, volvimos a la posición.

-¡No me entra Willy! ¡Ay ay me duele!

-¡Nada putita ahora te la comes toda!  Levanto su pelvis con fuerza, al mismo tiempo que con sus manos en mi cintura me jalo, logrando meter más de la mitad, puta madre sentía que se me salía todo por el ano.

-¡Aaaayyyyy ayyy no seas cabron!

-Calma putita, quédate quieta, primero duele pero te va a gustar.

Me quede inmóvil, no sé, más de tres minuto hasta que se pasó la sensación desagradable, el empezó a moverse suavemente yo también empecé a moverme, nos fuimos acoplando.

Ya que mi culito se había acostumbrado al tamaño de ese animalote, me daba sentones, uno tras otro, el impulsaba su pelvis con más fuerza se escuchaba como chocaban mis nalgas con su vientre.

-¡Mmm que rica verga tienes! ¡Ay papito dame más! Aaaaah aaah aaah

-Estas rica putita, tu culito esta mm mm

-¿Te gusta papi? Mmm ¿Te gusta mi culito? Aaaah ah dame dame.

Estaba súper enculada disfrutando, me había olvidado de Sandy hasta que empezó a chupar mi conchita, doble placer sentía.

-Linda eres más putita que yo, apenas conociste a Willy y ya le estás dando las nalgas jajaja jajaja.

-¿Es cierto eso Willy? ¿Soy muy putita?

-No creo, lo que pasa es que te encanta la verga, jajaja jajaja.

Sandy seguía chupando mi conchita, luego me cogió de perrita, mi culito estaba más que abierto, la metía y sacaba a su gusto, Sandy se acostó delante de mí y le comía a gusto su panochita, las embestidas eran cada vez más fuertes, era la señal de que iba a terminar.

-¡Ay papi que rico coges! Mmm mmm quiero tu leche.

-¡Uff mmm ya viene putita! Toma, toma aaaggghh aagghh.

Lleno mi culito con su leche se salió de mí, quedando recostado, caí vencida, pero seguí dándole con mi lengua en la panochita de Sandy hasta que se vino.

Me acomode para observar a Willy, su cuerpo estaba bañado en sudor, desde el cuello hasta su vientre, estaba fascinada con ese macho. Sin decir nada empecé a besarlo locamente, poco a poco baje a su cuello, luego a su pecho, mi lengua rosaba sus tetillas besaba sus pectorales, mi lengua limpió el sudor de cada surco de su abdomen, sus piernas también las bese y le pasé mi lengua, jamás había hecho algo así idolatraba ese cuerpo perfecto.

Llegué a su verga a pesar de estar en reposo después de haberla deslechado, tenía buen tamaño y grosor, estaba semierecta. Empecé a jugar con esa hermosa verga solo con mi boca, la besaba en su cabeza y luego el tronco, le pasaba mi lengua de arriba abajo hasta sus huevos, saboreaba los restos de leche que tenía en su glande, no pasó mucho tiempo cuando se puso otra vez dura y apuntando hacia arriba.

-Linda eres una golosa, ¿Quieres más verga?

-¡Mmm mm slurp slurp! Si papito quiero más ¡slurp slurp slurp!

En ese momento Sandy intervino:

-Ya los deje disfrutar mucho, también quiero que me cojas.

Sin decir más también se puso a mamar la verga de Willy, juntas pasábamos los labios a lo largo de su tronco, en su glande nuestros labios se encontraban e intercambiábamos besos, en momentos ella chupaba sus huevos y yo su cabeza o viceversa, Willy se incorporó y puso a Sandy de perrita y la empezó a bombear, yo estaba a espaldas de él, lo abracé acariciaba su pecho, le restregaba mis tetas en su espalda, en momentos muestras bocas jugaban.

-Ven putita, vas a probar mi verga con sabor a Sandy.

-Ya conozco el sabor de esa panochita.

-Sí, pero ahora con sabor extra macho.

Seguía bombeando a Sandy, de repente sacaba su verga y yo la mamaba, después acomodó a Sandy con sus piernas al hombro, al mismo tiempo que Sandy me pidió que pusiera mi panochita en su boca, mientras ella se comía mi conchita Willy y yo nos besábamos, que rico se la cogía y ella a la vez me daba con su lengua. Cambiaron de posición ahora ella lo montaba de cuclillas dándole la espalda, su vergota entraba y salía de la cavidad de mi amiga, mientras me comía los huevos de ese macho, en momentos cuando se salía su verga también la chupaba o le daba lengua a Sandy, sus movimientos fueron cada vez más rápidos hasta que se vino en ella, sacó su verga y todavía recibí unos pequeños disparos en mi boca, inmediatamente empecé a limpiar la  leche que escurría de la panocha de mi amiga y alternaba limpiando la verga de Willy, mi boca estaba embadurnada con los fluidos de los dos, Sandy busco mis labios y las dos compartimos el sabor de nuestro macho. Caímos rendidos los tres Willy quedó en medio de las dos, así pasamos el resto de la madrugada.

Willy nos despertó como a las once y media de la mañana, ya había preparado el jacuzzi, los tres nos metimos, el agua estaba caliente se sentía muy agradable, estuvimos platicando un rato de cómo nos conocimos Sandy y yo, como era nuestra relación, de Willy yo le pregunté varias cosas, luego empezamos con el cachondeo nos besábamos los tres, le acariciamos la verga con nuestras bocas, nos puso de a las dos de perritas y nos cogió  alternando un rato con cada una, hasta que se levantó y vacío su leche en nuestras bocas, fue rápido pero muy cachondo y rico. Tomamos una ducha, nos vestimos y salimos del motel, pasamos a comer algo ya que los tres teníamos mucha hambre, ya eran las cuatro de la tarde cuando me llevaron a mi casa me despedí de Willy y dijo que en la semana me buscaba quería coger otra vez conmigo, le dije que sí, que también a mí me había gustado, Sandy me dijo que también en la semana me buscaba.

No había nadie en mi casa, en esa soledad pensaba en todo lo que me había pasado desde que conocí a Tony, no me reconocía una y otra vez me cuestionaba ¿cómo has cambiado? Eres una puta fácil, estaba en una disyuntiva o ¿me portaba bien o seguía con mis puterias? Pero llegaba a la misma conclusión, si Alberto se hubiera casado contigo no estarías tan mal, una parte de mí se sentía culpable, la otra me decía ahora solo hay que disfrutar de la vida, deja de lamentarte Alberto ahora disfruta su vida. Eran conflictos que no me dejaban en paz lloraba y sufría en silencio.

En el próximo relato hago más de mis puterias, pero también pasan cosas que no esperaba.