Lidia (1: Conociendo su culo)
Como conozco a la mujer de mi vida, novia de mi amigo, muy puta ella.
Cuando la vi por primera vez quede impresionado con su extraña apariencia, era bonita con un rostro angelical pero su mirada decía algo mas, al darse vuelta para ir ala cocina por los refrescos, pude ver la finura de su cintura contrastando perversamente con las curvas de sus caderas, con aquel vestido hasta los talones como el de una gitana se podía adivinar una figura mas que inquietante, sentado en el sala con Saúl, su novio, tratada de disimular mi interés por ella no era correcto mirar ala chica de otro, mas aun si es tu amigo.
Al volver Lidia, dejo los refrescos en la mesita de centro, se sentó entre los dos en aquel amplio sillón de cuero y sin mas beso a Saúl, yo me incomode un poco, el beso fue mas largo de lo que debía ser estando los novios acompañados de un amigo.
Disculpa Adrián, me dijo, pero que ayas venido a conocerme no significa que me prive de mi chico, tengo que aprovechar que mi papi no esta en casa.
Ella siguió besándolo esta ves muy intenso, Saúl la tomaba de las caderas y levantaba lentamente el vestido de Lidia el cual ya enseñaba algo de aquella linda pierna, yo no sabia que hacer si irme o seguir mirando que tan lejos podían llegar delante mió, Lidia subió sobre Saúl abriendo sus piernas frente a el, Saúl apretaba sus glúteos con intensidad, el vestido de gitana estaba sobre las rodillas de ella, las manos de Saúl desaparecieron dentro del faldón, se notaba que estaba metiendo las manos dentro de su trusita, Lidia no Paraba de besarlo, en eso supe que debía irme, al pararme Saúl me dijo: No te vallas amigo siéntate disfruta el show.
Lidia no paro de morrearse con el cuándo me dijo eso. La verdad es que quería seguir viendo a ese angelito portarse como una Yegua salvaje, eso me tenia alucinado, siguió con su faena, yo me senté de nuevo, Saúl levanta todo el faldón de lidia hasta su cintura dejándome verla toda.
El trasero de Lidia no merecía llamarse así, Lidia tenia un culo hermoso que enfermaba los sentidos, caderas anchas glúteos duros gorditos y bien paradito piel blanca que combinaba con su pequeña cintura, como si fuera una perita perfecta, Saúl metía sus manos dentro de su pequeño calzón rosa se notaba que le metía un dedo por su agujerito lidia dejo de besarlo lo abraso solo para disfrutar la caricia, entonces Saúl bajo un poco su calzoncito rosa solo para que pudiera ver la perfección de su cueva: Mira Adrián que rico culito tiene esta perrita hermosa y lo que más le gusta es que lo besen.
No supe que decir mi amigo no solo conforme con tenerme de mirón quería que le bese el ano a su chica que me estaba volviendo loco de excitación, Lidia arqueo su cuerpo para adelante y con sus propias manos abrió sus nalguitas su anito era rosadito como el de un bebe, no pude evitar acercarme a verlo Lidia me miraba de reojo con la boca entre abierta se notaba su emoción por la situación, en eso como si algo mas fuerte que yo me pidiera hacerlo me puse de rodillas frente a su culito y lentamente lo bese como si besara sus labios, tiernamente, el cuerpo de ella empezó a temblar, luego saque mi lengua y lento con cariño perfore su anito, ella tomo mi cabeza y la presionó contra su culito soltando un largo gemido de placer , Mis besos a su hermoso culito eran mas intensos lidia no soltaba mi cabeza y movía sus caderas contra mi, Saúl en ese lapso había sacado su pené y no me di cuenta que lo tenia prácticamente en la cara pero no me importo mucho no quería soltar el culo de Lidia.
Saúl con su mano dirigió su pene ala rajita de ella estando con la cara tan cerca, pude ver como Saúl empezó a perforarla ella empezó a brincar sobre él con toda la ropa aun puesta solo el vestido levantado y el calzoncito a un lado: Eres una perrita te gusta como te chupo el culo mi amigo putilla e golfita.
Ella no contestaba solo me miraba y habría su boquita, saque mi pene el cual me dolía por estar tanto tiempo duro y encerrado, me acerque a ella por detrás y empecé a frotar mi pene en su ano que estaba mojadito con mi saliva, Saúl al verme para un momento y tomo a lidia del rostro diciéndole : Ves putilla con tu culito calentaste a mi amigo ahora tienes que darselo.
Dicho esto Lidia tomo nuevamente sus ricas nalgotas y las separo suavemente, yo estaba extasiado, me saque el pantalón para estar mas cómodo puse la punta de mi pené en la entra da de su culito, ella se queda muy quieta, el también, esperando sentir mi falo entrando empuje tan suave como pude observando como mi gangle desaparecía en su anito era delicioso, no había mas movimiento que el mío, cuando por fin lo metí todo, ella giro su cabeza y yo me acerque y nos besamos, luego empezó el mete y saca, juntos los tres nos movimos rítmicamente al compás del culo de ella, apretaba tanto mi pené tan rico y además sentía el pené de el adelante, Lidia gemía cada ves mas fuerte, luego sus gemidos se volvieron en pequeños gritos , tenia un orgasmo, no pude resistir mas y solté mi chorro casi al mismo tiempo que Saúl.
Me separe un momento de ellos me faltaba aire, la excitación me asfixiaba, ellos estaban besándose Saúl le hablaba al oído: Te gusto amor, te gustaron los dos penes. Ella solo decía si, si, si.
Luego de acomodarnos las ropas Lidia nos despidió con un beso en la boca: Chau amorcitos me han hecho gozar mucho hoy los amo. Y cerro la puerta.
Saúl me dijo que era una putilla que solo estaba con ella por su rico culo que cuando se aburriera de ella la dejaría, yo sin embargo sentía algo diferente que me aria regresar a verla.