Lib... ese maduro objeto del deseo

Como hice realidad mi fantasía de tener sexo con una mujer madura... y que mujer!.

Hola, tengo 34 años, soy de Bs. As - Argentina, y tengo una pasión por las mujeres que podríamos definir "maduritas" (más de 40 y cuando más años mejor). La historia que les contaré es 100% real y paso a principios de este año.

Ingresé a una página Web de búsquedas de parejas, y envié varios mensajes a mujeres que coincidían con mi perfil de búsqueda. Grata fue mi sorpresa cuando encuentro la respuesta de Libelula, una mujer de 52 años, no podía creer mi suerte. Se las haré corta, luego de cruzar varios correos con, arreglamos para encontrarnos en una esquina del barrio de Belgrano. Ella vino con su auto y me invito a subir a él, se notaba que tenía experiencia en aventuras pero estaba algo extraña por la diferencia de edad. Para mi sorpresa era una mujer bien mantenida, se nota que con gym u otras tretas, de buenas piernas para su edad, un físico que envidiarían muchas mujeres y un hermoso par de tetas.

Dimos una vuelta y fuimos a un bar, para conocernos un poco. Charlamos casi una hora, al cabo del cual salimos. Se ofreció a acercarme hasta la parada del colectivo, accedí. Cuando llegamos al estacionamiento, el auto estaba en un lugar algo oscuro. Ella apoyo su mano en mía, y acerco su cara. Nos besamos y mi mano acarició sus pechos descubriendo que eran muy firmes para su edad, su cuerpo bastante tonificado y por último inspeccione rápidamente su entrepierna (tenía pollera) para descubrir que estaba muy mojada. Mis dedos quedaron ahí, masturbándola por un minuto. Su mano entro en mi pantalón, y acarició mi miembro (que no es nada espectacular). Todo esto en dos minutos para no despertar sospechas ya que el vehículo estaba semioculto.

Los correos se sucedieron, y cada vez eran más calientes. En más de una ocasión terminaba de leerlos muy caliente, y creo que ella también. Esta por demás decir que a la semana teníamos nuestro segundo encuentro, en la misma esquina. Paso con su auto y esta vez fuimos a un hotel cercano. Mi excitación era mayúscula, estaba cumpliendo mi sueño. Me estaba acostando con una mujer 19 años mayor que yo!!!!. Necesitaba descargar esa energía, y Lib era perfecta par ala ocasión.

Cuando cerré la puerta la tomé por la espalda y apoye contra la pared. Comencé a besar el cuello mientras mis manos se encargaban de sus tetas y mi pija apoda en su culo (ambos vestidos). Notaba que estaba muy exitada. Luego la di vuelta y tire sobre la cama. Nos comimos a beso mientras desvestíamos. Una vez desnudos puede ver su cuerpo, que si bien no era delgado, estaba muy bien trabajado y sus tetas, obviamente de cirugía por lo perfectas y duras que estaban.

Hicimos un gran precalentamiento, con mucho sexo oral, manaba la pija maravillosamente bien y tuve que detenerla un par de veces para no correrme. Hasta que en un momento no soportamos más y pasamos a al penetración. En ese momento me puso un profiláctico con la boca, y a esa altura no tenía la menor duda que la señora sabía coger muy bien. Comenzamos por las poses tradicionales, misionero, y luego pasamos a mis preferidas, la cucharita y el perrito donde le hice acabar varias veces. Mientras estabamos en perrito intente meterle un dedo en el culo, pero me dijo que ella no lo solía hacer, que habría otra oportunidad.

Luego pasamos de la cama al sillón, y seguimos hasta que en un momento siento que voy a acabar. Le pido acabar en su boca, a lo cual accede sacándome el forro. Ambos caímos rendidos y mojados en sudor.

Luego de esa ocasión no volvimos a vernos más..... aun tengo su dirección de correo, así que el voy a pedir que lea este relato .Tal vez tengamos un segundo round.

El relato es 100% real, y si no está bien.