Lee esclava (2)

Nuevas instrucciones para las sumisas.

Hola esclava, ya veo que me echabas de menos, tengo nuevas instrucciones para ti, quítate toda la ropa y átate los cascabeles en los pezones, dirígete a cuatro patas en la cocina y pon dos platitos, uno con tu desayuno y otro con agua, tomate ambas como la buena perrita que eres, después coge un plátano y ven aquí.

¿Has traído el plátano? Bien ¿Cómo vas de elasticidad?, pela el plátano con la boca, pero no te lo comas, cuando le hayas quitado la piel, introduce medio plátano en tu coño.

Sin usar las manos vas a comerte ese platanito, da igual lo que te cueste, te lo vas a comer todo sin rechistar.

Con que no te lo has comido del todo ¿eh? Mereces un castigo, coge una regla y golpea tus pechos, hazlo con fuerza.

Date.

Otra vez

Más fuerte

Quiero ver como te enrojecen

Otra vez.

Muy bien ahora te diré lo que debes hacer, quítate toda la ropa, dejándote solo los cascabeles de tus pechos coge un diafragma anticonceptivo y colócatelo muy bien, luego ponte una gabardina.

Lo primero que harás será salir de tu casa, encontrarás un paquete, ábrelo, son unas esposas y una venda para los ojos, las llevaras contigo, luego te dirigirás a un bar uno de mala muerte, te dirigirás a los lavabos masculinos, allí te vendarás los ojos y te esposaras en una tubería.

No dirás nada, si alguien te ve no dirás nada, si te posee, dejaras que su carne te profane, en cuanto se vacíe dentro de ti, evitaras que se escape su semen.

Estarás ahí todo el día, el ultimo en tomarte seré yo, tengo las llaves de tus esposas y cuando termine de hacerte mía, te liberare, pero esperaras un minuto, el tiempo suficiente para que me vaya.

No se te ocurra mirarme o sufrirás las consecuencias.

Vuelve a tu casa y vete a tu bañera, no abras el grifo de agua, simplemente túmbate y quítate el diafragma.

Esta lleno de leche ¿a que si? úntate con ella todo tu cuerpo, tu cara, tu pechos, tu culo, ¡todo!

Siente como esos hombres te poseen como la muñequita que eres, ve a la cama sin asearte, quiero que duermas con el olor de esos hombres y de su leche.

Descansa, puede que te de más instrucciones