Le moví la apalanca a mi ahijado (2)

En la vez anterior les conte como le movi la palanca a mi ahijado. Esta vez le contare, la despedia de soltero que le di.

La despedida de mi ahijado.

Después de haberle movido la palanca a mí ahijado nos volvimos a encontrar tres veces más en las que sin rodeo ni timidez nos íbamos a mi departamento para bajarle la calentura que le producía los encuentros con su novia. Ella no quería tener nada de sexo con el hasta que no llegaran al matrimonio. Asunto que me beneficiaba a mí en toda esa relación. Brevemente le diré que mi ahijado no tiene mal gusto que su novia parece una candidata a reina de uno de esos concursos. Pero la nena había prometido a su abuela antes de morir el llegar virgen al matrimonio por lo que sabrán lo que implicaba esa promesa. Mi ahijado cada vez que se encontraba con ella salía con unas calenturas de morirse. Por lo que me llamaba a mi celular o móvil para encontrarse conmigo en mi departamento una vez allí me contaba lo caliente que estaba y luego de unas cervezas me pedía sin preámbulos que lo ayudara a bajar la calentura haciendo le movidita rica a su palanca.

Yo daba gracias a Dios por todo; el ritual era el mismo cada vez que nos reuníamos. Poníamos una película porno de bi- sexuales y comenzaba tocarle la polla por encima del short o pantalón corto. Su polla comenzaba a endurecer y se ponía como macana de de guaria de seguridad. Cuando la película estaba en su punto mas caliente el se quitaba la ropa quedando ese cuerpo de adonis desnudo por completo ante mi. En ese instante él comenzaba reír y me decía mira padrino vas a romper tu pantalón mejor quítatelo pues parece tienda de acampar. Yo muy obediente me desnudaba también. Me sentaba junto a él en la cama con mi mano le acariciaba la polla y con la otra me hacia mi paja (masturbaba).

El suspiraba, comenzaba acomodarse en la cama junto a mi hasta quedar acostado apuntando con su sable de aproximada 21 cm. hacia el techo de la habitación. Yo inmediatamente me alineaba junto a el mientras observaba el cuerpo que los dioses griego le habían regalado. Mientras con una mano le hacia la paja con la otra la alternaba entre hacer mi paja y acariciar su cuerpo bien formado. Un Hombre de 6 pies de alto sin una gota de gordura en es cuerpo. Su glande parecía coger vida latía tan rápido como su corazón su brillo de precum lo hacia apetitoso a los ojos de cualquier espectador. Me pedía acelerar el ritmo de las subidas y las bajas. Yo lo complacía mientras nuestros cuerpos unidos por los costados intercambiaban el calor de nuestras pasiones. Después de 20 minutos de labor rendía frutos sentía los jalones que daba su polla dura como una macana, anunciado su venida (corrida),su lechita caliente, arropando mi mano la cual yo luego limpiaba con mi lengua. Luego terminaba yo de pajearme y dormía juntos desnudos una siesta. Luego se duchaba y se marchaba hasta la próxima calentura.

Hace una semana vino anunciar que se casaba lo cual quería decir que anunciaba una despedidas de las movidas de palanca. Ya advertido del evento, le pedí nos reuniéramos por ultima vez que seria un despedida inolvidable. Acordamos reunirnos viernes ya los fines de semana lo tenemos libres los dos. Llegó el viernes y no podía concentrarme en mi trabajo planificando la despedida. Tan pronto salí, pase por una tienda en la que alquilan películas para adultos como tengo confianza con el muchacho que trabaja allí le pedí me recomendará la película bi-sex mas caliente en existencia. Me dijo que él tenía una que le había prestado un amigo que era la más caliente que había visto. Por ser a mi me la prestaría. No perdí tiempo me dirigí al supermercado para comprar varias bebidas fuertes vodka, tequila y hasta un ron ilegal producido en mi país que compre en la calle. Esa seria un despedida de grandes calibres.

Llego la tarde y todo estaba listo para la despedida, aire central en balance, velas aromáticas, picadura y por cierto la cama lista con las películas preparadas para verlas.

Escuché cuando me llamaban por el intercomunicador pidiendo le dejara subir; era mi ahijado siempre bien puntual.

Subió y cuando le abrí la puerta de mi departamento lo vi en unos cortos con una camisa hawaiana y en sandalias de playa. Parecía modelo de revista. Me dijo que al fin se iba a desquitar metiéndoselo a su mujer hasta hacerla sangrar por la chicha (concha). Estaba mas caliente que nunca contando las horas que falta van paro ir de luna de miel.

Le dije que eso ameritaba que celebráramos nuestra última vez junto para bajarle la calentura. Le ofrecí unos trago mientras hablábamos de de su planes futuros etc. Ya entrados en tragos le dije que tenía una película que no olvidaría jamás. Una vez puse la película a correr me sorprendió pues era una de esas que desde la primera escena comienza la acción. Mi ahijado se que do fijamente viendo la mientras yo ya comenzaba a quitarle ropa. Pero esta vez cada pieza iba acompañada de un beso en su cara.

Cuando le quite la camisa lo bese por su pecho fornido el cual besaba por primera vez. Mientras él miraba la película, me encontré con unos pectorales riquísimos que al besar con mis labios tiernamente lo hice poner carne de gallina. Luego alcance uno de sus tetillas duras puntiagudas con poco pelo las que chupe y mordí tiernamente. El comenzaba a suspirar. Baje mis manos hasta su cortos y le pedí se pusiera en pie para quitárselos. Yo me arrodille de espalda al Tv. y de frente a él cuando se levantó su cremallera quedó a nivel de mi boca. Al bajarle los pantalones cortos junto con ellos se fue su bikini saliendo disparada como un resorte su polla golpeado mis labios. Me que de inmóvil y lo mire a los ojos él me miró y los cerro lentamente como anticipando lo que ocurriría. Abrí mis labios besando suavemente la cabecita rosadita de su polla., a lo que el respondió con un suspiro largo y profundo. Ya sabía que mi plan de despedida se cumpliría al pie de la letra.

Agarre su polla erecta casi en su totalidad y corriendo el prepucio hasta atrás completa- mente metí su polla dentro de mi boca lentamente. Mientras su polla era quemada por el calor de mi boca, la pasión aumentaba entre nosotros y en la película cosa que lo ponía mas caliente a mi ahijado.Una vez logré tocar sus pelotas con mis labios, él tiernamente toco mi cara, agarrándome por mi cabeza y guiando lentamente mis labio para comenzar la mamada del siglo. Movía mi cabeza para producir un entra y saca de su polla rica en mi boca. Cada mamada era acompañada por un suspiro de mi ahijado que parecía un gemido. Seguí mi plan y mientras le mamaba su polla le apretaba las tetillas y acariciaba su toroso fornido. Comenzamos a sudar su olor a hombre recién bañado me embriagaba. Le solté la polla y me puse de espalda a é le dije no habrás tus ojos y abrázame para sentir todo tu cuerpo junto al mió.

Una vez nuestros cuerpo se juntaron sentí sus huevos sobre mis caderas por ser el mas alto que Yo y su polla taladraba mi espalda a tiempo que la quemaba con su calentura. Le pedí me abrazara lo mas fuerte que pudiera, mientras yo frotaba mi cuerpo contra el del. Su polla se encajó entre mis nalgas produciéndome una corriente de placer. Parecía que mis nalgas la mordían quedando atrapada entre ellas. Fue cuando emitió un gemido de placer contagiante. Me hizo sentir su polla palpitando sobre mis nalgas y nuestros cuerpos comenzaban a bañarse de un sudor tenue. Me atreví a tomar su polla que perecía una macana y pasándole saliva la metí en mi hoyito. Sentía como una pieza de CARNE dura caliente desgarraba lo que enfrentaba a su paso. Cuando logre entrar su glande en ano parecía que me había desgarrao los labios del mismo. Le pedí fuera empujando su polla lentamente obedeciendo cada instrucción que le daba logro completas su misión hasta sus pelotas duras chocaban con mis nalgas quemándolas con la calentura de su pasión.

Una vez tubo su polla dentro de mí me dio un beso tierno en el cuello y me dijo en voz bajo como con miedo de que alguien lo escuchara padrino eso se siente rico.

Aquí comenzó a cumplirse unas de mis fantasías, tener esa polla dentro de mí.

Su varonil y corpulento cuerpo me quemaba con el calor de su pasión.

Nos fuimos a la cama, quedando todo su cuerpo sobre mí. Me tomó por los hombros y se impulsaba hacia arriba como queriendo unir su cuerpo con el mió sus pelotas se apretaban contra mis nalgas, sentía ese hierro duro abrirse paso dentro de mi. De pronto me abrazó tan fuerte que me dolió, fue cuándo dándome un beso y gimiendo como si fuera su último suspiro inundo mis entrañas de sus potentes chorros de leche que calentaban mis intestinos. Se dejo caer sobre mis espaldas, mientras nuestro sudor mojaba las sabanas, sentí que su polla se clavo mas dentro de mi saliendo otra ronda de leche caliente. Me mordió un oreja y me dijo todavía queda noche para más cosas en esta despedida. Así que les contare la parte final de la despedida en el próximo relato.