Laura, Eva y Adrían

Laura y Eva son dos adolescentes que salen un día de fiesta en busca de sexo.

Ding dong!

Mi amiga Eva viene a casa a fumarnos unos petas como cada finde; aunque la noto un poco rara ultimamente sigue siendo igual de alegre que siempre. Eva es una chica morena, alta, muy alocada, y sobre todo es mi mejor amiga. Empezamos a fumar cuando estabamos en el insti, y ahora que hemos decidido hacer juntas la carrera, estoy segura de que seguirá siendo mi amiga por mucho tiempo.

-Laura tía, me debes 10 pavos, que siempre estoy pillando yo y al final tu nunca pagas nada, rata!- dijo nada más entrar.

-Hola Eva, ¿qué tal? Gracias por preguntar- la dije bromeando.

Saqué dos cervezas de la nevera mientras ella se hacía el primer peta. Cuando volví a mi habitación se había quitado los pantalones, estaba en bragas y con una camiseta larga.

  • Pffff.. jajaja ¿pero que coño haces lerda?- dije en cuánto la ví.

-Dios tía el puto calor que hace en tu casa, te voy a regalar un aire acondicionado con toda la pasta que me debes de esto jajaja-

Y nos pusimos a fumar.

Eran las 8 de la tarde y Clara nos llamó para salir de fiesta.

-Buah tía, ¿en serio? yo ahora no puedo ni moverme, que la den por saco, es una pesada siempre está igual, cuando discute con el novio es cuando la entran ganas de salir y se acaba tirando a media discoteca, si debe tener gonorrea y todo la muy guarra- dijo Eva cuando la dije el plan de Clara.

-Joder tía es que está sola y a mi me da penita, va, nos vestimos y salimos un ratillo que con una copa esto se nos pasa y estamos on fire! jajajajaja vaaaa tia! porfaaaa- la dije poniendola cara de niña buena.

-Pues tira para la ducha, que no se quién de las dos es más cansina jajaja eres una puta al final hacemos siempre lo que tu quieres- Me dijo riendo.

Me metí en la ducha y mientras el agua caía sobre mi cuerpo imaginaba el plan de esta noche: Eva y yo aguantando a Clara hablandonos de David hasta que se pusiera lo suficientemente pedo como para irse a la cama con el primero que pasara. No se para que sigue con él. Esa relación no va a ninguna parte. Los dos tienen más cuernos que el padre de Bambi. Pero en fin, ellos sabrán.

Cogí el gel y me lo fuí esparciendo por el cuerpo. "Mmmm si, aunque esté un poco atontada me apetece salir, beberme un par de copas y encontrar a un chico guapo, a ver si tiene un buen rabo jajaja". Me reía en la ducha por el torno que estaban cogiendo mis pensamientos y me empecé a esparcir el jabón entre los pechos. Son grandes y tienen los pezones pequeños, y ahora, duros. Inconscientemente, bajé la mano deslizandola hacia mi coño. El gel está frío y el agua caliente. Doy vueltas con los dedos alrededor del clítoris. "Joder, ojalá estuviese ese rabo de esta noche ahora". Me apoyo en los azulejos de la pared, que también están fríos. "Soy una guarra y me apetece que esta noche me follen muuy duro" Me pellizco los pezones.

En ese momento entra Eva en el baño.

-Tía, ¿por qué tardas tanto?¿quieres que me duche contigo?jajajaj

Paro de inmediato, me aclaro y salgo de la ducha.

-Ostia tía eres anormal, que susto.

-Va, no seas pesada, que yo también me tengo que duchar-decía mientras se desvestía

-No esperes a que salga eh, no te vayas a morir- dije mientras mi vista se deslizaba hacia sus pechos, más pequeños que los míos pero muy bonitos también.

Salgo del cuarto de baño pensando en que me voy a poner. "Necesito ir sexy que te cagas. En plan miradme, que buena estoy. Jajaja, dios soy imbécil".

Rebuscando en el armario encuentro un vestido negro, corto, palabra de honor, que me hace unas tetas que flipas, todo hay que decirlo, y unos tacones rojos de sandalia. A Eva la encuentro unos pitillos negros con un top rosa que deja la tripa al aire. Ella va a llevar tacones negros.

Una vez arregladas llamamos a Clara y la decimos que dónde quedamos.

¿Cóoooomo? Te voy a matar, te juro que te mato- dije hablando por teléfono.

¿Qué?¿Qué?¿Qué?- me susurra Eva pululeando a mi alrededor intentando acercar la oreja al teléfono.

Vale, haz lo que te dé la gana. Adiós.- y cuelgo

¿Qué?- preguntaba Eva impaciente.

Nada, que la zorra esta dice que no viene. Que la ha llamado David y que prefiere quedar con él. Pues ahora salimos que yo ya me he arreglado ostia.- dije cerrando la puerta de casa.

En serio, esta pava es tonta, en fin, mejor que es una pesada- decía Eva mientras salía para llamar al ascensor.

Entramos en el primer pub que vemos y pedimos dos whiskies con sprite. Charlamos, reímos y pedimos otras dos copas más.

-El camareroo te está miraando- me dijo Eva con voz de niña pequeña.

-Jajaja que boba eres, si le sacó el número de teléfono me invitas a una copa- dije, medio borracha.

-Dale duro mami jajaja- decía Eva a la vez que yo me dirigía hacia la barra.

El camarero era un chico alto, moreno, con barba, de unos ventipocos.

-Hola, me pones dos copas más, por favor- Le dije, mordiéndome el labio.

-Claro guapa, ¿que estáis las dos solas?-

-Sí, nos han dejado tiradas así que si quieres unirte cuando acabes estás invitado- le dije al oído mientras me acercaba a coger las copas.

-¿Y?¿El número?- pregunta Eva

-Ay Evita, las cosas de palacio van despacio-

-Los polvos de una noche no-

-Jajajaja va, un hidalgo, así me acerco a por más copas- Y las dos nos bebimos las copas de un trago.

"Dios, no se si voy a poder seguir bebiendo a este ritmo". Sólo eran las 2 y yo llevaba un pedo del carajo. Antes de acercarme al camarero fuí al lavabo a lavarme la cara.

-Hola, ¿queda mucho para el final de tu turno? Necesitamos compañia, la verdad- dije con una voz muy dulce.

-Jajaja acabo a ymedia ¿me vais a esperar?

-Seguro-

Cogí a Eva y la saqué a fuera. Necesito un cigarro.

A las 3 menos cuarto por fin aparece el camarero. Se había cambiado de camiseta y está muy guapo.

-Bueeeno chicas, ¿que tal? Soy Adrián, ¿a dónde os apetece ir?-

El chico era muy majo, y no paraba de hacer bromas. "Necesito irme ya con él coño, o ¿es que Eva no lo ve? Que pesada."

-¿Nos tomamos la última en mi casa?-dije, esperando que Eva dijera que no.

-Siii! Vamos!- dijeron los dos.

"Mierda, ¿cómo que los dos? No, no, no. Esto no es así. Tu a tu puta casa Eva ostia".

Llegamos y nos tiramos en la cama mientras yo cogía una botella de Jaguer de la nevera. Me quité los tacones y me tiré con ellos a la cama.

-Vale, vamos a jugar a verdad o atrevimiento- propusó Eva.

"Ah, que bien, que no se piensa ir".

Primero le tocó a Adrián. Eligió atrevimiento.

-¡Haznos un streaptease!- chillé, un poco alto creo.

Todos reímos mientras Adrián se levantaba. Tarareaba una canción mientras se quitaba la ropa. "Diooos, en serio, está tremendo". Se quedó en calzoncillos y salió de la habitación. Volvió a los diez segundos con una cubitera de hielo en la mano.

-Si queréis que me quite los gallumbos vais a tener que compartir un hielo- dijo mirándonos a las dos.

"Espera, espera, espera, ¿qué? no, no, no, Eva fuera, fuera ya coño"

Sin mediar palabra Eva cogió un hielo y se lo metió en la boca.

"No, no, esto no va bien, que darme un beso con Eva me da igual, pero quiero follar joder. Bueno, menos mal que es Eva y no Clara"

Y besé a Eva hasta que el hielo se deshizo y se deslizaban gotas de agua por nuestra boca. Al acabar miramos a Adri, que nos miraba fijamente con una notable erección debajo de los calzoncillos.

-Muy bien- dijo, y se los quitó.

"Dios, dios, en serio, que coño hace aquí Eva. Tengo a Adri desnudo delante piráte coño. Dios que rabo."

-¡Me toca a mí!¡Elijo atrevimiento!- chilló Eva.

-Te tienes que atrever a comerte un hielo en las tetas de tu amiga- dijo Adri, malicioso.

Eva me quitó el vestido, quedándome en sujetador y tanga, y cogió un hielo. Lo puso en mi canalillo, me miró a los ojos, sonrió y lo cogió con la boca mientras lo deslizaba por mis pechos.

"Dios, vale, me estoy poniendo cachonda, que coño hago". Pero en el fondo me apetecía disfrutar. El hecho de que fuera Eva me daba confianza y hasta me hacía gracia. Que puta es, jodiendo en todo momento.

-Vale, me toca- dije con la voz entrecortada, maldiciendo al pequeño hielo que había cogido Eva- elijo verdad.

-¿Verdad que vas a ser buena chica y vas a dejar que te tape los ojos?- dijo Adrián cogiendo un pañuelo de la silla y vendandome los ojos.

Noté que me separaban las piernas y me acariciaban el clítoris. Subían y bajaban un dedo con el tanga de por medio. Entonces mientras me lo apartaban me dieron un beso en la boca. Era..suave y olía a chica. Era Eva. Pero era agradable, me mordisqueaba el labio mientras me pasaba la lengua por el y su boca jugaba con la mía. Adri me apartaba el tanga mientras me pasó la lengua por el clítoris. Entre los dos me tumbaron en la cama y Eva me quitó el sujetador. Estaba tumbada boca arriba. Eva jugaba con mis pechos y los hielos a la vez que Adri me escupía en el coño para luego restregarmelo con la mano por el fuertemente. Estaba muy cachonda, necesitaba ver. Entonces Adri empezó a mover la lengua alrededor de mi coño mientras iba metiéndome dedos en él a una gran velocidad. Involuntariamente empecé a gemir. Oía la risa de Eva mientras me mordía la oreja. Al rato me cambiaron de postura y me pusieron a cuatro patas. Unas manos más pequeñas que las de antes me agarraron las piernas y noté el cabello largo. Era Eva, ¿qué hacía ella ahí abajo?

Y noté su rabo en mi boca. Instintivamente lo cogí con la mano y empecé a chuparle la puntita. Eva me daba besos en el coño, para pasar al poco rato a marear su lengua por todo mi clítoris. Me quité la venda y mire a Adri a los ojos. En ese momento todo paró.

-No, no, no..mal, joder. Tu prueba de verdad era que no te ibas a quitar la venda- dijo Adri en tono de reproche- ahora te tenemos que castigar.

Y salió hacia el baño volviendo con el cepillo de dientes eléctrico en la mano; se lo pasó a Eva.

Me colocaron boca arriba y me metió su rabo en la boca hasta casi ahogarme.

-No dejes que se corra- le dijo a Eva.

Y mientras tenía su pene en la boca, Eva iba alternando su lengua con la vibración del cepillo de dientes. Era muy placentero. Mis gemidos se ahogaban por su pene hasta que lo sacó y le dijo a Eva que parara.

"No joder, por qué".

Se sentó y Eva y yo fuimos a comérsela. Casi nos peleabamos por ella y cuándo nuestras bocas se rozaban nos besabamos. Decidí entonces meterme sus huevos en la boca y absorber. Dios, que rico.

Entonces Eva se sentó en la cara de Adri y mientras él se lo comía yo le cabalgaba. Rebotaba en él y cada vez lo hacía más fuerte. Los gemidos de Eva me excitaban cada vez más y me corrí. Mientras me tiraba en la cama oí como se corría Eva. Rapidamente, el chico se pusó de pie y apuntando a nuestros pechos se corrió. Yo me los refrotaba y me lleve un dedo a la boca. "Mmm sabe bien, es dulce".

Y nos quedamos dormidos.

PD: ¡Perdonad si faltan acentos o las frases están mal expresadas! ¡Es mi primer relato y no lo revisé mucho! Estaba impaciente por mandarlo^^