Laura

7:00 de la mañana. el despertador suena como cada día , como cada lunes cualquiera,; había sido un fin de semana gris , como todos los que recordaba en los últimos meses,

Se desesperezo en la cama , ,se levanto y con los primeros rayos de sol, se miro en el espejo, su largo pelo rizado, seguía teniendo el brillo de antaño, se desnudo parsimoniosamente, observo que su piel era suave, se palpo sus pecho grandes, algo caídos por sus embarazos, pero con unas formas exuberantes , plenas, tenia celulitis en su vientre, no había conseguido quitarse esos kilos de mas , no tenia mucha voluntad la comida le pirraba, sus caderas eran ampulosas, generosas, se rió para adentro pensando , cuantos darían por un culo así donde agarrarse, su sexo de labios grandes , estaba oculto por una mata rizada de vello negro, antiguamente a su marido le encantaba , ahora ya no había forma de que se le levantara, su educación anticuada y religiosa, le impedía hacer las cosas que su marido le pedía, chupar "eso" era para ella un suplicio, aunque pensándolo bien , tampoco es que su marido insistiera mucho.

Laura tiene 37 años, 3 hijos, trabaja en casa, su vida se centra en ellos y en su marido, es una mujer normal, grandes y bonitos ojos marrones escondidos detrás de unas gafas , digamos cutres y anticuadas, una nariz respingona, que le hace juego con una boca pequeña y graciosa, 1.68cm 77 k rellenita, su ropa es poco atractiva , oculta sus formas sensuales , y hace que no se distinga sus 110 de pecho y su culo ancho y atrayente.

Como cada mañana se ducha , se viste y despierta a los chicos para llevarlos al colé, hace buen tiempo y prefiere llevarlos andando, las voces de los crios se mezclan con el ruido de los coches , los gritos, pero ella esta absorta en sus pensamientos; ¿ Porque su marido ya no le veía atractiva, ¿ si que es cierto que lo niños el trabajo… , estaban cansados , pero ella siempre estaba dispuesta….Hacia ya dos meses que su marido no la tocaba , no recordaba ya lo que era tener algo duro dentro , para ella hacer el amor era tener un pene en su vagina…. Si le gustaban los besos, las caricias, pero nada como sentir eso que le hace derretirse, sentirse poseída, estallar de placer.

Dejo a los crios, y ensimismada en sus cosas , bajo la cuesta que le llevaba de nuevo a casa, al llegar al portal , pensó que debería subirse unas garrafas de agua que tenia en el coche, aparcado cerca de allí, cruzo la calle y se dirigió abajo a unos metros estaba su Carnival negro, se fijo que el Gimnasio que había debajo de su bloque , ya estaba abierto , eran las 9:30 y un par de estudiantes , hacían sus ejercicios de pesas, dentro de el, abrió la puerta corredera y cogio la garrafa, pensó en las malditas escaleras que tenia que subir y en lo que pesaba la dichosa bombona, volvió a dejarla dentro " Que se encargue mi marido de subirla" pensó.

Cruzo la calle hacia el gimnasio, su cabeza seguía dando vueltas pensó que le gustaría ponerse en forma, quitarse tal vez esos michelines, pero solo de pensar en el esfuerzo, cambio de idea; se acerco a luna del recinto que dejaba ver todo su interior , su figura se veía reflejada en el escaparate, absorta , observo que no estaba mal, se ajusto el suéter, miro el contorno de sus pechos, giro de lado ajustándose la falda larga que llevaba.

Dentro tres chavales cuchicheaban, mirándola descaradamente.

Juan es un chico de 25 años, que cursa en la Universidad Europea de Madrid, el último año de Ingeniería,

Joder¡¡¡ con la señora esas son las mejores mosquitas muertas deseosas de un buen rabo.

Sus dos amigo a asentían riéndose, Juan se encontraba en esos momentos con el torso desnudo donde se adivinaban unos abdominales muy marcados, y un pantaloncito de ciclista muy ajustado.

De pronto Laura se percato de los chavales, los vio hablar, reírse y mírala fijamente, vio también ese pecho rasurado, esas piernas fuertes, y sin querer su mente hizo que sus ojos se fijaran en el bulto de los pantalones, cuando miro mas arriba se encontró con los ojos negros de chico que parecían desnudarla, Su tez cambio de color a un rojo carmesí,

Bajo la mirada y deprisa se encamino a su casa, no sin antes ver el gesto del chico, algo parecido a un Ok, como dándole el visto bueno.

Abrió la puerta de portal deprisa, subió las escaleras y sofocada entro en su hogar.

Abajo Juan seguía hablando con sus compañeros,

Os hago una apuesta , a esta tía me la follo ahora mismo¡¡¡ que apostáis¡

Anda Juan decía su amigo Gonzalo, ya te gustaría, a esa no hay por donde entrarle¡

Ya veras solo tengo que encontrar una excusa, lo he visto en sus ojos, esa quiere polla.

Jajaja reían los tres. Estas mal tío , además es una señora que no vale na¡¡

No vale¡¡¡¡ Juan se tronchaba de risa , no entendéis de mujeres, esta mal follada y bueno ya veremos, hacedme un favor decidle a la encargada que me he tenido que ir.

Juan cogio su bolsa de deportes, se puso una camiseta sin mangas y se encamino a la calle no sabia lo que iba a hacer, al salir, paro en seco, había un sobre en el suelo, era una carta del banco, ponía dos nombres Javier……. Y laura…….. Calle de las eras 45 3º D , no podía creer la suerte que tenia, era seguro de la mujer, la calle estaba a la vuelta de la esquina y el 45 al lado, vio el timbre del 3º B pero pensó que mejor seria hacer otra cosa, llamo a un piso al azar , y cuando la voz que pregunto Juan dijo ¡ Cartero comercial¡, un sonido identificable hizo que la puerta cediera , Juan sonrió para adentro, subió de dos en dos las escaleras y pulso el timbre del 3º D.

Laura se sorprendió de que llamaran tan pronto a su puerta, abrió una rendija y vio al chico allí plantado, era el mismo de gimnasio.

Si, dijo Laura.

Hola buenas perdone es que se le ha caído un sobre y veía a dárselo

Juan tendió su mano, mientras laura miraba con precaución, leyó su nombre en el remita, le dio las gracias y procedió a cerrar la puerta no sin antes recorrer con su vista el torso de Juan.

Perdone no se si seria pedir demasiado pero estas escaleras te hacen polvo, Juan miraba con picardía a laura, Un vasito de agua seria tan amable.

Laura no sabia muy bien que decirle, el chico le había traído el sobre, bueno era un vaso de agua,- Espera le dijo y se encamino a la cocina.

Juan no hizo caso cuando vio que se metía, entro y cerro la puerta., dejo su bolsa en una silla y espero.

Laura se sorprendió al verle dentro, el chico con una sonrisa, cogio el vaso que ella le tendía, y bebió despacio saboreando, lentamente.

¡Que rica¡ dijo en voz alta mirando a Laura, , su mirada no era digamos normal , recorrió todo el cuerpo de ella fijándose sobre todo en sus pechos, y volvió a exclamar ¡Que rica esta¡

A laura los colores se le subían por el rostro, una vez terminado le dio el vaso, rozándole sus manos.

• Se señora que es mucho pedir pero es que con tanto agua me gustaría ir al baño

• Laura no sabia que decir, al fin y al cabo era un estudiante, no pasaba nada. La segunda puerta al fondo del pasillo.

Juan con una sonrisa entro en el baño, era amplio muy bien decorado, con una ducha de masaje acristalada, y en un momento pensó y su cara se ilumino.

Se quito la camiseta, se quito el pantaloncito, y grito para que le oyera,

-Señora si no le importa ya que estoy aquí me voy a dar una ducha es que sabe… en el gimnasio hoy no tiene agua caliente y bueno… gracias.

• Vaya cara tenia el chaval, a Laura no le gusto la situación, pero temía entrar en el baño y encantársele, en pelotas

Se oía el sonido del agua caer, mientras Juan se recreaba en la ducha, se puso gel por todo su cuerpo, miro hacia abajo y vio como su amiguito estaba ya mirando hacia arriba.

Laura dejo de oír el sonido del agua, Juan cogio una toalla grande y blanca y fue secándose parsimoniosamente, cogio colonia de una estantería y se echo, admiraba su cuerpo rasurado al completo en el espejo, cogio otra toalla mas pequeña y se la anudo a la cintura, justo por encima del vientre y llegándole hasta medio muslo.

Salio al salón, Laura se que do con la boca abierta, no entendía la cara que tenia el chico.

• Perdona, Laura porque te llamas así verdad?, que he pensado que quería enseñarte algo para que así me digas que tal me queda.

Laura no podía creer ni entender lo que veía, un niñato estaba casi desnudo en su salón, había utilizado su ducha y ahora la tuteaba explicándole no se que

Se fijo unos segundos en el, era muy guapo, con esa chulería que tienen los chicos jóvenes, unos hombros y un torso ancho de gimnasio y unos abdominales marcadísimos, se acordó en ese momento de Forlan y una pequeña sonrisa le ilumino el rostro, no tenia ni un rastro de vello, ni siquiera donde empezaba la toalla a tapar, sus piernas eran fuertes como columnas y aunque ella no era baja , el 1.90 del joven le parecía enorme.

-Digo Laura que te parece esto…. Así, me gustaría que me dieras tu opinión como mujer, me lo acabo de hacer y no se si les gustara a las chicas.

Juan dejo resbalar la pequeñísima toalla por su s piernas y allí enhiesto, desafiante, apareció un pene en su máximo esplendor.

Laura no sabia que decir, ni que pensar, se quedo con la boca abierta sin poder reaccionar, miraba al rostro de Juan y después mas abajo y veía, esa polla, preciosa , durísima , no muy grande pero , con un capullo gordo y esa curvatura deliciosa hacia el vientre

-Que te parece laura, totalmente depilada, te gusta ¿Juan iba paso a paso, haciendo desaparecer los escasos 3 metros que le separaban de ella, hablando algo que Laura ni siquiera oía.

Sin capacidad de reaccionar, solo contemplaba ese pene tan duro tan viril, tan…. De hombre.

A escasos centímetros Juan se paro, miro a Laura y cogiendo su mano la acerco a su polla, dejando allí a su libre albedrío.

Laura no era capaz de pensar, tenía una polla en su mano y notaba su inmenso calor su dureza, su pequeña mano reposaba como sin querer en el sexo del joven, pero si notaba la rugosidad que marcaban las venas en el tallo.

Te gusta Laura? Volvió a preguntar Juan, ella seguía sin palabras, Juan suavemente retiro la manita de su polla y cogiendola con sus fuertes dedos, solo la digo…. Ven.

Ella como una autómata, sumida en un profunda confusión, le siguió sin palabras, sin preguntas.

La llevo hacia un cuarto grande con una cama de matrimonio.

• Aquí estaremos más cómodos, la dijo Juan.

Laura quería pensar rápidamente, pero no podía esta en su cama, con un chico….

Solos. Juan dulcemente pero con decisión, cogio el suéter de Laura y se lo quito por encima de su cabeza., aparecieron dos tetas grandes y bamboleantes embutidas en una nada atractivo sujetador beis, Juan acerco sus manos al pelo de ella y desabrocho con parsimonia las orquillas que lo sujetaban, dejando caer sobre los hombros desnudos de ella esos rizos negros que la hacían mucho mas atractiva.

-Así mejor, sonrío el.

Laura estaba ensimismada como una muñeca sin voluntad, Juan desabrocho el sujetador, arremango la falda en la cintura y sin palabras pero con determinación arranco las bragas que todavía tapaban la poca dignidad que le quedaba a Laura.

Sin más coloco a Laura agachada sobre la cama con las manos en el colchón y los pies en el suelo abrió sus dos grandes cachetes con sus manazas y colocando la punta del gordo glande sobre la entrada, hundió la mitad de su polla con un poderoso golpe de riñones, Juan notaba el interior ardiendo, agarrado a las caderas de ella , dejo que se habituara unos segundos al invasor, le gustaba tenerla así sometida sin voluntad, agarraba fuertemente su culo y pasa sus manos sopesando las grandes ubres de ella, tenia unos pezones grandes y excitados, Juan sonrió de nuevo dentro de si, con su mano por debajo cogia un pecho de ella apretándolo ,abarcándolo sintiendo como se estremecía, como temblaba entre sus dedos.

Poco a poco introdujo su ariete en la cavidad que nadie excepto su marido había profanado.

Laura con los ojos cerrados, no existía, solo sabia que el placer que sentía la llenaba por completo, que sus sentidos estaban concentrados en aquella polla, que ahora empezaba a salir y entrar con decisión y firmeza, sintiéndose poseída , dominada, por un chaval que con sus manazas aferradas en su culo, le hacia sentir una hembra.

Juan seguía empotrando su pene hasta chocar sus huevos con el trasero de ella, el choc, choc, choc, de sus sexos retumbaba en el cuarto.

-Te gusta Laura, ahora casi no era una pregunta era una afirmación, agarrándola del pelo, levanto la cabeza de ella, quería ver su cara sus ojos, Laura mantenía los párpados cerrados, las aletas de su nariz se ensanchaban a cada golpe de caderas y su boca se abría como si le faltase el aire.

Dios que culo mas rico , te lo voy a partir en dos puta¡ . Juan fuera de si intentaba concentrarse, si seguía así se iba a venir en poco tiempo, y…. había que aprovechar la oportunidad.

Laura ya no podía mas, había intentado aguantarse morderse los labios, pero sentía tan adentro, tan duro ese pollon, no era mas grande que el de su marido , pero tal vez por la dureza por esa curvatura hacia arriba, nunca había sentido nada igual, el placer se le escapaba por su coño , por sus tetas y no pudo mas grito y gimió como nunca, como una verdadera zorra, viniéndose en un orgasmo desmedido, salvaje, que la hizo perder el mundo de vista, unos gritos interminables, que la dejaron rendida sobre la cama.

.

Ni siquiera oyó, como el chico la llamaba puta, zorra y carnudo a su marido, mientras despacio y ahora ya tumbados los dos en la cama seguía taladrando esa vagina grande y jugosa.

Laura despertó de su ensimismamiento, y sintió como el seguía a su espalda y follándola sin descanso, una luz ilumino su corta voluntad, y le dijo.

-Para para ¡¡¡por favor que no tomo ninguna precaución y no puedes correrte, dentro. Coge un preservativo al menos de la mesilla,

Juan retirándose la miro a la cara, con todos esos colores subidos después de tan intenso orgasmo, estaba preciosa.

Mejor pónmele tu, seguro que se te da mejor que ami, , laura totalmente nerviosa cogio un preservativo , lo abrió e intento ponérselo, , le temblaban las manos, miraba embelesada a la polla y no era capaz de enfundar el ariete.

Vamos a hacer una cosa cielo. Dijo Juan me lo pondré yo si me chupas la puntita.

Laura no sabia que hacer, nunca ni siquiera a su marido le había comido eso, sentía asco, aunque ahora caliente, casi lo prefería a ponerle el condón.

Acerco sus pequeños labios al glande, y le dio un beso, suave dulce, suficiente para notar un sabor que no la desagrado, Juan a los pies de la cama cogio su bolsa y extrajo una cámara de fotos.

Justo en el momento que Laura abría su pequeña boca para abarcar la polla, Juan puso la cámara en funcionamiento, en modo video, exclamando.

-Vamos a inmortalizar este gran momento, cómemela Zorra.

Laura sin darse mucha cuenta de esto, saboreaba ahora si con deleite esa dureza, ese poderío ese calor que la sumía en una excitación permanente.

-Dios que puta, como chupas zorra, seguro que tu marido no sabe el puton que tiene en casa, ahora vas a saber lo que es un macho.

Juan le quito el caramelo de la boca de ella y a cuatro patas inclinándola sobre la cama de matrimonio, volvió a meter su polla de un golpe en el coño de Laura, por supuesto no se había puesto el preservativo, y laura no tenia voluntad ya para nada, solo sentía como su boca era un gemido continuo, como sus tetas, tenían vida propia balanceándose al son de los golpes que Juan le metía, gemía gritaba, movía su cabeza de un lado a otro , mientras Juan la grababa ,cogia su cara para enmarcar sus suspiros ,su placer , su gozo; los bufidos del chico , se mezclaban con los sonidos salvajes que salían de la garganta de Laura.

_ Dios me corro, me voy acorrer puta.

_voy a llenarte el coño de leche zorra.

Ahggggggggh, ay me vengo , Dame mas fuerte, métemela hasta dentro¡¡¡, Laura no reconocía siquiera su voz, solo un torrente de palabras que salían su boca dominada por la lujuria.

OH oh ahhhh, y se vació sobre la polla dura de el chico, mojo el tronco, las sabanas sus muslos, como nunca.

Segundos después Juan vencido sobre la espalada de laura , gruñía , encharcando la vagina de una lefa vizcosa, espesa.

Toma puta toma, te voy a preñar zorra.Toma leche¡¡¡ Siente como estas llena de un verdadero macho¡¡¡¡.

Minutos después Laura, estirada sobre la cama reposaba con los ojos cerrados, respirando fatigosamente, Juan aun dentro de ella tenía esa risa burlona

_ Te gusta Laura ¿….