Laura (1)

Laura la chica mas guapa del barrio (1 de 3)

Empezare por decir que vivo en México, en provincia en el municipio de santa Catarina, omitiré la colonia para evitarme cualquier problema futuro, me llamo Laura tengo 23 años, mido 1.65, mi pelo es rubio, enormes ojos negros, tez blanca, soy una chica esbelta mis medidas son 87-58-92, mis pechos a pesar de no ser muy grandes son bellísimos, mis largas piernas son la tentación de todos, mi fina cintura esta firmemente delineada gracias a la hora diaria de abdominales que realizo todos los días, pero de lo que estoy mas orgullosa es de mi trasero ya es capaz de volver loco a cualquier hombre y porque no decirlo hasta una que otra mujer también lo desearía, esta firme, respingón y bien formadito, lo cual se convertiría en mi perdición. Vivo con mi familia estoy soltera y sin compromiso, mi padre falleció cuando tenia 15 años, nos mantenemos con la pensión de mi padre, tengo un hermano de 20 y una hermana de 18, así desde que murió mi padre me las ingeniaba para ayudar en la economía familiar, así como para pagar mis estudios.

Mi entorno es el siguiente la colonia donde vivo es de clase media baja, y muy antigua la mayoría de las personas que viven ahí, son viudos, viudas o parejas de ancianos, es muy común ver la plaza repleta de señores de edad avanzada, así que no hay muchos jóvenes por el vecindario lo cual con mi bello y escultural aspecto me convertía en la chica mas deseada de toda la zona, nunca tuve algún problema porque alguien que se propasara conmigo, me decían muchos piropos, y se que me comían con la mirada, pero de ahí no pasaba, el pequeño grupo de jóvenes que se juntaba cerca de la casa no me decían nada porque mi hermano era lidercillo de ellos por lo tanto me respetaban, mis vecinos estaban demasiado viejos para ponerme atención, pero en la plaza había un grupo de pensionados conformado por don Luis de unos 63 años alto casi 1.90, blanco, canoso de ruda expresión y complexión amplia, don Javier de unos 72 años de robusto de 1.70 , moreno, con anteojos y un enorme bigote y don Vicente de 65 años, 1.80 bastante moreno, gordo y la verdad muy feo, por cierto era el único no estaba jubilado se desempeñaba como jefe de personal en una compañía cercana a la localidad, así que todas las tardes que iba yo correr y ejercitarme a la plaza, ellos no perdían detalle de todos mis movimientos, lo que me causaba mucha risa el solo pensar que el trió de viejitos se cachondeaban conmigo, a lo cual por cierto nunca le tome importancia.

Pero bueno volviendo al tema Soy egresada de la universidad y todo comenzó precisamente cuando termine mis estudios hace 2 años, y comencé a buscar trabajo, lo cual no fue tan fácil como creía ya que en la mayoría de las compañías pedían ingles, y yo no se ni una pizca, pero bueno al fin joven yo insistía hasta que por fin encontré trabajo en una compañía de manufactura la se dedicaba a la industria automotriz, me hicieron muchos exámenes y pruebas y después de varios días el reclutador me aviso que yo era la elegida. La verdad pensé que se habrían equivocado ya que había mas chicas y chicos que yo con mayor experiencia, pero en fin la decisión era suya, y yo estaba entusiasmada con el trabajo, el puesto era interesante y tenia muy buena paga, así que rápidamente asistí para comenzar en mi nuevo trabajo

Al día siguiente muy temprano llegue a la empresa y el reclutador me dijo que toda la papelería estaba lista que fuera con el jefe de personal para dar por terminada mi contratación, al llegar me sorprendió mucho ver a don Vicente quien se presento muy cortés y muy amablemente conmigo lo cual hizo que olvidara cualquier comentario negativo que hubiera yo dicho de el antes, me explico y me dijo todos los pormenores de mis actividades, logre notar como a pesar de sus amabilidad, el viejo no perdía detalle de mi trasero y el muy desgraciado aprovechaba cualquier escusa para colocarse tras de mi y así poder observar con mayor facilidad estuve a punto de reclamarle, pero esa actitud fisgona contrastaba con su comportamiento amable y hasta cierto punto paternal, así que pensé si al viejo le gusta ver pues que vea un poco. Así transcurrió mi primer día, ya por la tarde cuando estábamos cenando le conté todo a mi madre la cual se puso muy contenta, pero cuando le dije quien era mi jefe su rostro cambio por completo nunca había visto el rostro de mi madre con aquella furia y unos ojos de odio, le pregunte por se ponía así cuando le mencione a don Vicente, No quiso decirme pero de tanto insistir, me confeso que tiempo atrás el viejo tuvo muchos problemas con mi padre, ya que el tipejo tato de propasarse con ella, y que de hecho ese problema fue una de las principales causa del infarto que le quito la vida a mi padre. Ese día me fui a dormir confundida ya que por un lado deseaba ese trabajo, pero por el otro deseaba golpear al tipo ese. Al la mañana siguiente no sabia que hacer, total me decidí a ir al trabajo, pensé, voy a soportar al tipo este, solo mientras encuentro un nuevo trabajo.

Así pasaron los días soportando las miras del viejo, pero disfrutando de mi empleo, en pocas semanas, se abrió un vacante en el área de compras, rápidamente solicite el puesto, don Vicente me dijo que el puesto era mío, pero que teníamos que celebrarlo yo acepte rápidamente cuando supe que también otros compañeros irían al festejo, la verdad es que a pesar de ser muy guapa, nunca había tenido muchos hombres en mi vida a lo mucho 2 novios y solo con el ultimo había tenido relaciones sexuales, pero hasta ahí. Así que cuando dieron las 6 de la tarde, nos alistamos para ir restaurant-bar muy concurrido de la ciudad, me invito a llevar en su auto, no había opción así que acepte. Ese vestía un ajustado pantalón blanco, con una blusa negra que tenia un buen escote, con unos zapatos de tacón negros, como podrán imaginar me veía hermosa, así que de camino al bar, don Vicente bromeaba sobre me prometedor futuro, pero al mismo tiempo no perdía oportunidad de rozar mi pierna cada que podía lo cual me ponía muy nerviosa pero, con la amena platica me distrajo lo suficiente como para no poner atención a esos pequeños roces, al llegar en la mesa estaba Carlos, Luisa y Felipe, así comenzamos la celebración, don Vicente pidió varias botellas de champaña, la platica estuvo llena de anécdotas, de chistes, hasta que me di cuenta me reía como una loca de cualquier cosa, me levante para dirigirme al baño y note lo borracha que estaba, la verdad es que yo nunca había probado una gota de alcohol, ya que no acostumbraba ir de jerga, de regreso en la mesa, ya solamente estaba Felipe quien me informo que Carlos y Luisa ya se habían retirado, para entonces ya eran como las 11:30 pm, por lo que le dije a don Vicente que ya me tenia que ir, a lo que el me contesto.

-- Espera Laurita, la ultima y nos vamos

--esta bien pero nada mas esta

Don Vicente le hablo a un trió que estaba en el lugar, le pidió algunas canciones

Al poco tiempo estábamos cantando a todo pulmón, hasta que de repente sentí sus manos en mis hombros, abrí los ojos y me encontraba en asiento del auto.

__ descansa Laurita. Mientras me acomodaba en el asiento, el cual estaba reclinado hasta atrás

Trate de contestar pero no podía ni articular una sola palabra, estaba totalmente ebria

__ no te preocupes de nada yo te llevare a tu casa, dijo don Vicente

__ esta bien, dije

Trataba de mantener los ojos abiertos pero no podía, solo podía oír lo que me decía

__hay Laurita una muchachita tan bella como tú no debería andar sola y borrachita, me decía mientras descaradamente me acariciaba las piernas.

__ que tal si alguien trata de propasarse contigo, me decía

Yo trataba de parame y reclamar pero no podía de hecho por momentos dormitaba y despertaba solo por el contacto que don Vicente me estaba haciendo, en ocasiones su mano acariciaba mis piernas, otras amasaba mis pechos y mi entrepierna. Y yo sin poder hacer nada, sentí mucha desesperación y frustración en los momentos de lucidez comencé a llorar.

__ no llores, no te va a pasar nada, solo estoy tocando tu cuerpo para darte calor, porque esta muy fría la noche.

__ no querrás enfermarte verdad

Estaba a punto de vomitar, no se si por la borrachera o por el asco de ver como viejo asqueroso, me estaba dando faje descomunal. De pronto perdí el conocimiento.

__ despierta ya llegamos, me dijo

Estaba para frente a la puerta trasera de la casa, el viejo me sostenía de la cintura, trataba de arreglarme la ropa y el pelo.

__ Mira quédate quietecita mientras voy por algo de agua.

Había un grifo cerca y debió haber un bote para llenarlo de agua

__ haber quiero que respires profundo y trates de caminar derechita, para que tu madre no te regañe, al mismo tiempo que humedecía mi nuca y frente con el agua.

Lo cual me hizo reaccionar un poco, cuando sentí que sus labios se posaron en los míos

Trate de resistirme pero estaba muy borracha, sobaba mi espalda y mi cintura, sus besos eran besos muy intensos y sentía con mi cuerpo estaba completamente pegado al suyo, inmediatamente sentí como empezaba a reaccionar a tales caricias, sin darme cuenta estaba correspondiendo a los besos, don Vicente seguía en lo suyo, comenzó a Acariciar mi trasero

__ no tienes idea de cuantos quieren hacer esto, pero nadie tiene la fortuna que tengo yo.

Me amasaba el trasero de tal manera que empecé a levantarlo para que lo tomara mejor, el desgraciado comenzó a mordisquear mi cuello, por mas que trate no pude evitar soltar mi primer gemido

__ te gusta verdad, yo sabia que serias mía.

Comenzó a desabrochar mi blusa y sobar mi pechos los apretaba con desesperación, sus ojos estaban fuera de si, llenos de lujuria, yo ya estaba a mil, tenia mi pantaleta completamente mojada. No podía creer que esta en la puerta trasera de mi casa estaba siendo fajada, por viejo decrepito, el cual a su edad nunca pudo haber imaginado que tendría a una chica como yo.

Me giro, y me recargo contra la pared, estaba todo mi culo expuesto a merced de don Vicente

__ mira nada mas tengo este cotizado culito, nada más para mí

Sentí como sus viejas pero expertas manos manoseaban mi trasero, habrían mis cachetes, sentía una que otra nalgada, el muy infeliz jalo mi tanga hacia arriba.

__ No hay nada como ver una tanguita saliendo del pantalón

De pronto sentí su barriga en la parte baja de la espalda, sus manos sujetaban mi cadera, y un enorme bulto se poso en medio de mis nalgas, lo cual me estremeció, creo ya hasta mi pantalón estaba húmedo.

__ siente mi orgullo, estoy seguro que nunca habías sentí una como esta

Me estaba bombeando por encima del pantalón, ya había perdido la razón, lo estaba disfrutando, me odiaba por eso, pero era la verdad, gemía con una puta.

De pronto se encendió la luz de cocina, el viejo corrió y rápidamente encendió su carro y se esfumo entre la oscura noche. Sin antes darme una nalgada y decir

__nos vemos chiquita.

Lo cual hizo que tuviera una enorme y larguísimo orgasmo.

__ Estas ahí Laura, pregunto mi madre

__ si ya llegue

__ esta bien apaga la luz nos vemos mañana

__ hasta mañana mama.

Apague la luz y rápidamente me fui para mi cuarto………..

Continuara