Lascivia familiar

De como un atraco-secuestro, se vuelve una lujuriosa sesión de sexo familiar en trio, de consecuencias explosivas. Lo que un buen padre ama a sus hijos, sin duda hasta el fooondooo de su...

La historia que os voy a contar a continuación paso en realidad en una de las ciudades mas importantes de un país europeo,fue durante varios días cabeza de noticiarios, y casi tan pronto como surgió, desapareció a la semana detrás de un asesinato escabroso, hará unos 4 años.

Durante 3 días una familia había sido retenida como rehenes en su casa, mientra unos ladrones robaban la sucursal del banco del cual el padre era el director.

Según las noticias, después del secuestro la familia compuesta por los dos hijos del hombre habían sido internados en el hospital sufriendo un shock traumatico. El padre después de permanecer como rehén junto a sus hijos se había visto obligado a revelar la clave de la caja de seguridad y acompañando a uno de los secuestradores como garantía, había ayudado a vaciar la caja de seguridad de su propio banco.

Los ladrones se habían llevado cerca de 126.000 euros, y habían desaparecido esa misma tarde, extrañamente a lo usual, el director del banco tardo en llamar a la policía casi 4 horas, dando al traste cualquier posibilidad de búsqueda y captura.

Interrogado por la policía, solo explico lo del secuestro en su casa, y únicamente se preocupo por la seguridad de sus hijos un chico y una chica .

Relató que durante el puente festivo, había llegado a su casa como siempre después de las 8 horas en el banco, sus hija pequeña estaba estudiando en el comedor y su hijo 4 años mayor estaba jugando con el ordenador en el salón. La chica que tenían para el servicio, les había dejado la cena preparada , cenaron y como cada noche se fueron a dormir a las 21.00 h.

pasados la 1.20 de la madrugada alguien entro en los dormitorios primeros de los chicos y luego del padre, habían sido llevados a la fuerza al salón y habían sido atados y amordazados , al padre por ultimo inducido por los secuestradores accedió tras 2 días de confinamiento en el hogar de cumplir con las demandas.

Estas noticias encabezaron periódicos durante una semana entera, en la que los hijos fueron interrogados y puestos de nuevo bajo la custodia del padre. Nada se supo de los atracadores-secuestradores, la policía interrogo y busco pero tras 6 meses de investigación el caso se cerro sin ningún culpable entre rejas.

Serena arrugo el periódico en una bola, después de todo lo sucedido en aquello terribles días volvió a su memoria, aun se despertaba por las noches presa de las pesadillas, aun habiendo pasado bastante tiempo ella no podía olvidar.

Al principio habían evitado hablar de nada relacionado con aquello, su hermano David y su padre la seguían tratando como siempre, pero algo nuevo se había colado en sus vidas, su padre preocupado por su salud, había decidido trasladar a toda la familia a un lugar mas tranquilo, donde pudieran olvidarlo todo.

Los tres como siempre juntos, habían intentado comenzar su vida en otra ciudad, su padre acepto ser el director de una pequeña sucursal en una ciudad pequeña, y durante varios meses todo volvió a su curso.

Pero pronto su padre Marcus mostró cierta preocupación, nerviosismo. Ella sabia que les escondía algo, pero no quiso contárselo.

Luego Serena empezó a encontrarse mal y las cosas empeoraron.

Su padre se volvió nervioso, huraño , cerrado en sus cosas. Cuando por fin se dio cuenta del problema era demasiado tarde para actuar.

Una tarde después de volver del colegio, reunió a los dos en el comedor de su nueva casa para hablarles.

Tenia un aspecto horrible, apenas con 46 años el pelo negro había empezado a encanecer después del suceso, sus ojeras oscuras dejaban claro sus largas noches en vela.

– David , Serena , ante todo no quiero preocuparos mas de lo normal, pero... creo que tengo que deciros que puede que tengamos que mudarnos de este sitio.

– Pero Papa..., aquí estamos bien...-- dijo Serena, es un sitio tranquilo y podemos acostumbrarnos a esto..

– Cariño no se trata de mi, – no se como explicarlo--, recordáis que prometimos no hablar de lo que paso aquellos días...

Serena palideció al momento, las manos empezaron a temblarle asustada.

– No digas nada... – dijo tapándose los oídos.-- No quiero oírlo...

–

Papa... no seas cruel, a ella le hace daño-- explico David.

– Lo se hijo..., pero parece que no podemos esconder lo que sucedió aquella noche..., --murmuro nervioso, – tu hermana ha empezado a vomitar desde hace una semanas, entiendes?.

– No te entiendo papa.

– Hijo, puede que este embarazada.

Serena se llevo un puño a la boca, angustiada por su mas terribles sospechas, hacia casi dos meses que había dejado de tener la regla, y luego habían comenzado los mareos y las nauseas por las mañanas.

Se había engañado a si misma diciéndose que seria algo que había comido en el comedor del colegio.

Intento ocultarlo en casa, pero su padre la había visto vomitar varias mañanas.

– Mira Serena, no quería abrir los ojos a la realidad, pero.. alguien, no se , algún cabrón me ha estado enviando notas al despacho, al principio eran cortas, pero parecía que supiera todo lo que paso aquellos días.-- luego empezaron a llegar las peticiones de dinero , si no quería que lo hiciéramos publico. Y me negué. Pensé en denunciarlo , pero hijos míos... no puedo poneros en esa situación.

– Porque no nos contaste nada? Tenemos derecho, no crees-- exclamo David enfadado.

– Si lo se, pero tu hermana empezó a encontrarse mal, y me di cuenta que no podemos someternos a ese juicio por parte de todos, esta embarazada tenlo por seguro, tu madre tenia los mismos síntomas cuando se quedo preñada de vosotros. – Y maldita sea,-- dijo apretándose la cabeza entre las manos-- después de la ultima nota llego esto, – del bolsillo de su camisa saco un dvd.

Derrotado , se dejo caer en el sofá delante del televisor.

– Que es esto? – pregunto David, – levantándose y colocandolo en el aparato reproductor de dvd.

La imagen se abrió en la pantalla, podía verse el salón de su antigua casa, los caros muebles de mama, los cuadros herencia de la abuela, la cámara enfocaba ahora al sofá , donde estaban sentados los dos chicos, Serena a la izquierda, David a la derecha. La cámara mostraba a los dos atados y amordazados con el rostro desencajado por el miedo.

– Apaga eso, por favor... ,no puedoooo –susurro Serena--, pero sus ojos no podían apartarse de la pantalla, sujeto el mando intentando apagar aquel odioso aparato apretando los botones sin cuidado, .

Otra imagen apareció en la pantalla, esta vez el plano era mas claro, su padre estaba sentado en el sofá de cara , Serena estaba empalada en la polla de su padre brincando como una loca, la cara de dolor y placer se movía entre su padre y ella . Las frases podían oírse claramente a sus espaldas.

– Vamos Papa, follate bien a fondo a tu nena si no quieres que le reviente la cabeza a tu hijito.-- sigue así ,eso es... , ves como no se te a olvidado follarte a una tía. Y ademas a una tan maciza como esta.

Has visto esas tetas?-- rió groseramente-- Podía llegar a mamar su leche solo todo el día y no me moriría de hambre.—ñamm, ñammm...

– No te oigo cabrón, dices algo...-- rió de nuevo-- veo que te esta gustando eso de tirarte a tu hijita-- no veas como la jode..., haz un primer plano

El zoom se centro en la polla clavándose hasta las entrañas en el coño de Serena, que parecía a punto de desmayarse de un momento a otro. Las tetas brincaban en la cara del padre con furia, arrancando gemidos de placer al hombre, que lamia a placer los pezones tiesos de la hija.

El chapoteo de los cuerpo follando era escandaloso, llenaba el audio del video tan claramente que pronto los jadeos parecieron llenar la habitación. De pronto un gruñido salio de la garganta del padre que pareció tensarse y dejar escapar un envite profundo .

– Miraaa se esta corriendo, biennnn, aplaudiooo, eso essss... , correte bien hondo … mmm, si eres viudo tendrás tanta leche guardadita para tu niñita..., vamosssss siguee , – tras unos cinco minutos de jadeos descontrolados por parte del padre-- termino por descargar todo el semen sobre el cuerpo inmóvil de su hija, que parecía agotada de la cabalgada sobre el padre.

–

Bueeenooo dijo la voz-- has batido el récord.-- creo que después de esto, podrás convertirte de nuevo en padre o-- río sarcástico-- en abuelo...

la imagen se apago al desenchufar Serena la televisión, llorando salio corriendo del salón refugiándose en su habitación de un portazo.

– David también pálido, dirigió su mirada a Marcus.

– No se me ocurrió pensar en las consecuencias, ella podía....

– si, dilo. Quedarse embarazada, sin duda , aquellos tres días fueron muy largos, y yo un idiota por pensar en mi carrera antes que en vosotros.

– Pero papa, desde entonces no hemos hablado de eso, con nadie, ya lo sabes, ni siquiera a la policía.

¿Crees que esos animales van a ir con eso a la policía?-- no se atreverán.

– No lo entiendes hijo, no irán a la policía, con que lo publiquen en Internet y empiece a circular, nuestra vida estará jodida para siempre. Por eso pagare.

Pero no podemos hacerlo durante mucho tiempo, esos hijos de puta exigen demasiado dinero, así que desapareceremos, he planeado algo un poco complicado pero ten seguro que será definitivo.

– Que has pensado?

– Con la ayuda de un tipo que me debe un favor ,creerán que hemos muerto. Y con fortuna podremos seguir con nuestra vidas en otro sitio.

– ¿ Y Serena?-- que pasa con el Bebe, ya sabes que podría...

– Lo se, eso he de hablarlo con tu hermana, así que sera mejor que te vayas a dormir, mañana nos espera un día muy largo.

– Se comprensivo con ella, ahora esta muy vulnerable..., y bueno... ambos la queremos.

– Si claro,-- dijo Marcus--

David desapareció en la penumbra del pasillo, y el silencio volvió a adueñarse de la casa, tembloroso saco el dvd del reproductor, y lo guardo entre unos sin importancia, debía haberse deshecho de él, pero incomprensiblemente no había podido hacerlo, angustiado por el miedo y la culpa. Estuvo dándole vueltas a todo, la rabia y la furia que sintió al principio habían sido sustituidos por la pena y algo insano oculto detrás.

Llevaba casi 3 meses sin poder conciliar el sueño, la gran cama se volvía un revoltijo de sabanas y mantas al moverse inquieto. Apenas dormía, pero cuando lo hacía, para vergüenza suya volvía a sentir lo mismo, el coño jugoso de Serena abriéndose a su polla, notaba las paredes de su vagina abriéndose, aprentandole sin descanso provocandole unas ganas tremendas de eyacular dentro de su niña.

Su caderas revotando sobre su gruesa polla apretándole golosa de semen, esas enormes tetas saltando en su cara duras, prietas como jugosos melones.

Y bruscamente se despertaba culpable consigo mismo, la enorme erección no conseguía bajarse hasta que no se pajeaba con furia en la ducha. Se sentía un monstruo vil, pero no podía evitar pensar en Serena al eyacular con fuerza , y lo peor de la situación que sospechaba que a su hijo le sucedería algo parecido.

Tres largos días encerrados, tres días en que no dejaron de follar de todas las maneras posibles, tres días en que desvirgo a su hija delante de unos secuestradores, aun podía notar la fina telilla abriéndose a su grueso cipote desgarrandola, haciéndola suya por primera vez. Aquellos días se había corrido mas veces que a lo largo de su vida adulta.

Follo con furia y aunque le costase reconocerlo, gozo cada una de las veces, casi tanto como su hijo que pese a ser mas joven había acabado agotado, su hija se había convertido en una mujer con su polla.

Y pesase a quien le pesase, horrorizado y secretamente satisfecho, pero estaba lo del niño.

Todas las mañanas desde entonces se obligaba a salir de casa antes que amaneciese, llegar primero a la oficina y volcar todo sus fuerzas en el trabajo, no volvía a casa a comer, evitaba delatar su obscenos sueños en la realidad, dejo de acudir a las reuniones del colegio, e incluso de compartir las comidas con sus hijos como antes hicieran.

En fin, evitar cualquier tentación, pero todas las noches volvía a lo mismo, sus sueños lo traicionaban y se despertaba duro con la tranca a punto de reventar , Serena se le aparecía en sueños una y otra vez, y ella ni siquiera sospechaba nada de su antinatural padre.

La observaba en la distancia, ajena a los lascivos sueños del padre, parecía que poco a poco se recuperaba, e incluso intentaba que todo volviese a la normalidad.

Allí sentado en el salón, pensando en todo esto, trago saliva y se dirijio a la habitación de los chicos, eran las 2.30 de la mañana, la puerta de David estaba entreabierta y pudo oír un gemido.

oculto en las sombras de la puerta, distinguió la silueta de su hijo sobre la cama, la luz de la calle se filtraba a través de la ventana, mostrando muy claramente la figura de su hijo apretándose con fuerza el grueso cipote, ajeno a todo David apretaba con fuerza el grueso tronco blanco, la mano se movía con lentitud pero asombrosamente fuerte, con fuertes quejidos que parecían crecer cuando los dedos se paraban en grueso cabezón ciruela, pronto una pequeña gota empezó a sobresalir del agujerito ayudando a untar barra de carne y acelerar el movimiento en fuertes sacudidas. Jadeaba poseído por una calentura incontrolable, llegandosele a escapar las estranguladas palabras – Serenaaaa, ohhh , Serenaaaa jodeeerr, siiiiii, meeeeee corrrooooo!.

Y tras unos largos minutos un chorro de esperma salio disparado como geiser de la gruesa cabeza purpura, empapando su mano en una serie de largas ráfagas de semen, pronto la respiración se volvió mas regular y por fin tras una serie de movimientos el silencio se apodero de la habitación.

Allí de pie en el pasillo, junto a la puerta la erección de Marcus sobresalía descaradamente del pantalón, apenas podía creerse lo que había visto.

Tragando con lentitud saliva, cerro la puerta sin hacer ruido, las gotas de sudor bañaban su frente. Sentía la piel hormigueando , sus pies se movían casi sin quererlo hacía la puerta que pertenecía a su hija Serena.

Se había prometido a si mismo comprobar si estaba bien, solo eso, pero debía calmarse, por el bien de su familia debía tener el control.

Podía sentir la sangre agolpándose en la polla, ante la paja que su hijo David le había dedicado al recuerdo de su hermana , se dirigió al baño y abrió la ducha, casi sentía la ropa quemándole la piel, cuando el agua fría cayo sobre él, poco le importo llevarla aun encima, se sentía punto de estallar, cachondo como un adolescente , poco a poco el fluir del agua consiguió calmarle algo la erección, pero seguía teniendo el rabo traidoramente necesito mas que tres fuertes apretones para correrse contra la mampara de cristal.

Aliviado, salio con toda la ropa chorreando , decidió no tentar al diablo que llevaba dentro, únicamente puso el oído tras la puerta de Serena, parecía no oírse nada, suspiro aliviado y decidió volverse a su habitación.

Tras ponerse el pantalón del pijama se acostó, el reloj marcaba las 03.15, dormiría poco, lo sabia, los sueños volverían a atormentarlo, pero que dulces sueños.

Serena , se había quedado medio dormida en un extraño sopor después de haber llorado toda la noche, la luz de su mesita aun seguía encendida, pero ella se veía incapaz de apagarla, como queriendo espantar los demonios de la noche.

Tenia los ojos rojos de tanto llorar, se sentía algo mareada con el estomago revuelto, volvía a sentir aquellas ganas incontrolable de vomitar, se levanto de la cama y abrió la puerta de su cuarto, el pasillo oscuro le indico que todos estaban durmiendo, así que avanzo a oscuras por el pasillo , sentía el estomago revuelto, pero poco a poco las nauseas empezaban a disminuir. Sabia que todos aquellos síntomas que habían aparecido hacía un par de semanas eran una señal grave de lo que verdaderamente le pasaba, aterrorizada por la situación se palpo la tripa, y sus manos subieron instintivamente hacia arriba a sus pechos.

Notaba como las tetas habían aumentado casi dos tallas y parecían escaparse escandalosamente de cualquier sujetador que tuviese, si antes intentaba ocultar su desproporcionados pechos, ahora casi resultaba imposible.

Se las notaba duras y pesadas, y le daba vergüenza admitir que los pezones también se le habían vuelto mas sensibles, tanto, que apenas podía pasarse la esponja del baño sin excitarse como una perra en celo.

Notaba como su cuerpo iba cambiando, pero se sentía demasiado avergonzada para decirle nada a su padre, bastantes problemas tenia el pobre – pensó.

Se dirijio a la nevera, donde sorprendida por su apetito se comió la mitad de la tarta de queso que había sobrado esa tarde.

Tenia miedo de pedirle a Papa que la acompañase al medico, sin duda, la reconocería y le diría lo que ni ella misma se negaba a reconocer; estaba embarazada de su padre o de su hermano.

Aquello era antinatural, como miraría al doctor cuando se lo preguntase, sentía la cara ardiendo por la humillación de verse juzgada como una putilla adolescente.

Pero seguía bajo la tutela de su padre, debería acompañarla al medico para vergüenza suya.

Siempre se encontraba cansada, como si llevase todo el peso del mundo a sus espaldas, poco a poco se dirigió por el pasillo a su habitación, solo parecía verse la luz del cuarto de baño encendida, ¿Se le habría olvidado cerrarla?.

Conforme iba acercándose oía el ruido del agua caer, – Que raro, pensó!, abrió algo la puerta, para ver quien se duchaba a esas horas, se quedo asombrada al ver en el reflejo del espejo la figura aun vestida de su padre dentro de la ducha.

El agua caía sobre su ropa como lluvia de aspersores, pero lo realmente asombroso era ver la cara atormentada que reflejaba , apenas oía lo que sus labios decían pero sin duda su nombre se repetía una y otra vez;-- Serenaaaaa mmmmmffff, ohhh hijaaaaaaa, mmmmmmffff, mffffff.

Las frases se volvían cada vez mas incomprensibles, su brazo había bajado hasta la entrepierna y se había

sacado de entre los empapados pantalones aquella monstruosa polla dura , apuntando hacia el techo.

Incapaz de moverse de donde estaba Serena veía como su padre le dedicaba su frenética paja, sobando con fuerza la gruesa barra de carne en un furioso vaivén que le llenaba los sentidos de imágenes que creía haber olvidado. Su padre follándola como un semental furioso por detrás, mientra los odiosos secuestradores apuntaban a la cabeza de su hermano con un revolver.

El rabo de Papa se deslizó hacia delante y atrás a la entrada, luego se metió lentamente del todo . Serena creyó desmayarse. La sensación de la polla deslizándose a la entrada junto con la imagen de su Padre era demasiado. Luego notó que le metía la polla presionando con lentitud. Gracias a la corrida que le había proporcionado sobre el sofá ya le era fácil. Le notaba dentro de ella, al fondo casi tocando las paredes del útero. En ese momento su padre empezó a moverse.

Marcus no podía creer que estuviera follándose a su hija por detrás, habiendo pasado tan poco desde el anterior polvo. Nunca había tardado tan poco en recuperar la erección, ni tan siquiera con su difunta esposa, pero ahí estaba duro como una piedra, no llevar goma también intensificaba las sensaciones, notaba el contacto de su piel contra la de su hija jodiendo. Era algo inexplicable. Notaba cada músculo interior de ella mientras se tragaba su polla sin un condón de por medio.

Sentía como la carrera hacia la descarga final era imparable, sintió los temblores de Serena y secretamente se alegro al saber que los dos se correrían a la vez, la envistió hasta el fondo, los testículos golpeaban ritmicamente el adorable culito de su niña, mientra el chapoteo de los cuerpos se oía ritmicamente en el salón,nada alrededor importaba, solo ese momento.

La rapidez de la riñonada se multiplico a medida la necesidad le ardía en los testículos. Serena seguía retorciéndose acompañando las envestidas sin llegar a comprender la respuesta de su traicionero cuerpo que le pedía mas y mas.

Con cada envestida la punta de la polla parecía hincarsele en las entrañas. Y le gustaba, mucho.

Marcus flotando en otro mundo, empujo más y más, hasta el fondo, y abrió los ojos asombrado al oír el aullido de su hija corriéndose convulsivamente. Se le nublo la vista, su hijita se corría con la polla de su padre hundida hasta la matriz, él también estaba a punto. Como si un rayo lo fulminase de arriba a abajo ,grito como un animal salvaje al notar la explosión del semen inundando en sucesivos chorros el coñito de su agotada hija.

Seguía aferrado a sus caderas , pero apenas sentía las piernas sostenerle, despacio permanecieron quietos congelados ante la asombrosa follada,hasta que finalmente desfallecido sus piernas apenas lo aguantaron cuando se deslizo agotado sobre el sudoroso cuerpo de Serena.

Serena rememoraba aquella noche, aquel instante y noto su cuerpo excitado, su conejito se había empapado al recordarlo, ahora veía a su padre descargar su semilla en la ducha pensando en ella, y se sintió extrañamente confusa...

Aquello estaba mal , pero....

Giro sobre sus pasos y volvió a su habitación, aquello de lo que no hablaban , les había cambiado la vida.

Para bien o para mal , nunca volverían a ser los de antes.

Un temblor de excitación le recorrió el cuerpo, punzando en los pezones perezosamente.

Y se dormio, esta vez sin pesadillas...

Algo muy distinto estaba transformando a esta familia.

¿Podrían llegarse a recuperar los lazos de amor y confianza que habían en el hogar?

Esperad a la segunda parte en LASCIVIA FAMILIAR 2.