Las ventajas de ser la novia de Nicolás (2)
Me entrego a unos jugadores de futbol americano haciendo que mi novio se vaya sin sospechar nada
Yo seguía siendo novia de Nicolás, mi plan de estar con su papá, seguía en pie. Un miércoles me quede de ver con Nicolás en una especie de bar que hay atrás de una universidad que hay cerca de la casa, este lugar es un terreno baldío, todo bardeado donde se vende alcohol, y no hay problema por la edad.
Nos vimos ahí y al llegar, el lugar ya estaba lleno, no podías ni caminar, el calor era insoportable, ese verano fue muy caluroso. Queríamos acercarnos a la parte donde te vendían las cervezas, pero era imposible, todo mundo te empujaba. Nicolás me dijo que mejor lo esperara, pues podrían lastimarme entre todo ese apretujamiento. Él se dirigió hacia las cervezas, y yo me quede a esperar, pero recibiendo aventones por todos lados, ya no sabía de qué lado cuidarme por tantos golpes que me daban. Pensé que lo mejor era tomar la cerveza y después irnos a otro lado. Mientras esperaba, sentí una mano que me apretó las nalgas, inmediatamente sentí que otra mano me acariciaba. Voltee como pude haber quien se había atrevido y vi a un grupo de jóvenes como de entre 20 y 25 años, todos con jersey del equipo de futbol americano de la universidad cercana, uno de ellos me dijo
-Que pedazo de culo tienes
-Sí pero no pueden tocarlo como si nada
Otro me preguntó
-¿Vienes sola?
-No, vengo con mi novio
Otro dijo
-Que lastima porque esas nalgas son como para acabárnosla a vergazos
-Lastima ¿porque? mis nalgas se las doy a quien quiero y mi novio no puede decir nada
-¿Que son una pareja swinger o algo así?
No, pero mi novio es muy inocente y aunque viera como me cojen, si yo le digo lo contrario él lo creería, es más tengo una idea
Se las comente, regresó mi novia, ellos estaban atrás, estuvimos tomando la cerveza, y entre los aventones, mi novio le pegó uno de estos muchachos, él se volteo y lo aventó, lo reto, yo me puse en medio, explicando que había sido un accidente, pidiendo que se calmaran, Nicolás estaba muy nervioso, le pedí que mejor nos fuéramos, pero lo jalo uno de los chicos y le dijo que eso no se iba a quedar así, le dije a mi novio que eran muchos que tratara de escapar, él me dijo que no me podía dejar, entonces, llego la persona que cuida ese lugar y pidió que las cosas se calmaran, uno de ellos le grito a mi novio que a la salida, se fueron ellos de nuestro lado, y le dije a mi novio que lo mejor era que si escapara, me pregunto por mí, le dije que si no nos veían a los 2 nos iban a seguir, que él se fuera, que yo me quedaba que si me veían ahí creerían que el también andaba por ahí, me dijo que era muy inteligente, se fue, los muchachos esperaron como 10 minutos y se acercaron otra vez
-¿Ya no regreso tu novio verdad?
-No, el plan fue perfecto, ¿a dónde vamos?
Uno de ellos dijo que su familia no estaba en su casa, que fuéramos para allá. Me fui con ellos, eran 6 muchachos, íbamos todos en un carro 4 atrás, el que manejaba, el copiloto y yo en las piernas de este. Me platicaron que eran muy unidos, y que más de una vez habían compartido a sus novias, mientras yo escuchaba tallaba mis nalgas en la verga del copiloto, a este cada vez se le paraba más, tenía un buen pene. Alguna mano paso de atrás para adelante para tocarme las tetas, esto prometía ser una buena cogida.
Llegamos a la casa, me ofrecieron algo de tomar, pedí una cuba, hicimos un brindis, uno de ellos se me acercó y comenzó a besarme, metía su lengua en mi boca, mientras me besaba me quito la blusa, alguien por atrás me desabrocho el brassier, mientras el otro me seguía besando los otros se quitaban la ropa, deje de besarlo y me puse a ver aquellas 5 vergas, había de todos tamaños, 4 andaban en un promedio de 15 centímetros, había otra que mediría como 22 centímetros, el que me besaba también se desnudó, su pene también debía medir como 15 centímetros, yo aún tenía puesto mi pantalón y mis tacones, me hinque enfrente de uno de ellos y comencé a mamar su verga, mi lengua la recorría toda, la metía y sacaba de mi boca. Otro de ellos se me acercó y me puso su verga al lado de mi cara, me saque la que tenía en la boca, sin soltarla con mi mano, tome la otra y me la metí a la boca, mi lengua pasaba por todo el tronco y la cabeza, después me las metía alternadamente
-Que ricas vergas tienen
Uno se me acercó por atrás y me quito el pantalón pero no los tacones, yo me pare y camine desnuda con tacones por aquella sala, mi culo se veía parado, firme, y pidiendo verga. Había 2 sillones, formaban una L, 4 se sentaron en 1 y los otros 2 en el otro, pase enfrente de ellos, de ida y de regreso, mientras pasaba cada uno me dio una suave nalgada. Los 6 ya tenían la verga bien parada, me acerque a uno y dándole la espalda tome su verga y me senté sobre ella, entro con gran facilidad, me pare y me fui con otro, volví a hacer lo mismo, me senté en su verga, así lo hice hasta que probé aquellas 6 vergas, la última fue la de 22 centímetros, esa me costó trabajo metérmela, pero lo hice. Me pare enfrente de ellos y les dije
-Que vergotas tienen
-Y tú eres toda una puta
-¿Tienen alguna crema?
El dueño de la casa fue por ella, me la dio y me preguntó
-¿Para que la quieres?
-Para que también me den por el culo, hoy quiero llenarme de verga
Dicho esto, tome un poco de crema y me lubrique el culo, uno de ellos se acostó en la alfombra, me puse dándole la espalda y me metí su verga en el culo
-Aaaaaaahhhhhh que rico, quien me coge por adelante
Él de 22 centímetros brinco sobre mí y me la metió
-Aaaahhhhhhhh, así por los dos lados denme verga
Coordinaron sus movimientos para entrar y salir al mismo tiempo. Me sentía súper bien, la doble penetración es algo delicioso, mi vagina y mi culo cada vez se abrían más, mis tetas brincaban con cada metida
-Quiero una verga en la boca
Uno se puso a mi lado y me la metió, tres vergas para mí, y tres más esperándome, era mejor que cualquier fantasía, ellos se movían muy rápido, mi cuerpo brincaba entre esas dos vergas, y no podía mamar muy bien aquel pene, tuve un orgasmo largo y delicioso,
-Aaaaaaahhhhhhhhhhhh me vengo, síííííííííí que rico, no paren
El que estaba en mi culo se vino, me lleno el ano de semen, me la sacó y al que se la mamaba me la saco de la boca y me la metió en el culo, me empujaban muy fuerte, trataba de contraer mi vagina y mi ano para apretarlos más y darles mayor placer, el que estaba en mis nalgas no resistió y también se vino, los otros tres pidieron que me lavara la vagina y el ano. Me pare, fui al baño y trate de sacar todo el semen de mi ano, me vi al espejo, ya estaba toda sudorosa, toda despeinada, pero me veía sexy.
Regrese con ellos, 2 de los que faltaban por penetrarme me cargaron y me metieron sus vergas, cada uno por un lado, ellos se quedaron quietos, y yo apoyándome en los hombros del que me la metía por el coño, empecé a brincar, ellos gemían muy fuerte
-Aaaaahhhhh toma puta
-Llénate de verga perra
-Así, métanmela, me encanta la verga, que rico me cojen
Mientras me cogían alguna vez se salía alguna de las 2 vergas, pero inmediatamente me la volvía a meter, tuve otro orgasmo, fue más largo que el primero
-Aaaaaaaaaahhhhhhhhhhhhh sííííííííííííííííííííííííííííííííííí, que buena cogida me están dando
El de atrás se vino en mi culo, y su semen escurría por mis nalgas y sus piernas, se veía que hacía mucho no cogía pues me echo mucha leche, el que tenía al frente se siguió moviendo, hasta que eyaculó en mi concha, yo estaba como ausente, ya no reaccionaba, me había cansado mucho con esta cogida, me sacaron sus vergas, el único que no me había penetrado, pidió cogerme. Para dejarme descansar, me mamo un rato las tetas, mis pezones estaban pasadísimos y con sus chupadas hasta me dolieron. Yo seguía sin estar consciente de lo que había pasado, el que faltaba, de un solo golpe me metió su verga, yo ya no me movía, él tenía que buscar su placer, yo ya no se lo podía dar. Él se movía, me la metía y me la sacaba muy rápido, como pude lo abrace mientras él seguía metiendo y sacando su verga de mi concha, estuvo así unos minutos, y se vino en mí, dentro de mi somnolencia, recordé que 2 personas se habían venido en mi coño y no usaron condón.
Todos menos el de los 22 centímetros se empezaron a vestir, este dijo
-Yo aún no me vengo
-Cierto, aún está puta no siente tu leche
-Ponte en cuatro que me quiero venir en tu culo
Como pude, con las pocas fuerzas que me quedaban me puse en cuatro, el preparaba su verga para metérmela, cuando puso la punta en mi ano le dije
-Despacio que la tienes muy grande
El poco a poco me la fue metiendo, lo hizo muy lento para que mi ano se acostumbrara a semejante pedazo de carne, cuando me la metió toda, estuvo un rato sin moverse, cuando creyó que mi ano ya se había acostumbrado, empezó a meter y sacar su pene lentamente, después fue aumentando el ritmo, hasta que mi cuerpo chocaba contra el de el a una gran velocidad, el golpeteo se escuchaba por todos lados, yo ya no aguante mi cuerpo y mi cara cayó sobre la alfombra, el seguía metiendo y sacando y en mi posición sentía que entraba más profundamente su pene. Cuando empezó a gritar
- Me vengo, me vengo, eres la mejor puta que he tenido
Lleno mi culo de semen, me la sacó y se vistió, uno de ellos pregunto que que hacía conmigo, otro le contestó que me vistieran y me sacarán de la casa, y me dejarán en la calle, el de 22 centímetros me cargo y dijo
-Vamos a llevar a esta puta así desnuda a la calle
El dueño de la casa lo detuvo y le dijo
-No mamen, déjenla, yo veo que hago con ella ustedes váyanse
Todos salieron, el me cargo y me llevo al baño, preparó la regadera, y me dijo que tratará de bañarme, mientras lo hacía, pensé en que los 6 me habían cogido y ni siquiera sabía cómo se llamaban, termine de bañarme, el dueño de la casa me dio mi ropa, salí, y me dijo que a donde me llevaba, le pedí permiso para dormir un rato, me dijo que no podía dormir más de 2 horas porque sus papás regresarían. A las 2 horas me despertó y me pregunto cómo me sentía, yo ya estaba mejor, y le pregunte por sus amigos, me dijo que no importaban, el me preguntó mi nombre, le dije Pamela, pregunte por el suyo y me contestó que Alfonso.
Se ofreció a llevarme a mi casa, le dije que en el lugar que nos conocimos se quedó mi carro, que ahí me dejara. Cuando llegamos a mi carro me dijo que le gustaría verme otra vez, le di mi teléfono. Tome mi carro y me fui a mi casa.