Las vacaciones de Susana (3)
De como se encamó mi mujer con el vecino, de como me lo cuenta y lo disfrutamos juntos.
LAS VACACIONES DE SUSANA (3)
El viaje en avión hasta Punta del Este fue como siempre cuando empezaban mis verdaderas vacaciones de quince días.
Me estaba esperando Susana con el auto aunque esta vez no mostraba la alegría de costumbre sino que estaba seria, casi no hablamos sino al llegar a la casa.
Me preparaba para darme una ducha cuando entró en la habitación con un par de toallas.
-Acá tenés para que te bañes- dijo parcamente-
La abracé, la traje hacia mí y la besé apasionadamente. Rompió en llantos y me abrazó con mucha fuerza.
-No te preocupes que todo va a andar bien- le dije
Cenamos en familia. Noté que tomó más vino que de costumbre como si temiera la charla que íbamos a tener a la noche. Acostó a los chicos y se vino hacia la habitación.
Entró al cuarto con una botella de vino y un par de copas, parecía estar liberada no sólo por mi actitud de abrazarla y consolarla sino también por el vino que le aflojó las inhibiciones..
Se acostó a mi lado, con la mano izquierda me acariciaba la cabeza jugando con mi pelo y acercó su boca a mi oído.
-¿Sabe papito que su nenita se portó mal esta semana? susurraba en mi oído con un tono de bebota sensual.
-¿Sabe papito que su nenita estuvo entregando su cuerpito a otro hombre? Yo creo que me merezco que me des un buen coscorrón-
Giró ligeramente su cuerpo para dejar expuesto su hermoso culo, redondo, duro y carnoso. Siempre quise hacerlo mío pero nunca pude por temor a dañarla.
-¿Papito no querés hacerme chaschas en la colita por haberte metido los cuernos con otro hombre? Si me das unas buenas nalgaditas después te dejo la colita para que me hagas lo que quieras porque ahora la tengo bien agrandadita.-
Escuchaba sin responder pero mi calentura iba en aumento a medida que mi mujer se mostraba más y más puta.
-Esto te pasa por dejarme solita, por no cuidarme, entonces..sass viene un señor atractivo, seductor, rubio, fornido, con unos ojazos azules hermosos y una condición de macho que se nota de lejos y . su nenita pierde la cabeza por él y le entrega todo lo que el macho le pide.- siguió susurrándome en el oído para aumento de mi calentura.
-Me parece que a papito le gusta que la nenita se entregue a esa clase de señores. ¿Verdad papito?. Decime la verdad. Decime que gozas pensando que a tu mujercita la satisfacen mientras vos estas en el trabajo o, quien sabe, con otra putita.-
Me miraba con su mejor cara de puta y relamiéndose los labios. Se sirvió un poco más de vino en la copa y bebió un trago.
La erección que yo tenía era ya notoria con solo mirar por sobre mis calzoncillos, no podía ocultar que me desesperaba escuchar de sus labios como había sido todo y ella lo sabia muy bien pero yo no podía pronunciar palabra..
-Jugate mi amor, decime si no te morís por verme bien empalada por un macho de verdad. A mi me encantaría que estuvieras presente, viéndome, viéndonos. Hasta te dejaría intervenir porque agujeros sobran y calentura también.-
Me sentía muy incomodo, era conciente que ya había perdido la partida sólo me quedaba disfrutar de lo que mi derrota me permitiera. Pero no lograba salir del mutismo en el que me encontraba.
Ella me miró en silencio, como esperando una respuesta que no llegaba y que necesitaba porque no podía soportar más mantenerse callada.
-Tenia ganas de contarte como fue todo pero si vos no querés dormimos-
Se dio media vuelta y apoyó su cabeza en la almohada.
-No pará si quiero que me cuentes es que estoy medio atolondrado por todo, ..entendeme-
Pegó un brinco, se rió feliz de lo que había escuchado de mi boca y me dio un beso de lengua mientras me pajeaba por sobre los calzoncillos.
-Esta bien te voy a contar como fue todo, pero no me vengas con pelotudeces de celos o amenazas o cosas por el estilo.¿De acuerdo?-
Estaba en sus manos así que acepté las condiciones, de ahora en más ella imponía la ley en la pareja.
Entonces ella comenzó a relatar lo sucedido:
"El lunes por la tarde atiendo una llamada telefónica. Era la voz de un hombre que yo no conocía.
-¿Habla Susana?
-Si, habla ella.¿Ud. quien es?
- Soy Esteban tu vecino-
-Realmente no lo ubico- le dije aunque por dentro mi corazón latía a mil por hora.
-¿En serio no me ubicas? El rubio, grandote, de ojos claros que vive a 50 metros de tu casa y que se deleita mirándote.
Ahh, sí ¿que tal?
Estaba casi sin aliento por lo insólito de la situación.
-¿Me ubicás ahora?
-Sí, sí ya se quien sos.
-Mañana a la noche, después de cenar, tengo pensado hacer una pequeña reunión en casa y me encantaría que vinieras, es más ya me estoy ilusionando con tenerte en casa mañana-
Me reí de nerviosa y de caliente. Me estaba invitando a una reunión en su casa, mejor dicho casi me lo estaba rogando.
-Me parece que sos un encanto pero también muy peligroso- le respondí con la voz agitada
-Soy peligrosísimo pero vale la pena correr el riesgo, no te vas a arrepentir..
Su voz transmitía una sensualidad que me avasallaba, estaba ya sometida a los deseos de ese macho hermoso.
-Está bien dejame ver como hago para que los chicos no queden solos y gracias por la invitación.- Respondí.
-De nada, . No te olvides, mañana a la noche, en mi casa. Chau
Esa noche me maté a pajas soñando con Esteban y con la posibilidad de estar con él en su casa.
Fantaseaba con su cuerpo desnudo penetrando en el mío, en mis piernas abiertas para poder sentirlo bien dentro mío.
Me ilusionaba con mis brazos abrazando su cuello, sus hombros, esos hombros de gladiador, mis piernas rodeando su cintura.
Soñaba con la humedad de su lengua mezclándose con la mía. No podía parar la calentura que me produjo su invitación, su voz de macho, la seguridad que tiene de saber que una mujer como yo caería muerta a sus pies.
Todo mi cuerpo pedía a gritos su cuerpo.
También pensaba que loco este tipo, llamarme así, está recaliente conmigo como yo lo estoy con él. ¿Dónde consiguió el teléfono?. Que locura es todo esto.
Al día siguiente llame al servicio de mucamas y contraté una que ordenara la casa y además se quedara cuidando a los chicos.
Me vestí como para arrasar, con una minifalda, una remerita que me marcara bien las tetas, me maquillé como si fuera una estrella de cine y luego de que los chicos estuvieron acostados me fui a la casa de Esteban.
Me recibió él, me hizo pasar al living de su casa.
Estaba iluminado con una luz tenue y se escuchaban muy suavemente boleros en un equipo de audio.
Todavía no había llegado nadie cosa que me extrañó.
En una mesita había en una hielera una botella de champagne y dos copas. Las sirvió, propuso un brindis, "por la mujer más sensual de Punta del Este", bebimos.
Fue entonces cuando me invita a bailar un bolero.
Me tomó de la cintura y yo pasé mis brazos por alrededor de su cuello.
Sentir ese cuerpo cercano al mío derrumbó cualquier posibilidad de defensa. Pensaba para mis adentros- por favor que venga alguien que no voy a resistir mucho más.
Entonces le pregunté:
-¿Falta venir mucha gente todavía?
-No . estamos todos los que yo quiero que estén, vos y yo, si querés agregamos al champagne. Esta es la pequeña reunión en la que había pensado cuando te llamé-
Ese fue el comienzo. Pegada a mi vientre sentía crecer su verga, olía su perfume y tocaba su cuerpo.
Ya no pude resistir, lo atraje hacia mía y le di un beso de lengua que fue correspondido por la suya. No demoramos nada en zambullirnos en su cama, en desnudarnos y en empezar la fiesta.
Nunca vi un hombre tan hermoso desnudo. Todo él es atlético. Tocarlo, acariciarlo es un placer.
Su verga no es enorme pero esta muy bien proporcionada.
Esteban al principio fue reconociendo mi cuerpo con su lengua y sus labios. No dejo agujero ni teta sin lamer y chupar.
Parece que tiene sensores en la lengua porque cuando me la pasó por la concha detectó esos pequeños pliegues que son más sensibles y allí trabajó un rato largo.
Luego me tocó a mí chuparle la pija, los huevos, el culo.
Mientras le chupaba la verga le acariciaba el pecho, esos brazos fuertes y musculosos.
Le chupé el culito redondito y sensual que tiene y le encantó, se contorneaba de placer y gemía como un burro-
Le dije a ver si terminás siendo putito trolito.... Parecía excitarse más.
A partir de ese momento el tomó las riendas, me hacía mover en todas direcciones.
Me llevaba como si estuviéramos bailando, por momentos me montaba como un jinete
que quiere galopar a una yegua o me daba vuelta para cogerme en cuatro patas mientras me amasaba las tetas.
En otro momento me clavó la pija y se bajó de la cama conmigo ensartada.
Yo, aferrada de su cuello le metía la lengua en la boca, le lamía la cara mientras él se paseaba por toda la habitación.
Me decía puta te gusta como te estoy cogiendo? ¿Querés pasear con mi pija adentro?
Yo le decía a todo que sí, no le podés negar nada a Esteban.
Así como estábamos se aferro de mi culo me hizo apoyar la espalda contra la pared y me siguió cogiendo como un loco.
Uhmm mi amor, que hermoso me cogió que feliz me hace este hombre.
Jugaba con mi cuerpo como si fuera plastilina y yo se lo agradecía, lo desafiaba a que se animara a más con palabras sucias, con actitudes de puta que necesita satisfacerse en grande, quería saber cual era su límite y el mío.
Le gritaba .putito no te da para más?... estoy esperando más garcha.
Ël me devolvía el desafío aumentando la intensidad de la cogida, usando la lengua como darme placer en las tetas mientras su pija entraba y salía de mi concha como si fuera un delicioso puñal que en vez de herir me gratificaba con un placer inmenso.
Era una verdadera batalla campal entre dos cuerpos que buscaban satisfacerse mutuamente y que no iban a parar hasta conseguirlo.
Lo vuelvo loco a ese hombre y él me vuelve loca a mí. No sabes cuanto papito, no sabes lo que es capaz de hacerme gozar ese macho. Por primera vez me sentí hembra de verdad.
Cerca del final del primer polvo me acosté boca arriba, él se sentó sobre mi abdomen y puso su pija entre mis tetas.
Le hice una buena paja con mis pechos, cada vez que empujaba hacia adelante me metía la cabeza de la pija en la boca y mi lengua se encargaba de recibirla.
En ese momento empezó a acelerar su respiración y los movimientos de su cadera, estaba por acabar
Ver a ese tremendo macho tensar sus músculos en el momento del orgasmo fue maravilloso.
Entrecerró sus ojos, se arqueó ligeramente hacia atrás y con un bramido hizo estallar su pija.
La leche me bañó las tetas, la cara, el pelo. Fue el summum, la gloria, el éxtasis, lo indescriptible.
Con mi lengua bebí las gotas de leche que estaban en mis tetas, con mis manos recogí las que estaban en mi cara.
Que te puedo decir, descubrí que soy multiorgásmica gracias a él, que detrás de mi orejita izquierda si me lamen suavemente me consiguen.
Seguimos cogiendo toda esa noche, la noche más feliz de mi vida.
Hicimos un silencio luego de la narración hasta que ella se animó a preguntar.
-¿Estás enojado con tu mujercita por lo que hizo?
-No estoy caliente y quiero cogerte.
Susana victoriosa era la quinta esencia de la lujuria, tenía los pechos duros, los pezones parados, la concha mojada.
-Parece que te gustó lo que te conté. Voy a ser complaciente contigo. Te voy a permitir todo lo que nunca te dí.-
Ya me imaginaba que cosa era la que iba a recibir en premio por mis cuernos.
-¿Querés la colita papito? Esteban me enseñó como me podes coger y que yo goce.
Se puso en cuatro, con la cabeza apoyada al colchón y las manos recogidas. Quedó su culito parado y a mi disposición.
-Poneme la cabeza de la pija primero y anda metiéndola despacito que te ayudo a que entre toda.
Así hice, le fui poniendo la verga despacio y ella empujaba lentamente hacia mí para que se fuera metiendo.
-Mi amor la tenés toda adentro.- le dije
-Ayy sí mi vida..dejala quietecita un poco hasta que se relaje el intestino.
Al poco tiempo me avisa que le de bomba
-Cogeme mi vida que ya la estoy gozando toda.
-¿Te gusta putita que te rompa el culo?
- Me encanta que me lo rompan dale ayyyy mi vida dale más fuerte
-¿Así te lo rompió el macho que tenés? Contame, fue así?
Susana gemía desesperada por tener la verga en el culo y seguramente por recordar como se lo había cogido Esteban.
-Uhmmm.. ese macho es único, .me lo hizo mejor que nadie perdoname mi amor pero no podes compararte.-
-Quiero verte coger con ese hombre, me desespero pensando en eso-
-Si mi amor lo vamos a hacer.. pero ahora seguime cogiendo que acabo . Dame verga mi vida dale.
-¿Te gusta así o queres más?
-Quiero más, no me alcanza con un hombre quiero que me cojan dale putito cogeme..que acabo.
-Tomá mi leche trola puta, traga pijas.
-Sí soy puta y me gustan las pijas ahhhh acabo mi vida acabo dame la lechita ahooooora.
A la mañana siguiente fuimos a la playa con los chicos, luego se nubló. Al mediodía volvimos a la casa almorzamos y dormimos la siesta, previo no volvimos a echar un buen polvo.
Al atardecer Susana atiende el teléfono , fue fácil para mí adivinar quien llamaba.
-Hola como estás.. ah sí .. ¿pensando en mí? yo también pienso en vos
Su sonrisa, la sensualida de su voz la delataban. Me maravilló el nervioso juego de su dedo índice envolviendo al cable del teléfono, estaba cargado de un erotismo fenomenal.
-¿Cómo dijiste? .¿esta noche?.... esperá que le pregunto.-
Bajo ligeramente la bocina del teléfono para hablarme.
-Roberto, Esteban nos invita a tomar un champagne esta noche después de cenar, ¿vamos?
-Decile que sí, . vamos.- le contesté excitado.
Susana sonrió con lujuria y le dijo- Vamos los dos así que preparate. Hasta luego.
Colgó el teléfono, vino hacia mí, me besó apasionadamente y me dijo- No te vas a arrepentir-