Las RRSS, tambien dan sus frutos...
Os cuento una batallita bastante reciente....espero que os guste!
Tengo una clienta nueva, una jovencita de Barcelona, de clase alta, una pija que se suele decir. Tiene veintitres años, pelo castaño, alta, piel morena, buen cuerpo. Muy mona toda ella en conjunto.
Desde hace un par de años, se ha querido dedicar a esto de las RRSS, haciendo de It-girl, y desde que trabajámos juntas, sus followers se han multiplicado por mucho.
En lo personal, que es lo que nos interesa, la verdad es que me cae muy bien, es una chica abierta y pasional, como yo de joven...bueno, de más joven....
En la tercera o cuarta visita que me hizo a mi estudio, hablámos de temas más personales, relaciones, parejas etc...tiene novio desde hace algún tiempo, pero no parece nada serio.
Un dia, le sugerí que subiera un pelín el picante de sus fotos. Nada erótico ni mucho menos, pero si más atrevido e insinuante.
Con el tema lenceria, andaba muy perdida, recuerdo que le enseñe un catálogo de conjuntos que pueder ir vistos, corpiños, etc..y le gustaron bastante.
Reconozco, que con imaginármela vestida con unos ligueros y un tanga, me ponía nerviosa. Mi piel se erizaba, y ella se había dado cuenta de esto. Le hablé de ella a Karlo, y me dio cuatro consejos, para ver que pasaba.
Ella no hacía más que decirme que no se hacía a la idea. Ese dia yo llevaba un body-tanga, y unos ligueros. Iba vestida normal, con una falda a media pierna, y una blusa.
-pues no entiendo bien el conjunto como queda Anna-me decía ella.
-mira, tienes que imaginarte con una blusa un pelin abierta, que se vea un poco, no es un sujetador, es un body, pero de puntilla.
Actué instintvamente al levantarme, y abrir mi blusa. Se le pusieron los ojos como platos.
-ves a lo que me refiero?-le dije ante su atenta mirada. Mi body, era de puntilla, pero practicamente transparente.
-si si, entiendo-dijo ella medio tartamudeando-pero es transparente...o casi.
-bueno, mira-continué desvistiéndome-va todo a conjunto, y es muy fino, e insinuante.
Cuando acabé mis palabras, estaba con la falda en el suelo, y con mi conjunto picante.
Se quedó unos segundos en silencio.
-te queda de maravilla Anna-me dijo de sopetón-estás guapísima. A los hombres seguro que les vuelves loca con este conjuntito.
-a los hombres y a las mujeres bonita-le dije al tiempo que me daba la vuelta para que observara mi precioso culito.
Celia se quedó otra vez en silencio.
-mañana por la mañana iremos al hotel Vela, y haremos un shooting desde una habitación muy alta. Veras que fotazas sacamos. Yo me encargo de la ropa interior, y tu de la de vestir.
-perfecto-contestó ella.
Nos despedimos hasta el dia siguiente. Recuerdo que me quedé en ropa interior con un calentón de mil demonios.
-estás solo?-le pregunté a Karlo por whatsapp.
-si, Mireia a salido. Por?
Sin contestarle me fui para su despacho en ropa interior.
Entre y Karlo me esperaba en su silla sentado...cuando me acerqué tenía su pene entre sus manos, completamente duro. Sin decirle ni media, apoyé mi manos en la mesa, y puse mi culito en pompa. Se levantó, me apartó el hilo del tanga, y me hizo el amor. Estaba a mil, no tardé nada en tener un orgasmo.
-veo que ha ido bien con Celia-me dijo al tiempo que se subía los pantalones.
-irá mejor....se ha quedado de piedra....le ha gustado...
-espero que te vaya genial....seguro que te la ganas....
Esa tarde hablé con una marca conocida de ropa interior, y acordamos que me darían unos cuantos conjuntos para que Celia se hiciese fotos, con la condición que etiquetase el nombre de dicha marca en sus posts.
Al dia siguiente, a las nueve de la mañana ya estaba en la habitación del hotel preparando todo. Tengo un pequeño “estudio fotográfico portatil”. Puse un par de focos, una camara de video fija en un tripode, y algunas cositas más.
A las diez en punto, Celia estaba en recepción, tal y como habíamos quedado.
Subímos las dos, con su maleta. Estaba preciosa, había ido a la peluqueria, y venía muy bien maquillada.
Empezamos el shooting, y la verdad estaban saliendo unas fotos preciosas.
-quieres probar algo mas sugerente Celia?-le pregunté cuando acabábamos el conjunto de faldita vaquera y blusa.
-si, he pensado en ello, y creo que tienes razón.
En ese momento, se desnudó delante mio, llevaba un sujetador y un tanga de color blanco. Con el moreno de su piel, y estando al pie de la cama, me hubiese tirado encima de ella. Pero aguanté.
Le enseñe un par de conjuntos que me habían prestado, uno de color negro y otro de color malva. Esta vez no se fue al cambiador, y para mi sorpresa se desnudo completamente delante mio. Algo había cambiado en su mirada. Estaba como más lanzada, y yo excitadísima, o como me dice Karlo, “cachonda perdida”.
Le abroché el sujetador, y los ligueros. Es increcible lo bien que huele su sexo. Estando a menos de un palmo de mi cara, casi tengo un orgasmo.
Con el tema posturas para las fotos, Celia andaba algo perdida.
Recuerdo que yo llevaba puesta una falda ligeramente larga, con abertura detrás, le queria enseñar como poner un pie encima del sofá, pero me era imposible. Asi que ni corta ni perezosa me subi la falda hasta la cintura.
En los enormes ventanales, con una falda puesta, y una camisa ligeramente desabrochada, salieron unas fotos espectaculares. Nos encantaron a las dos.
Celia pillo lo que quería para las fotos enseguida.
-tengo una sorpresa para ti Celia-le dije a la vez que abria la puerta del baño.
-fotos en el jacuzzi?? me gusta!-dijo ella al verlo. Tenia un enorme ventanal detrás desde el que se ve la ciudad entera.
Mientras se llenaba la bañera, Celia salió a la habitación, mientras yo ponía los focos en el baño.
Entró, y mirándome a los ojos, con un silencio absoluto, empezó a desnudarse. Primero se desabrochó la blusa, y la colgó en un perchero. Dejó caer su falda al suelo, y dandose la vuelta, se agachó para cogerla, poninendo su culito en pompa delante mio.
Fuera los zapatos.
Apoyando un pie en el borde del jacuzzi que ya estaba lleno, se bajo las medias.
Se acercó a mi, en silencio absoluto, y cuando estaba a medio palmo, se dio la vuelta.
-me ayudas?-me preguntó señalando el corchete del sujetador.
Le desabroché el sujetador, y mirándome a los ojos lo dejo caer al suelo.
De espaldas a mi, tardó como diez segundos en bajarse el tanga, cada centimetro que bajaba era como un premio para mi. Su culo es perfecto, y los labios de su vagina muy muy apetecibles.
Completamente desnuda, me paso un dedo por mi barbilla, como recogiendo mi baba.
Se metió en la bañera, y empezamos con el shooting. Con el pelo recogido, y su precioso culito en pompa, aparaciendo por encima de la espuma de la bañera: espectacular.
Pasado unos minutos, acabamos con el Shooting. Me puse al pie de la bañera con una toalla abierta, para que no cogiera frio.
El ambiente se volvió muy picaro otra vez.
-Sabes hacer fotos eroticas?-me preguntó. Tengo que reconcer, que hacia mucho rato que era ella quien llevaba la inciativa de la situación, todo lo contrario que me había recomendado mi marido.
-si, en una ocasión hice fotos eróticas, o casi pornográficas.
-quiero tener mi propio Book de fotos eróticas, para uso personal. Me las quieres hacer?
La cogí de la mano, y la lleve a la cama. La abrimos del todo, y le dije a Celia que se tumbara encima.
Dejo caer su toalla, y se tumbo boca arriba.
-olvidate que estoy aqui, quiero que te toques, como si estuvieses sola en tu dormitorio.
Se empezó a tocar, pero quedaba todo muy forzado, nada natural.
-quieres que pongamos una película porno? que te gusta?
-me siento incómoda, estándo desnuda, y tu aqui haciendo fotos completamente vestida y tal....
La señal estaba más clara aún. Me quedé en ropa interior en un segundo. Celia tenia una sonrisa muy pícara dibujada en su preciosa cara.
-mejor?
-mucho mejor, estas muy guapa Anna.
Cogí la cámara, y aunque el tema mejoro, no se ponía en siutación.
-mira, ponte de rodillas en la cama, y abre bien tu vagina, desde detrás quedara una foto preciosa.
Allí empezó todo. Se puso de espaldas a mi, en la cama de rodillas. Separó sus labios vaginales y empezó a tocarse el clitoris.
Como me moría de ganas, me desnudé del todo, y me acerqué a ella. La abracé por detrás, cogiéndola de los pechos, y empecé a besarle el cuello.
Sus pezones estaban durísimos, toda ella no paraba de jadear. Deslicé mi mano izquierda por su dura barriga, hasta llegar a su vagina. Estaba empapada. Con dos deditos le masturbé el clitoris durante un rato, hasta que tuvo un orgasmo.
Entonces se dió la vuelta, y nos besamos. Nuestros cuerpos desnudos estaban completamente pegados el uno al otro. La agarraba fuerte por los glúteos, acercándola más a mi.
-tumbate preciosa-le susurré al oido.
Volví a besarla, y fui bajando por su cuello, su pecho, sus tetas...mordía ligeramente sus pezones, continué mi camino hacia su sexo, sin dejarme ni un milímetro de su piel. Su tacto es increible.
Cuando llegué al final de mi camino, Celia abrió bien sus piernas, y con sus deditos, separó sus labios para enseñarme el camino. Creo que es la vagina más perfecta que he visto nunca.
Estuve lamiéndola durante mucho rato. No padía parar. Ella se corría, yo paraba unos segundos, y con mi cara mojada, volvía a la carga.
-me dejas?-preguntó después de uno de sus orgasmos.
Sin contestarle, me di la vuelta, y le acerqué mi sexo a la boca. En un precioso 69 estuvímos un montón de rato lamiéndonos la una a la otra.
Ella, a pesar de su inexperéncia, usaba su lengua rebién.
Le pedí que se pusiera de espaldas, y me dediqué un rato a su culito. Sin dejar de masturbarla, le lamía el ano que se se contraía con el tacto de mi lengua.
Karlo se volvería loco con ese culito.
Me atreví a meterle un dedito, y Celia enloqueció de gusto.
Estuvímos haciéndo el amor hasta la una del mediodia.
Mientras nos vestíamos, noté que Celia se sentía rara. Como avergonzada. Mientras le abrochaba el sujetador, la besé y ella se mostró algo esquiva, así que decidí no insistir más.
Se fué con su maleta, y quedamos en que la llamaría cuando tuviera las fotos.
Justo en ese momento me llamó mi señor marido, que sabía de mis intenciones. Le expliqué todo detalladamente, y el se reía.
-tengo ganas de ti cariño-recuerdo que le dije.
Karlo, para variar, estaba de viaje.
-dame unos minutos y te vuelvo a llamar Anna.
Ya me temía lo peor. Bueno, lo peor no, lo mejor.
Pasados unos minutos me envió un whatsapp, donde me decía que no me moviera de la habitación del hotel, que tenía una sopresa para mi.
Me acabé de vestir, y recogí todo el material para cargarlo en el coche.
Empecé a revisar las fotos, y la camara de video fija. Cuano nos vi a las dos enredadas entre las sábanas, no pude evitar masturbarme. No recuerdo cuantos orgasmos tuve ese dia.
A las dos aproximadamente, me llamaron de recepción, diciendo que subían dos modelos para una sesión de fotos. Sin saber de que me hablaban, intuí que era cosa de la sorpresa de mi marido. Así que sabiendo que era cosa suya, me desnudé para recibir a mi visita en lenceria.
Cuando abrí la puerta, aparecieron dos chicos enormes. Fuertes, altos y muy guapos.
-somos tu sopresa-me dijeron.
Noté en sus caras que les causé buena impresión.
Me tumbaron en la cama, y después de desnudarme, me hicieron un masaje a cuatro manos. Casi me quedo dormida, si no fuese porque uno de ellos empezo a jugar con mi coñito. Abrí un poco las piernas, para ponérselo más facil, y continuó con su masaje vaginal.
Me pidieron que me pusiese boca arriba. Tenía la cabeza en la punta de la cama, y me dijo uno de ellos que la dejase caer. Mi cabeza quedó colgando de la cama, y mi cuerpo completamente tumbado. No entendí muy bien aquella postura tan rara, hasta que uno de ellos, metío su polla en mi boca, y fue empujando, hasta que sus testículos rozaban mi nariz. El chico tenía un buen miembro, y de aquella manera, me la introdujo hasta la traquea.
Empezó un leve movimento, como follándome la boca, hasta que se fue animando. El otro chico mientras, me lamía el coñito, que continuaba completamente mojado.
Como la postura era incomodísima, me reincorpore, y después de dejar bajar la sangre a su sitio, pues estaba toda en mi cabeza, me organicé para disfurtar de aquellos dos impresionantes hombres.
Continué con una polla entre mis labios, mientras el otro chico empezó a darme duro. Con sus empujones me movía toda entera, pero con mis labios y mi lengua hacía esfuerzos para que aquella polla no se escapase de mi boca.
-te atreves con los dos a la vez?-me dijo uno de ellos.
Asentí con la cabeza. Mientras se ponía el preservativo, me puse un poco de lubricante en mi culito, e introduje dos de mis dedos.
Acto seguido, me senté encima del chico que estaba tumbado, introduciendo todo su falo en mi vagina. Me tumbé un poco, y separando mis nalgas, el otro chico me metió su polla en mi culito. Entonces empecé a moverme con sutileza, aumentando el ritmo, y evitando a toda cosa que cualquiera de las dos pollas se salieran de sus respectivos abujeritos.
Me encanta estar entre dos hombres a la vez.
Al rato se corrieron, casi a la vez. Los escorts es lo que tienen, cuando acaban su cometido se visten y se largan por donde han venido.
Me quedé un rato en la cama pensativa. Estaba caliente, tenía ganas de más.
Al final, me fui a casa, sabiendo que estaba Tete allí.
Cuando llegué le expliqué la situación, mientras le bajaba la bragueta, y sacaba de su cueva la mamba negra que tiene entre las piernas.
Tete es una garantia de buen sexo, con una herramienta descomunal, y sobretodo con un aguante fuera de lo normal.
En el mismo recibidor...me subio la falda, y me obsequió con el enésimo orgasmo del dia.
Que dia....