Las Noches de Persefone.... vol 2.

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vamos a tratar de escribir la secuela....si les gusta comenten y seguimos si no... nos olvidamos que esto jamas paso ;) ... un abrazo enorme

Hellena.

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Mi vida había seguido normal…. Y eso es difícil de decir, después de ese día, el día en que Perséfone se fue de mi vida, los días comenzaron a apilarse simplemente, a dejarse caer uno sobre otro… claro, comencé a valorar sobremanera las cosas pequeñas y sencillas de la vida, me di cuenta que me gustaban las mujeres, no todas pero si algunas.

Había pasado casi un año, tenía un empleo estable, vivía en Texas… no había vuelto a México, y a veces pensaba en ella, no siempre ni todos los días… pero había momentos en los que su recuerdo me robaba el aliento, en los que deseaba verla, saber si estaba bien… simplemente saber que había pasado con ella.

Recuerdo muy bien ese día, parecía como cualquiera, hacia mucho frio, es lo que recuerdo mas claramente, me desperté sin ganas de despertar, había una fuerza extraña que me ataba a la cama… lo atribuí a la flojera y me forcé a despertar y a ducharme… me vestí rápido, no me gustaba que la casa estuviera tan fría, pero bueno, solo decidí apurarme, salí y trate de encender el coche, pero no funcionaba, simplemente no encendía, me enfurruñe porque la idea de caminar en el frio me desagradaba bastante… no hubo mas que hacer, no había recorrido ni una cuadra cuando una camioneta negra paso por donde caminaba para estacionarse unos 50 metros mas adelante… al verla, recordé todos los coches que usaba Persefone, siempre me pareció muy divertido que siempre fueran camionetas negras… y a manera de burla siempre pensaba que si un día cometia un crimen tenía que llevar un vw sedan blanco… nadie lo esperaría jamás….

Dentro de la camioneta había un chico, se bajo despacio mientras me acercaba al coche, hablaba por teléfono, pero la verdad, no se veía sospechoso y yo, hacia mucho que había dejado de tener la sensación de que “algo” me podría pasar en cualquier momento… el chico se giro hacia mi…

-Señorita, que hora tiene?- me pregunto de lo mas normal, mientras trataba de encender un cigarro.

-Son las 8:17 – me limite a responder mientras caminaba a su lado.

-Discúlpeme – se limito a decir mientras, mientras me jalaba del brazo, hacia la camioneta, dentro había una chica de no mas de 20 años , me inyecto algo… y no supe de mi.

Abrí los ojos en una habitación completamente blanca…. Pisos, techos  y paredes… llena de muebles negros… el ambiente olía a ella, la busque con la vista pero no había nadie… despacio fui haciendo mas y mas conciencia de mi entorno, de la sensaciónes, me pare de esa cama negra, descalza, con una camiseta que no era la que me había puesto ese día, pero era mia… de hace tiempo atrás, todo parecía haber regresado extrañamente en el tiempo, solo faltaba ella….

No estaba en el infierno, eso me era clarísimo, la habitación aunque semejante no era ni remotamente de las mismas dimensiones, era un lugar infinitamente mas pequeño, que al no tener ventanas resultaba mucho mas claustrofóbico…. me acerque a la puerta pero como era de esperarse estaba cerrada… me senté en la cama, con una sensación extraña en la boca del estomago… deseaba que fuera ella, así al menos sabría que estaba bien.

Pasaron 10 o 15 minutos, quizás mas… cuando escuche que la puerta se abrió despacio….

Perséfone estaba ahí, parada en el marco de la puerta, con un traje negro de lino, extrañamente vestida muy parecida al primer día que la vi ahí, en el aeropuerto.

-hola- me limite a decir.

Ella sonrio sin emitir sonido alguno se aserco a mi, me tomo de las muñecas y me jalo para que me pusiera de pie.

-jamás sete va a quitar la maña de jalarme?- dije tratando de romper un silencio que me parecía eterno.

-shhhhh – se limito a responder poniéndole fin a mis preguntas y a mis quejas.

Me abrazo, y fue como si el tiempo no hubiera pasado…. Tenia tantas preguntas, tantas sensaciones encontradas, estaba llena de gusto por verla ahí, viva…. Aunque no me agradaba la forma en la que me había llevado a verla, la ultima vez que la vi, estaba herida, la deje abrazarme y la abrace de vuelta.

-¿Alejandra?- susurre despacio.

  • no…. Tu no me dices así- se limito  a decir sin separarse de mi.

-¿Perséfone…. Que hago aquí?- me limite a preguntar

-leei la historia- dijo sin soltar mi cuerpo- eres mía 6 meses…. Te he regalado todo un año- dijo como si fuera una justificación suficiente  a todas sus acciones, comenzó a desnudarme sin decir agua va… sin besarme, siempre fijándose encada centímetro de piel que iba descubriendo de piel.

-hey heyyy – comencé a decirle – mínimo con permiso ¿no? – mientras jalaba la blusa que se estaba esforzando por quitarme a tirones.

-Joliene –me dijo muy seria, viéndome a los ojos, casi molesta de que la detuviera- ¿alguna vez te ¿he hecho algo que te lastimara?, te deje libre, viviste tu vida, tu casa y tu familia… lo único que quiero es estar con mi mujer, ¿estamos?- me dijo con una voz firme para imprimirle autoridad en sus palabras.

-¿todavía piensas que soy tu mujer? … después de un año de no saber nada de ti, no has pensado que podría tener novio, novia o algo parecido a una relación, que alguien mas podría quererme, que alguien mas decidió quedarse conmigo…. Tu te fuiste Alejandra, me dejaste sola, botada en medio de una isla… llore como no tienes idea…-

  • no te deje por que deseara – dijo interrumpiéndome, rápidamente atropellando las palabras unas con otras – te deje porque necesitaba que estuvieras segura, saber que nadie te iba a robar, que no te lastimarían… mierda Joliene yo te am…- dijo deteniéndose de golpe antes de terminar la palabra –tu eres…- dijo mientras respiraba profundo y cuidaba cada palabra que salía de su boca- la única persona en el mundo… que me hace sentir cosas buenas….cada día, desde que apareciste en mi vida, asi por error, desde ese día, ahí algo que me ata a ti, yo no soy una buena persona y quizás no merezco que alguien que es bueno como tu se quede conmigo… pero no te puedo soltar- se quedo callada mientras me miraba fijo.

Sonreí un poco y desvié la mirada, tenía una mezcla de sensaciones encontradas….

-Eres una boba – me limite a decir mientras la abrazaba.

  • Boba tu…- dijo despacio- aparte … no tienes novio, ni novia ni nada…- me dijo muy firme

  • y tu ¿cómo sabes? – dije separándome un  poco viéndola incrédula.

  • pues porque todo el tiempo te he vigilado… o acaso ¿tu piensas que yo dejaría que mi mujer saliera con alguien mas? –dijo con una sonrisa como si fuera lo mas normal del mundo.

  • y si ¿hubiera salido con alguien?- me limite a decir.

  • pues lo mato mi amor- me dijo con una sonrisa casi remarcando algo tan obvio  como quien asegura que el sol saldrá cada mañana

-tu estas loca… eres demasiado bonita… pero estas loca- me limite a responder –jamás has pensado que seria bueno, digo por no dejar, que no me secuestres …. No has pensado que podrías llamarme… mandarme un wathsapp… no se lo que hace la gente norma..-

-Si te llamo, puede que no me respondas… si voy por ti siempre es seguro que termines a mi lado… lo encuentro mas personal…- dijo mientras terminaba de sacarme la blusa.

Me reviso despacio…lo que quería ver en si era como seguían las marcas que Ximena me había hecho…. Ya casi habían desaparecido… todo, menos la quemada…. Se mordió el labio inferir….mientras la tocaba con la yema de los dedos… por primera vez, vi un dejo de preocupación en su cara, no pronunciaba palabra… se aserco despacio y beso la cicatriz en silencio.