Las monjas inolvidables

Como fueron esplendidas y lujuriosas.

Las monjas inolvidables.

Era la primera semana del mes de septiembre, en México es normal que en esa época los estudiantes están de vuelta a las escuelas, llámense universidades, preparatorias y demás.

Soy un hombre de 1.70 delgado peso 74 kilogramos y me mantengo en forma ya que me encanta el deporte y sobre todo la bicicleta de montaña. Así como que como cada sábado me puse un short y estaba a punto de salir, cuando mi esposa me dijo que los niños necesitaban libros y había que irlos a comprar al centro, de momento no me gustó la idea, ya que me quitaba la oportunidad de ir a mi deporte favorito.

Pedí la lista de libros y me dirigí al centro del distrito Federal, el trafico es abundante y mas en esa época, por lo cual hice aproximadamente 1.30 horas para llegar, deje estacionado el auto y fui caminando hasta la zona de librerías. Cual fue mi sorpresa al ver que las librerías estaban a reventar , pero de una manera u otra tenia que comprar los libros, fui caminando hasta la librería mas grande y me metí, hacia un calor espantoso, había hombres, mujeres, estudiantes, etc. En México no se forma uno para que lo atiendan por lo cual se debe de ir metiendo poco a poco, así que tomé posiciones y me fui acercando al mostrador.

Al estar en la segunda fila, frente de mi había dos monjas sin la pañoleta en la cabeza, pero por su forma de vestir así se identifican.

Ambas muy jóvenes, 25 y 26 años, una gordita y una mas alta, ambas muy bien. La verdad me apena contar esto, ya que los apretujones son muy fuertes, yo me encontraba atrás de la gordita chaparrita y casi sin quererlo le di una repasada en sus nalgas y en ese momento me empece a excitar y mi verga creció de inmediato y mis miserables 20 cm de repente estaban totalmente firmes, ella fingió no sentir y nuevamente le di otro llegue, ella volteo me vio y se acomodó, tenia una nalgas divinas, anchas y con unos cachetes muy grandes, muy duras, así estuve empujándola un rato, pero de forma tan deliciosa que ella estaba feliz, solo que tenia un problema, me quedaba muy abajo ya que era chaparrita, por lo cual traté de llegar a la otra monja, yo estaba realmente excitado así que empece a quitarme para llegar a ella, la chaparrita se hacia para tras para que no me fuera, pero mi decisión era llegar a su compañera que me quedaba mas en forma.

Finalmente me ubique detrás de la monja, era blanca, veía sus oídos rojitos y una nalgas de verdad espléndidas, deberás amigos una nalgas realmente espléndidas, esto tal vez sea porque comen muy bien, casi sin quererlo me acerque y le puse mi verga en sus nalgas, ella respingó como sacada de onda y yo insistí, al sentir mi verga que se la ponía toda en su rajada, sentí como respiró profundo y las levanto para que yo la agarrara mejor, sentí como mi miembro crecía aun mas al sentir muy caliente, se debe recordar que yo solo traía un short, por lo cual ella sintió totalmente mi verga, ella solo traía su falda muy amplia color azul y sus calzones, por lo cual la sentía en forma casi real, el tener a una mujer así es la gloria y yo daba gracias a dios por estar ahí en ese momento.

De repente me di cuenta que mi miembro estaba afuera del short, se había salido por un lado y la estaba picando solo sobre su falda, me encontraba perdido, la hormona me estaba matando por lo cual, baje mi mano derecha, ya que tenia las dos es sus hombros y empece a levantarle la falda poco a poco, llegó el momento en tenia su falda totalmente levantada sobre su cadera y me verga le tocaba sus piernas y me metía entre sus nalgas, era divino realmente divino y excitante, estaba rodeado de gente y yo casi cogiéndome a una monja realmente hermosa y complaciente. Así que dije: si he llegado hasta aquí, voy a intentar otra cosa, por lo cual le fui bajando poco a poco el calzón, ella estaba feliz y totalmente pegada a mi cuerpo, la verdad en varias veces sentí como quería realmente tenerla toda dentro o quizás eran orgasmos. Llego el momento en que me di cuenta que el calzón estaba abajo, me hice para atrás (Como pude) y le empuje mi miembro totalmente erecto, sentí como resbalaba con facilidad, la mujer estaba empapada en sus propios jugos, yo me hacia para tras y para adelante y mi intención era llegar hasta ahí, realmente pense que no me la podría coger con tanta gente ahí.

De repente ella hizo un movimiento ( no se como) pero de repente sentí como mi verga deslizaba suavemente en su vulva, en un instante tenia toda mi verga dentro de ella, no costo trabajo y debo pensar que se debía justamente a lo lubricada que estaba, ella se repegó totalmente y puso la mano en su boca, aún así yo sentía como suspiraba, lo sentía claramente en mi verga que se hinchaba mucho mas al sentir sus palpitaciones, en un momento ella se hecho para atrás con tal fuerza que me movió muy fuerte... ahí terminamos los dos, ella para atrás y yo para adelante, que venida....que venida....Así permanecimos un rato, mi verga se hizo flácida y se acomodó en su lugar y a ella le subí los calzones y le solté la falda, en ese momento me atendieron y procedí a salir...ella me tomó de la mano y me la apretó y sonrió de lado. Yo se la oprimí también. Nunca le vi las nalgas, pero que nalgas tenia... aun la recuerdo.

Saludos cordiales.

Elmonje_us@yahoo.com