Las mejores cosas de la vida no se pueden ver 1
La idea fue propuesta por sus mejores amigos en vista de la felicidad que compartían, un vino especialmente seleccionado para acompañar la comida y el mar de fondo reflejando la luna llena con velas iluminando sus rostros. Ese día solo le pidió que se arreglara lo más guapo posible sin mencionar la sorpresa, le cubrió los ojos tomando de la mano para no delatar sus planes y contrato un taxi que los llevo hasta su destino sin contratiempos. Un ramo de rosas rojas con una tarjeta en el interior, esta decía lo siguiente:
Erick Diaz Martínez un chico con muchas cualidades en su persona, siempre optimista de su futuro mirando de frente sus problemas y enfrentándolos sin dar un paso atrás para resolverlos con determinación. Su gran sueño en la vida viajar para conocer los grandes paisajes del mundo, razón principal por la cual pensaba estudiar idiomas como carrera y disfrutar de todos esos lugares únicos en su tipo. La primera vez que le gusto una ciudad tendría como 6 años de edad, mientras veía la televisión sentado en la sala de su casa y ojeaba un libro que tomo prestado en la escuela. Simplemente quedo maravillado con lo dicho por el narrador del programa, haciéndose la firme promesa de algún día personalmente conocerlo y poder ver de cerca todo lo que tenía que ofrecer a sus visitantes.
Sus padres propietarios tenían un restaurant propio en la costa, así Erick mantuvo contacto con otras personas de países extranjeros y su acento tan distinto al intentar hablar su idioma lo hacía buscar más información de ellos. En sus ratos libres escuchaba canciones en idiomas distintos tratando de pronunciar las palabras, era divertido ver como un pequeño chico sin práctica alguna intentaba aprender y no desistía en sus planes de comunicarse con una lengua diferente a la suya. Por algo dicen que la práctica hace al maestro, debido a que nadie nace sabiendo hacer las cosas a la primera y requieren cierta práctica para perfeccionar sus talentos. Este otoño empezaría la universidad con nuevos compañeros de clase, algunos chicos de su antiguo grupo de preparatoria estudiarían la misma carrera y la única diferencia era que eligieron una institución diferente a la suya.
Su decisión radicaba en la intención de permanecer cerca de sus padres, dado que la misma se encontraba en la misma ciudad donde creció y vivió los momentos más memorables de su infancia con los vecinos. Incluyendo su primer beso con un primo que dejo de ver, este se mudó a otra ciudad perdiendo el contacto y su primer novio a los 14 años con un chavo dos años mayor. Aunque su relación no paso de algunos meses, debido al carácter posesivo de tenerlo, siempre vigilado en sus salidas con compañeros y su falta de tacto al tener conversaciones importantes de ellos. Los siguientes novios no fueron personales, ya que navegando por el Facebook los encontró y aunque la comunicación en parte fue buena no podía reemplazar el contacto físico. Las participaciones dentro de clases lo hacían destacar entre los demás, a pesar de fallar en la pronunciación del nuevo idioma si podía retener gran cantidad de información y relacionarla correctamente con las cosas a su alrededor.
Dentro del aula solo tenía dos amigos de su entera confianza, ellos sabían gran parte de los detalles de su vida personal e inclusive su atracción hacia los chicos dándole su apoyo. Sin embargo este no era el caso de sus padres inconscientes de la sexualidad de este, los hermanos se encontraban en la misma situación pues era reservado y mantenía en secreto aquellos datos de su vida lejos de ellos por temor a su reacción. Aunque ellos no solían tener mucho tiempo para estar en familia reunidos, debido a esto se hacían arreglos con anterioridad para conversar las noches al cerrar sus puertas y hablar un poco de sus actividades mezclando la vida personal con los negocios. Valeria se interesaba por los estudios de su hijo siempre complaciendo sus peticiones, si se trataba de la educación de este no descansaría hasta encontrar lo mejor y hacer que disfrutara las oportunidades que ellos no pudieron tener a su edad.
Aunque debía pagar un pequeño costo de vez en cuando sirviendo como mesero, las vacaciones les ayudaba al menos un turno reemplazando a uno de los trabajadores y ahorrando la paga usándola en otras cosas de más prioridad. Todavía le restaba cierto tiempo empleándolo con sus amigos en salidas al cine, visitas a ferias del libro, museos con diferentes exposiciones, cursos de informática o bien primeros auxilios entre otros. Además de contar con la playa para practicar deportes acuáticos, el surf montando olas de 10 metros sobre el nivel de mar en grupos y buceando con los peces cerca de los arrecifes coralinos reflejando la luz solar. Su primer en la universidad Erick entablo su primeras relaciones de amistad, conoció algunos chicos de la ciudad vecina con quienes conversaba y raramente tenía que compartir algunas tareas en equipo. Su vida social en el Facebook trajo algunas buenas amistades, mismas que conservo con el paso de los años pero no todas fueron tan buenas y dejaron cicatrices que solo el tiempo pudo sanar.
El deporte nunca fue su punto fuerte pero el futbol americano le gustaba, varias veces tuvo la oportunidad de practicarlo con compañeros de preparatoria y entrenar con ellos como si se tratara de un verdadero equipo. Además de verlo ocasionalmente en la televisión apoyando a las panteras, asistir a un juego en vivo del supertazón con los vencedores y presenciar un momento de la historia en el momento justo. En las tardes se escapaba a la playa para ver su momento favorito, una puesta de sol presenciando el sol ocultarse en el mar y hacer cuenta regresiva del 10 al 0 en cámara lenta. Las clases prestaba la mayor atención posible sin descuidarse, leer formaba gran parte de sus estudios en la comprensión de idiomas y las reglas de la escritura un tanto difíciles de aprender. Su carácter despreocupado por las cosas no significaba que no se esforzara, realizando sus exámenes se preparaba lo suficiente con el fin de pasar bien y ser recompensado con buenas calificaciones finales.
Buscando una oportunidad en el amor se creó una cuenta en grinr, una aplicación de modo que se descarga en celular para buscar citar y ver si ocurre algo más con cierto riesgo de seguridad. Así encontró a Iván un chico bien parecido amable, nunca puedes tener el control total de las situaciones en la vida y decidió hacer una salida con el sin compromiso. Desde que se conocieron platicaban mucho por la App, posteriormente pasaron a Facebook para realizar videollamadas y escuchar sus voces les daba cierto aire de familiaridad en la relación. Aunque propiamente dicho no existía más que amistad, aun así Erick tuvo la oportunidad de conocer sus amigos y entablar conversaciones sobre intereses mutuos. En salidas a sitios como parques, pizzerías, museos, etc. Prefería pagar su parte solo porque no le gustaban los malentendidos, una cosa es que te inviten a disfrutar un día de diversión y simplemente dejes que termine pagando las cuentas porque se ofrece a hacerlo.
Su relación daba pasos firmes en la dirección correcta desde sus inicios, si alguien realmente te interesa para establecer una relación y la atracción mutua hacia que los chicos pasaran grandes momentos de alegría. Estar acompañada de una persona por la cual sonríes, solo verla te produce una emoción que no tiene comparación y simplemente el tiempo no alcanza para conversar lo suficiente con él. Los días continuaban avanzando sin que alguno de ellos diera el siguiente paso, Iván no tenía miedo de seguir su camino al lado de Erick pero buscaba una ocasión y la situación indicada para proponérselo en una cita romántica. Quienes hayan experimentado la sensación de tener a alguien especial, entenderán perfectamente la razón de no querer dejar ningún momento al azar y hacer cada instante perfecto sin intervención de las personas a su alrededor. La edad no representaba mucho problema pues solo un año era prácticamente nada, existe un dicho que dice si de amor se trata no distingue edad, sexo, religión o estatus social.
Sus días libres se daban un escapadita al centro de su ciudad, perderse entre las calles sin nadie para evitarles explorar cada rincón y ver las estrellas sentados en las playa era maravilloso. Pasaron cerca de tres meses de haberse encontrado por casualidad, una pequeña reservación en un restaurant en el otro extremo de la ciudad y los platillos favoritos pedidos con anterioridad por Erick fueron lo necesario para pedirle a Iván ser novios. La idea fue propuesta por sus mejores amigos en vista de la felicidad que compartían, un vino especialmente seleccionado para acompañar la comida y el mar de fondo reflejando la luna llena con velas iluminando sus rostros. Ese día solo le pidió que se arreglara lo más guapo posible sin mencionar la sorpresa, le cubrió los ojos tomando de la mano para no delatar sus planes y contrato un taxi que los llevo hasta su destino sin contratiempos. Un ramo de rosas rojas con una tarjeta en el interior, esta decía lo siguiente:
“Es poco el tiempo que te conozco pero si me aceptas me gustaría pasar el resto de mis días contigo y contemplar tu bello rostro cada mañana al despertar. Cuando estoy lejos de ti me siento incompleto como si me faltara fuerza, los momentos más felices contigo no tienen comparación y no podía imaginar un futuro sin tus besos que me derriten. Te amo con todo mi corazón Quieres ser mi novio Iván?”
Además le entrego una cadena con foto de ambos de la primera cita, está dentro un relicario de plata con la frase te amo mi tesoro y un poema con versos escritos pensando en él. Iván estaba emocionado con la sorpresa que lloro mucho, ningún otro chico le hizo sentir como Erick pues lo ponía nervioso y las palabras parecían sobrar en las conversaciones pues sus ojos expresaban sus sentimientos. Los enamorados podrían pasar mucho tiempo en silencio, viéndose de frente adivinarían sus pensamientos sin decirlos y disfrutarían de una convivencia más amena. No pudo negarse ante tal petición pues si no le hubiera ganado seguro lo hacia él, su estancia se prolongó por 2 horas en el restaurant porque deseaban vivirlo al máximo y tomarse algunas foto de recuerdo para subirlas a sus redes sociales presumiendo su amor a las amistades.
Se dieron varios besos sin miedo a ser mal vistos por la gente, Erick llegando más allá le dio de comer en la boca a su novio y este le correspondió regresándole las atenciones prestadas. Su noche termino con un paseo romántico a la luz de las estrellas, los chicos habían tenido una velada mejor de lo esperado con la atención recibida y terminaron despidiéndose para retirarse a casa porque no querían problemas. Los papas de ambos novios se enojaban con ellos si llegaban tarde, la responsabilidad les permitía gozar de ciertos privilegios y mantenerlos contentos a fin de darles permiso la próxima vez. Cuando regresaron a casa intercambiaron mensajes de buenas noches, ambos se quitaron sus ropas pues el clima les hacía sentir calor y durmieron pacíficamente hasta el día siguiente felices de un día hermoso. Paso una semana desde que se hicieron formalmente antes de decirles a los amigos, ellos los notaban un poco misteriosos en ese lapso de tiempo y claro les dieron de brazos deseándoles lo mejor del mundo en su relación.
Aunque seguían faltando la parte más importante sus papas, no sabían cómo planteárselos para que no se molestaran de su noviazgo y simplemente guardaron su secreto por miedo a enfrentarlos. Cerca del mes de haberse comprometido no pudieron continuar con la mentira, cada uno le diría a los suyos en el fin de semana sin prisa y verían si reacción era buena o se negarían a aceptarlos juntos de novios. Lo primero seria comenzar por declararse gay para ver si loa apoyaban, después mencionarían que estaban teniendo una relación seria con otro chico y si lo rechazaban tratarían de hacerlos comprender sus sentimientos. En caso si llegara a ser necesario saldrían de su hogar, porque no tendría caso estar fingiendo que su problema no existía y ellos no querían ocultar sus preferencia a la gente delante de estos. Erick inicio una plática una noche que cerraron el restaurante con el motivo de hacerle mejoras, se paró de frente sintiendo muchos nervios pero firme en su decisión y les padres hace años me di cuenta que me gustan los chavos.
Su padre se levantó de la mesa inmediatamente diciendo perdí el apetito, discúlpenme me iré a tomar aire fuera un rato de la casa no me esperen y la madre se reusaba a creer aquellas palabras pronunciadas por su hijo.
Madre: he fracaso en mi labor de educarte acaso te negamos alguna vez algo
Erick: no mama siempre me han educado de la mejor manera solo entiéndeme, ser gay es algo completamente natural en la personas y lo hice justo en este momento porque no deseo que enteren de nadie más.
Madre: seguramente estas confundido por tu edad
Erick: es la realidad madre pero necesito su confianza en este momento
Madre: me resulta ilógico pensar que mi propio hijo le gusten los hombres
Erick: mira no elegí serlo por decisión propia
Madre: no estoy de acuerdo con tu elección habiendo tantas chicas lindas, sabes tu padre le será muy difícil hacerse a la idea de aceptar tus preferencias y si vieras cuanta ilusión tenia de verte casado con una buena esposa e hijos.
Erick: eso todavía puede ser solo que diferente a su pensamiento pero no me resulta fácil abrirles mi corazón, muchas veces soñé con decirles para no ocultarles la verdad y ahora que lo hago simplemente me hieren con sus palabras y silencio. Nunca me sentido a gusto con mis compañeros de la escuela, si supieran cuantas burlas he aguantado de su parte y esperaba que ustedes como padres me pudieran apoyar en mi vida. Tal vez la forma en que se los dije no fue la mejor pero no me arrepiento, hace tiempo me acepte a mismo con mis preferencias sexuales y solo busco encontrar la verdadera felicidad en este mundo.
Madre: retírate no deseo conversar más de esto
Erick: por más que trates de esconder la verdad esta no desaparece
Madre: mañana hablamos
Desconsolado salió corriendo hacia su habitación con un nudo en la garganta, solo esperaba que Iván le fuera mejor diciéndole a los suyos y tomando su celular le marco para contarle lo sucedido. Iván esta en casa viendo una ciudades de papel una película reciente, un tanto sorprendido al ver la llamada entrante de su novio pues sabia su plan y alegremente le contesto diciendo palabras bonitas para hacerlo sonreír.
Iván: hola precioso! Te extraño mucho amor de mi vida
Erick: hola amor! Necesitaba escuchar tu voz para reconfortarme
Iván: es algo temprano para que me marques no tenías una cena con tus padres
Erick: has dicho tenia porque se acabó antes de empezar
Iván: te hicieron algo para lastimarte
Erick: ellos no serían capaces de hacer tal cosa
Iván: relájate y cuéntame que paso?
Erick: como recordaras quedamos en decirles a la familia sobre que somos gays y la relación que tenemos tu y yo, pues veraz no se lo tomaron a bien mi madre está llorando y mi padre se fue sin decir nada al respecto.
Iván: deber darles tiempo no puedes soltarles una bomba y actuar como si no pasara nada, solo necesitan espacio para reflexionar porque eres su hijo y independientemente de lo que seas no te abandonaran a tu suerte.
Erick: como deseo tenerte aquí conmigo para abrazarme
Iván: puedo escaparme un rato para verte
Erick: oye no se enojaran si los haces
Iván: no le veo problema tomarme un par de horas para estar juntos, ausentarme será muy fácil considerando que no están ahora en casa
Erick: te lo agradezco amor
Iván: déjame ponerme algo de ropa salir y nos vemos en la playa
Erick: qué clase de película veías?
Iván: no pienses mal solo estaba en bóxer porque tengo calor no haría nada sin ti
Erick: yo tengo frio pero bueno allá te veo en 15 minutos
Iván se levantó a toda velocidad de la cama pero no se bañó, solo se cepillo los dientes con algo de pasta dental y coloco una bermuda gris, además se colocó una playera sin mangas. Erick en cambio solo se lavó la cara porque hace poco se había arreglado, tratando de sonreír para olvidar el mal momento que pasó con sus padres y perfume pero fue cuidadoso de no hacer ruido a su salida. Mama seguía en el comedor sentada llorando sin moverse, sintió tristeza de no poder hace nada para detener sus lágrimas y evito hace un ruido que lo delatara en su escape furtivo. El padre se encontraba en un bar a las afueras de las ciudad, entre copa y copa maldecía los cuatro vientos tener un hijo gay y sus sentimientos se juntaban en su pecho. El miedo de enfrentar la realidad viendo a los vecinos como si todo marchara bien, durante su adolescencia cometió muchas estupideces con amigos de la escuela y varias veces estuvo a punto de regarla metiendo la pata.
Las drogas fueron una parte importante que casi lo matan, comenzó a consumirlas a raíz de convivir frecuentemente con amigos y terminó cediendo a las múltiples invitaciones de ellos. Muchas personas dicen la primera vez no pasa nada si la pruebas, mentira más grande pues termino gustándole pero no quedo ahí y salto al alcohol probando gran variedad de licores con diferentes grados. Sin embargo una aventura de tantas salió accidentado, lo estupidez de los adolescentes mezclado con mucho alcohol y desvelos continuos le dejaron las piernas fracturadas. Afortunadamente ningún daño irreparable debido a su edad pero un amigo murió, esto lo hizo reflexionar con una fuerte llamada de atención de los padres y una rehabilitación de un año en la mejor clínica de rehabilitación. Aunque no quería reconocerlo en un principio lo acepto, psicólogos especializados lo atendieron paso a paso para su recuperación y evaluaron su conducta de los últimos años.
Fuertes enfrentamientos con su familia dejaron heridas emocionales que solo el tiempo curo, aun así ahora se encontraba rompiendo la promesa de no volver a probar gota de alcohol y dejaba atrás sus esfuerzos del pasado que tanto le costaron. La voluntad le había fallado rotundamente en un momento de debilidad, el cantinero solo lo veía beber botella tras botella sin señas de parar y desperdiciar su vida como si no pensara en el mañana. Su experiencia ejerciendo el oficio le otorgaban un sexto sentido, sabía reconocer el tipo de persona ante él y basto con echarle una simple mirada para saber que no pertenecía ahí. Quiso enterarse el motivo de su estancia en el lugar, no era raro intercambiar algunas palabras con los clientes y aconsejarlos si estaba en sus conocimientos hacerlo como la hace un amigo en los momentos más difíciles.