Las hijas rogando y el padre castigando.(15)

Otra vez no...., Otra vez.... – el murmullo parecía atascado en su garganta. Intento retroceder lentamente hasta que su espalda choco con el muro apilado de pupitres viejos.

Antes de que pudiera lanzarse hacia la rejilla de ventilación , Paco la agarro del tobillo impidiéndole cualquier huida.

• Quieta ahí... pequeña salvaje! – le dijo subiendo la mano hasta sujetarla de la cintura .
• Noooo...., noooooo..... pateaba Eva desesperada.-- la sujeto de los brazos ,empezando a chillar aterrorizada , sujeto las muñecas cruzadas tras su espalda , atándola con un cable suelto del suelo.
• Sera mejor que paressss, o te lo aseguro sera mas doloroso! – dijo propinando un azote al culo de su hija ,-- Créeme , me encantara que te resistas....-- chilla cuanto quieras! – termino arrojándola sobre un oxidado escritorio .
• Cabroooonnn...., sueltameeeee, hijoooo de putaaaaaa!-- Grito pataleando su hija .
• Esoooo essss...., la altura perfecta !, pronuncio Paco detrás de su hija , acercándose. la sujeto de los hombros colocandola tan echada como pudo, la cabeza y los hombros asomando al otro lado, paso su mano sobre la gastada tela de su falda levantándola sin contemplaciones.

El carnoso culito apuntaba hacia arriba invitándolo, se relamió ante lo duro que seria esta vez su castigo. Poco le importaba los chillidos , los insultos eran su única arma .

• Salidooooo de mierdaaaa, hijoooo de putaaaaa! – intento revolverse rabiosa.
• Tu sólita te los buscaste, hija! – termino sentenciando mientras su mano agarraba la braga y estiraba con fuerza rasgando la tela. – Y aquí esta Papa, para corregirte !
• Nooooooooo! Aulló Eva! – No me hagassss nadaaaa,-- sollozo devilmente.

Paco no pudo dejar de admirar el jugoso culo de su pequeña Eva, aquellas interminables piernas cubiertas por calcetines escolares. – Como no ponerse cachondo!-- se dijo.

• Ay peque, no sabes como voy a gozar reventándote el ojete..., Dios sabe que voy a disfrutarlo bien a fondo!-- acabo riéndose con fuerza.
• Por favoooor, pooooor favoooor – suplicaba entre lloros-- Te juroooo que ….! – lloriqueo.

Estaba empalmado , el bulto de su rabo estirando la tela de su pantalón empapado. Ante él, el cuerpo de su hija pequeña estirada boca abajo, la pobre llorando con las piernas colgando ; el culo al aire, la apetitosas cachas y los pelillos rizados en la parte baja. La postura perfecta.

Tomo algo de distancia, pudo escucharlo detrás de ella, retrocediendo, quizás después de todo había recuperado la poca cordura. Momentáneamente suspiro aliviada, aun no pudiendo moverse , sabia que seguía tras ella. Antes de que volviese a suplicarle escucho el ruido de algo mojado cayendo a peso sobre el suelo. Intento girarse, pero no pudo.

Había decidido soltar el palo con el que iba a castigarla, no quería cegarse por la furia y dañarla seriamente, la correa le pareció mas apropiada, se desabrocho los pantalones mojados ,recuperando la correa del suelo. Anudo una vuelta en su muñeca y se dirigió hacia la pequeña eva empuñándolo.

Recordaba muy claramente como había usado la misma artimaña para castigar a sus preciosas hijas mellizas, el primer azote voló en un seco movimiento de muñeca.

• Zaaaaaaasss....-- golpeo a Eva , provocandole el pinchazo y la quemazón inmediatamente.

Se tensó aterrorizada, comenzando a chillar .

Grito a pleno pulmón, pero no le dio tiempo a volver a repetirlo y la zurro en la nalga izquierda. Retrocedió para poder contemplar las primeras señales rojizas cubriendo el glorioso culito de su niña pequeña.

• Noooo meee pegueeessss... Cabrooooooon! – volvía a chillar furiosa una y otra vez.

A Paco poco le importaron sus ruegos, su mano tomo de nuevo altura volviendo a sacudir el cada vez mas rojizo culo de Eva, haciéndola chillar tan alto que hubiera roto los cristales .

• Hijooooo de Putaaaa., Hijooooo de Putaaaaa.... aaaauuuuuu! – lloraba con la cara roja de vergüenza.
• Vamooos, vamooos , Peque... , tu te lo buscastes. Ya lo sabes! – acabo confesandole Paco.

Ver el culo encarnado de su niña, flagelado y cubierto de marcas de correa lo ponía muy cachondo, ni la había tocado y aun así estaba a punto de correrse. Tomo aire, descansando los brazos, recuperando algo de control. Los gritos y gemidos de su pequeñina hacían trempar su rabo con dureza, cada meneo de cadera invitándole a enterrarse en aquella estrechita vagina.

Sudando, se detuvo a recuperar el aliento . El slip del calzoncillo reventando por las costuras cuando con la mano libre destapo el rabo , tieso como un torpedo listo para dar en el blanco, se sobo un par de veces la gruesa barra , untando la carne del juguillo resbaladizo.

Podia escuchar los cada vez mas deviles lloriqueos de Eva, totalmente vencida, medio desmayada con el culete hinchado y rojo por el correctivo. El momento perfecto para joderla .

La llantina era de lo mas penoso, pero no dejo ablandarse cuando volvió a vapulear con mas fuerza, zurrando con la correa la parte baja del trasero, levantando a su hijita hasta casi ponerla de puntillas.

• Paraaaaaa.... paraaaaaa …. porrrrrr favoooorrr! – rogó, volviendo la cara cubierta de lagrimas.
• Lo se , cariño! A mi también me duele!.... , No sabes la preocupación de estas horas....! – Llegue a pensar que te había perdido para siempre, hija mia!-- susurro acercándose hasta susurrarle al oído.

Rozo por primera vez el grueso cipote por la vapuleada raja entre los cachetes de su niña pequeña. * Noo..., nooo...-- gemía devilmente. No lo hagas....! * No sabes cuanto te echado de menos-- lamió paco delicadamente su oreja-- Cuanto he soñado con volver a follarme este coñito.-- mordió el cuello al decírselo. – No quiero volver a usar la correa, cariño!..., por lo menosss en un tiempecillo....-- confeso.

Paco sobaba su rabo intentando aliviar el escozor que sin duda sufriría el culito de Eva, dejo caer la correa para sujetar con fuerza los dos cachetes agitados y enrojecidos. – Joodeer, que manera de palpitar!-- pensó excitado. Que ricura ! – oyó chillar de nuevo a Eva, que acabo silenciada por el cachete propinado al ya castigado trasero.

• Ah callar, Peque!-- le mando mientras hipaba con mas fuerza. intentaba rebullirse del peso del cuerpo aplastandola de nuevo.

Nada podía hacer, mientras le ponía la mano izquierda sobre el cachete izquierdo ,recorriendo con la mano el excitado y mojado coño sobandolo por primera vez. Estaba muy excitada.

• Eres una guarrilla viciosa..., mira como me has puesto la mano – le dijo riéndose , mientras fregaba su mano mojada por su boquita .
• Noooo, es mentiraaaaaaaaa... – volvió a chillar.

Paco retrocedió ante el chillido, miro a ambos lados del cuchitril buscando cualquier cosa. Se arrodillo hasta sus olvidados pantalones , sacando del bolsillo un arrugado pañuelo. Enrollándolo se acerco hasta su hija , amordazándola de un solo movimiento.

• Menudos pulmones-- …..

aliviado de los llantos volvió a colocarse sobre el cuerpo de su pequeña, sus dedos volaron de nuevo hasta sobar el coño con la palma de la mano abierta , pellizco el clítoris hasta arrancarle un gruñidos excitantes.

Los dedos se le cubrieron de los fluidos rápidamente. – Su pequeña putilla!-- pensó cada vez mas excitado.

Unto el dedo indice con decisión y le clavó la punta al carnoso ojete.

Eva respondió al roce del dedo se su padre , encabritandose con rabia . Como si aquella mínima resistencia fuera capaz de ello. Pobre niña, a la primera culetada el dedo de Paco se hundió hasta el nudillo, haciéndola berrear entrecortadamente.

Paco no la dejo recuperarse de la impresión, sujeto con la otra mano los riñones de su hija, empezando a meterle y sacarle el dedo del ojete. Era deliciosamente estrecho y caliente, tan estrecho por los continuos meneos de los músculos que no dejaban de agitarse. Casi sin descanso, el dedo comenzó a acelerar su entrada y salida.

Por fin su pequeñina se relajaba.

• Diossss que culete massss sabrosooo hijaaaa....! susurro excitado su padre.
• Mmmmfff, mmmmmffff ,mmmmmfff.... – gruñía Eva .

Con decisión, hundió otro dedo en el estrecho pasaje del culo de Eva, que reacciono tensándose ante la nueva invasión. Esta vez algo mas resignada, gruño durante un segundo , intentando levantar la cabeza.

• Esooo es Eva..., ves como puedes con dos dedosss.... espera....!-- el tercer dedo se clavo en su culo uniéndose al resto... , el pasaje ensanchándose para dar cabida a los dedos castigadores.

Paco sentía el rabo a punto de explotar ante el expectaculo del culo de su pequeña ensartado con tres dedos bien hondos. El culito empezaba a moverse al compás impuesto de su mano, con algo de reparo destapono el ojete de Eva , el hueco dejado por sus dedos seria suficiente...

El rabo palpitante apuntaba hacia el techo desde hacia demasiado, se sobo un par de veces engrasando la barra . Se paro detrás de ella , agarrando su nuca firmemente.

• Ahoraaa quietecitaaaa peque, o te doleraaa muchooo masss! . – advirtió Paco untándose la polla hasta lubrificarse el tronco.

Con ultimo gesto soltó su polla para dar un ligero roce al ojete , pringandolo de sus jugos, apunto el grueso cabezón en el tierno agujerillo un par de centímetros, la sedosa carne cedió arrancando el primer gemido e intento de escapada. El ojete apenas parecía alojar la gruesa seta, La diferencia de tamaños era tan enorme, que por un momento dudo.

Escuchaba los lloriqueos cada vez mas bajos de su hija, el sufrimiento de no saber donde estaba, sus malos modales, su terquedad, su carácter … Debía aprender, por las buenas o por las malas. Le dolió su ingratitud, era el momento de nivelar las cosas, medio empotrado en el culo de su hijita decidió sacarle la mordaza. Quería oírla sufrir.

Inclino su cuerpo un poco mas metiendole otro par de palmos de rabo , tensando los cachetes un instante. Taladrar aquel culo iba a ser de lo mas placentero, no sabia cuanto le quedaba para correrse , no mucho.

Eva al verse libre del pañuelo , sentía el culo ardiendo. El enorme rabo de su padre seguía quieto y ya sentía como si la rajase por dentro.

• Paraaaaa un poooocoooo Papaa, porrrr favooorrr, me dueeeeleee muchoooo. Te jurooo que sere bueeenaaaaaaa!--- gimoteo medio asfixiada.

Paco se apresuro a pasarle la mano que sujetaba su cintura por debajo hasta rozar el coño, pellizcando violentamente el clítoris de su hijita, rodeando con la otra mano su cintura collandola a su polla.

El dedo no dejaba de pellizcar , manoseando una y otra vez el botoncillo provocando a la pobre Eva los contoneos de su culo , encajándose la polla de Paco un par de centímetros mas.

La tenia medio clavada , enculandola palmo a palmo. La tierna carne de su ojete se abría como tierra húmeda, casi sin resistencia. Jadeo por el esfuerzo de no taladrarle hasta los huevos, asegurando su total sumisión a cada gritito lanzado.

Siempre peleando, giro su cabeza para aullar de dolor casi medio ida.

Suerte de su brazo sujetándola de la cintura, sino puede que hubiese caído al suelo desmayada.

• Auuuuuuuuuuuuuu, auuuuuuuuuuuu, coooomooooo dueeeleeeeeeeee Paaappaaaa!, paraaaa, me estas desgarrando las entrañaaaaasss!.
• Quietaaa mi niña! Si tus hermanas pequeñas pudieron , tu también. – aclaro Paco-- Ya esta bien dentro-- le mintió intentando calmarla-- ahora veras, que gustillo!.

No podría aguantar mucho mas, los pesados cojones empezaban a palpitarle y aun no la había penetrado totalmente. Siguió castigando el clítoris de su niña, hasta tenerla chillando cada vez mas seguido. La notaba a punto de correrse y cuando el ultimo grito se volvió una lamento larguísimo, clavo su cipote hasta los huevos.

Enterrado como estaba en su culo, pego un rugido ronco al notar a su padre encajado en su culo. Resollaba como en una carrera de fondo, no podía notar nada a su espalda. El seguía quieto sin decir nada. Eva dejo de pelear.

Su padre no podía evitar notar cada pliegue de culo apretándolo amorosamente. Intento no moverse para que su niña se habituara a tenerlo empotrado. Concentrado como nunca antes lo hiciera ,vio como su hija volvía su llorosa carita hacia él; Rendida.

Por fin se recostó sobre el cuerpo agotado de su hijita , sujetando sus hombros comenzó a joderla con delirio, el cuerpo culebreando rápidamente dentro y fuera , empujando con rabia. Los cojones balanceándose al compás de la riñonadas.

Eva gemía sin poder evitarlo, el dolor iba apagándose , dejándola agotada. Ya no peleaba , pero giro la cabeza a un lado para intentar ocultar sus gemidos, la cabeza de su padre estaba a un palmo de la suya.

• Siiii, siiii , Evaaaaa...., mmmm... vessss que placerrr cariñooo!-- susurro mientras mordía su labio obligandola a abrir su boca ante su lengua.

Se dejo follar con fuerza sin darse cuenta si quiera, meneando el culo al compás del rabo paterno. La tranca entraba y salia una y otra vez. Su hija comenzaba a gozarlo, ya sin resistencia.

Su polla salpicaba contra el culete de su peque, las lenguas moviéndose al lascivo compás desenfrenado.

Ya sin ninguna oposición, se lanzo a una merecida comida de lengua.

• Ayy nenaaa , como tragaaasss rabooooo.... ufffff, uffffff....
• Ahhhhhh, ahhhhhhh, ahhhhhhhhhh,.... Diooooossss queee gordaaaaaaa....! – se quejaba Eva .

Paco sintió como se le nublaba la vista del placer, sus cojones parecían latir fenetricamente . Oyó como su hijita volvía a gemir.

• No puedooooo maaassss! – aulló , corriéndose agotada sobre el pupitre.
• Siiii, siiiiiiii, ohhhhhhhh siiiiiiiiiiii, voyyyy a llenartee el culitoooooo peque.....!-- gruño Paco envistiendo hasta sentir el fogonazo de la eyaculación. ---Ahhhhhhhhhhh, ahhhhhhhhh, ahhhhhhhhhhhhhhhh.

El chorro de esperma baño su culo, vaciándose en una lenta riñonada. Se agarro con brío a las caderas de su hija mientras en varios empujones acabo descargándose en medio de bestiales gruñidos. Por fin, agotado y satisfecho , saco la polla con Ploooop sonoro desde cualquier rincón del cuchitril.

Dejando de lo mas saciado el culo de su hija.

Aun con su oído frente a su boca podía escuchar las respiraciones acompasadas, recuperando el aliento. Lamió con delicadeza el oído, liberando de su peso el cuerpo agotado de su hijita.

Estaba sudado, tan caliente como un hierro hirviendo. Contemplo por un momento el cuerpo medio desvanecido de su hija, aun el culo en pompa con el enorme agujero dejado por su polla, goteando su esperma.

Sabia que por fin, había entendido la lección.

Se acerco hasta el cuerpo agotado , la cara de su hija colorada por la pasión estaba medio apagada. Acaricio su pelo con amor, intentando espabilarla. Por fin , sus ojos se abrieron , enfocándolo algo confundida.

Paco masajeo los hombros a través de la camiseta, intentando relajar el tenso cuerpo de su hijita.

No escucho ninguna queja, nada que le impidiese continuar rozando sus manos hacia abajo hasta los riñones y volverlos a subir. Las delicadas manos llegaron al borde de la camiseta ,colándose bajo ella, rozando la suave piel hasta la fina tira del sujetador.

• Esta vez ...--susurro Paco, quiero verte la cara hija...--

Paco agarro su cintura y volteo el cuerpo justo hasta tenerla frente a él. Eva seguía conmocionada por la salvaje reacción. Sintió las manos de su padre levantando la camiseta por la cintura, justo hasta llegar al cuello. Pudo ver como la sudorosa cabeza de su padre se enterraba entre sus tetas, tironeando la tela de sus sujetadores.

Rápidamente desabrocho el cierre trasero, metiendo la mano por entre los tirantes y la carne tierna.

Los dedos comenzaron a acariciar sobando con ansias las teta derecha, pronto el pezón empezó a endurecerse levantándose decididamente. Ella seguía cada uno de sus movimientos, la boca abriéndose por primera vez soltando un delicioso gemido. --- Ummmfffff, ummmmfff, repetía Eva sin darse cuenta.

Se lanzo a buscar su lengua , lamiendo su labio y abriéndolo para morderlo y poder comerle la lengua.

Deliciosamente dulce, se abandonaba rendida a los lascivos besos .

• Sii cariño, – susurro contra el cuello – Rindete a mi..., esooo es...-- Quieres el rabo de Papa, verdad?-- mordió chupando el cuello de Eva.
• Nooo.. , noo seee...-- acabo confesando la aturdida niña.

Afianzándose entre los muslos abiertos de su hija , empezó a notar la excitación empalmando de nuevo su cansada polla.

• Vamos, no seas tímida pequeñina, confiesa que te mueres por tener mi rabo regando tus entrañas!-- murmuro mientras lamia el pezón tieso estirándolo.

Eva sintió como el rubor le subía hasta la raíz del pelo, giro su cuello intentando evitar las caricias.

• Mmm preciosa, no te sonrojes!. Puedo oler desde aquí tu coño caliente y mojado solo para mi!. – Se buena y pídeme que te folle hija!.--

Paco sabia de la tozudez de su hija pequeña, lo difícil que seria doblegarse totalmente. Acaricio suavemente la piel sudorosa de Eva , su boca se apresuro a sustituir su mano, adorando cada palmo de la joven piel de su niña.

Lamió hambriento los gordos pezones tiesos, mordisqueandolos , bañándolos en la saliva , excitándolos una y otra vez. Trago la teta , enterrando su cabeza en el delicioso surco entre ambos, alternando ambas tetas con el mismo delirio. Levantando de vez en cuando la vista, para ver el goce de Eva reflejado ya sin ningún pudor.

Sobando las tetas de su niña, desteto su boca de aquellos pezones duros como el acero , sus manos bajaron hasta posarse en su cintura, los aterciopelados muslos abiertos , sobando de nuevo su rabo a cada mínimo roce.

Paco sentía la sangre palpitandole de nuevo en la punta de la tranca, tiesa de nuevo por obra y milagro del coño juvenil de su hijita. El sabor salado del deseo en la punta de su lengua al iniciar la primera lenguetada en el coñito dolorido.

Eva sentió las manos de su padre forzándola a separar sus muslos sin que ella pudiese negarse, el aliento de su boca sobre su sensible coño, las yemas de su dedos moviéndose para separar sus labios vaginales, provocandole una serie de sacudidas sorprendentes a cada roce de su húmeda e hinchada carne.

Echo la cabeza atrás, sin saber como reaccionar al contoneo instintivo de sus caderas. Los dedos pellizcando dilatando su sensible clítoris haciéndola montar sin ningún tipo de miramiento la mano de su padre.

• Ufffff, uffffff, ufffffff,-- gemía alucinada mordiéndose los labios.
• Disfrutaaa peque! Ves como siiii!, mi cieloooo!-- dijo Paco contemplándola contoneándose al compás de su mano.

Eva no podía escuchar nada, solo se dejaba llevar, la forma en que su cuerpo respondía la dejaba indefensa, la mano trabajándola sin tregua, el efecto de notar la tibia y húmeda lengua moviéndose su abierto y sensible coño, la hizo soltar un bramido ensordecedor.

• Rrrrrrrrrrrrrrr, aulló Eva totalmente enloquecida, acompañando las caderas empujándose sobre la boca de su padre.

Paco sorbía, lamiendo y chupando el jugoso coño, tragando los fluidos que parecían derramarse como miel sobre su lengua. Levanto la cara un segundo , cada contoneo de culito lanzandola contra él . Supo por fin que había domado a la potranca cuando el quejido de su garganta le llego como un delicioso sonido celestial.

A Eva la lujuria la dejo rendida temblando como una hoja, pura y salvaje lascivia. Y lo peor era...., que quería mas.....

Su padre no tardo en atacar de nuevo bajando su cabeza atornillando su lengua al hinchado clítoris, haciéndola aullar de puro goce, ya no era dueña de su propio cuerpo. Paco beso el abultado botoncillo, retrocediendo para verla totalmente abierta , empujo dos de sus dedos sacándoselos enseguida. Acerco sus empapados dedos hasta su boca, siguiendo la reacción de su hijita al ver chupar con gusto los mojados dedos.

• Ricoooo, – totalmente satisfecho – coloco las cansadas piernas de su niña sobre sus hombros, apoyo el grueso cabezón contra la empapada entrada, metiendo el tremendo cabezón en la sedosa cueva .

El siseooo esta vez no fue de rechazo, tal como estaba empalado el empuje hacia sus entrañas resbalo como engrasada soltura, ensanchandola como siempre lo hacia.

Era tan tremendo , que le pareció un siglo el momento en que se hundió palmo a palmo, enterrando su tranca hasta tener sus cojones descansando sobre el lubricado coñito.

• Ayyyy Eva...., cuanta falta me hace tu coñoooo , hija mía! …. Tan estrechitooooo.... Uffff!-- gruño su padre , chupando hasta alargar de nuevo los pezones tiesos de Eva.
• Auuuuuuu, uuuuuuuuuuu, uffffffffffffffffffffffff-- jadeaba desenfrenada la niña.
• Tienes un coño ardiente, mi niña!!!. Jooooderrr como me aprieta el rabooooo, ufff!-- jadeo él. Necesitooo que toqueeess a Papaaa!-- murmuro Paco luchando desesperado con las atadas muñecas atadas de su hija, dejandola libre de tocarle.

Cuando el cable que le sujetaba las muñecas dolorosamente a la espalda acabo desenredado , la sangre volvió a circular de nuevo por sus brazos. Por su mente, paso la idea de empujarlo . Pero estaba demasiado llena de su dura carne. Se apoyo con fuerza a ambos lados del pupitre.

No sabia lo que le sucedía, excitada como estaba gimió devilmente al mínimo meneo de él.

Paco gozaba de lo lindo notando los músculos interiores de su vagina ciñendo firmemente su grueso cipote hasta arrancarle un grito de puro dolor.

• Ayyyyyyy nenaaaa, que gustazooooooo – bramo Paco disfrutando como un loco al comenzar a taladrar el estrecho chochete. – Tannnn tierrrnooooo mi niñaaaa, uffff, uffffff....!-- repetía envistiendo profundamente una y otra vez.

Eva no podía creerse lo que sentía, el calor creciendo a cada envestida, los gritos cada vez mas feroces de ambos , dejándose llevar por la lascivia su padre apretaba con rabia su teta a cada riñonada , los pulgares acariciando los tiesos pezones acompasando el mete-saca .

El rugido de su padre descargando el semen caliente la pillo al borde de su propio final, el caliente liquido bañaba sus entrañas a fogonazos. Le llego un ultimo chorro que pareció clavarse le hasta la matriz, acabando con su cuerpo rendido al tremendo placer.

Cuando pensó que todo había terminado, la cabeza medio desmayada a un costado, su padre medio derrumbado encima de ella, noto como la dureza de su polla no se bajaba. Seguía tieso como el acero, y sin poder abrir boca de asombro noto como su cuerpo se erguía de nuevo sobre ella.

Sus manos bajaron sus piernas hasta colocarlas anudadas detrás de su cintura, y se vio impulsada hacia arriba , justo hasta estar sentada sobre su tremenda barra.

La cara de Paco era todo un poema, y sin dejarla pronunciar palabra se lanzo a empalar profundamente el coño de su hija pequeña, haciéndola revotar encima de sus huevos , sus manos sujetaron con decisión el castigado culete, rozando el ojete aun mojado de la corrida , hurgando decididamente su dedo mientras la follaba rabiosamente.

• Auuuu, dioooos, ooohhhh dioooos, – jadeaba Eva a cada bajada y subida de rabo.

La levantaba hasta empalarla con fuerza a su rabo, comenzando a joderla hasta sentir el chasquido de las carnes ensordeciendo la tormenta exterior. Solo el chapoteo de los sudorosos cuerpos era lo bastante excitante para olvidarse del rugido exterior.

La ultima riñonada fue demasiado para Paco , y enterrando la cabeza entre el hueco del cuello de Eva se corrió como nunca antes los hiciera. Los chispazos de placer bailaban detrás de sus ojos, mientras se corría dentro de su niña.

• Que gozada de coño-- pensó acompasando su alterada respiración al los fuertes latidos de coño.

Medio desmadejada, solo pudo darse cuenta como la dejaban de nuevo sobre el escritorio apoyado contra la pared de chapa. Estaba medio muerta, la polla de su padre por fin saciada escurriéndose de su coño. Su padre la había follado hasta casi reventarla.

Le dolía cada palmo de su cuerpo, tanto que era un suplicio moverse un solo centímetro.

El rastro blanquecino de semen escurría por su pierna hacia abajo, agotada como estaba le dio igual,

• Dios mio niña, eres todo una fiera..., río su padre recuperando el aliento.-- Me has dejado seco!

Eva pudo ver, como se alejaba buscando algo en la oscuridad, cuando volvió a verle llevaba los calzoncillos de nuevo ,los pantalones húmedos en una mano, su falda arrugada en la otra.

• Vístete hija, dijo alcanzándole la falda-- Sera mejor, que volvamos a casa. Debemos recuperar todo el tiempo perdido-- aclaro guiñándole un ojo .

Estaba demasiado conmocionada para no obedecerlo, lentamente se bajo del pupitre , volviéndose a cubrir con la camiseta gastada , atándose de nuevo la falda.

Seguía desnuda bajo la ligera ropa, con la mirada hambrienta de su padre observando cada movimiento.

Recogió la mochila colgándola a su espalda, su padre conduciéndola cortesmente hacia la abertura exterior.

El viento amainaba un poco la fuerza de la lluvia, llegando junto a la verja medio agazapados.

Paco cerro de nuevo el candado, depositando la llave en el tope donde lo encontrara. Bendito escondite, se dijo-- , ambos subieron al coche en silencio. Desplazándose por las calles desiertas en la complicidad de un castigo muy , muy, muy placentero.