Las hijas rogando y el padre castigando. (6)

Ya lo dice el refran; La familia que folla unida, permanece unida. O no era asi?

Aparco el coche en silencio aun dándole vueltas a los que hacia unos segundos había sucedido. Puede que no fuera muy espabilado con aquello de la sensibilidad de las tías , pero sospechaba que Violeta estaba mas necesitada de lo que había pensado en un principio.

Solo se le ocurrió ser un poquito mas detallista y recogerla del curro aquella tarde. Al fin y al cabo lo de tomarse unas cañas con sus colegas podía hacerlo cualquier otro día, la sorprendería.

Y vaya si la sorprendió-- Sabia a la hora que ella salia de la biblioteca , solo era cuestión de presentarse por allí y quien sabe..., – Joder!, casi se le lanzo encima!-- Casi no le casi dio tiempo a abrir la boca y la tenia aplastando le aquellas magnificas tetas.

Y fue recordar aquellas esplendidos melones estrujándole contra el asiento que poco le falto para lanzarla en el asiento de atrás y hacerse una cubana entre sus enormes tetas. Cuando volvió a mirarle a la cara pensó que lo había pillado, pero no.

solo tenia esa mirada de perro abandonado con la que se paseaba todo el día por casa, Que deprimente.!

consiguió arrancar, escuchando su cháchara como siempre y contestando como pudo, pero seguía empalmado, el mono de mecánico a punto de estallar y la idiota ni se había dado cuenta.

  • Bueno, el se encargaría de espabilara.-- llevaba demasiado tiempo huyendo de su casa, era tiempo para estrechar las relaciones.-- pensó sonriendole bobamente.

no era una lumbrera pero , tantearía el terreno a la mas mínima oportunidad.

Porque, dios!-- Violeta necesitaba polla, una buena sesión de follar le bajaría los humos.

Con la idea en la cabeza subió corriendo los escalones hacia casa. Al entrar el ruido en la cocina le dijo que allí estaría.

  • Me voy a ducharrrr! – ahora salgo vale, se oyó decir en voz alta.-- Violeta oye, lavame este mono por favor, mañana viene la revisión y es el único decente que tengo.

Esta asomo la cabeza por la puerta, cuando lo oyó llamarla.

  • Dejalo aquí, anda!-- que tengo que calentar la comida.
  • Lo dejo encima del lavabo, vale?-- dijo gritando desde la ducha.-- te dejo la puerta abierta...

Violeta volvió a la cocina a preparar la mesa, oía el agua caer y como todos los días agarro la ropa sucia metiendola en la lavadora, por ultimo con todo preparado, se dirigió al cuarto de baño , abrió la puerta con cuidado, entrando casi de puntillas, el vapor casi lo cubría todo.

Pero allí en la ducha estaba Alberto, al principio no quiso mirar, pero la tentación pudo mas.

Sabia que Alberto se había convertido en un hombre, pero nada le advirtió del tremendo asombro al ver aquel esplendido cuerpo musculado, sus ojos bajaron sin dudarlo a un esplendido culo cubierto de jabón.

Trago saliva y se apresuro a agarrar el mono con prisa, mortificada por que la descubriera, no se dio cuenta como al levantar el mono, de sus bolsillos resbalaron las monedas sobre la alfombra.

Se arrodillo intentando recogerlas antes de que se diera cuenta, mirando de reojo como este se giraba en la ducha.

Lo miro mientras se enjabonaba la cabeza, y su boca se abrió aun mas al ver el enorme pene colgando entre las piernas , como si de una serpiente de pitón se tratase, no podía apartar la vista de la tremenda verga que parecía un enorme barra de carne .

Casi tropezando, recogió las monedas del suelo como pudo y salio corriendo hacia fuera, respirando por primera vez desde que entrara al baño.

Sentía que el vapor no solo le había humedecido el pelo , su ropa parecía pegarse provocandole escalofríos que no eran debidos al frío.

Se apresuro hacia su cuarto despojándose de toda la ropa, y secándose con la gruesa toalla , sentía la piel tan sensible que el roce la ponía nerviosa y torpe.

Se vistió con su viejo vestido veraniego ancho y sin forma pero horrendamente cómodo y se quito cualquier resto de humedad del cuerpo.

Cuando salia de nuevo por el pasillo, vio a Eva avanzando casi corriendo hacia la cocina, parecía algo nerviosa, justo detrás de ella Maria aparecía algo mas sonrojada , la rutina de siempre.

Todos se sentaron a mesa y comenzaron a comer, al principio las mellizas estuvieron hablando de su día de clase en el colegio, poco a poco empezaron a desgranarse lo sucedido durante la mañana.

Le alegro ver como Papa escuchaba atentamente cada una de las palabras de las chicas, Maria parecía estar nerviosa, y le recordó a su padre todo lo que había estudiado aquella mañana.

  • Y tu Eva,. Has estudiado algo?-- pregunto violeta.
  • Humm, si.., – los etruscos dijo levantando la mirada del plato y desviando la vista un instante.
  • Seguro...-- volvió a preguntar violeta-- mira que tu sola, no se yo....
  • Si hija, me he encargado que lo hiciera a fondo.

Vamos, que la he tenido que supervisar yo. Claro que, yo soy algo mas duro que en el cole, verdad? * Si...,-- susurro Eva. * Buenoo si has aprendido algo mas, mejor para ti. Espero que sigas así las 2 semanas que te quedan castigada en casa.-- replico Violeta-- Al final, va a resultar que va servirte de algo estar un poquito mas controlada.

Todos vieron como Eva se ruborizaba al oír las palabras de su hermana mayor, se miraron unos a otros algo extrañados, pues sabían del carácter explosivo de la pequeña tirana. Lo realmente asombroso era ver que esta no tenia una de aquellas frases cortantes a los que los tenia acostumbrados.

  • Tu hermana esta cambiando Violeta, ha entendido que el camino que llevaba no era el correcto, y... bueno, estoy dispuesto a enseñarle la larga ruta hacia una vida mas disciplinada y feliz-- dijo Paco dejando el tenedor en la mesa. – Verdad cariño?
  • Buenoo... yo, yo.... dijo intentando responderle. Sintió que era el momento de confesarlo todo, de acusarle delante de todos, de desenmascarar al monstruo... , pero antes de poder decir una sola palabra mas noto como un pie subía por la pernera de su leggin, hasta quedarse quieto en su coño mojado por el semen de su padre que seguía mojandole acusadoramente y comenzó a trazar un lento sobeteo nada molesto.

Tuvo que ahogar un grito, y apenas se movió cuando este aumento el ritmo, levanto los ojos para ver como su padre la desafiaba a decir algo mas.

  • Yoooo...., no se..., a lo mejor... debería estudiar en el comedor con Maria...., consiguió pronunciar.
  • Tu que dices, papa?-- pregunto violeta. Puede que tenga razón?
  • Depende hija, ya no recuerdas lo mentirosa y manipuladora que puede ser? No te preocupes yo las vigilare bien de cerca, te lo aseguro.

Os he dejado demasiado tiempo de lado, y bueno... es hora de que vuelva a tirar del carro , no? * En serio?,-- hablo Alberto,-- Y que hay de la empresa, cuando volverás al trabajo? – Ya sabes...

ese sitio infernal que llamas trabajo! * Bueno, si las cosas siguen así, puede que en un par de semanas cuando todo esto haya pasado me reincorporare de nuevo. Ya hace demasiado , que cargas con mi responsabilidades. * Vayaaa.... , pues si resulta que estas recuperado..., Seguro que podrás con todo tu solo? * Seguro hijo, ademas. Tengo la seguridad que cuento con la mejor de las familias del mundo, se que puedo contar con todos vosotros, verdad?-- dijo alargando los brazos entrelazando las manos. – Mientras estemos unidos, fuertes como una piña, nadie podrá con nosotros.

Poco a poco la cocina fue vaciándose, de cada uno de los miembros de la familia. Las mellizas se lanzaron hacia la puerta con sus mochilas cargadas , entre sonrisitas y chillidos , desapareciendo hacia otra tarde mas de aburridas clases, Maria parecía haber decidido pasar la tarde descansando en su habitación, y fue hacia allí donde Violeta vio dirigirse a su padre.

  • Que atento era, siempre tan bueno...,-- Violeta tenia que vaciar la lavadora, y dejarla dispuesta en el tendedero antes de marcharse.

No entendía, porque las prisas de su hermano Alberto, para que tanta ducha, si iba a pringarse de nuevo con grasa esa misma tarde...

Con la cabeza ocupada en un millón de cosas por hacer, siguió colgando la ropa sumida en sus pensamientos cuando un suave roce en su oreja le hizo sentir un escalofrió de arriba a abajo.

  • Te ha gustado, lo que has visto antes?-- pregunto Alberto rozando descaradamente su entrepierna con el culo de su hermana mayor.
  • Quee... dices.., antes, antes cuando?-- contesto Violeta cada vez mas nerviosa.
  • Ya sabes, en el baño. No pasa nada... no es un crimen echar un vistacillo!-- ya sabes lo que te digo no?
  • Pues... noooo, nooo seee.-- dijo Violeta colgando la ropa como si la vida le fuera en ello.

Alberto podía notar la fina telilla del vestido calentarse por el continuo roce de su polla , ya lo bastante tiesa para levantar la falda por donde sobaba lentamente.

  • No? En serio..., no te ha gustado lo que has visto, venga, no seas mentirosilla?-- la reto dando le un primer topetazo algo mas fuerte , agarrándole de la cintura dispuesto a no perder la postura, en continuo frotamiento.
  • Oyeee! Que soy tu hermana... guarrrooo! Intento decirle... , pero sin mover un solo musculo para que se alejara, sin moverse un palmo de donde estaba ,alli parada sin dejar de sobarle con aquella cosa dura que seguía rozándole el culo cada vez mas rápido.
  • Ya..., pero digo yo que también eres una tía, no? Y vamos... una tía buenísima..., mmmm?-- comenzó a susurrarle al oído.
  • No se... que dices... yo no soy así...., ufffff....! dijo sujetándose con las manos a dos de las cuerdas del tendedero.
  • Mmmm, pues no sabes lo que te pierdesss... hermanita, mmm dijo levantando definitivamente la fea tela del vestido y dejándola en bragas allí en medio de la cocina.-- Si aflojaras un poco, digo yo... así.-- su mano empezó a recorrer la cadera hasta bajar por el cachete del culo y enterrarse dentro su pelambrera, comenzando a trabajarle el clítoris con una mano, acomodando el ritmo del magreo con el cada vez mas rápido sobeteo de su rabo sobre la ropa.
  • Nooooo, lo hagaaaas...., agggggg, agggggggg, aggggggggg, noo puede serrr soy tu hermana.... por diooossss, agggggg, paraaaa , por favor paraaaaa.
  • Así que... , quieres que pare...., que deje de hacer esto..., y comenzó a meterle un dedo con furia dentro del coño lo suficiente mojado para deslizarle arriba y abajo mas rápido. Torturándola hasta hacer que retorciera su cintura hacia atrás en busca de la liberación. – Venga, yaaa acabamosss, un poquito mas...., esoooo essss , asiii , siiii, llenamee la mano de tu cremaaa violeta...., siiii, asiiiiii , correteeeee para miiiii.
  • Aggggg, aggggggg, agggggg , un ultimo espasmo la recorrió de arriba a abajo como un rayo, y sintió como las piernas se le aflojaban hasta casi caerse allí en el suelo, la mano de Alberto volvió a taparle con la braga , bajándole el vestido.

Casi no podía respirar, mortificada por la grosería de su hermano, intento girarse para darle un bofetón pero allí no había nadie, se toco la cara y se apresuro a mojarla , se sentía acalorada a punto de desmayarse, con las piernas tambaleándose se dirigió a su cuarto y se vistió para salir de nuevo al trabajo, casi cuando salia, no pudo de dejar de notar el roce constante de sus bragas mojadas a cada paso hacia la calle.

Alberto se merecía una bronca monumental, vaya si lo merecía! – acalorada , salio a la calle dispuesta a olvidar lo que había sucedido en la cocina de su casa.

Tenia que salir de casa antes que Violeta reaccionara, sabia de sobras como se las gastaba cuando se enfurecía.

Pero por nada del mundo se hubiera perdido la corrida de su hermana, menuda hembra estaba hecha. Un ligero sobeteo y ya la tenia dispuesta a mil, si no hubiera sido por la hora y el sitio, se la habría follado sin el menor remordimiento.

Pero tiempo al tiempo, ahora que sabia lo caliente que era , solo era cuestión de tiempo encontrar el sitio y el momento. Joder, pensó-- si se había corrido en el mono del garaje como un chaval de quince años. Puede que protestara un poco, pero..., vaya si había respondido... , si la tenia allí bien dispuesta que solo el miedo de ser pillado por alguien le hizo largarse antes de que la liase bien gorda.

La conocía demasiado, la santurrona de Violeta , pero menuda hembra para joder tenia en su casa. No volvería a aburrirse nunca.

Con esta idea en mente condujo incomodo hacia el taller, tendría el tiempo justo de cambiarse de mono , pero la corrida merecía la pena. Estaba deseando volver a casa para ver la reacción de su hermana, seguro que le abroncaría , pero nunca delante de todos...., eso de ser una familia, Jaaaaaa!.

Mejor que le echara la bronca en su cuarto, pensó. Bien tarde, recién duchado y con la polla bien dispuesta, pensó.

  • Eso es! – esta tarde tomare unas cañitas con los colegas-- puede que llegue bastante tarde..., pero conociendo como conocía a su hermanita, allí lo esperaría con la escopeta cargada...-- Jaaaa!, jaaaaa.! El si la esperaría con el fusil bien preparado para darle guerra.

A ser posible toda la nochee..., mmmm , siiii, ya tenia ganas de acabar la jornada...,

Desapareció tras la esquina, dejando el hogar familiar sumido en el silencio. Todos habían vuelto a sus trabajos, y la casa permanecía en un silencio sepulcral. Eva había desaparecido en su cuarto, sentada entre sus libros , subrayando un sinfín de frases , tomando apuntes.

Así la había dejado Paco, cuando ojeo desde la puerta , la actitud de su pequeñina, no era cuestión de dejarla olvidar lo que le esperaba.

  • Así me gusta, dentro de dos horas y media podrás merendar con tu hermana. – te dejo para que sigas estudiando, y que sea en serio, eh?
  • Sii..., vale...-- respondió desde la silla.
  • Voy a sentarme en mi butaca, y no quiero sentir ningún tipo de ruido o jaleo , entendido?

Asintió con la cabeza , Paco cerro la puerta y se dirigió a la habitación de Maria, entro en silencio intentando no distraerla de su libro.

  • Hola preciosa, como sigues hoy?-- pregunto dándole un besito en la mejilla.
  • Bienn..., ya me encuentro mejor..., mira ya casi he terminado con la lección de hoy.
  • Así me gusta, preciosa!, haz que me sienta bien orgulloso. – dijo saliendo hacia la puerta.
  • Luego si terminas pronto, te daré el masa jito, vale?-- pregunto Paco.
  • Oh siii..., vale? Vendrás aquí , o me lo darás en el salón Papa?-- pregunto curiosa Maria.
  • Mejor aquí, hija. Te podrás estirar mejor! Eh?, tu solo saca la cabeza por el comedor y ven a buscarme, que llevare el mentol para las friegas.

Cerro la puerta, dirigiéndose hacia el salón, estaba cansado, tanto trajín en solo dos días le tenia algo cansado, pero nada era mejor para sus fuerzas. Pronto volvería a estar totalmente en forma, sus niñas eran la fuente de su rejuvenecimiento. Se recostó en su vieja butaca , y por primera vez en dos años se durmió plácidamente.

No debieron pasar mas de 50 minutos cuando despertó tranquilamente de la siesta, se dirigió a la cocina y bebió un sorbo de agua. Espero otros diez minutos mas,preparando el tarro de mentol secretamente guardado en la nevera.

Cuando pasaban casi una hora desde que despertara, la cabeza de Maria asomo por el salón.

  • He terminado Papa, puedes venir ya si quieres! .
  • Claro, dijo levantándose de un salto, aya vamos, venga!

Juntos avanzaron hacia el cuarto compartido de Maria y las mellizas, entraron intentando no hacer ruido .Paco por ultimo giro el pestillo y se preparo abriendo el tarro sobre la cama.

  • Venga, ven para aquí..., esos pulmones necesitan su friega.-- unto las manos en una espesa crema mentolada esperando el acercamiento de su hija.

Maria seguía dándole la espalda mientras se desabotonaba la camisa hasta quedarse en sujetador, y sentarse justo en frente de su padre. Mirándolo atenta a cualquier gesto.

Paco estendio la fría crema por la clavícula de su hija, en fuertes movimientos, arrancando pequeños gemidos al paso de sus manos.

  • Ufff, que fría esta...,dijo castañeando los dientes....

Paco siguió masajeando las clavículas , hasta que el roce de su dedos deslizo la tira de los sujetadores hacia abajo, y comenzó a bajar con el sus palmas, primero con lentitud siguió el contorno de la tela que cubría la tetas, para en un ágil movimiento deslizar también abajo, dejando los imponentes pezones tiesos por la fría crema a escasos palmos de su mano.

Este estudio la cara de su hija, medio abandonada al masaje que le estaba dando, preguntándole.

  • Te gusta como lo hago?-- sus manos empezaron a sobar la teta a conciencia, amasando una y otra vez hasta arrancar el primer gritito de gusto de su niña.
  • Ummmm, ummmm, siiii me gusta muchoooo, sigueee, por favorr...
  • Claro cariño..., así verdad?, su otra mano agarro la otra teta e imito el magreo que le prodigaba cada vez mas rápido.

Las tetas se endurecian en sus manos a cada manoseo, y a Paco se le hacia la boca agua intentando averiguar el sabor que tendrían. * Mmmmm, mmmmmmm, mmmmmmmmm, gemía Maria bajito. * Esta bien mi niña, no tienes frío..., pregunto astutamente Paco, tienes la piel un pelin azul, deja que te de un poquito de aliento, así, una bocanadita de aire calentito.

Empezó a soplar su aliento sobre las tetas de su hija, que al sentir el calor se relajo aun mas.

  • O si, sii..., que calorcitooo... , que bienn Papaaa...
  • espera cariño que tus pezoncillos también están azulillos, dijo inclinándose y soplando como si las velas de una tarta se tratara.-- sera mejor que te pongas al borde de la cama hija,-- así estaremos un poco mas cómodos...

Maria abrió los ojos al oír a su padre detenerse y pudo ver como este se levantaba de la cama, sentía un gustillo bulliendole por todos lados, el calor seguía allí donde las manos de Papa habían tocado la piel sensible y fría. No quería dejar de sentirlo, era lo justo, llevaba esperando todo el día y ahora lo necesitaba.

No sabia muy bien que, pero le gustaba sentir el cuerpo ardiendo de aquel calor que hacia que le picase el chochete como nunca, y le daba algo de apuro que su padre se diera cuenta. Tenia ganas de rascarse, cada vez mas, ardía al sentir la picazón cada vez mas fuerte...

Por eso cuando escucho la voz de Papa, le obedeció como siempre, el sabia lo que le convenía, nada que viniese de él estaría mal, es mas...-- pensó , todo lo hace por mi bien, no?.-- Podía estar descansando y esta aquí ayudándome--.

De esa manera se sentó hacia en uno de los laterales de la cama, deseando que siguiera dándole aquel fantástico masaje tan delicioso.

Vio como agarraba varios almohadones de la cama de las mellizas y se dirigía con ellos en las manos, los dejo justo a sus pies.

  • Así esta mejor..., y casi al momento se arrodillo encima de ellos, – así de rodillas la miraba sonriente cuando le dijo.-- sera mejor que abras las piernas hija, así podre colocarme mejor para seguir con el masaje-- venga! No quiero que te enfríes...
  • Claro Papa,-- Dijo Maria-- abriendo las piernas ,deslizando la falda de lana unos centímetros arriba.-- Así esta bien?-- pregunto ingenuamente-.
  • Siii... eso es , muy bien niñaaa... asiii, que suaves son tus muslitos mi niña... , tan tiernos....-murmuro en un susurro.-- acompañando la mano unos centímetros arriba de donde la falda se había subido.

Paco observo a su niña , como cerraba los ojos seguramente aislada en el gustillo que sin duda empezaba a sentir, era una hembra caliente, lo sabia.

Y era cuestión de tiempo y paciencia, comenzó a soplar de nuevo sobre los pezones . El temblor lo animo un poco mas.

  • Sigues con frío, verdad?-- pregunto Paco.-- Papa va a darte un poquito mas de calor, mi niña. Veras que agustito. Y doblando el cuello se lanzo a lamer el pezón derecho en un lameton pausado, atendiendo las reacciones de Maria, que sin saber como se ofreció echándose hacia delante.

El siguió lamiendo como si de un jugoso helado de menta brotase de aquellas tetas solo para él. Lengueteo sobre el pezón hasta hacer que Maria se agitase nerviosa, vio el momento.

Comenzó a morder teta con decisión, atornillando la lengua en la aureola , chupando hasta estirar el pezón , bebiendo como si de un biberón se tratase.

Siguió mamando de la teta de Maria, hasta que noto como su mano lo agarraba por el pelo acercándolo mas y mas.

  • Mmmmfff, mmmfff, mmmmmfff, mmmmmmmmmmfffff, uuffffffff. – susurraba Eva cada vez mas fuerte.

Paco cambio de teta , arrancándole otra serie de jadeos que le hacían sospechar lo encharcado que tendría el coño, pero prefirió tenerla a punto de caramelo, siguió mamando mordiendo y chupando como si la vida le fuera en ello, su lengua no paraba de enloquecer a la pobre Maria, que se dejaba hacer. Y es que paco que ya tenia una erección considerable, sentía que era el momento para avanzar a mas, tenia la cara hundida entre los tremendos melones de su niña , dándose un banquete cuando Maria aparto su cabeza con la mano, destetandolo como un corderillo.

  • Que pasa mi niña, dejo de hacerte esto.... ? Pregunto Paco mirándola de nuevo a los ojos.

Maria estaba acalorada, pero lo miraba con una preocupación que antes no parecía sufrir.

  • Es que..., – pronuncio Maria.
  • Si? dime. – continuo Paco.
  • Tengo ganas de ir al lavabo..., me hago pis...,
  • Ahora hija mía..., no puedes aguantarte?-- pregunto con voz inocente.
  • No se..., siento que..., que..., – susurro sonrojada como la grana.-- Me pica muchoooo....,
  • Te pica mucho...-- repitió sonriéndose el padre-- Dejame ver... dijo levantando la falda hasta dejar al aire las braguillas azules .
  • Nooo..., intento baja Maria-- me da corte..., no quiero que... me veas ahi...
  • Porque hija..., si me dices donde te pica Papa podrá rascarte y se acabo... , no?
  • No se...., es que... siento que me he echo pipi, y no quiero que me veas así....
  • Ay hija, soy tu padre, a mi me lo puedes contar todo..., no pienso echarme para atrás, crees que te haría pasar el apuro si te ayudo ? – Veré si te sigue picando, y bueno limpiaremos lo que tengas de sucio , eh? Dijo guiñandole el ojo.

Antes de que esta volviera a pensárselo , Paco se lanzo a ello de cabeza, debía ser cuidadoso pues de ello dependía , las posteriores folladas que iba a prodigarle a Maria.

No podía creer que su hija fuese tan simple, pero de sus niñas era la que siempre vivía con la cabeza en las nubes, la soñadora .

Siempre tenia un libro entre sus brazos, y aunque era extremadamente linda su fragilidad la aisló en una burbuja ajena a lo que los demás daban por supuesto, al mundo.

Aquí estaba él , su maestro , había llegado el momento en que la bella durmiente despertara, el se encargaría de ello, solo que su beso no la despertaría del sueño.

Su lengua se encargaría de despertarla al sexo.

Movió la mano hasta las braguillas azules hasta dejar la palma extendida sobre ella, constantemente observando las reacciones de su hija, algo tensa al notar la mano allí abajo.

Primero comenzó un suave roce, que le dejo claro lo mojada que debía haberla dejado pues su mano se lleno del jugo impregnado solo un instante antes.

  • Te pica aquí, cariño? – manoseo lentamente como un gatito inquieto arriba y abajo--
  • Siii...-- dijo intentando apartar la mano de su padre
  • Dejame... vess, esta un poco mojadito... , pero... espera a ver si esto te alivia un poquito el picor.

Comenzó a usar dos dedos para frotar la tela arriba y abajo , hasta dar con un capullito lo bastante considerable para sobresalir de la tela húmeda. Siguió meneando los dedos hasta que Maria aparto la mano que lo había detenido en un principio y comenzó a gemir al compás que marcaban sus dedos.

Allí de rodillas, sentía como la polla también se le ponía tiesa al ver como acompañaba impulsiva mente sus caderas con la fricción de su coño. Sabia que el final se acercaba, y sin darle a tiempo a quejarse aparto la braguita , dejándola con el coño al aire goteando el dulce néctar que ya empapaban sus dedos.

Esta no se enteraba , echada la cabeza hacia atrás se dejaba llevar como si fuero lo mas habitual del mundo.

  • Te pica mas, verdad? – voy a rascarte un poquito mas, pero...
  • Mmmmm, mmmmmm, mmmmfffff, Queeeee?
  • Tendré que secar todo esto..., porque espera tengo una idea...., echate de espaldas sobre la cama..., así...

Maria se tumbo sobre la cama , mientras su coño abierto seguía desnudo calando la colcha. Violeta la regañaría-- pensó, le diría si era una cría de pañales. Lo sabia.

Pero todo pensamiento que tuviera salio volando de su cabeza cuando volvió a sentir los dedos de Papa volando mas y mas rápidos sobre su coño.

Era como un volcán , el ardor la llenaba y se moría por algo que no lograba entender.

Paco siguió castigando el clítoris de su hija hasta hundir los dedos dentro del coño y comenzar a imitar el ritmo del folleteo, pronto tuvo a su niña siguiendo las sacudidas de su dedos y se lanzo de lleno , hundiendo su lengua en la sabrosa vagina.

El primer aullido lo agrado hasta hacer aumentar el ritmo de sus dedos, la boca se le llenaba del jugo de su niña hasta gotearle por la comisura de la boca.

Pronto estaría casi a punto, lo notaba... y la torturo clavandole otro dedo mas , la glotonería con la que tragaba sus dedos ya la dejo al borde.

Levanto los ojos para ver a su hija morder la colcha ahogando el grito que sin duda estaba deseando gritar, y retorció su lengua una vez mas hasta sentir como la crema inundaba su boca, los espasmos de Maria eran bestiales y Paco no dejo nada por tragar.

Trago y trago como un hombre sediento en el desierto, era un manjar sabroso como nunca antes había probado.

  • La primera comida de coño de mi niña, – pensó orgulloso.

El estaba igual de cachondo, pero debía ser prudente, follársela era lo que mas quería , pero su hija era algo mas delicada que el resto.

Levanto la cabeza insatisfecho con su ereccion sobresaliendo descaradamente complacido por la respuesta de su pequeña Maria.

Esta respiraba aun aceleradamente, ajena al repaso que su padre la estaba dando.

Que hombre con sangre en las venas no se correría con una mujer así, – pensó, allí estaba aun con las piernas abiertas , las bragas aun corridas y el coño chorreando de babas y jugos, las tetas apuntando al techo acusadoramente.

Y el sobándose la polla sobre los pantalones, contemplando semejante espectáculo.

Era fuerte, pero no tanto.

Miro el despertador de la mesilla, solo habían pasado 35 minutos, hasta que por finn Maria empezó a moverse, poco a poco su mano bajo hasta su falda bajándola hasta las rodillas. Ni se dio cuenta que aun llevaba las bragas medio corridas, se levanto hasta estar de nuevo en la cama y lo miro a los ojos.

  • Ya esta, verdad?-- ya paso todo... a que si. – le pregunto el padre.

Ella aun acalorada buscaba los sujetadores y se los puso en silencio mientras contestaba.

  • Oh siii..., pero...
  • No me digas que no te encuentras mucho mejor-- reto Paco.
  • Siiiii, muchooo.... es comooo estar en el séptimo cielo...-- rió Maria.
  • A que si, verdad?-- ya sabia yo, tu hazme caso... y puede que otro día...
  • Si?-- pregunto curiosa Maria-
  • Pues que te enseñe algo mejor, que te parece?
  • Esta noche?-- pregunto impaciente Maria.
  • Espera , espera, vas muy rápido..., tu padre ya es algo mayor y debe recuperar algo de fuerzas. Entonces si que te dolerá algo mas!- dijo pellizcándole la nariz al sentarse de nuevo junto a ella.
  • Bueno... , dolerá mucho?--pregunto curiosa Maria-- Si se siente tan agustito … pues no sera tan malo no?
  • Te dolerá un poquito al principio..., pero luego... es cien mil veces mejor... la animo...

Maria lo abrazo como solía hacer desde que era una niña y se sentaba en sus rodilla a que le contase cuentos de princesas.

  • Te adoro Papa!-- dijo dándole el beso acostumbrado en la mejilla.

Paco aprovecho ese instante para girar la cara y besar la boca de su hija por primera vez, sus labios carnosos se encontraron hasta que la insistente lengua abrió la boca de Maria y lamió su lengua por primera vez.

Esta se tenso un segundo, cosa que aprovecho Paco para lamer y succionar hasta tenerla en su poder.

Era una mujer sedienta de cariño, fogosa como su pequeña Eva y el se encargaría de meterla en su cama.

Por lo pronto podía darle su primera lección practica, su polla pedía guerra y puesto que no cataría coño hasta pasado un día o dos, que mejor que una buena paja...

Si.., pensó – era el momento propicio para iniciar a su pequeña Maria en darle masajes , puede que una buena mamada le pasara las ganas de merendar.

Que mejor merienda que la leche caliente......