Las hijas rogando y el padre castigando. (15.)

Aturdido por el sonido del timbre del teléfono abrió los ojos con lentitud, se volteo con algo de torpeza, Eva seguía acurrucada con su polla ajustada en su coño, beso su hombro con delicadeza, saliendo de su raja con el pesar de un condenado a trabajos forzados.

Entorno los ojos cansado, ni siquiera deberían ser las 6:30 de la mañana. Quien cojones llama a esas horas?-- se puso los calzoncillos con rapidez saliendo con prisas del calor de las entrañas de su pequeña , anudándose la bata salio medio aturdido al pasillo donde el teléfono martilleaba sin cesar su cansada cabeza.

• Ya va..., ya va...-- bostezo hablando en el desierto pasillo-- Siiii.... digameee?-- hablo aun adormecido.

Conforme la voz al otro lado del teléfono empezó a hablarle, los ojos fueron inmediatamente abriéndose incrédulos. Para cuando cuelga el auricular, los ojos empiezan a lagrimearle.

Se restriega la cara incrédulo por la noticia, el sueño definitivamente olvidado. Casi como en trance se acerca a la cocina , desplomándose sobre una de las sillas. Permanece callado intentando hacerse con la idea.

Van pasando las horas, y la luz de la mañana empieza a recorrer las paredes de la cocina, todo vuelve a ponerse en marcha una vez mas.

Para cuando Violeta lo descubre, aun esta con la mirada perdida . Preocupada se aproxima para preguntarle.

• Papa..., cuanto tiempo llevas aquí.?-- Estas bien.?
• Uf, Violeta eres tu. – parpadea cansado-- Veo que ya es de día.-- He de ponerme en marcha inmediatamente.-- termina mirando el reloj de la pared.
• Espera, espera....-- Que ha pasado?-- intenta detener al padre preocupada.
• Llamaron hace cosa de un par de horas, – era de la residencia-- Tu abuelo murió anoche-- un aneurisma. Tus tía me ha llamado para ir juntos a la residencia y arreglar todo los papeleos.--
• Lo siento Papa...., – lo abrazo con ternura-- se cuanto querías a tu padre!--
• Bueenooo es ley de vida, pero eso no impide que no me duela, pequeña. He de irme cuanto antes, si me apuro puedo llegar a Cartagena en unas 4 horas.
• Claro, deshizo el abrazo Violeta.-

Paco abrió la puerta de su dormitorio con cuidado, abrió el armario y metió un par de pantalones y camisas dentro, agarro un cepillo de dientes cerrando la cremallera de su maleta casi en 5 minutos, por ultimo mirando sobre el hombro se ducho procurando despejar su agotada mente.

Si se paraba solo para comer y echar gasolina una vez , llegaría a Cartagena cerca del mediodía. Sin duda, su hermana estaría en el tanatorio municipal.

Se peino de cualquier manera y apretó el paso con la maleta a cuestas. Sin mirar atrás salio del dormitorio procurando no hacer ruido. Al final , solo su preciosa Violeta lo despediría. Aproximándose preocupada, se abrazo dulcemente hasta reconfortarlo.

• Que tengas buen viaje, papa. Llamanos cuando llegues , ya sabes.... no dejare de preocuparme hasta que lo hagas.-- lo beso rozando sus lengua con ternura.
• Mmmmm , hija . Te adoro...-- continuo enroscando su lengua sin pausa.--
• Mmmmmffff.... papa enrojeció Violeta al separarse de la boca de su padre.--- Vuelve pronto, y ….-- sobo la dura polla --- recuerdanos...--- se arrodillo hasta tener su cara a un palmo de la erección paterna.

Froto la polla sobre la tela, levantando los ojos y mirándolo. Paco , sabia muy bien que aquello le aliviaría algo de tensión y coloboro moviendo las caderas hacia delante. Violeta gruño hambrienta, bajando la cremallera y sacando la pesada tranca fuera.

Se relamió ansiosa , comenzando a sobar la barra con ganas resbalando arriba y abajo .

• Esooo es cariño..., va come la polla de papa.! . – murmuro sujetando un mechón suelto .

Violeta abrió la boca y lamió la gruesa seta punteando la lengua en el agujerito una y otra vez. El sabor a macho de su padre le llenaba la boca mas y mas cuando empezó a tragar el cipote paterno, la sentía golpear hasta la campanilla hasta casi ahogarla, las mandíbulas doloridas por el tremendo esfuerzo, sonrió satisfecha al ver como su padre la follaba la boca totalmente entregado.

Aguanto la arcada que casi la ahogaba y sujetándole los cojones con una mano castigando las duras bolsas mientras se ahogaba con la tranca casi encajada. Paco disfruto apurando las caderas hacia delante y hacia atrás.

• Ufffff, ufffff.... nena! , cada día lo haces mejor.... ufffff, uffff, uffff. Yaaaa no aguantooo maaas....-- dijo medio ahogándose.

Violeta empujo la polla cada vez mas rápido, mamando mas y mas duro. Noto como se tensaba y empezaba a vibrar en su garganta. El aullido de su padre al empujar corriéndose la dejo ahogándose al notar la descarga de semen llenandole la garganta, trago algo indecisa, el sabor amargo del esperma volvió a golpearla al intentar tragar otro interminable caño de la pegajosa leche.

Apretó la boca mamando de su semilla hasta dejarlo seco.

Justo cuando la polla se le escurrió entre los labios ella lo miro a los ojos , dedicándole una sonrisa entrañable.

Aggggggggghhhh, gracias hija..., acabo por levantarla del suelo con delicadeza. --- Ahora si que me voy tranquilo, y en ultimo lengueteo de bocas se despidió de su hija mayor.

Cuando la puerta acabo por cerrarse, Violeta se contemplo en el reflejo del espejo del recibidor y llevándose un dedo a la comisura de la boca se limpio la insignificante gota de semen. Su jornada diaria comenzaba de una manera excitante, puede que después de todo estuviera deseando ver a Pascual y probar de nuevo el sabor de su semen, así podría comparar sabores, sonriéndose se dirigió a la rutinaria y excitante jornada.

Paco condujo según su propio itinerario marcado, primero paro para comer un insípido bocadillo cerca de Orihuela , llenando el deposito de su todo terreno en apenas 40 minutos de descanso, estiro las piernas mientras charlaba con su hermana la hora aproximada en que llegaría.

Para cuando salio del área de servicio, los recuerdos de su viejo padre se agolparon en su cabeza , aun teniendo 93 años conservaba estupendamente su capacidad de razonar , solo sus dañadas piernas eran la única evidencia de su pelea con la vejez.-- Llevaba cerca de 6 años viviendo en la residencia , donde voluntariamente había ingresado.

Su hermana había sido tajante en lo de continuar solo en la vieja casa a las afueras, se lo llevo a vivir con ellos. Discutieron como siempre hacían pero Remedios gano la batalla, como podía dejarlo en la vieja casa solo...., allí en medio del campo podía pasar le algo y no se enterarían . Tampoco resulto todo lo bien que se esperaba, la convivencia con el marido de Remedios no era todo lo deseable que pudiera ser. A si que pensó en descansar sus huesos en un lugar donde su viejo camarada Ramirez pasaba sus últimos días.

Consiguieron vender la casa a una pareja de jubilados alemanes , dinero que sirvió para que Eladio pudiera ingresar en una residencia privada.

El refunfuño algo, pero al final reconoció la evidencia e ingreso en el mismo centro donde otros dos viejos camaradas pasaban sus últimos días.

É l solía pasarse, un par de veces al mes a visitarlo. Le llevaba puros de contrabando y charlaban de sus múltiples viajes por alta mar. Siendo marino mercante, no pasaba mucho tiempo en casa por lo que el millar de anécdotas se acumulaban en eternas batallitas de una juventud muy lejana.

Llego cansado al caserón , aparcando junto a los setos,Su hermana lo estaba esperando, ambos se abrazaron en un cálido apretón, entrando del brazo en la restaurada casa.

• Como ha sido....?-- pregunto sentándose en el comedor de la entrada.
• según las auxiliares, ayer se acostó como otro día cualquiera, y simplemente no se despertó...- Ay Paco, que tristeza....-- sollozo su hermana.
• Bueno Reme, al menos se fue como él quería, sin dolor y sufrimientos-- Suspiro recordando las 19 horas de agonía de su esposa.
• Siii... al menos eso.-- En fin, te quedaras un par de días, verdad?--
• Si bueno, hasta el entierro …, espero que a Ricardo y a Luis no les importe-- se refirió sus pequeños sobrinos. – No quiero molestar..., si acaso me voy a un hotel?
• Quita, quita..., no seas tonto. A los pequeñajos les encantara tener a su tío durmiendo aunque sea en el jardín.-- Se rió complacida por primera vez.
• Al lado de la caseta del perro... Malvada!-- acompaño en una sonora carcajada.--
• Si bueno..., los del centro se encargaron de todo el papeleo y en fin..., solo me he tenido que preocupar en llamar a cuatro conocidos...-- Venga , vamos al tanatorio .-- dijo Remedios mirando su reloj-- En una hora comienza la misa.

Salieron en silencio hacia el tanatorio, recorriendo el trayecto en un respetuoso silencio. Justo cuando llegaron a la puerta de la sala, le sorprendió comprobar lo vacía que estaba. El marido de Remedios, Joaquin le estrecho la mano en uno de sus escasos gesto de afecto.

Se situaron frente al ataúd hasta que la ceremonia comenzó .

Las palabras del cura fueron amortiguándose en su cabeza, de reojo vio a su cuñado observar impaciente el reloj una y otra vez, meciendo sus talones en un aburrido compás de espera, contemplo los otros asistentes con detenimiento. Debían estar cerca de la edad de su padre, casi centenarios.

Entre apretones flojos y algo sudorosos fueron despidiéndose de los ancianos hasta quedar solos en la sala.

Partir en el todo terreno con las urna de su padre no le resulto angustioso , solo le temblaron las manos cuando vació la urna en el borde del espigón, tal como deseo su padre.

Abrazado con su hermana, recorrieron el camino de vuelta con las olas azotandolos a sus espaldas.

• pensé que quería estar con mama ….!-- murmuró Remedios.
• No..., creo que siempre quiso dormir en el mar... – Su último viaje-- suspiro tranquilo.
• Volvamos a casa, tus sobrinos quieren torturar a su tío favorito.
• Dirás al único. No? – la apretó por el cuello en una llave.

El contraste de los gritos y carreras de sus pequeños sobrinos le provoco una sonrisa, tanto que por un momento deseo estar de vuelta en casa.

Aun con 6 años, los gemelos era dos pequeños terremotos de pelo rubio que no paraban quietos, preguntando un millón de preguntas a la vez.

Telefoneo como prometió con los pequeños bribones casi sujetos a sus perneras.

Remedios sonrió discupandolos , llevándoselos a la cama entre medio de protestas y quejas. Pronto la casa volvió a estar sumida en un apacible silencio.

Su otra sobrina Katia llevaba cerca de seis años fuera del país, en uno de esos trabajos para el medio ambiente que se pagaban tan bien.

Según su madre, casi no tenia tiempo para nada que no fuese trabajar y estudiar.

Pobre Katia..., tan lejos de su hogar.-- pensó al cerrar los ojos.

Cuando a la mañana siguiente dos bultos empezaron a botar sobre su estomago, casi estuvo a punto de morir del susto. Ricardo y Luis no concebían despertar de otra manera a su tío favorito.

• Vamos dormilón..., mama ha echo torrijas..., vaaaaa....-- votaron una y otra vez sobre su cama.
• Vale, vale... ya me levanto...!-- consiguió protegerse con la almohada.

Arrastrándose fuera del universo blanco y rosa de su sobrina, se vistió con rapidez intentando no hacer caso de los ruidos de su estomago. Bajo de cuatro en cuatro las escaleras, hasta sentarse en la mesa con los cubiertos en ambas manos.

• Listo hermanita... , empieza a echar combustible.... ! – pronuncio contemplando la enorme fuente de torrijas.
• Vaya , veo que tienes hambre... eh?-- venga coge las que quieras. – arrimo la fuente a su plato.

Paco mordió disfrutando la primera de ellas como los pequeños, tragando y murmurando exageradamente.

Cuando hubo acabado el festín, todos fueron abandonando la cocina. Todos , salvo su hermana y él.

• Queee...? – le pregunto Paco – Va desembucha...! – oigo los engranajes de tu cabeza rodando …
• Veras...., Ayer antes de que vinieras me dieron los efectos personales de papa.-- Cosas sin importancia, ya sabes; ropa, cosas personales ;nada importante-, algún que otra maqueta... lo habitual...!
• Si... bueno.., pues por mi puedes quedártelo todo...! – bebió otro trago de café caliente.
• No, hombre... había un sobre con tu nombre... Sabes?
• No me digas..., un cheque millonario!-- se mofo Paco de nuevo.
• Que no , hombre. No lo he abierto..., pero vamos-- continuo dudando..., se distingue una llave!

Sabes algo de eso? * Pues ni idea...-- como no sea algún viejo barco cochambroso... , no creo que... * Toma... sera mejor que lo abras antes de marcharte....,-- si no no dejare de darle vueltas.

Remedios le tendió el sobre amarillo sobre la mesa, impaciente.

Rasgo el sobre con tranquilidad, sin dejar de sonreír a su hermana. Del interior cayo un papel blanco y una solitaria llave.

Intrigado, leyó las cuatro frases en silencio.--

.-- Va lo que yo te decía, el viejo cobertizo del antiguo caserón.-- esquivo los ojos de Remedios.-- Me ha dejado la vieja bañera … Te lo puedes imaginar. – se encogió de hombros.

• Vayaaa... así que ese era el gran secreto...-- se alejo decepcionada al comedor-- Todo tuyo hermanito...
• Si buenooo...-- sabes, antes de volver a casa le echare un vistazo, – a lo mejor puedo utilizarlo como chatarra para el taller. – se despidió sujetando su cazadora y calzandosela junto a la puerta.

Durante el resto de la mañana la nota le quemo en el bolsillo, apenas cuatros renglones picudos escritos por una mano ya temblorosa. Pero sin duda, la letra de su padre.

Paco, esta llave abre el viejo cobertizo junto a casa, en él encontraras una parte de mi que nadie hasta hoy ha conocido, dejo a tu buen juicio el contenido.

Intrigado se adentro con el todo terrenoo por la calzada lateral de su antigua casa, el cartel con los nombres alemanes colgaban delbuzónn que siempre leshabíaa pertenecido, respiro con nostalgiaadentrándosee en el camino de grava saludando con la mano a los Georf, sentados en el viejobalancínn de la entrada.

Para cuando salio del coche, Gunter Georf le tendía la mano amigablemente.

Charlaron un par de minutos , tras los cuales se despidieron en los limites de la propiedad. Paco sabia que el viejo cobertizo era la única zona sin reformar de la finca. A Gunter y su esposa Frida les horrorizaba todo lo relacionado con el mar, habían perdido a su único hijo en alta mar hacia años y por eso escogieron estar alejados de cualquier cosa que les recordara el mar que se había tragado a su hijo.

Así que Paco, se despidió de Gunter educadamente encaminándose a la vieja estructura de chapa y madera. Todo parecía muy oxidado , olvidado de cualquier manera allí en medio de ninguna parte, puede que ni siquiera pudiera abrir el candado que sujetaba la puerta. Encajo la llave con cuidado, abriendo fácilmente el cierre engrasado, para cuando los goznes de la puerta se abrieron sin chirriar, seguía sorprendido.

A oscuras la luz se filtraba por las rendijas metálicas, aun así tanteo hasta encontrar la llave que encendía la bombilla del techo.

Todo seguía casi igual, la mesa sujeta por dos caballetes cubierta de maquetas de barcos a medio terminar, las paredes repletas de estanterías con cajones de pequeñas piezas, a la derecha las herramientas para pulir , cortar , enganchar cada meticuloso detalle.

Que demonios quería de él?-- se pregunto Paco resoplando, revolvió abriendo y cerrando el contenido de cada uno de los cajoncitos, sin encontrar ninguna pista mas.

Agobiado por lo que le supondría vaciar todo aquello se sentó derrotado en el viejo taburete en la esquina mas alejada de la salida.

Intento hacerse una idea rápida de cuanto tardaría en encontrar aquello de lo que hablaba la nota, estiro las piernas hasta que sus pies tropezaron con algo , cayendo con gran ruido. De rodillas gateo hasta sacar de detrás de unas cajas de cartón un grueso estuche de piel marrón.

Estiro para fuera el estuche , hasta dejarlo sobre la mesa de caballete. Que raro! Seria aquello lo que decía su padre? , abrió la piel algo cuarteada levantando la tapa . Dentro había una decena de pequeñas libretas escolares como las que usaban los niños.

Extrañado agarro una de las ultimas al azar , en la primera pagina se veía la fecha de hacia casi 7 años. Suponía que era algo parecido a un diario,la letra picuda de su padre era inconfundible.

Leyó en silencio aquello que su padre le había dejado como herencia.

Mayo del 2005.

Este tío es realmente gilipollas!-- Puto Cabrón...., en fin …, supongo que he de hacerme a la idea de dejar su casa. Se me ha concedido un tiempo precioso y lo he disfrutado como nunca. – Lo reconoceré..., pero dejar a la niña ahora...-- eso si que va a ser difícil.

Me importa un cojon si el soplapollas de su marido pone el grito en el cielo, que cojones quiero conocer a mi ultimo hijo, acaso le va a negar ese placer a este pobre viejo?-- Remedios esta confusa, por supuesto quiere evitar habladurías, las mujeres siempre lo quieren así. --- Pero... con semejante hembra delante mi sesera se queda seca y mi rabo entra en acción.

No me justifico, Remedios es una hembra fogosa..., todas las mujeres de la familia lo han sido. Bien que lo se yo, así que cuando empezó a encontrarse mal no pudimos sospecharlo. Así de sencillo, estaba preñada.

Nunca pensé, que después de tantos años pudiera correrme como lo hacia con ella, pero la niña tiene una manera de mover ese culito que me vuelve loco, como no voy a correrme como un mulo?-- Ella sabe exprimirme tan bien como lo hacia su madre, que dios la tenga en su gloria!--.

Al final resulto que si, iba a tener a mi hijo, a nuestro hijo. Resultaba algo confuso, pero no quise entrar en detalles algo peliagudos con ella. Supe algo después, quizá dos o tres días mas tarde de la reacción del gilipollas, los gritos se oían en todos lados, el muy imbécil se las daba de cornudo, precisamente él.

Remedios tuvo que ceder en aquello de mandarme a una residencia, apartarme de ella y del niño. Y así lo hice, no quería provocar mas problemas, mi yerno es gilipollas pero no un insensato, prefiere tenerme lejos para poder tirarse día y noche a su hija Katia, mi nieta.

Creerá que no me doy cuenta como repasa a mi nieta cada vez que estamos en casa, joder..., si el pobre imbécil no puede dejar de empalmarse cuando esta en la misma habitación con ella.

Acaso cree que no le vemos escabullirse cada noche a la habitación de la niña hasta la mañana siguiente, Remedios no es tonta, lo sabe..., esta resignada. Katia es una mujer cañón, por eso, y por que la familia no se desmorone lo tolera. Katia se avergonzaba de toda la situación, y encontró la excusa de sus estudios en el extranjero para salir huyendo de semejante embrollo; la comprendo demasiado bien. – Mejor poner tierra de por medio.

Mi hija y yo gozamos de un tiempo para nosotros que nos acerco como familia, y por lo que a mi se refiere , me siento igual o incluso mas orgulloso de la semilla que crece en las entrañas de mi hija. Para los demás sera mi nieto adorado, pero para mi y para ella nuestro hijo sera motivo de mi ultima alegría.

En este punto Paco dejo de leer boquiabierto, las manos sudadas sujetando la libreta al leer, la primera cuartilla de la pagina terminada, atónito ante semejantes confesiones.

Su padre... y su hermana...., los gemelos eran de él. De pronto las piezas empezaron a encajar en su cabeza, el repentino ingreso en la residencia, la huida de su sobrina a una facultad en el extranjero. En que lió te metiste, viejo?-- negó con la cabeza.

Cerro la libreta con cuidado, ojeando los lomos de cada una de ellas, contó 14 encajadas como fichas de domino, estiro la primera de ellas con dificultad hasta que una carta salio de la primera pagina cayendo justo a sus pies.

Con cuidado, rasgo la solapa de papel sacando el grueso de papel doblado de su interior.

Querido hijo:

Puede que ahora, mas cerca de los 100 sea algo mas sincero conmigo mismo de lo que he sido nunca, quizás no comprendas , ni perdones, lo que leerás en el interior de estas libretas.

Las escribo desde mi mesa , aquí en la residencia donde pasare mis últimos días, intentando recordar cada uno de los aspectos que no comprendiste de tu padre.

No te pido justificaciones, no soy de ese tipo de personas. He vivido de la mejor de las maneras posibles, con la mujer que escogí para formar una familia, sin mirar atrás.

Me toco vivir una época muy complicada, en un país que se desmoronaba y del cual salí a salvo físicamente , pero que me dejo una huella imborrable.

A todos los de mi generación nos la dejo.

Entre estas hojas conocerás al verdadero Eladio, el chico encerrado dentro de este cuerpo de anciano, tal como me siento cuando cierro los ojos cada noche.

Solo espero que conozcas algo mas de tu propia familia, esa de la que tanto preguntabais tu hermana y tu cuando erais pequeños y que apenas tenias referencia. Os lo debemos.

Con el cariño de

Tu padre Eladio.

P.D: dejo a tu elección contarle a tu hermana el contenido de estos diarios.