Las hijas rogando y el padre castigando. (12.)

Puede que después de todo aquello no fuera una buena idea--, lo planeo la noche anterior, e hizo los preparativos mientras los demás cenaban en la cocina.  Ella casi se atraganto al comer tan rápido y volver a la habitación casi corriendo.

Eva sabia que no tendría mucho mas tiempo, así que cuando entro a su habitación agarro la mochila y la vacío de libros, dentro solo puso un par de pantalones, una falda muy doblada, dos camisetas y un jersey. Hizo una bola con unas cuantas bragas y las metió dentro con algo de apuro, vigilando la puerta. Luego,  antes de que Violeta volviera a dormir tenia la mochila bajo su cama, abrió el ultimo cajón de su mesita hasta dejarlo en el suelo y alargando la mano sujeto el saquito negro enganchado al fondo.

Su fondo de emergencias, la ayudaría a pasar desapercibida un poco mas de tiempo, contó los pocos billetes volviendo asegurar el cierre, el móvil negro cayo a su mano enseguida, nadie conocía de su existencia, solo algunos “amigos” del insti.

Así era como se ponían en contacto con ella, para algún tipo de trabajito manual.

Suerte que aun tuviese algo de batería, coloco a cargarlo bajo el enchufe tras el cabezal de su cama.

Suspiro algo tranquila, si las cosas salían como quería, saldría de aquel sitio al amanecer, se largaría antes de que todos lograran despertarse.

Con ese objetivo en mente, Eva se preparo para la noche mas larga de su vida.

Se hizo la dormida, cuando Violeta entro en el cuarto para dormir, solo cuando esta apago la luz de su mesilla de noche, pudo respirar con tranquilidad, era solo cuestión de dejar pasar las horas, y si lo hizo.

El sueño le fue venciendo , se quedo dormida casi inmediatamente y el sueño volvió a apoderarse de ella .Volvía a estar sentada en la silla de su escritorio, Paco seguía jodiendola       con lentitud empujando con ganas el pollon en su tierno coñito.

Al principio, le había dolido algo, dolorida como estaba, pero para peor bochorno de ella había comenzado a darle un placer que jamas admitiría.

Y eso él lo sabia.

Se despertó bruscamente, con las sabanas pegadas al cuerpo, el chándal con el que había dormido se le pegaba al cuerpo, fuera las primeras luces de la mañana asomaban por la ventana, miro hacia su hermana acurrucada y al reloj que marcaba las 6:40.

Agarro la mochila bajo la cama, calzándose las zapatillas para dirigirse a la puerta, abrió con mucho cuidado la puerta , llevaba el móvil enganchado al cuello, el dinero escondido bajo las plantillas de sus deportivas. Sigilosa se dirigió por todo el pasillo hasta la cocina, abrió la nevera  saqueándola de todo lo que pudo, con la bolsa llena de comida puede que aguantase un par de días.

Volvió sobre sus pasos y se apresuro a salir por la puerta hacia la calle.

Ya cuando bajaba las escaleras, pensaba y pensaba como seria la reacción de su padre, se enfurecería, peor, la castigaría si la encontraba.

Pero no la encontraría....

Fuera en la calle, el día se ponía en marcha como siempre, evito ser vista por los chicos de la panadería, pasando agachada por el callejón, aun no tenia muy claro hacia donde se dirigiría, camino sin rumbo hasta que sus pies la llevaron de nuevo a la valla del instituto, aun era demasiado pronto para que el conserje apareciera.

Vigilo un par de minutos antes de escalar la verja de entrada, apartándose de la entrada casi sin aire en los pulmones.

Se dirigió hacia la parte de atrás del viejo gimnasio, se agacho junto al montón de hierros oxidados , parte del andamiaje hacia una eternidad, tapaban un respiradero amañado para poder entrar y salir cuando quisiera.

Se deslizo por la sucia abertura, hasta llegar al interior de su escondite, se sacudió la mugre del chándal , dejando su mochila sobre un montón de colchonetas, a tientas encontró la vela encendiéndola con un chasquido.

Aquel sitio había sido un chollo, nadie conocía su existencia, casi nadie.

El antiguo almacén del gimnasio parecía repleto de viejos trastos olvidados por todo el mundo,  suspirando volvió sobre sus pasos hasta las colchonetas. Rendida por el cansancio de noches sin dormir , cayo agotada sobre ellas sin sospechar lo que se avecinaba.

Arturo preparo su almuerzo en el silencio de su cocina, la comida prepara por su madre era peor una lavativa matinal.

No quería enfurecerla de nuevo, sabia que cuando esto sucedía era mejor salir corriendo hacia cualquier parte. Aun le daba escalofríos aquella enorme casa, seguía sin acostumbrarse al caserón de los Abuelos. Todo era sumamente viejo , como salido de una película de terror antiguo, tantas habitaciones vaciás le producían pánico.

Aun andando de puntilla, la madera crujía chivándose ante cualquier fuga.

Cuando ya se dirigía hacia la salida, la voz de su madre hizo que se le helara el aliento.

Arturin hijo, ven aquí.-- llamo Isabel desde el estudio.

Mentalmente se odio por ser tan devil , pero ella era su madre y tal como le recordaba constantemente, quien pagaba la comida que llevaba a su boca o la ropa que se ponía.

así que suspirando agacho la cabeza y se dirigió hacia donde la voz le reclamaba.

Al llegar, la vio sentada tras el escritorio que había sido del abuelo bebiendo su habitual taza de te. No despegaba los ojos de la carpeta cuando le hablo.

Arturo , por casualidad no sabrás de nadie que este entrando a escondidas a la sala de profesores, verdad?

Yoooo..., no tengo idea... tartamudeo como siempre que ella se dirigia a él.

Bueno.. , eso pensé, Claro!-- volvió a decir Isabel levantando los ojos intentando sonsacar alguna reacción.-- No serias tan Imbécil!, no me equivocaba contigo, después de todo!

Por.... que …. diiiicessss eso!-- pudo acabar de decir Arturo.

Alguien-- y dijo eso mirándole de nuevo-- Ha estado trasteando en la sala de profesores, Claro... que no ha desapareció nada, !-- bebió otro sorbo de te.

Pero.... No se!-- se que alguien ha estado toqueteando mis carpetas...!

Sosssspeeeechaaaas de alguiiienn!-- consiguió pronunciar cada vez mas tenso.

Pueeede ser! Y ten seguro que cuando lo atrape, no tendré piedad!-- dijo cerrando la carpeta de un golpe seco.

No recordó mucho mas de la conversación, angustiado como estaba por las palabras de su madre, el camino hacia el instituto. Pedro el conserje, acababa de abrir la verja como todos los días, lo saludo nervioso apresurándose por escabullirse sin ser visto hacia el escondite donde podría serenarse.

Llego al gimnasio, tal como recordaba de sus encuentros con Eva desplazo el respiradero y se apresuro hacia el interior. Si se daba algo de prisa podría pajearse un par de veces para  serenarse.

Tal como recordaba los viejos trastos de toda la escuela reposaban olvidados en aquel extraño almacén, la luz comenzaba a colarse por las ventanas de atrás , dejo su mochila junto al pupitre de tres patas, si se daba prisa su madre ni se daría cuenta que llegaba tarde algo tarde a su primera clase.

No solo tenia que convivir con ella en casa, también la tenia como recordatorio humillante en el instituto.

Quejarse de nada le serviría, al contrario. Seria otra causa mas motivo de vergüenza para Isabel, como quería que la llamase en el instituto.

Lloriquear no era lo que hacia un hombre! Le oía mentalmente repetir de la boca de su madre.-- Menuda decepción de hijo.-- acababa repitiendo le siempre.

Apurado se saco la polla fláccida de la bragueta del pantalón y comenzó a machacarsela  furiosamente con la voz de su madre martilleando en su cabeza, apenas podía abarcar la gruesa barra, pero le dio igual , continuo pajeándose lentamente al compás de la letanía de insultos dedicados por su amantisima madre,  casi enseguida el gustillo empezó a llegarle a todo el cuerpo,de la seta empezó a rezumar el juguillo que le hizo acelerar la sacudida de su mano.

Era una gozada-- pensó mirando al techo-- cuando el chorro salio escupido hacia delante le dejo tan sereno y tranquilo como siempre lo hacia.

Mmmmmmm, siguió escupiendo chorro tras chorro hacia las colchonetas.

Cuando acabo se sacudió el grueso rabo, abriendo los ojos alucinado por lo animal de su corrida, el olor  fuerte le llegaba a la nariz.

Miro los chorreones de semen colgando por todos lados , debía ventilar algo aquello o cuando alguien se le ocurriera entrar allí , solo olería el tufo de macho cabrio y acabarían con el escondite. Aun tenia algo de tiempo, deslizo una pila de cajas repletas de expedientes hacia las ventanas justo encima de las colchonetas , y subiéndose en ellas se  estiro para abrir una de ellas.

Fue al mirar hacia abajo algo mareado, cuando la vio.

Alguien estaba al otro lado del nido de colchonetas, se bajo rápido de un salto despertando del sueño a la figura encogida tras las colchonetas.

Jodeerrrr.... que sueñoooo....-- bostezo descubriéndose Eva.

Mierda!-- menudo susto me has dado!-- suspiro Arturo al  entrar entre las colchonetas. – Que coño haces aquí?--

Mmmmm, no es muyyy pronto... ! – volvió a bostezar Eva mirándolo. Solo son las 7:30,  es que no tienes algo mejor que hacer ?

Yooo, me estaba haciendo una paja. De acuerdo?-- pero no esquives lo que te he dicho? - Que hacías durmiendo aquí?--

Me he largado de casa, le soltó Eva . Y en algún lado tenia que dormir, no?

Pero tu no estabas expulsada!,-- vamos, no te hemos visto desde hace una semana.

Bueno, si! Pero este sitio esta bien por ahora.

Sabes que si te pillan al instituto lo empapelan y lo cierran!-- le escupió Arturo preocupado.

Menudo Cagón! Solo es algo temporal, vale? Y puede que si...-- Dijo acercandose hasta el hombro susurrándole-- si me ayudes... pues me piense en hacerte una paja!

Arturo la miro intentando creerse sus palabras, pero su lado cobarde siempre ganaba.

Mi madre sospecha ya de alguiennnnn!-- tartamudeo al recordarla--, solo faltaba que le diera alguna razón para odiarme mas.

Buenooo, entonces escondeme en algún sitio donde no se le ocurra mirar, Genio!-- le chillo cabreada,-- Jodido niño de mama!

Valeee, Valeee! --contesto Arturo-- puedes quedarte por ahora!, luego me pasare mas tarde-- dijo mirándole intencionadamente. Puede que me lo piense si....- dijo aguantando el aliento-- Si me la chupas...-- insinuó.

Mierda.... eres un hijo de puta!-- le soltó Eva.--

Ya sabes... mi oferta, me callo y me olvido de todo si  me la chupas con la boca. Ya me dirás algo esta tarde-- dijo escurriéndose de nuevo por el agujero de ventilación.

Cuando las puertas abrieron , esperaba en la entrada con una sonrisa que solo él entendía.

No le importo oír la voz de su madre en el altavoz  recordando el pago de matriculas, siguió flotando esperanzado en aquella tarde.

Isabel detestaba aquello, es mas lo odiaba profundamente.

Despreciaba perder el tiempo entre aquellas cuatro paredes, permanecer prisionera de los caprichos de críos inútiles y maleducados.

Permanecer encadenada aquel escritorio, cuadrando cuentas, balances y un sinfín de facturas.

Cada mañana se volvía mas y mas duro, le amargaba el carácter hasta hacerla odiarse a si misma.

Pero era lo que pagaba la comida de su casa su fuente de ingresos.

No soportaba a los adolescentes, siempre tan egoístas, se creían el centro del mundo , siempre pidiendo, siempre llorando. – Se pellizco la nuca, aliviando algo de la tensión acumulada.

Nunca se hubiera imaginado siendo madre, de hecho fue una sorpresa monumental cuando después de su viaje mochilero por Europa descubrió que estaba preñada.

Terminaba la facultad, decidieron hacer un viaje por Europa en plan barato, sus padres ya habían muerto dejando le la vieja casa y un fondo pequeño para ella. Vieron Niza, Mónaco, Venecia, Lucerna y Munich.

Fue en Munich en el final del trayecto, cuando con  unas amigas se colaron en una fiesta de la cerveza que acabo con todas durmiendo en un camping de Laim con un resacon impresionante y sin bragas.

Todas se rieron de aquello y se largaron hacia sus casas, todas menos ellas que volvió con un regalo extra de equipaje, embarazada como estaba no pudo acceder al puesto de restauradora de la iglesia de San Marcos, demasiados riesgos subida a un andamiaje a 4 metros del suelo.

Conforme iba creciendo la barriga también lo hacia su resentimiento hacia aquel ser que la apartaba de su gran sueño, luego al nacer Arturo encontró un puesto en un colegio como secretaria de dirección y abandono cualquier esperanza de  volver al mundo de la restauración.

No le importo ser madre soltera, nadie en la escuela la conocía, así que fingiendo algo, decidió ponerse el anillo de su madre para hacerlo pasar por suyo, luego solo fue cuestión de vestirse discretamente aparentando ser una viuda.

Aun siendo joven, si se arreglaba bien el pelo parecía añadirse años.

Pero detestaba todo aquello.

Las horas desperdiciadas en aquel trabajo monótono, los continuos intentos del director por sobarse con ella en el despacho. Antes prefería pasar una hora con su consolador a la compañía del aburrido tipo. Y por si fuera poco, alguien había tenido la caradura de colarse en la sala de profesores y manipulado los exámenes.

Harta de aquello, convenció a la junta escolar para la instalación de unas cuantas cámaras de seguridad en los pasillos.

Siempre con la excusa de hacer mas seguro el instituto , instalarían un par de ellas en los pasillos , en la sala de profesores y en el patio trasero del gimnasio.

De hecho, los operarios habían terminado la instalación de la cámara en la sala de profesores esa misma mañana. Conectando el circuito al tablero de su mesa , el sitio perfecto para ver sin ser visto.

Trabajo todo el día con aquella idea enterrada en la mente, si tal como sospechaba su hijo tenia algo que ver con aquello, no habría compasión. Solo era cuestión de plantar el cebo adecuado y esperar.

Sabría como hacerlo...

Arturo salio pitando escaleras abajo al oír el timbre de final de clases. Debía tener algo con lo que negociar con Eva, sabiendo lo que se jugaba esta vez era su cuello.

Salio como rayo hacia la entrada del instituto esperando ver como poco a poco se largaban todos.

Cerca de 40 minutos después todo estaba desierto, se colgó su mochila de nuevo y recorrió el camino hacia la parte trasera del gimnasio, estaba tan excitado en pie de guerra ante lo que iba a suceder.

Entro como había echo esa mañana, dirigiéndose hacia el escondite tras las colchonetas.

Vaya, ya has vuelto...-- escucho Arturo a sus espaldas.

Se giro para ver que justo detrás del montón de viejas cajas de cartón Eva se estaba preparando para comer algo.

Se sentó junto a ella frente a la improvisada mesa , viéndola comer algo envuelto con papel de aluminio.

Si, ya acabaron las clases, – y he venido a …

Negociar...-- consiguió pronunciar Eva con la boca aun medio llena.

Algo así, veras!, – Supongo que este sitio esta bien, para pasar un día, no?-- pero tendrás que ir al baño, que se yo-- dijo encogiéndose de hombros--

Mmmmm, buenoo si, mear aquí dentro podría ser insoportable un par de días mas.

También querrás ducharte, no?-- siguió diciéndole Arturo.

Puedeee.-- Que propones?-- dijo mirándole fijamente.

Si me la chupas, digamos … un par de veces al día-- podría decirte un sitio.

Eva mordió el ultimo bocado de su bocadillo, permaneciendo callada . Cuando Arturo pensaba que se reiría de él , le volvió a sorprender de nuevo.

Una mamada y una paja con la mano! , solo si me dejas usar el baño y la ducha?. Trato hecho.

En serio? – dijo en tono algo inseguro-- Claro, claro.

Que sitio es ese?-- pregunto Eva curiosa.

Mi casa... claro!

Y una mierda..., con el troll de tu madre rondando por allí! – Ni hablar!

Venga hombre..., si casi nunca esta en casa..., ademas siempre se lo pasa encerrada en la parte baja..., la casa es enormeeeeee...., solo tienes que tener cuidado de no acercarte cuando ella este en casa.

No seee....! – repitió cada vez mas convencida.-- Supongo que me darías las llaves para colarme … no?-- cuando ella este aquí?

Eso es.! – le animo Arturo cada vez mas contento.

Buenooo en ese caso! – Trato hecho-- escupiendo su mano preparada para el apretón.

Lo que no esperaba fue la reacción de Arturo al tumbarla sobre las cajas para lanzarse para intentar besarla. Era tremenda mente torpe, todo ardor.

Eva intento calmar aquella boca de pulpo, abriendo la boca para empezar a lamer su lengua lentamente.

Poco a poco Arturo comprendió que las prisas no eran buenas, terminando por seguir la iniciación de la lengua envolviendo la suya dentro y fuera, hasta iniciar una profunda envestida de bocas , suspiros y salivas.

Se sentía excitado como nunca antes, Eva era la primera chica que besaba así, secando le el cerebro hasta solo notar su lengua pulsando en su entrepierna en pie de guerra.

La erección crecía mas y mas dentro de aquellos pantalones de recia pana, sus manos ya no las sentía como suyas cuando empezó a bajar hacia las tetas que tan buen sabor recordaba.

Le costo horrores abandonar aquella ardiente boca, deslizando despacio la boca cuello abajo hasta la cremallera del chándal , cuando toda ella cayo. La cremosas tetas de Eva quedaron expuesta para él.

Ñaaaammm, Ñaaaammmm-- pedían a gritos, mientras contemplaba el sujetador blanco encerrándolas.

Su mano fue mas rápida que su lengua cuando se lanzo apretando la teta derecha , aplastando y amasando continuamente aun por encima.

Ufff, no seas bruto..., mmmmmm--- murmuro Eva bajito.

No le dio tiempo a quejarse mas pues con manos rápidas deslizo la tela del sujetador blanco hacia arriba , liberando a semejantes melones al sediento chaval.

Arturo no le dio tiempo nada mas que lanzarse a mamar de aquellos pezones rosados, hundiéndolos en su boca sorbiendo y mordiendo a la vez.

Eran increíbles los gemidos sorprendidos de Eva ante semejante mamada. Casi la dejaron muerta allí mismo, teniendo que rendirse al soltar el primer gemido de goce.

Mmmmmm, mmmmmm... susurro sujetando la cabeza de Arturo para atraerlo mas hacia sus tetas.

Arturo esta en el paraíso aplastado entre semejantes montañas de carne excitada, encajado entre ambos melones turnandose en el castigo de los pezones rosados, siguio mamando intentado sacar jugo , tragandose casi la aureola y enroscando su lengua a aquellos tiesos pezones.

Estaba tan duro que sabia que no tardaría en correrse de nuevo, pero poco le importo.

Solo se dejaba llevar por el sabor de las tetas de Eva en su boca y los continuos gemidos que salían de su boca.

Cuando pensaba que moriría en las puertas del cielo, ella lo agarro mas fuertemente de la cabeza, hasta que pensó que la diñaría asfixiado  entre aquella deliciosas tetas y se tenso hasta relajarse medio muerta sobre el sucio suelo.

Arturo no entendía lo que sucedía, palmeo su cara espantado por su reacción. El seguía duro como una piedra y allí estaba ella casi muerta.

Estas bien!-- intento reanimar junto a su oreja-- Oyeeee, auno no he....

Eva abrio lo ojos relajada y tranquila, enfocando los ojos al pobre Arturo que la miraba temeroso.

Jodeeer Tio, te he dicho...., que nada de … ya sabes...-- uffff que gusto...-- termino de decir estirándose mientras se ponía en pie.

Dio un par de pasos a su espalda subiéndose de nuevo los sostenes y abrochándose el chándal.

Cuando se giro, Arturo la miraba confundido.

Pensaba.... que …. dijo en tono indeciso tú, también tenias derecho a disfrutar un poco...-- acabo confesando a media voz.-- Como lo disfrutaste tanto la otra vez!

Bueeeeno si..., pero venga … vamos ponte de pie...-- le regaño Eva-- Supongo que Mami te esperara en casa?-- no querrás hacerla esperar?-- O quieres que sospeche algo?

Arturo se había olvidado de todo, pero sabia cuanta razón tenia. Miro su reloj , calculando mentalmente el tiempo que le quedaba antes de que Isabel , su madre apareciese por casa.

Se levanto como un resorte, quedándose de pie si saber muy bien que hacer. Fue al mirar abajo cuando vio que su polla parecía agujerearle los pantalones. Le dolían los huevos aunque había descargado esa misma mañana.

Va venga, acercate aquí... --dijo Eva señalandole el centro de la habitación.

Arturo obedeció como un corderito colocándose donde Eva le mando, esperando a lo que ella le tenia preparado.

Y es que Eva jamas hubiera reconocido lo cachonda y caliente que la había puesto aquella mamada, casi tanto como la corrida que mojaban sus bragas acusándola.

Nunca debía sospechar lo cerca que había estado de dejarle meterse entre sus bragas a seguir  hurgando aquella lengua prodigiosa en su coño.

Aparta esa idea de tu cabeza Eva-- se ordeno una y otra vez.-- Pero no dejaba de preguntarse como seria aquello.

--Lo justo, era justo-- así que cuando lo vio avanzar hacia donde ella le indicó, preparo un asiento destrozado a sus pies, arrodillándose justo frente al enorme tienda de campaña frente a sus narices.

No estaba muy segura de como iría aquello, seria su primera mamada, y aquello la ponía nerviosa.  – Suerte que él, era aun mas pardillo que los demás-- no creía que se hubiera dado cuenta como se había corrido por el festin en sus tetas.

Suspirando, sobo ligeramente el enorme bulto de pana aun por encima de la ropa , mirando alternativamente la cara alelada de Arturo y la erección. Respiro un par de veces antes de empezar a desabotonar el pantalón de la cintura y bajarlo hasta los tobillos.

No quisiera dios , que su Mami viese las manchas de semen en algún lado.-- El slip parecía a punto de romperse por las costuras de la bragueta,  lo acaricio suavemente hasta notar humedecida la palma de su mano.

Pese a conocer alguna que otra polla, la sorprendió ver como despunto como un muelle tieso cuando deslizo el calzoncillo. Mierda..., se dijo de nuevo mentalmente.

Pese a ser un chaval canijo, lleno de granos , con el pelo grasiento  , la naturaleza debió compensarlo con un rabo de toro.

Sabia por otras pajas a tíos, que ningún chaval de su edad la tenia así. Ni de lejos se parecía a la polla de caballo de su padre, porque aquello hubiera sido demasiado. Allí parada tiesa como un ariete, gorda como una barra de pan apuntaba al techo una seta como una ciruela madura, cada vez mas roja.

Las venas de empezaban a hincharse, cuando su mano sujeto semejante tranca con la mano casi abierta.

Coñoooo,  no me cabe en la mano!  se regaño mentalmente-- porque no habré cerrado la puta boca-- aquella bestia parda le rompería las mandíbulas-- Eres una bocazas...

dijo peleándose internamente.--

Porque no tendrá la polla como un chaval cualquiera?-- No tenia que se la de un actor porno.

Arturo no entendía el dilema de Eva, pero solo el contacto de su mano sujetándole el rabo, le hizo dar un brinco, veía como esta lo miraba con los ojos como platos.

No le cabía en su mano, eso lo notaba. Pero esperaba sentirse mejor que cuando él se daba el gusto en casa.

Resoplo una vez mas, cuando la mano comenzó a bajar hacia los huevos.

Tuvo que aguantarse el chillido cuando noto la mano estrujándole los cojones en varias pasadas, no aguantaría mucho mas, lo sabia.

Cuando la mano comenzó a rozar la seta , deslizando la piel hacia tras , no pudo mas y se vació ante la sorprendida Eva que esquivo el primer caño,  pero nada pudo hacer para hacerlo con las otras que siguieron.

Se corrió con los ojos cerrados , olvidándose de todo, descargo la interminable lechada suspirando de alivio. Fue al abrir los ojos ,cuando la vio manchada de su semen, toda ella cubierta de algún que otro hilo de esperma.

El pelo, la cara, el chándal, nada se había librado de la descarga . Se llevo la mano a la boca para no reírse del aspecto de la pobre Eva. Pero era para verlo!

Esta parpadeo pasmada ante semejante corrida, poco a poco la sorpresa se volvió en furia al ver la sonrisa bobalicona que se escapaba de su boca.

Seras Gilipollas, diooossss como me has puestooo... agggg,... dijo intentando limpiarse el pelo – Que asco, joder...-- dijo levantándose y descubriendo mas semen pegado en la parte delantera del pantalón.-- Dioooos!      – Peor que una jodida vaca lechera!

Arturo seguía alucinado por la corrida esparcida por el suelo , su polla yacía muerta en  su entrepierna. solo ver a  Eva se despojarse del pantalón del chándal, la  chaqueta despues  y contemplar aquella diminuta braga rosa  en el redondo culito inclinado sobre el montón de colchonetas, para que la polla volviese a cobrar vida.

No lo pudo evitar y alucinado comprobó como poco a poco se levantaba tiesa de nuevo en busca de un lugar donde hundirse.

Nunca antes, se había recuperado tan rápido, pero allí estaba otra vez tiesa como el acero.

Ajena a lo que pasaba a sus espaldas, Eva luchaba por encontrar la mochila escondida tras el montón de colchonetas, tuvo que doblarse para tantear en medio de tanto desorden , levantando ingenuamente el culo para recostarse mejor.

Solo cuando noto la mano en la nuca aplastando su cara contra la tela sucia de la colchoneta reacciono furiosamente, intentando manotear a ciegas.

Que coño haces, hijo de Puta!-- suelta...-- protesto al notar sujetas sus muñecas a la espalda.

Ohh Eva.... dejameeee rozar la polla contra el culo, Por favooor... solo esooo, te lo juroooo... – suplico Arturo a sus espaldas.

Estas loco?... venga, sueltame... y te juro que me olvido de todo....-- murmuro cada vez mas asustada.

Diooossss.... Eva, solo rozarme... Vale? –  Nada maaaas...

Entonces sueltameeeee....-- suplico-- Y te lo dejare hacer...

Sin darle tiempo a decir nada mas, Arturo adelanto su temblorosa mano hasta la fina tela de la braga, posando sus dedos por toda la tela lentamente, los dedos se le cubrieron del flujo de la corrida y empezó a deslizar mas rápido sus mano.

El silencio de Eva se rompió cuando sus dedo abarco el clítoris , golpeándolo decididamente.

Ahhhhh, ahhhhhhhhhh,, aaaaaaaaaaaaaaahhhhhhhhhh... aullo mortificada .

Lo hago biennnn....-- Verdad? – dijo mientras sujetando la braga la corrió hacia un lado para ver el rosado coño en su esplendor.

Arturo contemplo la dulce vagina rezumando jugos al paso de su dedo y no pudo evitar acercar la nariz a oler el delicioso liquidillo que bañaba su mano.

Que gozada! Se dijo para si al hundir la cara entre aquellos deliciosos cachetes , y comenzar a sorber como un helado de fresa.

Lamió y lamió, hasta que la lengua encontró el jugoso botoncillo . Sujetándose al culo de la pobre Eva punteo lentamente aquel trocillo de carne, hasta que los murmullos se convirtieron en gritos salvajes.

--Ahhhhhggggg, diooooooosss, siiiiiiiiiiiiiii, ooooooooooooohhhhhhhhhh, siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii.-- chillaba cada vez mas fuerte Eva.

Debió seguir así un buen rato, cuando separo su cabeza de aquel jugoso coño.

Tanto placer era asombroso, se dijo Arturo, como demonios no había disfrutado antes de aquello.

Si por él hubiera sido, esta seria una clase de sexologia mas completa que las dadas en el instituto.

Los datos siempre son fríos, el trabajo de campo y las practicas si que eran excitantes.

La gente mataría por una clase practica como esta, y no por tonterías como las que enseñaban allí.

Bendita sean las practicas!.