Las grandes series americanas (4: Bel-Air)

Segunda parte y segundo polvo consecutivo de Will, ahora con su joven prima Ashley, a la que acabará desvirgando.

EL PRINCIPE DE BEL-AIR Y SUS PRIMAS (PARTE 2)

Después del polvo que pegaron Will y Hilary, esta última decidió irse a dormir, a pesar de los intentos de Will para volver a follarsela ya que, después de hacerlo, los dos se sentaron desnudos en el sofá para hablar de lo sucedido, diciendo ambos que no se arrepentían de nada, lo que, poco a poco, volvió a poner a tono a Will de ver desnuda a su prima, pero Hilary se negó a follar otra vez. Por lo tanto, Will recogió su ropa y fue a la casa medio empalmado por este último calentón.

Este fue a entrar por la puerta corrediza del salón porque se dio cuenta que, seguramente, Ashley se la había dejado abierta al entrar después de haberlos espiado. Sin embargo, la sorpresa fue mayúscula. Cuando este se acercó, vio que había ropa por el suelo. Eran una camiseta ajustada de tirantes rosa y, más adelante, unas típicas braguitas de algodón. En ese momento, a Will le vino la imagen de Ashley a la cabeza y se acordó que, cuando les estaba espiando y mientras se masturbaba, la vio con esa camiseta puesta. Pero ahí no terminó todo porque, cuando este fue a entrar al salón, oyó una especie de gemidos que venían de detrás del sofá. Will entró sigilosamente en la casa y, aunque ya se lo imaginaba, vio a su primita Ashley desnuda y masturbándose sentada en el sofá, lo cual le provocó una gran erección.

Por lo que respecta a Ashley, esa noche hacía bastante calor y no podía dormir. Se levanto de la cama y bajo a la cocina para tomar algo fresco, con la intención de volverse a dormir rápido. Sin embargo, una vez abajo, decidió salir al jardín a tomar un poco de aire fresco y fue así cuando, después de ver la luz de la caseta de la piscina encendida y de manera totalmente involuntaria, pilló a Will y a Hilary follando juntos.

Cuando esta los vio, la primera sensación fue de tremendo estupor, quedándose absolutamente paralizada. Lo siguiente que sintió fueron unas tremendas ganas de gritar, pero se contuvo de ello porque le vino otra extraña sensación al cuerpo, que era la curiosidad. Ashley tenía 15 años y pronto cumpliría 16. Ya no era ninguna niñita y empezaba a "descubrir" su joven cuerpo. En ese sentido, no hacía mucho tiempo que empezó a sentir curiosidad por el sexo y por todo lo que gira alrededor del acto sexual. Había descubierto la masturbación y la empezaba a practicar con frecuencia. Ella solo había visto a gente haciéndolo en películas y notaba que cada vez le llamaba más la atención ese tipo de escenas, por lo que cuando vio la a su primo y a su hermana follando, no pudo evitar ver la tórrida escena.

Poco a poco se fue excitando y, sin pensárselo 2 veces, empezó a masturbarse mientras les veía escondida. Pero por miedo a ser descubierta, se fue a la casa. Se sentó en el sofá e intento relajarse, pero le era inútil. Una y otra vez le venía la imagen de Will y Hilary follando lo que, poco a poco y casi de manera inconsciente, le hizo bajar la mano hasta su coño y empezar a masturbarse allí. Además, por tener aún algo de mentalidad de niña romántica, creía que después de follar, Will y Hilary dormirían juntos esa noche, por lo que creía que nadie la vería, pero se equivocaba.

Viendo que Ashley se masturbaba, Will se fue acercando sigilosamente para que esta no lo descubriera. Tenía la polla totalmente empalmada y no podía reprimir sus instintos, pajeándose lentamente hasta colocarse casi al lado de su primita. Esta estaba como ida en sí. Estaba con los ojos cerrados mientras se masturbaba, por lo que no advirtió la presencia de su primo, ni cuando este se colocó delante de ella.

Will no podía aguantarse más y decidió dar el primer paso, sentándose al lado de su prima. Fue en ese momento cuando Ashley abrió los ojos y vio a su primo desnudo junto a ella. Esta se quedo absolutamente estupefacta durante unos segundos, como un poco aterrorizada, por lo que cuando se recompuso un poco, hizo rápida mención a levantarse.

-Tranquila Ashley, no pasa nada- dijo Will cogiéndola de los hombros para evitar que se levantara.

-¡Déjame Will! Me quiero ir. Esta no esta bien- dijo Ashley entre sollozos cuando su primo no la dejo levantarse.

-Tranquilízate, no te va a pasar nada malo. Esto que hacías es natural en las personas, igual que el sexo- intentando calmar Will a su prima.

Pero mientras Will estaba intentando calmar a Ashley, no perdía el tiempo y colocó su mano derecha sobre los hombros de su prima, para intentar calmarla y a su vez retenerla, mientras que su mano izquierda fue bajando hasta el coñito de su prima, en el cual ya se distinguía una arreglada matita de pelo. Poco a poco, entre las suaves palabras de Will y las caricias sobre el sexo de su prima, esta fue cediendo en su voluntad de irse, quedando a merced de su primo.

-Se que me has visto mientras follaba con Hilary. Te he visto allí, detrás de la puerta haciéndote una paja. ¿Te gustaría que te follara como a ella? ¿Quieres que te folle, Ashley?

-Aun soy virgen Will, ten mucho cuidado-le respondió Ashley, confirmándole que tenía vía libre para follársela.

Este, al escuchar la respuesta no pudo evitar una sonrisa. Iba a tener el privilegio de desvirgar a su joven prima, lo que aún le excitó más. Will decidió ser cuidadoso con ella, por lo que lo primero que haría sería comerle el coñito. Se arrodilló delante de ella, le abrió las piernas y empezó su tarea. Mientras que Will era un experto en el tema, era la primera vez que a Ashley le comían el coño, por lo que Will pronto notó la primera corrida de Ashley, la cual se quedo extasiada. De repente, Will se levantó y se sentó al lado de Ashley.

Ahora te toca a ti darme placer-le dijo Will a su prima, mientras que con la mano conducía la cabeza de Ashley hasta su polla para que se la comiera..

Ashley nunca había visto una polla tan de cerca, ya que nunca antes se la había comido a ningún tío. Abrió la boca e intentó engullirse toda la polla de su primo, para poco después empezar a chupársela como si de un helado de hielo se tratase. Ciertamente, Will pudo comprobar la diferencia de las mamadas que le habían hecho esa noche la experta Hilary y la principiante Ashley.

Al poco tiempo, se cansó de la mamada y pensó que ya era hora de desvirgarle el coño. Tumbó a Ashley en el suelo, encima de la alfombra boca arriba y con las piernas muy abiertas, situándose entre ella y apuntando su polla al coño de Ashley.

-¡Espera Will, no llevas condón!-dijo Ashley asustada.

-Tranquila, la primera vez es mejor sin preservativo porque no puedes quedarte embarazada- dijo improvisando Will, que había gastado su condón en Hilary y no quería parar ahora.

Dicho esto, Will empezó a penetrarla. Lo hizo con bastante delicadeza puesto que no quería dañar a su prima, encontrando, sin embargo, bastante resistencia, lo que le obligó a empujar más fuerte. Él pudo notar como le rompía el himen a su prima, la cual gimió con fuerza al sentirse penetrada. Poco a poco, la resistencia iba siendo menor y Will empezaba a bombear más rápido sobre el coñito de su prima, hasta que decidió pasar a su postura predilecta, es decir, situando a Ashley delante de él a 4 patas. En esa posición, Will perdió toda su delicadeza, empezando a follársela como un animal. Ashley cambió los gemidos por gritos de placer. Nunca llegó a imaginar, ni en sus sueños mas eróticos, que acabaría follando con su primo Will, llegando al poco tiempo a un nuevo y más placentero orgasmo. Will no podía aguantar más, sacando la polla del coño de Ashley y corriéndose en la espalda de esta, quedando ambos exhaustos tumbados en el suelo después del polvo. Poco después, ambos se levantaron y se fueron a dormir.

Desde esa noche, la relación de Will con sus primas no cambió en exceso. Los tres tenían un secreto que guardar y este quedaría siempre oculto a los demás. Will nunca volvió a tirarse a ninguna de sus primas, aunque si que lo intentó alguna vez.