Las fiestas del pueblo 2

Continuo la noche con Manu y con los celos de mi primo

Cuando mi primo me mira tan de cerca, mi cuerpo se va estremeciendo aún excitada tras mi encuentro con Manu, no puedo resistirme a su cercanía, su mano en mi cadera moviéndose, se acerca cada vez más a mis labios. En ese momento escucho como me llama Manu

-          Lu, toma tu copa y vente a bailar- Manu se acerca a nosotros me pasa la copa y mira con cara de mala leche a Felix, me agarra de la mano y me lleva.

-          Si, si, lo siento Felix, ya hablaremos.

Me paso toda la noche bailando pegada a Manu, nos acariciábamos, besábamos lentamente, siento su cuerpo muy cerca al mio, pero mientras beso a Manu miro de reojo a mi primo, no se qué me pasa, pero me ha despertado una curiosidad, que hacía tiempo que no sentía. Se me vienen a la cabeza recuerdos de cuando de adolescentes nos tocábamos por debajo de las mantas o en el establo antes de irnos a la piscina jugábamos a hacer el tonto.

-          Lu, estás en babia. Porque no nos vamos a dar otro paseo en coche?

-          Manu, eres un vicioso, tu solo quieres llevarme al huerto, jejejjeje

-          Que te ha dicho tu primo?

-          Nada, tonterías, está un poco bebido

-          Pues que no se pase, porque el es tu primo y no puede hacer lo que yo te hago

Manu comienza a besarme, un beso lleno de pasión, me muerde el labio inferior, le lamo los labios con mi lengua, me tiene agarrada de la cintura me acerca más a él, siento como se está endureciendo su entrepierna. Nos metemos la lengua en la boca del otro, baja sus manos por mi culo, mientras yo le acaricio los hombros, me encanta apretarme contra él. La verbena ya ha terminado y Manu se ofrece a llevarme a mi casa, mi calle está casi al final del pueblo, llegamos a la puerta nos volvemos a besar apoyados en la pared, cada vez con más ansia, sus manos vuelven a situarse en mi cintura, noto que nos volvemos a poner cachondos.

-          Manu, aquí no, a ver si nos van a pillar.

-          Joder Lu, ya eres mayorcita y no hay nadie en la calle.

-          Manu, una cosa es que sea mayorcita y otra cosa que me apetezca les vayan con el cuento a mis padres, es por puro respeto.

-          Lu estamos reconoce que estas muy cachonda

-          Claro que si, ven conmigo

Le cojo de la mano y llevo a Manu hacia el final de la calle, es una zona en la que ya no hay casas y además no hay farolas, así que la oscuridad nos permitirá hacernos lo que queramos. Me apoya contra la pared, no hablamos sólo nos besamos, nuestras lenguas se entrelazan en nuestras bocas, mientras las manos que antes se situaban en mi cintura ahora se pasean por mi abdomen subiendo en dirección a mis pechos. Noto como su erección va creciendo en sus pantalones, bajo mis manos para acariciar su polla por encima del pantalón.

-          Joder Lu, me tienes otra vez cachondisimo, quiero volverte a follar.

-          Yo también, me pones mucho.

Comienzo a desabrocharle el pantalón y meto mi mano dentro, su polla está durísima, sin pensármelo dos veces rodeo su polla y comienzo a masturbarlo, subiendo y bajando por el largo de su polla notando como su respiración se va agitando. Manu saca de mi sujetador mis tetas y empieza a lamerlas, se mete mis pezones en su boca mientras sus manos se dirigen a mi entrepierna, me desabrocha el pantalón y se va directamente a meterse dentro de mi braga, me abre los labios y sin esperar me mete un dedo. Gimo de placer, yo cada vez voy acelerando más mi mano, le masturbo cada vez más fuerte según me va excitando, los dos castigamos los sexos del otro cada vez más fuerte, más duro, no aguantamos mucho más hasta que nos corremos casi a la vez.

-          Joder Manu, como me he corrido

-          El que se ha corrido bien he sido yo, quería follarte

-          Bueno tranquilo tenemos muchos días.

Nos colocamos la ropa, yo tenía mis manos llena de su leche, y Manu se lamia sus dedos llenos de mi corrida, aun notaba los estragos de mi orgasmo. Me acompañó hasta mi casa, nos dimos un par de besos más y nos despedimos. Subí al cuarto de baño, me lavé un poco sin hacer ruido para no despertar a mis padres, me fui a mi habitación me puse el pijama y me metí en la cama. Estaba muy cansada por toda la acción de esa noche, pero lo que me sorprendió que en lo único en lo que podía pensar era en la mirada de mi primo, y en sus manos acariciando mis caderas.

Pasaron los días, estuve en contacto con Manu, nos mandábamos mensajitos, pero por su trabajo no podíamos quedar; a mi primo sí que le veía, pero su comportamiento había cambiado, estaba muy serio conmigo. Un día me escribe mi amiga y me dice de ir a la piscina del pueblo de al lado, le digo que si, llegamos a la piscina y nos encontramos con un grupo de amigos, entre ellos estaba mi primo, a Felix parecía que le costaba mirarme a la cara, comencé a quitarme la ropa y me fijo que mi primo no me quita ojo mientras me voy quedando en biquini. Al cabo de un rato decido acercarme a mi primo para acabar con esta situación tan rara.

-          Felix puedo hablar contigo?

-          Claro, que pasa?

-          Que te pasa a ti, desde el otro día estás super raro conmigo.

-          Ya sabes lo que me pasa, me jode que te hayas liado con Manu.

-          Pero a ver Felix a ti que te importa

-          Pues claro que me importa, me jode porque me gustas, quiero ser yo quien esté besandote y acariciándote toda la noche.

-          Felix, eso es imposible somos primos, y no podemos hacer esto.

-          No podemos porque somos primos o porque tu no quieres? Porque recuerdo que hace años tu y yo jugábamos a cosas que no juegan los primos.

-          Felix eso son cosas de críos, vamos a dejarlo así.

Me levanto y la verdad es que la conversación me ha dejado con mal cuerpo, no me apetece estar ahí tumbada con mis amigos así que decido bañarme, esta piscina es natural por lo que el agua viene de las montañas, así que el agua está fría lo que provoca que mis pezones se pongan duros. Estoy apoyada en una de las paredes, cierro los ojos pensando en todo lo que he hablado con Felix, de repente siento que alguien se acerca, abro los ojos y veo a mi primo acercándose a mi. Se pone frente a mi, no deja de mirarme, sus ojos sobretodo se posan en mis labios y en pezones erectos, mi cuerpo reacciona a su mirada y a su presencia, siento sus manos en mi cintura bajo el agua.

-          Felix esto no puede ser

-          Dime que no quieres y te dejo en paz pero si no es así voy a seguir intentándolo

-          Esa no es la cuestión, somos familia y ya somos mayores como para estar jugando

-          Para mi esto no es juego, desde el otro día sólo puedo pensaren ti, en los celos que me dio ver como Manu te tocaba, te besaba. Dime que tu no has pensado en mi

-          Felix si, si que he pensado en ti y me está atormentando.

Sus manos reaccionan a mis palabras bajando sus manos hasta mi culo, acariciándolo.

-          Lu estaba deseando oir esas palabras, necesito tocarte, sentirte

-          Felix no me presiones, y por favor vamos a tener cuidado que nos pueden ver y todos saben que somos primos.

Nos separamos y volvemos con nuestros amigos como si nada hubiese pasado aunque nuestras miradas estaban cargadas de deseo y de excitación.

Continuará la historia, espero vuestros comentarios.