Las clases anales de ana continuan.
Despues de la primera ves era cierto mi ano se dilataba, y sin problemas la verga de felipe entraba y salia provocando un placer que me volvia loca de lujuria.
Cuando faltaba una semana, para cumplir el mes de mi primer día de clases sexuales, por fin el teléfono timbro, me apresure a contestar y ahí estaba Felipe, * como estas linda, como va ese culito * hola Felipe pues ya no me duele me siento normal solo fue una semana de dolor después todo a regresado a la normalidad, bien linda, dime esta tu marido, no el regresa hasta las 4 de la tarde, * bien escucha con atención, le dirás que tienen que estar el próximo sábado por la tarde en la central al llegar yo los estaré esperando* si Felipe se lo diré y ahí estaremos, * no olvides traer el mismo vestido de la ves pasada * si Felipe lo llevare puesto, se escucho el clic del teléfono al colgar, a mi mente llegaron los momentos de aquel día y no pude evitar sentir un estremecimiento de placer, recordé las palabras de Felipe, mi amigo tiene 26 cm, de verga tan solo el morbo de imaginar aquello dentro de mi me hacia desear que ya fuera sábado,
Cuando llego mi esposo le mencione lo que había dicho Felipe y el contesto que bien mi amor pues el sábado nos vamos por la mañana, el sábado llego y como acordamos salimos a las 10 de la mañana justo a las 3 de la tarde llegamos y ahí estaba Felipe, al mirarnos se apresuro a ponerse de pie, lo que hizo me dejo nerviosa pensando que mi esposo se molestaría, pero no sucedió nada de eso, me tomo con sus manos mi barbilla y me planto un beso en la boca, un beso con tanta pasión que las piernas amenazaban con perder la fuerza que las sostiene, me gusta que sean obedientes, veo que traes la ropa que les dije eso es buen inicio * subimos a su camioneta y tomo el mismo rumbo a su casa, solo que esta vez la confianza nos hizo más placentero el trayecto, al llegar a su casa tomamos un refresco en la sala, y cuando terminamos dijo, Ana sube a la recamara donde pasaron la noche cuando vinieron el mes pasado y sobre la cama hay algo póntelo y regresas aquí *
Me dirigí a la recamara y en efecto había una diminuta tanga sobre la cama, pero solo eso la tome con mis manos y me pareció muy atrevida, en la parte de adelante tenía un pequeño triangulo el cual apenas cubría mis labios vaginales, y la tela era tan trasparente que se veía todo sin problema, en la parte trasera una pequeña tirita se metía en mis nalgas, y tengo que decirles que por más que acomodaba mis bellos estos salían a los costados de ese pequeño triangulo, a un costado de la tanga había un papel escrito que decía lo siguiente, * Ana esta prenda es lo único que usaras esta tarde, cuando te la pongas, cálzate las zapatillas y baja a la sala*
Me dirigí a la sala a pesar de ser la segunda vez de estar ahí sentí una especie de pena al salir así, sin embargo tenía que continuar, mi esposo se puso de pie al mirarme bajar por las escaleras, Felipe se apresuro a esperarme al pie de las escaleras y tomándome de la mano me hizo dar una vuelta, * perfecto luces divina Ana, el día de hoy checaremos como esta ese culito, si se adapta a mi verga, si ya no te duele, si sientes placer y si todo está como pienso mañana iremos a dar el segundo paso * Felipe se puso de pie y fue a poner música, se dejo escuchar una melodía suave y Felipe tomándome de la mano me llevo al centro de la sala y nos dispusimos a bailar, me tomo de la cintura y con suavidad guiaba mis pasos, al inicio me sentía un poco incomoda por estar casi desnuda, pero poco a poco fui tomando confianza, bailamos unas 3 melodías mas después Felipe dijo lo siguiente, *bien chicos es el momento de saber cómo está este culito * y dándome una nalgada me amos a ver, sube al sillón y ponte como la ves pasada pero separa las piernas lo mas que puedas, le obedecí y quede totalmente expuesta, con sus manos separo mis nalgas y nuevamente aquel delicioso calorcillo invadió mi cuerpo, se pego a mi culito y metió su lengua, esta vez no hubo resistencia alguna,
Que rico culito mi amor decía Felipe, al tiempo que introducía un dedo, el cual entraba con gran facilidad sin causar nada de dolor, solo placer se puso de pie y tomo la botellita de aceite de bebe, dejo salir un delicado chorrito el cual entro por mi ano, con su dedo lo introdujo haciendo que resbalara hacia adentro, formidable amor se dilata muy bien creo que todo está como tiene que ser sube a darte un baño saldremos a otro lugar esta noche será diferente lo mereces linda, te pones la tanga y tu vestido sin sostén, le obedecí y después de bañarme Salí como él había dicho, mis pezones podían mirarse ligeramente sobre la tela del vestido, salimos y caminamos por varias calles hasta llegar a un parque donde ocupamos una banca, Felipe me tomo de la barbilla y me dio un beso el cual se prolongo, creo que él se había dado cuenta del efecto que causaba en mí, la obscuridad de la noche ponía su parte pues con facilidad introdujo su mano separando la tanga y metió un dedo en mi pepita, estaba súper mojada incluso el pequeño triangulo de la tanga estaba empapado, saco la mano y chupo su dedo, sígueme tu chico te quedaras aquí solo iremos ella y yo no tardaremos caminamos y en una parte un poco mas apartada del parque había una especie de quiosco en un rinconcillo me tomo de la cintura y me atrajo hacia él, mi cuerpo temblaba de la excitación y el temor de ser descubiertos por alguien, dime Ana quieres que te coja si Felipe quiero que me hagas lo que desees, si me lo pides con verdadero deseo regresamos a la casa y te cogeré
Por favor Felipe te nesecito, quiero sentir tu rica verga en mi pepita, me palpita solo de imaginar que me cogerás bien rico, está bien Ana, siempre y cuando me prometas que seguirás siendo mi puta cuando yo lo desee si Felipe seré tu puta siempre que lo pidas pero por favor cógeme ya, te lo suplico cuando estemos cogiendo frente a tu esposo quiero que repitas todo lo que acabamos de hablar si Felipe lo hare, regresamos donde estaba mi esposo y Felipe dijo es hora de regresar chicos, al entrar en la casa dijo lo siguiente, bien Ana ahora quítate el vestido, siéntate en el sofá y separa las piernas le obedecí y separe las piernas, con unas tijeras corto los listones de la tanga, y esta cayó al suelo, chico en el baño hay un recipiente con jabón tráele que le depilaremos la raja a esta nena, tiene mucho bello y quiero que este sin un solo bello, mi esposo obedeció y trajo los recipientes, Felipe puso el jabón en mi monte púbico y con mucha suavidad y paciencia fue quitando todo mi vello púbico, jamás me había depilado ahí, y menos pensé que un hombre me depilaría, la excitación crecía mas, al terminar lavo bien mis labios vaginales, y se dispuso a darme una rica mamada de pepita, sinceramente estaba tan excitada que no espere mas y le suplique para asombro de mi esposo, ( Felipe por favor no aguanto más cógeme ya )
Por favor Felipe has que salga la puta que llevo dentro, apaga mi fuego Felipe seguía mamando y haciendo que saliera mas liquido por mi pepita, escurría por mis piernas y me retorcía de deseo, pero él seguía encendiendo mas y mas el deseo en mi, se aparto y de frente a mí se desnudo totalmente esta vez su linda verga estaba más dura que la ves pasada, sus venas parecían a punto de explotar, no espere mas y la metí a mi boca, esta vez chupe con desesperación, disfrute el sabor de aquel miembro, entro todo no me importaba sentir que me ahogaba, el deseo me hacia actuar como una puta, un delicioso sabor salió de su pene el me aparto y me dijo me pusiera en posición de perrito, sin poner aceite, solo con la saliva que tenia la puso en mi ano y la fue metiendo con suavidad, fue agradable sentir como se dilataba mi ano, dejando entrar sin dolor, el placer era enloquecedor, como Felipe dijo estaba dilatado para su verga, vamos chico ahora si participaras desnúdate y dale a mamar tu verga mientras yo la cabalgo de inmediato mi esposo se desnudo y me dio su verga la mame con amor, después de todo el me estaba compartiendo, Felipe inicio un delicioso mete y saca, no pude mas y solté un chorro de liquido vaginal, gemí como nunca lo había hecho antes, no me importo que mi esposo estuviese frente a mí, Felipe se estremeció y dejo salir su leche con fuerza, esta corrió por mi ano inundándolo como lava hirviendo, hasta la última gota entro en mi culo,
vamos chico ahora cógetela por esa rica Pepa que pide a gritos verga el ano es mío y la Pepa tuya vamos mi esposo se dio la vuelta y de un solo movimiento me dejo ir toda su verga, Felipe no perdió tiempo y me chupaba mis tetas, succionando mis pezones los cuales estaban tan hinchados que me dolían, mi esposo solo tardo unos minutos terminando dentro de mí, todo mi cuerpo se sacudía por la excitación, caí desfallecida en el sillón, mi esposo a mi lado y en ese momento Felipe dijo, mañana es tu primer cogida con esteban linda, tu culo se pondrá tan rico que todos lo desearan nos fuimos a descansar y la mañana llego demasiado pronto.
Me di un baño y después alcance a mi esposo y a Felipe a tomar el desayuno, como estas linda te duele el culo no Felipe estoy muy bien, que bueno porque en una hora estaremos en donde esteban ya es hora de que sientas esa verga, cuando terminamos el desayuno Felipe dijo que saldría una media hora y que al regresar me indicaría como iría vestida, cuando regreso me dio una bolsita y me dijo ponte lo que viene dentro y bienes. Subí y me puse unas pantaletas de color blanco, súper transparente, se veía con claridad mi sexo, Salí y me dirigí a ellos, luces hermosa Ana bien chicos esta será la primer sesión de tres y después solo será cuestión de esperar un poco y notaremos el cambio de aquellas nalguitas a unas nalgas carnosas y deseables, solo tienes que soportar la primera vez y si decides no volver así lo dejaremos, esteban vive en la parte más alejada de la montaña, dejaremos la camioneta y caminaremos un poco para llegar a su cabaña, solo será cuestión de unos minutos, no temas en gritar nadie te escuchara, me pongo el vestido, no Ana nadie nos vera iras atrás en la camioneta y así llegaras hasta el veras que rica sensación,
Después de unos kilómetros de terracería se detuvo, ahora si aquí caminaremos, al verme titubear me dijo quieres regresar, no por favor, pues entonces vamos sal de la camioneta, Salí y de inmediato sentí como el viento recorrió mi cuerpo, como si fueran mil manos tocando, me dio la mano y me ayudo a caminar, pronto me acostumbre a caminar casi desnuda por aquel bosque, los arboles se sacudían como queriendo alcanzarme y acariciarme un poco,
Fue un trayecto que se me hizo eterno, al fin se miro una cabaña y en la puerta un hombre regordete estaba recargado, mirándonos como nos aproximábamos poco a poco, el aspecto de aquel hombre me hizo dudar por un momento pensé que lo de 26 cm, solo era broma, cuando estuvimos cerca de el saludo a Felipe y le dijo, * vaya Felipe es la primera vez que me traes un culo tan joven* sin más palabras solo le dijo a Felipe, llévala a la piedra y ya sabes que tienes que hacer,
Esta vez Felipe era quien obedecía, condujo por un espeso lugar de vegetación, mi esposo nos seguía a poca distancia, dentro del pequeño bosquecillo había una piedra, que parecía haber sido diseñada para el coito anal, me dijo que me pusiera de perrito y que me ataría los pies y manos solo por evitar que saliera corriendo, mi culo quedo paradito, creo que mi ano estaba ligeramente abierto aún por la noche anterior, no me podía mover en lo mas mínimo, mire como Felipe y mi esposo se alejaban no sin antes darme un beso cada uno, pasaron unos minutos y escuche el crujir de las ramas sabia que aquel hombre estaba caminando hacia mi encuentro, no pude evitar asombro al mirarlo frente de mi, ahí estaba con aquella bestial verga, estaba dormida y se veía imponente, trague saliva pensando que no lo soportaría, se dio la vuelta y me la aproximo a mi boca, no pude más que dar unos lengüetazos, esa verga respondió de inmediato a la caricia y se irguió desafiante, todo mi cuerpo se sacudía no de placer si no de miedo,
Con sus dos manos tomo aquella verga y solo mire como se ponía más tensa con su propia caricia, para ese momento mis piernas temblaban sin control, tomo un frasco y le puso algo viscoso, no pude evitar soltar un chorro de orina, que escurrió por mis piernas sin control, aquel hombre sonrió y camino a mi culo,de forma brusca arranco mis pantaletas, sentí su dedo entrar sin problema metiendo aquel liquido viscoso a mi ano, me tomo por la cintura y me dio un tirón, sentí que me partía en dos, sin embargo apenas estaba entrando la punta, pero su forma de hongo la hacía más cabezona, el temblor seguía en todo mi cuerpo, solo dejo que me adaptara a su cabeza y sin piedad la enterro,un grito escapo de mi garganta, y me desmalle, cuando reaccione ahí estaba el inmóvil sin moverse, con su enorme verga dentro de mí, la sentí llegar muy dentro de mi culo, de mi pepita salía liquido sin parar, la fue sacando y con un movimiento brusco, metió y saco una y otra vez mas, el dolor era intenso, nuevamente me desmalle esta vez al despertar ya no estaba aquel hombre Felipe y mi esposo estaban a mi lado las correas ya estaban sueltas sin fuerzas en mi cuerpo, Felipe me tomo en sus brazos, y me llevo a la camioneta, sentía escurrir por mi culito sangre y semen de aquel hombre, Felipe deposito un beso en mi frente y me dijo mañana lo superaras y la próxima vez será con mucho placer cuando él te coja, después de que te coja tres veces lo agradecerás linda ya lo veras, regresamos a su casa, y por el dolor intenso decidimos quedarnos un día mas, hoy el dolor es solo un recuerdo, en verdad el cambio en mis nalgas es muy notorio ahora están carnosas y deseables como dice Felipe, puede parecer algo anormal, pero estoy ansiosa de la próxima cita, ahora soy una puta deseando que sigan dándole placer por el culo, a mi esposo le gusta como estoy quedando, y quiere que continuemos con las clases sexuales, ahora ya me hace sexo oral y disfrutamos más que nunca de nuestros encuentros.