Las Bragas de mi Cuñada Cecilia (1)

Una cuñadita muy especial logra que se despierte en mí un instinto especial, del cual saldrá inicialmente favorecida mi esposa Alejandra.

Cecilia es mi cuñadita que me mantiene con la verga al palo, actualmente tiene 30 años, pero la historia comenzó años atrás cuando rondaba por los 24 y era estudiante de medicina. Ella es una mina muy linda, de un físico más que interesante, con unas buenas piernas y una cola que se las trae. En esa época se caracterizaba por dos cosas, vestir muy sexy ya que usaba minifaldas muy cortitas y quizás por su aire intelectual espantaba a los hombres, con lo cual parecía bastante ingenua cosa que me empezó a calentar sobre manera.

Lo cierto es que al principio no le prestaba mucha atención, por un lado porque mi señora está más que buena aunque por su forma de vestir es más tradicional; hasta que un día sin querer se sentó frente a mí y pude observar ese trapecio delicioso engalanado en unas braguitas níveas, que me permitía la postura despatarrada de mi cuñada y la corta minifalda bordó que vestía.

Ese día si bien no definitivamente algo hizo un clic en mi cabeza y empecé a ver a mi cuña de otra manera.

Durante más de un año tuve la oportunidad de que la escena volviese a repetirse y pude observar ese trapecio engalanado de braguitas rosas, celestes, verde agua, de más está decir que mi calentura iba en aumento.

Aprovechando que la situación con mi señora, Alejandra, que andaba viento en popa comenzamos a fantasear en nuestros actos sexuales con diversas fantasías y en una de esas la fui llevando hábilmente a decirle que me la quería coger con la bombachas de otra hembra……… la cosa siguió en aumento, poniéndola a mil y pegándole unas cogidas que le dejaba chorreando su entrepierna, la situación llegó a tal extremo que un día le fije fecha y hora límite para que la fantasía se concretase. Yo estaba convencido que sin lugar a dudas las bragas que mi señora iba a conseguir eran las de Cecilia.

Un fin de semana que fuimos a almorzar a lo de mis suegros, al salir de la casa y subirnos a nuestro auto, le comenté a mi señora, "guarda que te quedan 4 días……", esta simplemente se rió y metío su mano a un bolsillo de unos jean ajustados que tenía y me mostró la puntita de unas bombachitas blancas…………… yo haciéndome el tonto aunque de antemano sabía la respuesta le pregunté de quién eran y ella simplemente me respondió de Cecilia. Esa noche se puso un camisón bien cortito y las diminutas bragas de su hermanita, comenzamos a franelear y yo estaba a mil esperando ver a mi señora apoyando su concha en la bombachita donde apoyaba su coñito mi cuñadita, debo aclarara que me señora es un poco más grande de cuerpo que su hermanita, y en especial de cola….cuando le saqué el pijama creía morirme ya que la bombachita se perdía en el cuerpo de Alejandra, la hice poner en cuatro ya que le quería ver sus grupas de atrás y de un golpe la ensarté, mientras pensaba en Cecilia me clavaba salvajemente a mi señora, notaba como se le iban inundando las bragas con su flujo…..en un momento dado dejé apenas el pene en contacto con la empapada concha de mi esposa y esta comenzó a implorar…..no me la saques!!!!!!!!!!!!!!!....no me la saques!!!!!!!!!!.....clavame fuerte!!!!!!!!........, entonces el morbo me llevó a sacársela……..esta casi sollozaba en silencio…..lentamente comencé a bajarle las chorreantes bragas hasta el muslo……y luego se la metí de una, mientras le ordenaba que con una mano me masajease los huevos con la bombacha de mi cuñada y me mostrase la cara de puta que tenía mientras me la cogía…………………….al rato comencé a decirle que me dijiese que le gustaba o le sacaba la verga y ella decía:" no…..NO!!!!!!!!!!!!....quiero VERGA por única respuesta, cuando acabe le inundé su vagina con semen y caíamos ambos extenuados. Unos minutos

Hice que se sacara la bombacha y que me limpiase bien mi pene con esta y le dije que no la lavase que al otro día íbamos a volver a la casa de sus padres e iba a devolver la bombachita a su lugar original, …para mis adentros pensaba en la concha peluda de Cecilia, tal lo que me había confesado , tomando contacto con esas bragas mezcladas con fluidos de su hermana, mi semen y frotada de huevos. Al otro día regresamos a la casa de mis suegros…..al rato vino mi señora y me dijo simplemente "está todo en orden".

La historia continuará si es interés de los lectores…..se agradecen comentarios.