Las aventuras de una madre (2)
El descuido- Bueno aqui os dejo lo siguiente que nos paso, por culpa de un descuido nuevas aventuras.
Varios días transcurrieron desde nuestro pequeño trato, pero con el temor y a la vez excitación, de que el bruto llamara al móvil de mi madre para que el y sus amigos pasaran un buen rato, pero eso no llego a pasar ya que según leímos en periódicos, el y su banda al completo fue detenida, el mayor de todos en la cárcel y el resto a correccionales durante un buen tiempo, sin duda seguro que seria una buena historia para contar la aventura que tuvieron con la cachonda ama de casa.
Otro temor nos paso por la mente ya que si ellos fueron detenidos, la policía revisaría sus móviles y cámaras y sin duda verían la orgía en la que participaron y podrían considerar que la estarían violando, otro delito mas que añadirles y respuestas muy comprometedoras que tendría que dar mi madre a la gente. Pero tampoco ocurrió nada, seguramente por el hecho de que si veían los videos solo saldría una mujer madura que se ofrecía gustosa a sus "captores".
Después de asegurarnos de que nada mas ocurriría, nuestra relación se fue intensificando, ya no solo como una relación madre e hijo, nuestras sesiones sexuales pasaron de ser furtivos encuentros de noche mientras mi padre dormía, a tener sexo cada vez con mas frecuencia, en toda la casa, llegando a momentos en que esperábamos ansiosos a que mi progenitor se marchase para quitarla al ropa y follarla en cualquier lugar. Sin duda según me contaba ella se estaba volviendo en una adicta del sexo, pensando en ello todo el rato, su cambio de actitud fue poco a poco haciéndose mas evidente, ya no vestía de forma casual, siempre la gustaba ir elegante pero cada vez se vestía de forma mas provocativa y sensual, no solo para mi sino para todo el que mirase.
El relato que a continuación escribiré sucedió un día normal del que recordaremos siempre. Como en el anterior, estará escrito en tercera persona, ya que son las vivencias de ambos unidas.
Jorge sujetaba a su madre contra la pared de la cocina, la tenia levantada con sus manos sujetándola por el trasero y su pequeña faldita del vestido de andar por casa enrollada a la altura de su abdomen. El la empujaba con fuerza penetrándola y haciéndola gemir mientras sus pechos se movían arriba y abajo, jadeante Lara lo agarraba por el cuello y lo besaba con ternura, disfrutando de la sensación de ser penetrada de esa manera.
Así estuvieron un buen rato, resoplando y sudando hasta que su hijo eyaculo dentro de ella arrancándola pocos segundos después un bueno orgasmo mientras se retorcía con la polla de su hijo todavía dentro de ella, y su vagina rebosante de semen. Habían hablado con al posibilidad de usar condones pero ella tomo la decisión de tomar la píldora, no era algo al cien por cien efectivo pero el riesgo les daba mas morbo.
Trabajosamente se separaron y cada uno continuo con sus tareas, ella con al comida mientras se bajaba el vestido y recogía el tanga del suelo para ponérselo de nuevo y Jorge preparándose para salir un rato.
Cuando su hijo se marcho Lara continuo con sus tareas domesticas, hasta que sonó el teléfono.
- Hola, ¿dígame? Lara no escucho respuesta alguna ¿Diga?
Durante unos segundos nadie contesto y justo cuando estaba a punto de colgar el teléfono una voz masculina respondió.
- He visto lo que hacías con tu hijo.
A Lara se le helo la sangre de repente, y procuro guardar la compostura.
¿De que habla?, yo no he hecho nada con mi hijo.
Te he visto.
Oiga perdone pero no se lo que ha visto, peor se equivoca de persona. dijo ella a la defensiva.
Te llamas Lara y vives en el cuarto.
Aquello la pillo descolocada, realmente alguien la había visto, pero ella no podía imaginar quien pro mas que daba vueltas a la cabeza, habían tenido mucho cuidado, pro un momento por su mente paso la idea de que alguno de los chicos que la habían follado semanas anteriores la habrían delatado y habían llamado por fin al numero que les dio, pero ellos desconocían que estuviera con su hijo haciéndolo.
Y usted como lo sabe - dijo resignada ya que su secreto había sido desvelado y quería saber como ha podido ser.
Esta mañana, la he visto a través de la ventana abierta de su cocina.
A Lara se le callo el alma al suelo, había dejado la ventana que daba al patio de luces entreabierta, no las principales si no la de un lateral para que entrase corriente, y tenia una idea ya de quien era, un vecino de al lado, no del mismo bloque pero que su ventana de cocina da justo en frente de la de ellos, por lo que tenia entendido apenas se le veía y confiaba de que nunca se asomaría, un error que pagaría.
Bueno y que si me vio dijo Lara entre resignada y enfadada.
Es muy fácil, venga esta tarde a mi casa, pongase guapa, es el cuarto d del bloque contiguo si no aparece todos sus vecinos sabrán lo puta que es usted. y acto seguido colgó el teléfono.
Lara no podía creer lo que acababa de ocurrir, ya se había imaginado a esas altura que la haría chantaje y tenia miedo, pero a su vez un cosquilleo de excitación la impulso a no echarse para atrás, toda su vida se acabaría si la gente se enteraba, en frió era algo que la preocupaba, aunque después hiciera locuras como haberse dejado grabar y fotografiar por desconocidos.
Una cosa tenía clara, su hijo debía saberlo, y mientras seguía con sus tareas como si no hubiera pasado nada, dentro de su mente los nervios la comían. Cuando llego su marido a casa lo recibió con un beso y le puso la comida, con la tensión se la había quitado el hambre y se disculpo con su marido para acompañarlo. Al poco rato oyó la puerta abrirse, era su hijo y antes de que fuera a comer también, le hablo en el pasillo.
- Tengo algo que decirte, después de comer en privado.
Jorge no sabía que quería su madre pero quería sacarse de dudas, por lo que comió con prisas y mientras dejaba a su padre viendo la televisión en el salón, se reunió con su madre en el baño.
Que ha pasado. pregunto él extrañado por la actitud de su madre.
No se como decirlo, pero seré breve, el vecino de al lado nos ha visto y quiere que vaya esta tarde a su casa
¿Vernos?, pero como, y para que quiere verte.
Pues por mi culpa, por no dejar la ventana cerrada de la cocina, y bueno ya te imaginas que querrá, si no se lo dirá a todos.
Durante unos segundos Jorge se quedo callado aclarándose las ideas. El temor a ser pillados se había hecho realidad, pero el morbo en su mente empezó a abrirse paso.
¿Y acudirás a la cita? dijo Jorge mientras empezaba a acariciar la cintura de su madre y por debajo de su falda levantando lentamente.
Ay no se hijo... no quiero que esto se sepa - se mordió los labios por no gemir y sujeto la mano de su hijo mientras la acariciaba su pubis despacio.
Entonces no le hagamos esperar más, me voy contigo.
Como respuesta Lara le dio un beso en la boca a su hijo y se fue al dormitorio a cambiarse, como le dijo que se pusiera guapa eso hizo, un tanga bien sugerente de color rojo y un vestido algo ajustado marcando bien su delgada figura, también se maquillo con esmero y su hijo le dijo que la esperaba fuera.
No le tubo que hacer esperar mucho, con la excusa de que había quedado con una amiga en el centro se despidió de su marido y salio pro la puerta. Su hijo estaba ahí y se sorprendió al ver a su madre tan atractiva para esa cita desconocida, con el maquillaje y su vestido sugerente aparentaba la mitad de años.
Juntos se dirigieron al portal de al lado y llamaron al cuarto d. Una voz ronca contesto.
Quien es.
Soy Lara.
No tubo que decir mas, la puerta se abrió y los dos entraron en el edificio, y subieron las escaleras hasta entrar al ascensor que este edificio si tenia. El ascenso parecía hacerse lento, Jorge notaba como su madre temblaba, subía que era una mezcla de miedo y excitación y la acaricio para calmarla a lo que ella le respondió con una picara sonrisa.
Al llegar al último piso se dirigieron a la puerta del vecino mirón y llamaron.
Ya les estaba esperando porque la puerta se abrió de inmediato, Jorge había oído historias sobre ese hombre, no muy agradables pero lo que vio superaba con creces las habladurías. Ante ellos había un tipo enorme, en todos los sentidos, era alto, de casi un metro ochenta, no tenia cuello de lo grueso y lleno de grasa que era, su panza era de una envergadura descomunal y sus rechonchas piernas y brazos bien podrían ser jamones enteros. Su ropa no era menos desagradable, una camisa de tirantes que alguna vez pudo ser blanca pero ahora tenia extensas manchas marrones y lamparones, así como su pantalón corto, que desaparecía entre su tripa y mostraba manchas de no solo comida que había caído sobre el.
¿Eres Lara? pregunto el no sin antes repasarla de arriba abajo y comérsela con los ojos.
Si... dijo Lara intimidada por su aspecto-
Y vienes con tu hijo, eso no es lo que te dije. dijo el tipo algo molesto.
Por mi no te molestes ¿no querías verla?
Claro, entrad.
Los dos entraron en lo que parecía la guarida de un cerdo. Esa es la imagen que tenia de su nuevo "amigo" de un cerdo descomunal. Pasaron pro el salón y su aspecto no desentonaba con el interior de su casa, platos de comida sucia sobre la mesa del salón, revistas porno, un sillón sucio y roto, y varias prendas de ropa sucia tirada pro todos lados, incluidos calzoncillos. Entre tanta inmundicia Lara desentonaba completamente, una belleza vestida y maquillada como si fuera a un baile de gala, se encontraba en medio de tanta suciedad.
- Me llamo Carlos. intervino el antes de que pudieran decir nada sus invitados. Pero normalmente me llaman el Potas.
A Jorge se le revolvió el estomago al imaginarse por que repugnante razón sus amigos, si es que tenia, le llegaron a llamar El Potas.
Y no me importa que trajeras a tu hijo, eso no cambiara las cosas. dijo el mientras se acercaba a Lara.
Bueno pues ya estoy aquí, que quieres ahora. - Dijo Lara mirándole fijamente.
Una puta como tú debería saber que estas aquí para hacer lo que mejor sabe, y tu hijo más le vale no hacer nada si no queréis que todo esto se sepa.
Tranquilo yo estoy aquí solo por su seguridad. dijo jorge mientras ese tipo se acercaba a su madre.
Y acto seguido procedió a meter su mano entre la falda de Lara.
- Las putas con las que he estado nunca han necesitado bragas, y tu menos. y de un fuerte tiron se las arrancó. Y no te preocupes, va a disfrutarlo, ya veras.
Lara pensó que si había estado con putas, la única manera de que una mujer le hiciera caso, tal vez le hubiera contagiado algo, solo esperaba que se hubiera ocupado de no estar con cualquiera de la calle, o usara preservativos con ellas, pero ésas preguntas no se atrevió a formularlas.
- Vamos a la cama que tengo ganas. dijo de forma socarrona, dirigiendo a Lara sujetándola por la cintura hacia el dormitorio.
Como podían esperar, el dormitorio estaba igual de sucio que el resto de la casa, la cama desecha y con manchones en las sabanas, ropa tirada por los suelos y preservativos usados a modo de trofeos en el armario.
El Potas fue a una de las mesillas y saco una cámara digital.
Toma, vas a grabar como me follo a tu madre. le dio la cámara a Jorge que la acepto con cierta reticencia ya que estaba algo pegajosa.
Y para empezar vas a chuparmela. y sin mediar mas palabra se bajo los pantalones con suma facilidad.
Tanto Jorge como su madre no estaban preparados para lo que vieron, sobre todo Lara que imaginaba otra cosa, por lo general pensaban que alguien de su obesidad tuviera un peque pequeño, pero lo que vieron era todo lo contrario. Lara se quedo mirando un rabo del tamaño de una berenjena con su mismo grosor, rodeado de venas y con unos huevos colgando dignos de un toro.
- Bueno a que esperas - la apremio y sujetándola de los hombros la obligo a agacharse entre sus piernas. - y tu ponte a grabar.
Jorge acciono la cámara y se puso filmar la escena, con su madre arrodillada con al cara a pocos centímetros de una enorme polla. Mientras Lara comenzó a acariciar su bolas y saco su lengua y probo su glande. Ya había saboreado los rabos sucios de los pandilleros, pero el olor fuerte y sabor rancio de este los superaba con creces, a pesar de ellos se humedeció su vagina y continuo lamiendo, recorriendo con su lengua todo el tronco hasta llegar a sus bolas.
Por extraño que pareciese apenas tenia bello en el cuerpo por lo que no se tuvo que preocupar de atragantarse con algún pelo y dio largas lamidas mientras con sus finos dedos abarcaban como podía su rabo mientras lo masturbaba.
Jorge fue acercando la cámara sacando un buen primer plano de su madre mientras lameteaba el sucio glande del Potas, ella le dedico una sonrisa y se metió todo lo que pudo en la boca mientras gemía.
- Quitala la ropa le ordeno el Potas a Jorge mientras jadeaba de placer ante las caricias de Lara-
Dócilmente le fue quitando la ropa a su madre, bajándola los tirantes por los brazos hasta que el vestido callo al suelo, dejando su cuerpo desnudo acuclillado haciendo equilibrio en sus tacones.
Lara por momentos sentía como la excitación empezaba a vencer su voluntad, la situación la estaba haciendo hervir de deseo, y lameteaba la polla de su chantajista con deleite mientras su hijo la grababa de cerca.
- Eres toda una guarra, ya lo sabia desde el principio, te encanta comer las pollas de desconocidos ¿eh?
La mujer solo podía gemir como respuesta mientras metía uno de sus huevos en su boca y dejaba empapar su cara con la pre que brotaba del pene que tenia sobre ella.
- Vas a saber lo que es follar con un tío de verdad. El Potas agarro del moreno pelo de Lara y la levanto a la fuerza.
Cuando estuvo a su altura la abrió las nalgas con sus manos, para mostrar la húmeda vagina a su hijo y que lo grabara bien. Recostada sobre la enrome tripa del hombre se fue acercando hasta que la morreo en la boca, Lara no pudo resistirse y acepto con resignación como la invadía con su lengua en su boca, tragando saliva de el. La acaricio durante un buen rato, palpando cada centímetro de su cuerpo, y pasando sus dedos por sus nalgas y la vulva de ella de forma obscena haciéndola humedecerse. Mientras sus lenguas se entrelazaban, Lara empezó a suspirar con creciente excitación indicando a su vecino lo dispuesta que se estaba volviendo
Agarrandola fácilmente por la cintura, lanzo a Lara sobre la cama, se coloco en frente de ella con su inmenso cuerpo y la separo las piernas sujetando los tobillos. Lara con excitación y miedo, colaboro dejándose hacer, pensando en ese grueso pene cubierto por su propia saliva. Mientras Jorge no perdía detalle colocándose a un lado para tener una imagen clara con la cámara.
- Veras como se debe follar a esta guarra. - dijo dirigiéndose a Jorge - Voy a destrozarte.
Lentamente se fue recostando sobre ella, en ese momento Jorge pudo ver la enorme diferencia de cuerpos, una enorme bola de grasa que tapaba por completo el delgado y bien cuidado cuerpo de su madre. Lara a su vez sentía todo el peso de el hasta llegar al punto de casi asfixiarla, pero se sentía tan caliente que no la importaba, solo quería sentir ese enorme rabo dentro de ella, y no tardo mucho en hacerlo.
El Potas siguió morreando a Lara, y palpando su cuerpo con sus gruesas manos hasta que sintió la calida y húmeda vagina de ella en su glande, y con fuerza empezó a empujar.
Apenas entro su glande en su vagina cuando Lara empezó a gritar, un intenso dolor recorrió su cuerpo al dilatarse de forma extrema su vagina, a pesar de su calentura y lo chorreante que la tenia sintió como la penetraba cada centímetro de ese rabo.
Ella gritaba y se agarraba a las sabanas, retorciéndose bajo el inmenso cuerpo de el, hasta que noto como la penetraba hasta el útero, sus gritos se fueron transformando en ruidos de asfixia al sentir tremenda invasión. Tras un buen rato así Laura sintió como su dolor se fue transformando en placer, con la sola idea de pensar en lo que tenía dentro y lo lejos que había llegado al aceptar la oferta de ser montada como una vulgar fulana. En ese momento comprendió cual era e origen de los gritos femeninos que escuchaba desde el salón de su casa, y que ahora quien sabe quien podría estar escuchando los suyos.
Mientras Jorge no perdía detalle, solo la imagen de tal brutal follada le recordaba a su madre en su anterior aventura con la pandilla, por lo que su erección era tremenda y tuvo que quitarse los pantalones para acariciarse. Otra vez esa sensación de ver a su propia madre siendo sometida y ver como ella disfrutaba y sufría a la vez le hizo temblar de gusto y morbo, a la vez que de celos y angustia.
así transcurrió casi una hora, los orgasmos de Lara se sucedían uno tras otro, con el enorme pene entrando y saliendo, sin detenerse, con el aliento del cerco en su cara, y como sus fluidos caían a chorretones de entre sus piernas, parecía no cansarse aquel tipo, hasta que mientras Lara empezó a gemir con fuerza y convulsionarse, con su vagina palpitando todavía del anterior orgasmo y ya hipersensible, el Potas la sujeto con fuerza contra la cama y gruño como un animal mientras se corría dentro de ella. Chorro tras chorro, de espeso semen chocaron con el fondo de su útero, lo que la hizo alcanzar a Lara nuevas cotas de éxtasis, poniendo los ojos en blanco y emitiendo un largo gemido ahogado, mientras ambos cuerpos sudorosos chocaban.
Jorge lo grabo todo, como las bolas de aquel hombre se vaciaban dentro de su madre, filmando imágenes claras de como entraba y salía ese pene y su vagina se desbordaba de semen derramándose por entre el trasero de Lara.
Resoplando el Potas se levanto de ella dejándola exhausta, la dio un par de golpecitos con su pene en su hinchada y enrojecida vulva, para luego abrirla la vagina con los dedos.
- No pierdas detalle de esto. - le dijo a Jorge.
Claramente se veía la extrema dilatación a la que había sido sometida, se veía todo su interior, hasta la que debería ser estrecha entrada al útero, rebosando y soltando chorritos de fluidos blancos.
- Vamos ponte delante de ella. - le ordeno a Jorge, el cual obedeció sin rechistar, poniéndose a un lado, mientras el cerdo movía a su madre como si fuera una muñeca colocándola a cuatro patas.
Lara adivino rápido que es lo que quería hacer, y tímidamente se resistió, si la penetraba por el ano la desgarraría, pero se encontró como su hijo ponía la cámara en la mesilla de noche para grabarla y la sujetabas de los brazos. En esa posición, Laura vio como Jorge tenia la polla durísima, como pocas veces había visto.
Por favor... no... ummh... por ahí no... es muy grande... - suplicaba ella aunque ya volvía a calentarse.
Las putas se callan y dejan hacerse lo que sus clientes piden, ¿eres una puta verdad? - Lara sintió como de repente la metía esos gruesos y sucios dedos en su ano, lo que la hizo arrancar un chillido y mientras el manipulaba su ano acariciándola por dentro su hijo la empezaba a acariciar los pechos.
yo... - empezó a gesticular Lara entre dolor y placer.
El Potas siguió masturbándola analmente, con sus dedos entrando y saliendo acariciando cada rincón que alcanzaba, haciéndola retorcerse.
- Lo eres o no.
El castigo ya empezó a hacerla mella, e inconscientemente, con su vagina volviendo a chorrear sus propios fluidos, empezó a separar mas las piernas y a abrirse las nalgas ella misma.
- mmmh sii soy una puta...aaagh... - gimió ella para su vergüenza interna, pero el expresarlo la produjo un gran placer.
Sin esperar más, le saco los dedos al instante, lo que la hizo dar un bote de gusto a Lara antes la repentina liberación y al instante sintió como el Potas apoyaba su glande en el ano, escupía y empujo con fuerza.
El grito que se oyó en la habitación fue terrible, Jorge lucho con fuerza para sujetar a su madre que pataleaba y gemía.
Durante interminables minutos para Lara, hasta que se fue adaptando al calibre de ese pene, creyó que se moría de dolor. Con la sensación de tener su ano ardiendo mientras no disminuyan las brutales embestidas seguidas de cumplidos "que culito mas estrecho" "que rico como aprietas, me encanta verte así zorra" . Y así estuvieron un rato, hasta que sus gritos desgarradores se fueron convirtiendo en gemidos y suplicas "sii... dame mas fuerte cabrón... aaah me mataas".
Ya a esas alturas Jorge no necesitaba sujetar a su madre y vio asombrado como ella se reclinaba sobre su entrepierna y comenzaba a lamerle la polla, el excitado hasta mas no poder la sujetaba la cabeza y de vez en cuando la forzaba hacia abajo, atragantándola, pero sin que ella misma volviera a por mas. Cada vez que se tragaba su rabo iba acompañado de un fuerte empujón del Potas, hasta que Jorge no pudo aguantar mas, tras todo ese tiempo sin apenas tocarse viendo las morbosas escenas que se sucedieron en su habitación y se corrió en la garganta de Lara, haciéndola toser pero sin apartarse, succionando y bebiendo.
Después de correrse en la boca de ella, continuo con la grabación sujetando la cámara, grabando como hilillos de semen caían por su boca y luego recorriendo su cuerpo, como las manos de ese cerdo sujetaba su delicadas cintura, y ese enorme rabo entrar y salir, no hizo falta esperar mucho mas, los gruñidos del Potas se hicieron cada vez mas intensos y los de su madre coincidieron en un orgasmo simultaneo, llenándola esta vez por su ano mientras ella se retorcía como una gata en celo.
Tras esto, se dejaron caer sobre la cama exhaustos, Lara se sentía llena y su coño palpitaba de excitación a la vez que le escocia su ano mientras derramaba la leche del cerdo. Hizo señales a su hijo para que la grabara, abriéndose de piernas y posando como hizo la última vez con los muchachos de la calle. Se fue moviendo, aunque cansada todavía en su cuerpo tenía deseo de más, y se fue subiendo sobre el fofo y grueso cuerpo del Potas, el pene ya no estaba tan duro como antes pero ella se encargo de lamerlo y acariciarlo para que volviera a estar en plena forma.
Frotándose con su cuerpo Lara sube hasta sentarse sobre el rabo del Potas y se va penetrando sola, bajando poco a poco mientras suelta un largo gemido.
- Sabía que te gustaría. -dijo mientras sujetaba a Lara por los pechos apretándolos con fuerza y haciéndola gemir mas fuerte. - en el momento que te vi, sabia que eras toda una guarra que la encanta ser tratada como lo que eres, una puta.
Lara no decía nada, movía su melena negra y cabalgaba con su pene incrustado dentro de ella, y moviéndose en círculos y dando botes, se mordía los labios de gusto y jadeaba como un animal recostándose sobre el pecho del Potas para besarlo en la boca.
Viendo actuar así, Jorge no aguanto mas, la imagen de su madre subiendo sobre el y follando como una loca le motivo para subirse sobre la cama y dirigir su pene sobre el ano de Lara, penetrándola y arrancándola un grito de sorpresa y gusto. En ese momento los tres se movieron acompasando los movimientos, Lara gimiendo y gritando obscenidades mientras la doble penetración la hacia temblar de gusto, hasta tener varios orgasmos.
- uugh si... aah... ahh no pareis... me corro... aaaaahgg... me corrooooooo. -gritaba entre convulsiones, desmadejada poniendo los ojos en blanco mientras ellos no paraban, haciendo que se corriera una y otra vez, empapando a los dos con chorretones de fluidos.
Los dos no pararon hasta correrse cada uno dentro de ella. La madre de Jorge acabo llena de leche y temblando, recostada al lado del Potas y este abriéndola la boca para meter su pene y que se lo limpiara, todo esto siendo grabado por Jorge.
Al acabar, tanto Jorge como Lara se vistieron, ella sin poder ducharse, embadurnada todavía de semen y el vestido todo sucio, antes de irse el Potas la dio una palmada en el culo.
Ya te dije que la encantaría solo mira como tiembla de gusto. les dijo con la respiración todavía agitada apretando con fuerza uno de los pechos de Lara.- A partir de ahora, serás mi putita, y vendrás cada vez que te llame, Sin importar la hora.
Si, lo que tu me pidas, - Lara ya no se sorprendió de lo que decía, se había convertida en algo parecido a una adicta al sexo, y lo sabia.
Y una ultima cosa, depílate el chochito.
Al salir a la calle ya era de noche, y eso siendo verano, por suerte no se cruzaron con nadie, si algún conocido la veía así, las preguntas serian incomodas. Nada mas llegar a casa los dos se ducharon juntos y Jorge vio lo enrojecido que tenia la vagina su madre, las marcas en el trasero, sus pechos. Mientras el agua corría por su cuerpo, Lara cogió una cuchilla de afeitar y le pidió a Jorge que la rasurara su vagina, a lo que el accedió haciéndolo y lamiéndola el coño de paso, dejándoselo bien liso y brillante.
Este es el final del segundo relato, espero que os sea de vuestro agrado, solo deciros que a este le siguieron mas encuentros, los dos, o ella sola ya que llamaba a horas en las que yo no estaba o a petición de el, en mas de una ocasión recibimos llamadas de madrugada y tras decirle a mi padre que se confundieron y después de dormirse el, ella iba dócilmente a ser follada. En una ocasión incluso estando mi padre en el salón oíamos los gritos de ella, sabia perfectamente que era ella por que me dijo que iría, y mi padre en tono de broma sin reconocer la voz decía "que bien se lo pasaba el vecino" , yo claro con una empalmada terrible yendo a mi habitación para masturbarme.
Bueno continuare con nuestra historia, ya sabéis dejad comentarios etc... ;)