Las aventuras de mi novio. (2) La vecina

La tomó de las caderas y empezó a darle fuerte y rápido. Se escuchaba el golpeteado de las piernas con las nalgas de mi vecina y los gemidos. Mi vecina estaba disfrutando de su primera vez.

Apareció en la imagen el rostro de mi mejor amiga, Andy, estaba mamando verga.

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Miró a la cámara y se levantó reclamando:

-Amor, no, apaga eso. Ya te dije que todavía no me siento segura para eso.

-Hay, pero si ya hicimos el amor. ¿Por qué todavía no? –Se escuchó la voz de Rafa.

Se levantó Andy.

-Y ¿Si se te pierde? ¿Si alguien lo ve? –Le reclamó Andy.

-No se me va a perder.

-Todavía no. –Y se sentó en lo que parecía una cama.

Rafa continuó grabándola.

-¿Te gustó hacer el amor conmigo? –Preguntó Rafa.

-Me gustó mucho.

-¿Por qué lo hiciste?

-Porque te amo, porque deseo estar contigo siempre. Que me hagas el amor, casarnos y estar juntos para toda la vida.

-Sabes que esto está mal, ¿No? Y qué no vamos a poder estar juntos toda la vida, ¿Verdad?

-Si pero por lo pronto yo te amo, quiero que tú seas el único por ahora.

-¿Qué harías por mí?

-Todo. Si quieres que te la mame, te la mamo, si quieres que me trague la leche, me la trago, si quieres darme por el culo, te lo pongo… lo que quieras. –Silencio. –Dame eso. –Y le arrebató la cámara. -¿Ya te cogiste a July?

Rafa apareció en la cámara.

-Si. –Dijo mi novio.

-¿Cuándo?

-Ayer.

-¿Y a mí?

-La semana pasada.

-¿Cogiste primero con July o conmigo?

-Con tu hermana. –Dijo Rafa.

Volteó la cámara Andy para grabarse sola.

-Lo amo tanto, que le permito que lo haga con mi hermana. -Y dicho esto se fue la imagen.

Luego siguieron un par de videos familiares, para pasar después al viaje que hicimos con los primos donde por primera vez mi novio lo hizo con mi hermana. Pasé esos videos rápido. Otro par de videos de mi novio teniendo sexo con Andrea.

Me detuve en una imagen que me llamó la atención; Era mi casa, en la imagen apareció mi recamara. Volteó la imagen, y salió Rafa.

-Que bien me la voy a pasar con estos dos. –Dijo mientras sonreía.

Salió de mi cuarto y bajó por las escaleras, lo hizo lento, como que cuidando sus pasos. Avanzó hasta llegar a la sala de mi casa. Con cuidado apuntó la cámara al sillón donde estaban mis vecinos; mi vecino estaba encima de su hermana, se estaban besando.

-Tan chiquita que esta la vecina, y tan caliente que es. Me la voy a coger un día de estos. –Susurró Rafa mientras los grababa. –Perdón, pero debo interrumpirlos.

Acomodó la cámara de tal manera que se quedó grabando a mis vecinos mientras fajaban.

De repente se escuchó como Rafa bajaba las escaleras y venía silbando. En ese momento, mis vecinos saltaron, se acomodaron la ropa y se arreglaron un poco. Fingieron que veían la tele. Mi novio apareció en la imagen.

-¿Qué ven?

-Nada. –Dijo mi vecino. Mi vecina estaba un poco nerviosa, con la mirada en el suelo. –Me tengo que ir, van a venir mis amigos. –Y dicho esto, salió corriendo mi vecino.

-Ahorita vengo. –Dijo Rafa, avanzó hacia la cámara y se fue la imagen.

Apareció en la imagen de nuevo mi vecina, sentada en una cama, que reconocí de inmediato, era mi cuarto y mi cama. Luego apareció mi novio, se sentó a lado de mi vecina en la cama. Empezó a acariciarle la pierna por encima del pantalón.

Mi vecina, con tan solo 12 años, no tenía mucho de cuerpo.

Rafa le tomó la mano y se la llevó hasta su verga, que también estaba cubierta con su pantalón. Mi novio la miraba fijamente, y ella, le regresaba la mirada. Eso me sorprendió.

Mi novio le metió la mano por debajo de su blusa en busca de sus pechos, pequeños aun, y la empezó a acariciar. Seguían mirándose fijamente. Rafa se le acercó a darle un beso, pegó sus labios a los de mi vecina. Ella no hizo nada más, seguía jalándosela a mi novio.

No abrió la boca para nada, y besaba a mi novio con los ojos abiertos. Rafa entendió todo lo que pasaba y la tiró a la cama.

Le abrió las piernas y se metió en ellas y empezó a simular que la penetraba mientras la besaba. En eso estaban cuando:

-Hermana. –Gritó el vecino. –Ya llegaron por nosotros.

Se escuchó como iba subiendo las escaleras. Rafa rápido se bajó y se escondió debajo de la cama.

-¿Estás aquí? –Preguntó el vecino mientras tocaba la puerta y la abría. -¿Qué haces aquí?

-Vi-vi-vi-vine a de-descansar. –Dijo la vecina tartamudeando.

-O me estabas esperando para coger. –Apareció el vecino frente a la cámara y se abalanzó sobre su hermana. Empezó a besarla y acariciarle las piernas. –Así me gusta, bien calienta.

-Espera hermano, vámonos, nos esperan. –Decía la vecina mientras trataba de quitárselo.

-Bien que traes ganas.

-Quítate.

-Solo porque nos esperan, pero para la próxima lo haremos. Es más, hablaré con Rafa para que ya no nos interrumpa.

Dicho esto, se acomodaron y salieron del cuarto. Salió Rafa y se acercó a la cámara.

-Me la pasaré increíble con estos dos –Dijo sonriendo.

Se fue la imagen.

Regresó. Rafa estaba en mi cuarto.

-El vecino vino a hablar conmigo; me dijo que lo dejara un rato a solas con su hermana para fajársela y que a cambio me ponía a una de sus amigas de la secundaria y resaltó que estaba muy chichona. Muy tentador. Acepté, claro. Lo que no le dije fue que yo me cogería primero a su hermana. Yo la voy a desvirgar.

Dicho esto, se levantó de mi cama y acomodó la cámara de tal manera que se vio toda mi cama. Se escuchó como salió de mi cuarto. Fueron unos 10 minutos donde no apareció nada en la imagen. Al rato se escucharon unas palabras que no entendí. Escuché como se abrió la puerta:

-Entonces, ¿Yo te gusto? –Dijo Rafa.

-Si. –Oí la voz de mi vecina. Aparecieron en la pantalla, se sentaron en la cama.

-Y quieres hacerlo conmigo.

-Sí, es que, o sea…

-Dime. –Interrumpió Rafa.

Mi vecina traía una falda. Rafa la levantó y la puso frente a él y dándole la espalda a la cámara.

-Tú me gustas… Espera. –Dijo. Rafa le había levantado la falda y se le vio la ropa interior. -¿Qué haces?

-Tú también me gustas. –Dijo Rafa. –Y quiero hacerlo también contigo.

-¿Ahorita?

-Si.

-Y ¿July?

-Esto será nuestro secreto. –Y con gran habilidad, la acostó en la cama y mi novio se levantó. Rápido se bajó su pantalón y ropa interior. Le levantó las piernas a mi vecina para quitarle su ropa interior.

Mi novio se agachó a mamarle la panochita a mi vecina, que tenía una pequeña mata de bello.

Vi el rostro de mi vecina, lo estaba disfrutando y a la vez estaba sorprendida. No pasó ni el minuto cuando Rafa se levantó y se puso el condón.

-Ando bien caliente. –Dijo. –Quiero ya tu panochita.

Mi vecina no dijo nada. Rafa se puso encima de ella y se la clavó de un golpe. Mi vecina soltó un grito, gemido un poco desgarrador. Imaginé que sintió un dolor enorme pero esa idea se me quitó al instante:

-Muy rico. Dame más fuerte y profundo. –Dijo mi vecina casi suplicando.

Rafa se acomodó de rodillas, se levantó y le abrió las piernas y empezó a moverse de una manera muy rica. Los gemidos de mi vecina eran muy ricos, me calenté de solo escucharlos.

-Siento rico. Siento rico. ¿Qué es esto? Es rico. –Dijo mi vecina. Un orgasmo.

-Ahora ponte en cuatro. –Le dijo Rafa.

-¿Cómo? –Preguntó mientras se levantaba.

-Ponte de perrito. De rodillas.

Entendió y se acomodó.

Rafa se puso detrás de ella y se la clavó.

-¡Huy! Así siento más rico. Dame fuerte y rápido.

La tomó de las caderas y empezó a darle fuerte y rápido. Se escuchaba el golpeteado de las piernas con las nalgas de mi vecina y los gemidos. Mi vecina estaba disfrutando de su primera vez.

-De nuevo siento rico.

-Es un orgasmo. –Le dijo Rafa.

-Un… ¿Qué? –No terminó bien. –No aguanto, mi cuerpo ya no aguanta. –Y soltó un gemido, dejándose caer en la cama. Mi novio cayó encima de ella.

-Quédate así. Y abre la boca, ahí voy.

-¿Qué… vamos… hacer? Ya… no… puedo…

-Solo abre la boca, te vas a tragar mi lechita.

-Si… si… si…

Se puso frente a ella, se quitó el condón. Metió su verga a la boca y empezó a masturbarse.

-Mueve la lengua. Así.

A los 10 segundos.

-Ahí va. No te muevas. –Gimió mi novio. Se levantó rápido mi vecina.

-Me estoy ahogando. Es mucha. Ya me cayó en el cuerpo. –Rafa sonrió. –Coges increíble, ya sé porque July te ama.

-Y que no se te olvide que mañana lo haremos con tu hermano.

-Después de esto ahora si te digo que si acepto. Con uno es riquísimo, con dos debe ser aún mejor.

Quité la mirada de la pantalla y me perdí en lo que acaba de escuchar. Rafa cogió con mis vecinos, ¿al mismo tiempo?

Adelanté el video. Lo detuve.

Lo que vi me sorprendió mucho.

Continuará.