Las aventuras de Mary 2

Después del autobús nos espera una nueva aventura antes de llegar a casa.

Nos bajamos del autobús y me doy cuenta de que no le he preguntado ni cómo se llama

-Bueno ¿Y tu nombre es...?

-Marcos ¿Vamos a tu casa, gatita?

  • Eso ni lo dudes

Mientras vamos a mi casa lo miro de reojo, y empezamos a charlar, cosas tontas para rellenar el vacío de quién quiere follar sin dar muchos detalles, hasta que llegamos al portal. Una vez entramos y llegamos al ascensor siento que Marcos se coloca a mi espalda y me abraza por detrás, noto como su miembro poco a poco se clava entre mis nalgas y como sus manos han encontrado el borde de mi blusa. Cuando entramos dentro me arrincona contra el espejo.

-¿Cuál es el número de tu piso, gatita?

-El tercero

Y él pulsa el número mientras tira de mi blusa haciendo que los botones que la mantenían cerrada salten por todos lados, desabrocha mi sujetador y se mete mis tetas en la boca.

-Joder, que tetas mas ricas tienes- dice mientras se mete un pezón en su boca y empieza a chuparlo mientras me pellizca el otro con sus dedos

-Sigue, no pares- le pido y es que el niñato sabe muy bien lo que se hace

Mientras está con su boca, su lengua y sus dientes torturandome los pezones siento como su mano empieza a subir mi falda y como su bragueta que está a punto de explotar se roza justo en mi centro, tengo las bragas empapadas y sentir su polla justo ahí solo me hace sentir ganas de arrancarle la ropa y montarmelo con él en el ascensor, sin importar que mi vecina nos pille en plena faena. Así que sin pensarlo mucho me arrodilló entre sus piernas mientras le bajó el pantalón, su falo por fin queda liberado y se me hace la boca agua, así que sin pensarlo mucho me lo meto en la boca, escucho como Marcos gime y gruñe y eso me pone a mil.

-Joder gatita, que bien lo haces- me dice- tomar por culo- me dice mientras presiona el botón que para el ascendor- no me queda mucho así que si te portas bien te prometo que cuando lleguemos a tu piso te voy a dar la follada de tu vida.

Y a mí que estoy cachonda como una perra y que me muero por sentir esa polla dentro, empiezo a chuparsela con ganas mientras el me sujeta la cabeza con sus manos, el lleva el ritmo de las embestidas mientras yo le acaricio los huevos mientras que con mi lengua y mi boca chupo y succiono tanto como puedo, noto como cada vez se tensa más, se que está a punto y aceleró el vaivén de mi boca, quiero su semen en mi boca, sentir como su poya palpita entre mis labios y dentro de mi boca.

-Gatita espero que estés lista-me dice mientras jadea- porque estoy a punto

Y justo cuando me dice estas últimas palabras noto como sus dedos agarran mi cabeza y me mete toda su polla dentro mientras se corre como un animal. Empiezo a tragar y chupar pero se ha corrido tanto que noto como su semen me resbala por la barbilla y entre mis tetas.

Cuando acabo de tragar me levanto y le beso, y noto como su propio sabor en mi boca ahora forma parte de este morreo.

-Bueno Marcos, ¿estás listo para más?

-Dios, si llego a saber que esto es lo que me esperaba al montarme en el bus... Vamos a tu casa.

Así que le doy al botón que lleva a mí piso y arreglamos como podemos nuestras ropas, y solo soy capaz de las ganas que tengo de meterlo dentro de mi casa y ser follada por este semental que sabe perfectamente que es lo que necesito.